La Poesía Española: Del Modernismo a las Vanguardias
Nos encontramos ante el fin del siglo XIX, un periodo marcado por la inestabilidad política, los conflictos obreros, la pérdida de las colonias, el auge del nacionalismo catalán y vasco, y un notable atraso social, cultural y económico. España era percibida como un país enfermo, con un sistema educativo y económico deficientes y una crisis política caracterizada por un régimen corrupto. Aun así, el Regeneracionismo intentó modernizar varios sectores, incluyendo el económico, social y cultural.
En la poesía de este periodo, encontramos varias tendencias que transitan entre el Modernismo y las Vanguardias.
1. El Modernismo
Ubicado aproximadamente entre 1888 y 1916, el Modernismo hispanoamericano fue fruto de la crisis espiritual del siglo XIX. Se dividió en dos etapas: una con culto a la forma y otra con una poesía más profunda y personal. Sus características principales fueron:
- Voluntad de innovación, individualismo y cosmopolitismo (centrado en París).
- Evasión en el espacio y en el tiempo.
- Creación de símbolos de elegancia y aristocracia.
- Riqueza léxica, adjetivación, sensualidad y gran renovación métrica.
Estas características resaltaron en autores como Rubén Darío, con obras fundamentales como Azul, Prosas profanas y Cantos de vida y esperanza.
Aunque el Modernismo español tendió a eliminar la ornamentación y a buscar una mayor profundidad (influido por el intimismo de Bécquer), los autores que destacaron fueron Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez.
2. La Poesía de Antonio Machado
La obra de Antonio Machado se puede dividir en dos grandes etapas:
2.1. Modernismo Español (Intimista)
En esta etapa, Machado explora emociones íntimas y el dolor de los recuerdos. Los temas centrales son:
- La importancia del tiempo, transmitiendo su emoción a través del recuerdo y el sueño.
- El diálogo con símbolos temporales (la tarde, el agua, etc.).
- El amor a través del recuerdo.
- Estilo descriptivo y musical, con una métrica típica: la silva-romance.
Obras destacadas: Soledades y Soledades, galerías y otros poemas.
2.2. Poesía del 98 (Compromiso Social)
Aquí encontramos una preocupación social por el pueblo castellano. Los temas y el estilo se transforman:
- Paisaje de Castilla: Visto de forma objetiva y desgarrada, pero inserto en el tiempo (ayer pujante, hoy miserable, mañana de esperanza).
- Meditaciones sobre la soledad, la muerte, el tiempo y Dios.
- Poesía breve y sentenciosa.
Obras destacadas: Campos de Castilla y Nuevas canciones.
3. La Poesía de Juan Ramón Jiménez
La trayectoria poética de Juan Ramón Jiménez se divide en tres etapas:
3.1. Poesía Sensitiva (Hasta 1916)
Obras de juventud, como Pinceladas románticas y modernistas. Destaca la sencillez, aunque en la poesía modernista de esta etapa encontramos temas típicos del movimiento, adjetivación brillante y sinestesias.
3.2. Poesía Intelectual (1916-1936)
Poesía “desnuda” o “pura”, dirigida a la minoría, acorde con los postulados del Novecentismo. Se caracteriza por:
- Sencillez de estilo (estilo nominal, enumeración).
- Elementos vanguardistas.
Obras destacadas: Diario de un poeta recién casado y Eternidades.
3.3. Poesía Suficiente o Verdadera (A partir de 1936)
Poesía cada vez más difícil, donde solo interesa la esencia del poema y las emociones. El poeta busca a Dios en la naturaleza y se funde con él (misticismo panteísta). Abandona las formas tradicionales; el verso se acerca a la prosa, utilizando imágenes y oxímoros.
Obras destacadas: Animal de fondo y Dios deseado y deseante.
4. Las Vanguardias
Las Vanguardias supusieron una ruptura radical con la tradición. Los movimientos más influyentes fueron:
- Futurismo: Exalta la civilización mecánica y la técnica, el dinamismo y el antirromanticismo. Destaca Marinetti.
- Cubismo: Descompone la realidad, juega con la tipografía, imágenes visuales y caligramas. Destaca Apollinaire.
- Dadaísmo: Expresa la rebeldía pura y el lenguaje incoherente. Destaca Tzara.
- Ultraísmo: Basado en elementos futuristas y cubistas, utiliza imágenes tipográficas y temas deportivos y maquinistas. Destaca Guillermo de Torre.
- Creacionismo: El arte no imita la realidad, sino que la crea. Utiliza juegos del azar de las palabras. Destacan Vicente Huidobro y Gerardo Diego.
- Surrealismo: La vanguardia más influyente. Busca la liberación total del individuo mediante la liberación del lenguaje (escritura automática). El surrealismo español libera la imagen y enriquece el lenguaje. Destacan André Bretón y Juan Larrea (poetas del 27).
La Novela Española: Desde Principios del Siglo XX hasta 1939
El siglo XX se inicia con el trauma del Desastre del 98. La etapa de 1902 a 1931 es crucial, marcada por la publicación de obras clave y eventos mundiales como la Primera Guerra Mundial y la Revolución Rusa. Posteriormente, la dictadura de Primo de Rivera coincide con la publicación de obras de Ortega y Gasset y el hundimiento de la bolsa de Nueva York. Las últimas etapas incluyen la Segunda República (1931-1939) y la Guerra Civil (1936-1939), periodo en el que se produce la Segunda Guerra Mundial y el asesinato de Federico García Lorca.
En la novela de 1900 a 1939 encontramos tres tendencias principales que dividen esta etapa histórica:
1. La Generación del 98
Jóvenes autores con espíritu crítico que reaccionan contra las tendencias narrativas del siglo XIX y protestan contra la decadencia social. Sus temas principales son:
- España: Búsqueda de su esencia a través del paisaje, la intrahistoria y las raíces literarias.
- La Existencia: El sentido de la vida, el tiempo y Dios.
Utilizan un estilo sencillo, antirretórico, claro, con precisión léxica y léxico connotativo.
El año 1902 fue clave para la publicación de La voluntad (Azorín), Camino de perfección (Baroja) y Amor y pedagogía (Unamuno).
Autores destacados de la Generación del 98
- Miguel de Unamuno: Estilo denso de ideas, lenguaje expresivo y palabras con uso renovado. Obras: Niebla, San Manuel Bueno, mártir y La tía Tula.
- Pío Baroja: Estilo expresivo pero sencillo y descripciones impresionistas. Obras: Camino de perfección, La busca y El árbol de la ciencia.
- José Martínez Ruiz (Azorín): Estilo de ritmo lento y lírico, pero claro y preciso. Obras: La voluntad y Antonio Azorín.
- Ramón María del Valle-Inclán: Estilo evolucionista hacia el esperpento, perspectiva crítica y denuncia. Obras: Sonatas y Tirano Banderas.
También podemos añadir a Carmen de Burgos y Concha Espina.
2. El Novecentismo o Generación del 14
Autores liberales, intelectuales, universitarios y europeístas. Eran reformistas, defensores del arte puro y se alejaban de la masa.
Autores destacados del Novecentismo
- Ramón Pérez de Ayala: Autor de novelas intelectuales (La vida, El destino, El Mundo como lucha). Obras: A.M.D.G. y Troteras y danzaderas.
- Gabriel Miró: Autor de novela lírica (melancolía, plasticidad, sensualidad). Obras: La cereza del cementerio y El Obispo leproso.
- Ramón Gómez de la Serna: Conocido por la greguería y autor de novelas experimentales. Obra: El doctor inverosímil.
Aunque los autores que tenían preferencia por el ensayo eran José Ortega y Gasset, Eugenio d’Ors, Gregorio Marañón y el propio Gómez de la Serna.
3. Hacia 1927 (Novela de la Generación del 27)
Jóvenes autores que culminarán su obra en el exilio. Encontramos dos vertientes:
- Autores con inicios asociados al intelectualismo: Rosa Chacel, Francisco Ayala (Muerte de perro) y Max Aub (Campos).
- Novelistas sociales comprometidos: Ramón J. Sender (Réquiem por un campesino español y Crónica del Alba) y Luis Cernuda (Teatro. Mujeres obreras).