Evolución de la poesía y novela en España

Evolución de la poesía en España

Poesía 39-xx Tras acabar la guerra civil, cabe destacar la proeza cultural, el aislamiento y la influencia de la censura. La poesía de los exiliados Juan Ramón Jiménez, Alberti etc tienen como temas comunes la nostalgia de la patria perdida y cierto pesimismo existencialista. También encontramos la poesía de la cárcel, principalmente de Miguel Hernández que evoluciona hacia una poesía más común “prometida el rayo que no cesa”. Entre los que se quedan en España, unos desarrollan una poesía arraigada afin del régimen con temas como el amor, el paisaje, la religión etc. técnicamente vuelven al clasicismo garcilasista y renacentista. Destacan Luis Rosales “Abril” Y Leopoldo Panero, otros desarrolla una poesía desarraigada, influida por “ hijos de la ira” de Dámaso Alonso y “sombra del paraíso” de Vicente Alexandre, como una poesía arrebatada, Angustiada, pesimista, etc. Técnicamente busca el anti retórico cisma, basándose en la lengua cotidiana con preferencias por el verso libre. Encontramos autores, Eugenio de Nora, Blas de Otero (Anura). También encontramos el grupo cántico, con una poesía culta y el postismo como fundamento vanguardista. A partir de los 50 se produce un cierto aperturismo al exterior, pero con una fuerte censura. Nace la poesía comprometida Y social que busca cambiar la sociedad y denunciar las injusticias, consolidada con cantos y veros de Gabriel Celaya y pido la paz y la palabra Blas de Otero. Escriben sobre el papel del poeta como Portavoz de los problemas sociales y sobre los problemas de la época. La poesía está supeditada al contenido y el afán de llegar a un público mayoritario. Destacan Blas de Otero “que trata de España”, José Hierro “cuanto se de mí” y Gabriel Celaya. En los años 60 el concepto de la poesía cambia: su finalidad ya no es solo la comunicación sino también el conocimiento del hombre y del mundo. Los temas Evolucionarán desde el realismo social hasta el intimismo y la importancia de la experiencia personal. Se busca un lenguaje que le va a nivel artístico, un estilo personal y alto. Destacan ángel González “tratado de urbanismo”, Gil de Biedma “Poemas póstumos” y Felix Grande “Blanco Spirituals”. En los años 70 aparecen los novísimos, poetas que no Han vivido la guerra civil, en una España que se empezaba a desarrollar Económicamente con un progresivo aperturismo social y cultural los temas son bastante Eclécticos y en la técnica hay un mayor cuidado de los aspectos formales destacan Perez Gimferrer (Arde el mar), Antonio colinas “Sepulcro en Tarquinia” y luis Alberto de cuenca entre muchos. Tras la muerte de franco 1975 hay una gran variedad de tendencias poéticas. Se pueden observar tres grupos de la poesía de la experiencia, que abogan por una sentimentalidad Más cotidiana y sencilla, “Habitaciones separadas”,”el ultimo de la fiesta”,”Los vanos mundos”; la poética del silencio en la que comparten éstos poetas una visión exigente de la poesía una actitud contemplativa, destellos de conocimiento y sobriedad de estilo y por ultimo el neosurrealismo Se expresa a través de imágenes oníricas o visionarios, Blanca Andreu y Almudena Guzman.

Novela en España

Los nacidos en la posguerra Vázquez Montalbán, Eduardo Mendoza, etc. Los novelistas que rondan los 25 años cuando muere franco Javier Marías, Antonio Muñoz Molina, Ignacio Martínez de pisón, etc. Y los que ya crecen en una España democrática Juan Manuel de Prada, Felix Romeo, Juan Bonilla. La novela negra: es una adaptación de un género típico de esta unidad 11. Destaca el detective Pepe Carvalho de Manuel VAzquez Montalban. El invierno de LIsboa y Plenilunio de Antonio Muñoz Molina y “no acosen al asesino” de José María Guelbenzu. Novelas que incorporan, sin ser propiamente relatos policiacos, “Visión del Ahogado” de Juan José Millas y “Queda la noche” de Soledad Puertolas. La novela histórica es uno de los géneros de mayor éxito editorial, situándose en el pasado con una perspectiva contemporánea. De este género son el capitán a la triste de Arturo Pérez-reverte, “Mansura” de Félix de Azúa, la vieja sirena de José Luis San Pedro, “el hereje” de Miguel Delibes. No será planteamientos históricos sirven para reflexionar sobre el ser humano o para hacer una revisión crítica incluso para desmitificar de una manera irónica como el fabulosas narraciones por historias de Antonio orejudo. También comenzaron a ser frecuentes los relatos sobre la guerra civil. En la metanovela El tema central es la propia creación, literaria, con un autor como protagonista: como el gramática parda de Juan García hortelano en la novela lírica se busca la calidad técnica y la perfección Formal, como “la lluvia amarilla” de Julio Llamazares. La novela autobigráfica se ocupa de los años del franquismo por lo que nos hicieron o la transición “el río de la luna” de José María Guelbenzu. En la novela psicológica encontramos obras como “ciegas esperanzas” de Alejandro Gándara. En la novela culturalista Se analiza la cultura occidental, en “la tempestad” de Juan Manuel de Prada. En la novela testimonial se construyen relatos sobre los problemas de la juventud “héroes” de Ray Loriga. En la novela intimista los protagonistas, están en un espacio urbano, transmiten sus problemas más íntimos; a veces sin diferenciar Lo real y lo fantástico “la soledad era” esto de Juan José millas. En esta última época se recupera también el cuento como “alguien te observa el secreto” de Martínez de Pisón y “el silencio patinador” de Juan Manuel de Prada