La poesía en España después de 1939: evolución y tendencias

Tema 5: La poesía posterior a 1939. Poesía existencial. La poesía social. Los poetas de los 50. ‘Los novísimos’. Claudio Rodríguez.

El final de la Guerra Civil llevó al exilio a numerosos poetas en cuyas obras se refleja la evocación nostálgica de España y la huella de la Guerra Civil. Entre ellos destacan poetas como J.R. Jiménez, Cernuda y otros miembros del 27.

La poesía de posguerra (década de 1940)

La poesía de la posguerra está condicionada por las enormes penurias materiales y las imposiciones del régimen franquista. Se desarrollaron dos tendencias políticas:

1. La poesía arraigada

La cual acoge poetas como Leopoldo Panero, Luis Rosales o Dionisio Ridruejo, quienes practican una lírica de corte clásico para expresar una visión del mundo optimista, temas patrióticos o la exaltación del pasado histórico.

2. La poesía desarraigada

La cual muestra la disconformidad con la realidad, la angustia existencial y los primeros síntomas de cierta protesta social. Se desarrolla en torno a tres acontecimientos del año 1944:

1.1 La publicación de Sombra del paraíso, de V. Aleixandre
1.2 La aparición de Hijos de la ira, de Dámaso Alonso
1.3 La publicación del primer número de la revista leonesa Espadaña.

La poesía en los años 50. La poesía social.

En la década de los cincuenta predomina la poesía social cuyas características son:

  • La poesía es concebida como una herramienta apropiada para la concienciación de los lectores y, por tanto, para la transformación de la realidad.
  • Se reivindica una literatura destinada a la inmensa mayoría, no a élites selectas.
  • Se emplea un lenguaje sencillo y coloquial, con cierto carácter narrativo y tendencia al prosaísmo.

Los principales autores de esta poesía son:

  • Blas de Otero: sus primeros libros ofrecen una poesía desgarrada que manifiesta profundas preocupaciones existenciales. Más adelante en libros como Pido la paz y la palabra, En castellano o Que trate de España, expresa abiertamente su preocupación social y la denuncia de orden política. Su poesía es formalmente sencilla y abierta a la ironía, los símbolos o los juegos de palabras.
  • Gabriel Celaya: practicó una poesía abiertamente combativa en libros como Las cartas boca arriba o Cantos iberos.
  • José Hierro: Tras una etapa de poesía existencial, sus libros acogen la realidad histórica bajo una perspectiva comprometida, como en Quinta del 42. Después su poesía deriva hacia una estética visionaria, como en Libro de las alucinaciones.

La poesía en los años sesenta.

En esta década predomina la poesía de la llamada promoción poética del 60, que comparte los siguientes rasgos:

  • De la poesía como comunicación del realismo social se pasa a una poesía de la experiencia o del conocimiento.
  • Presencia de la ironía y del humor.
  • Gran atención al lenguaje.
  • Influencia de poetas extranjeros como T.S Eliot, Ezra Pound o Cavafis.

Entre los autores pertenecientes a este grupo podemos destacar a:

  • Claudio Rodríguez: nació en Zamora en el año 1934 y murió en el año 1999. Es autor de una poesía vitalista y de exaltación de la realidad. Su estilo es muy brillante, en parte impregnado de imágenes visionarias cercanas al surrealismo, y se sirve de un léxico riquísimo propio del ámbito rural para expresar reflexiones profundas. Entre sus obras destacan Don de la ebriedad, Conjuros y El vuelo de la celebración.
  • Jaime Gil de Biedma, representante de la poesía como experiencia. Su obra está recogida en Las personas del verbo.
  • Ángel González, que representa la síntesis de un firme compromiso social con el uso del humor y un lenguaje natural. Destacar el libro Palabra sobre palabra que recoge toda su obra.
  • José Ángel Valente, representa la veta de la poesía como vía de conocimiento de la esencia de lo real. Entre sus obras están A modo de esperanza, La memoria y los signos, etc.

Los novísimos. Años 70.

Los Novísimos constituyen un movimiento de ruptura vanguardista con la poesía social que busca lograr mediante el lenguaje un experimentalismo formal. Obtienen su nombre de la obra Nueve novísimos poetas españoles, de José María Castellet.

Todos ellos comparten algunas características comunes como que todos han nacido tras la Guerra Civil; están influenciados por los medios de comunicación de masas; formalmente, se despreocupan de las normas y proclaman la libertad creativa absoluta.

En cuanto a los contenidos de su poesía, incorporan la cultura de masas; vuelven a temas culturales de otras épocas; también son frecuentes asuntos relacionados con lo político.

Respecto a la forma, recogen aspectos de las vanguardias del siglo XX, en especial del surrealismo. Por otro lado, tienden al automatismo en la escritura, además de incorporar a sus textos mensajes de otros géneros. Algunos autores no abandonan el tono coloquial de los poetas del 50.

Entre sus autores más destacados están Pere Gimferrer, Guillermo Carnero, Antonio Colinas y Luis Alberto de Cuenca, pertenecientes a la tendencia culturalista y surrealista, y Leopoldo María Panero, Luis Antonio de Villena, Jaime Siles y Manuel Vázquez Montalbán, pertenecientes a la tendencia coloquial, irónica y crítica.