Lejos de las propuestas experimentales, la novela del postboom refleja una vuelta a la narratividad, al gusto de contar una historia que pueda provocar el placer de la lectura. Su punto de partida arranca a mediados de los setenta, con la publicación en 1975 de Soñé que la nieve ardía, de Antonio Skármeta, y alcanza su triunfo con La casa de los espíritus (1982) de Isabel Allende.
Características de la novela del postboom
Podemos señalar como características de la novela del postboom, además Sigue leyendo