Recorrido por la Literatura Española Contemporánea: Esperpento, Novecentismo y Dramaturgia Pre-Guerra Civil

Luces de Bohemia: Contexto y Esperpento

Luces de Bohemia fue publicada en 1920. Esta primera etapa del siglo XX se encuentra marcada por la dictadura de Primo de Rivera y por las huelgas debidas al auge del movimiento obrero.

La obra pertenece al esperpento, forma teatral creada por Valle-Inclán, que busca deformar la realidad para expresarla de una manera más eficaz, más cruda y a la vez más artística. Constituye el intento renovador más importante del teatro español anterior a la Guerra Civil.

La obra recoge las últimas horas del escritor ciego Max Estrella y su recorrido nocturno por Madrid, que culmina con su muerte a las puertas de su propia casa. Los temas principales son: la vida bohemia de principios de siglo y la realidad sociopolítica española. Se ofrece así una reflexión pesimista sobre España, en la que incluso las clases populares se ven denigradas.

En la obra intervienen más de cincuenta personajes. Casi todos están presentados como caricaturas y se les ha aplicado la deformación esperpéntica; incluso están animalizados. El protagonista, Max Estrella, es una especie de antihéroe: bohemio, borracho y ciego, pero que conserva un resto de orgullo y de lucidez. Su supuesto amigo, Don Latino de Híspalis, es cínico y desleal; al final abandona a Max moribundo y se lleva su cartera con un billete de lotería que luego resultará premiado.

En el lenguaje se combinan diversos registros, desde el estilo pedante de los modernistas hasta el lenguaje popular madrileño. Son especialmente relevantes las acotaciones, que tienen valor artístico por sí mismas, con gran riqueza léxica. La variedad de espacios y ambientes hace que la obra sea difícil de representar. En los aspectos formales radica la gran novedad de la obra, basada en la “deformación sistemática de la realidad“.

El Modernismo y la Generación del 98

1. La literatura a principios del siglo XX

La literatura al inicio del siglo XX busca nuevas formas de expresión. Aunque el Modernismo y la Generación del 98 han sido tratados como corrientes opuestas, comparten muchos rasgos comunes y autores ligados a ambas corrientes.

2. El Modernismo

El Modernismo se inició en Hispanoamérica a finales del siglo XIX. Surgió con la influencia europea en la literatura hispanoamericana y de dos movimientos: el Parnasianismo (la perfección formal) y el Simbolismo (elaborar el estado del alma).

2.1. Actitud de los modernistas

Los modernistas no están a gusto con el mundo en el que les ha tocado vivir, deciden automarginarse y muestran una actitud bohemia. Proponen un arte libre y la exaltación de la belleza.

2.2. Temas y características

En cuanto a los temas y características principales, destaca el culto a la belleza, paisajes bellos, princesas… Se persigue la expresión de los sentimientos y usan elementos simbólicos como el cisne. El estilo es refinado y sensual; la musicalidad del lenguaje busca despertar los sentidos. Se incluye el color, la musicalidad, la plasticidad y la sonoridad.

2.3. Líneas temáticas: escapista e intimista

Desde el punto de vista temático se distinguen dos líneas: escapista e intimista. La escapista es la más representativa: el modernista se evade a mundos ideales o exóticos y tiempos pasados. A través de la naturaleza, la mujer, los perfumes y la música, el poema se carga de sensualidad. En la línea intimista, el amor y el mundo son vistos desde el punto de vista melancólico.

2.4. Autores modernistas

2.4.1. Rubén Darío

Rubén Darío viajó por casi toda Hispanoamérica y estuvo en España. Azul es el libro iniciador del Modernismo. Sin embargo, la culminación del Modernismo se produce con Prosas profanas, que muestra brillantez expresiva, mientras que Cantos de vida y esperanza es reflexiva.

2.4.2. Manuel Machado

Manuel Machado: sus versos muestran un claro interés por lo español y lo andaluz. Una poesía dominada por la estética: Alma.

2.4.3. Juan Ramón Jiménez

Juan Ramón Jiménez: toda su poesía responde a una sola y misma búsqueda de la belleza. El propio poeta estableció tres etapas en su poesía; la primera corresponde a la estética modernista, la etapa sensitiva. La naturaleza, la muerte o el amor insatisfecho son temas que aparecen envueltos en un sentimiento de tristeza y melancolía. Los libros principales son: Arias tristes, Platero y yo.

3. La Generación del 98

La Generación del 98 es el nombre que se ha agrupado tradicionalmente a un conjunto de escritores, ensayistas y poetas que se vieron afectados por la crisis moral, política y social.

3.1. Características

Algunas características del 98 son:

  • Distinguieron entre una España real miserable y una España oficial falsa y aparente.
  • Entienden la necesidad de una regeneración como un cambio a gran escala.
  • Sienten un gran interés y amor por la Castilla miserable.
  • Estudian los mitos literarios españoles y el romancero.
  • Su estilo es antirretórico, prefieren un lenguaje sencillo y directo.
  • El pesimismo es la actitud principal, que les hace simpatizar con los románticos.
  • El género literario preferido de los autores del 98 es la novela, que inicia un camino innovador.

3.2. Autores de la Generación del 98

3.2.1. Antonio Machado

Antonio Machado: en su primera etapa modernista, Soledades. En la primera edición, Machado tomó rasgos del Modernismo, pero en la segunda, Soledades, galerías y otros poemas, eliminó elementos en favor de una poesía más depurada. En esta segunda edición aparecen los temas del paso del tiempo, la muerte y Dios. Aparecen símbolos como el “jardín” (= la infancia, la juventud perdida) y el “camino” (= la vida en dirección a la muerte). El tema principal es el sueño como paso del tiempo y el deseo de volver a la infancia. Segunda etapa “noventayochista”: Campos de Castilla. La presencia de Leonor se une a reflexiones sobre España, su presente y futuro. La decadencia de las tradiciones sirve para expresar emociones y el símbolo de carácter español.

3.2.2. Miguel de Unamuno

Miguel de Unamuno se aleja de la belleza formal de los poetas modernistas para levantar un mundo propio y original. Su poesía es de tipo metafísico y refleja su angustia espiritual, el dolor que provoca el silencio del tiempo, la muerte… La novela unamuniana escapa de los postulados tradicionales del género; Unamuno acuñó el término “nivolas” para esas novelas heterodoxas. Son ejemplos de nivolas: Niebla y San Manuel Bueno, mártir.

3.2.3. Pío Baroja

Pío Baroja ordena buena parte de su obra en trilogías, cada una con un tema diferente: la lucha por la vida como en La busca; la tierra vasca como en Zalacaín el aventurero; y el mar, en Las inquietudes de Shanti Andía. Ambas son novelas de ambiente vasco que sitúan al hombre de acción. Otro tema es la raza con El árbol de la ciencia, una novela de carácter filosófico en la que el autor tiene una visión desolada y crítica de la España de la época. El objetivo de su narrativa es entretener al lector. Sus novelas se caracterizan por la acción, los diálogos abundantes y la presencia del narrador a través de comentarios y reflexiones.

3.2.4. Ramón María del Valle-Inclán

Ramón María del Valle-Inclán: dos estilos: Modernismo y Esperpento. Los años iniciales marcados por el Modernismo y representados por las cuatro Sonatas: Sonata de otoño, Sonata de estío, Sonata de primavera y Sonata de invierno. De esta primera época también la trilogía de “la guerra carlista”. Las obras de las últimas épocas destacan Tirano Banderas, cuya historia se centra en un dictador americano y no está localizada en un tiempo ni espacio concretos. Por último, las tres novelas del Ruedo Ibérico, que intentan reflejar la historia y vida del país.

3.2.5. Azorín

Azorín (José Martínez Ruiz): en sus novelas, la narración se fragmenta en instantáneas que congelan el tiempo y captan la impresión del instante. Ejemplo es La voluntad, que contempla cómo el paso del tiempo conduce la vida hacia la nada. En cuanto a los ensayos, destaca La ruta de Don Quijote.

El Novecentismo y las Vanguardias

1. Contexto y características del Novecentismo

Entre 1910 y 1936 coexistieron diversos movimientos: el Novecentismo, las Vanguardias y la Generación del 27. El Novecentismo surge cuando un grupo de jóvenes manifiestan su rechazo hacia el tono visceral y subjetivo de sus mayores. Son intelectuales liberales que pretenden modernizar la sociedad y acercarla a Europa. Se les denomina también Generación del 14 y sus rasgos más característicos son:

  • El intelectualismo: defienden la racionalidad y el rigor intelectual.
  • El europeísmo: propagan la modernización intelectual del país y su vinculación a la cultura europea.
  • La presencia en la vida cultural y política: aprovechan los resortes para influir en la sociedad.
  • El ideal universitario: muestran su preferencia por la cultura urbana.
  • Defienden un arte puro, de base intelectual, que rechaza el sentimentalismo romántico.

2. La literatura novecentista

La literatura novecentista es una literatura depurada en forma y contenidos; el estilo muestra una acusada preocupación formal: huye de lo fácil y descuidado, con un lenguaje selectivo y minoritario. Se cultivan el ensayo y la novela, y en la poesía cabe mencionar la figura de Juan Ramón Jiménez y la prosa poética, que pasa por diferentes etapas.

2.1. La poesía: Juan Ramón Jiménez

En la poesía, Juan Ramón Jiménez es el autor más representativo, fue Premio Nobel de Literatura. Evolucionó de una etapa modernista a una más intelectual, por la poesía desnuda, expresión de la experiencia sin ropajes retóricos. La nueva etapa comienza con el Diario de un poeta recién casado, donde prefiere los poemas breves y sin rima, versos libres. A partir de 1936, su poesía se vuelve compleja y metafísica con grandes temas: la poesía, Dios y la eternidad, en la etapa suficiente o verdadera, como en Animal de fondo.

2.2. El ensayo

En el ensayo, se observan planteamientos reflexivos y un tono objetivo. Alcanzó un gran desarrollo tanto en calidad como en variedad temática e ideológica. La meditación en torno al ser de España dio paso a una perspectiva cosmopolita impulsada por Ortega y Gasset.

2.2.1. José Ortega y Gasset

José Ortega y Gasset escribió ensayos de temas filosóficos, sus reflexiones sobre España, el aislamiento del país, y se declara europeísta convencido. Destacan: La rebelión de las masas. En relación con la estética: La deshumanización del arte, un análisis del arte nuevo que se convirtió en justificación teórica de las vanguardias y tuvo gran influencia en la Generación del 27.

2.2.2. Eugenio d’Ors

Eugenio d’Ors, agitador cultural, influyó en la aceptación de nuevas corrientes intelectuales y artísticas. Su obra se publicó en una nueva forma de ensayo periodístico, la “glosa“, que consistía en una breve reflexión centrada en el ambiente cultural y político de la época. Sus libros reflejan una sólida formación humanística y su pasión por los clásicos y modernos. Destaca Tres horas en el museo del Prado.

2.3. La novela

En la novela, la prosa es precisa y llena de recursos expresivos. Se caracteriza por la actitud crítica de unos escritores atraídos por la cultura europea y el análisis de los problemas de España.

2.3.1. Gabriel Miró

Gabriel Miró: destaca Nuestro padre San Daniel, representación de un mundo casi desaparecido que el autor pretende rescatar. La acción es mínima; lo fundamental es la creación de ambientes y de personajes. Miró aspira a captar la vida monótona y asfixiante de una comunidad cerrada. En la obra crea un enfrentamiento entre los que viven dominados por la idea del pecado y los abiertos a la felicidad.

2.3.2. Ramón Pérez de Ayala

Ramón Pérez de Ayala: Tinieblas en las cumbres pertenece a su etapa realista, con una visión amarga de la vida. Pérez de Ayala pretende “reflejar la crisis hispánica desde principios de este siglo”. Evolucionó hacia una narrativa más intelectual. Su mejor obra es Belarmino y Apolonio.

3. El Vanguardismo

El Vanguardismo: entre las dos guerras mundiales se producen varios movimientos de revolución estética y transgresión artística, conocidos como movimientos de vanguardia. Estos movimientos o “ismos” se caracterizan por un afán de ruptura con la tradición estética previa, lo que conduce a la búsqueda de nuevos temas y formas expresivas. Su afán se centra en experimentar y romper con el arte anterior, desarrollar un arte nuevo y hacer gala de un antisentimentalismo. Ese deseo de originalidad, como consecuencia, genera una obsesión por experimentar nuevas formas, por medio de la excentricidad y el escándalo. Desprecian al público y a la burguesía, buscando la provocación. Suelen darse a conocer en revistas literarias mediante manifiestos que atacan el arte oficial y afirman nuevas propuestas estéticas, dejando traslucir la idea de que la revolución estética forma parte de un cambio más profundo de carácter moral y social.

3.1. Movimientos de vanguardia (“Ismos”)

  • El Futurismo: exalta los avances técnicos del nuevo siglo como las máquinas, la industria…
  • El Cubismo: busca la descomposición de la imagen tradicional; surgió a través de los cuadros de Picasso. El escritor más conocido del movimiento es Guillaume Apollinaire, inventor de los caligramas, poemas visuales cuyos versos tratan de reproducir la realidad.
  • El Dadaísmo: el nombre procede de “dada”, los primeros balbuceos del bebé, y no pretende significar nada. Sus seguidores pretenden romper con el arte y la literatura de la corrompida sociedad burguesa, recuperar la falta de lógica y la inocencia, utilizando incluso un lenguaje incoherente.
  • En la literatura, el movimiento más importante es el Surrealismo: deseo de una auténtica liberación en la vida del hombre. Busca más allá de la realidad y la lógica, y así manifestar impulsos reprimidos. En España, los autores más relevantes en poesía son Alberti y Lorca; en pintura, Dalí; y en cine, Buñuel.
  • El Creacionismo: la necesidad de crear una nueva realidad. Las palabras son el centro de atención, no su significado.
  • Y el Ultraísmo: busca captar el mundo a través de percepciones fragmentarias e imágenes ilógicas. Su estilo evita referencias sentimentales o morales y prefiere temas de la realidad moderna. Autor: Guillermo de la Torre.

3.2. Ramón Gómez de la Serna y la greguería

Ramón Gómez de la Serna, escritor y periodista madrileño, se mantuvo al margen de las actividades colectivas. Fue director de la publicación “Prometeo”. Su vida y obra son una constante ruptura con lo establecido y las convenciones. Dar conferencias vestido de torero o celebrar banquetes en quirófanos eran algunas de sus excentricidades. Este carácter excéntrico caracteriza su literatura. La base de su producción es la greguería: “Humorismo + Metáfora = Greguería”. Las greguerías tratan diferentes temas y se construyen con recursos literarios variados, como la hipérbole, la personificación y el símil. Además, destaca por ofrecer un mundo absurdo, que solo puede captar de forma incoherente y humorística.

El teatro anterior a 1939

1. Panorama general

Este periodo transcurre durante el reinado de Alfonso XII. En general, fue un periodo muy represivo donde conviven dos ramas: el teatro comercial y el teatro innovador y renovador.

2. El teatro comercial

Dentro del teatro comercial tenemos la comedia burguesa, conocida como comedia benaventina. Jacinto Benavente fue su autor más representativo. El teatro de Benavente tenía un tono más realista. Los temas y personajes de la comedia burguesa corresponden con los de las clases medias y altas de la sociedad y con los conflictos típicos de estos grupos sociales: amores insatisfechos, hipocresía… Destaca Los intereses creados.

2.1. El teatro poético

El teatro poético surge de la corriente modernista. Es un teatro de pura evasión, sin relación con la realidad, que recupera temas históricos y legendarios. Destaca Eduardo Marquina con Las hijas del Cid.

2.2. El teatro cómico

El teatro cómico, cuya finalidad es el entretenimiento. Bajo este rótulo se engloban tendencias y espectáculos muy diversos, entre ellos la zarzuela y los sainetes, que alcanzaron un gran desarrollo con Carlos Arniches. Él presenta en sus sainetes una galería de personajes pintorescos de Madrid (chulapos), con sus problemas cotidianos y su forma de hablar. Destacan sus tragedias grotescas, donde el autor denuncia una serie de lacras sociales como el atraso cultural de España, la injusticia social… En sus obras como Los caciques.

2.3. El astracán

Otro género del teatro cómico es el astracán, creado por Muñoz Seca y caracterizado por los juegos de palabras, los chistes y las parodias. Su obra más popular es La venganza de don Mendo.

2.4. Los hermanos Álvarez Quintero

Los hermanos Álvarez Quintero estrenaron obras en las que predomina el ambiente andaluz, con acción sin complicaciones. Destaca La malvaloca.

3. El teatro renovador

Dentro del teatro renovador surgen intentos dentro de los diferentes movimientos literarios. En la Generación del 98 destacamos a Unamuno, con un teatro intelectual y filosófico en el que refleja sus obsesiones por el paso del tiempo, la muerte y la búsqueda de la felicidad; a Azorín, cuya intención es liberar el teatro español y elevarlo a la categoría del teatro europeo (el eje de sus obras es el diálogo, del que se deduce lo relacionado con los personajes y la acción; meditó sobre el paso del tiempo y la muerte). Sin embargo, Valle-Inclán es el autor más importante en esta generación. Su obra es una revolución en la historia del teatro español y la semilla de nuevos caminos abiertos por el teatro actual.

3.1. La obra de Valle-Inclán

La obra de Valle-Inclán suele agruparse en tres ciclos:

3.1.1. El ciclo del mito

La acción transcurre en una Galicia rural y mítica, donde la existencia del hombre se rige por los instintos primarios y lo irracional. Destacan Divinas palabras y Comedias bárbaras, donde es notable la utilización de acotaciones.

3.1.2. El ciclo de la farsa

Obras situadas en un espacio “ridículo”: jardines, rosas… Destaca La marquesa Rosalinda. En ellas se ven rasgos de lo que luego será el esperpento, como la deshumanización de los personajes.

3.1.3. El ciclo del esperpento

Es un intento de presentar la realidad española, mostrando los hechos de una manera exagerada y burlesca. Presenta una realidad deformada para que el espectador quede sorprendido. Es un teatro de crítica de una realidad falsa y unos valores que ya no tienen sentido. Se encuadra en la trilogía Luces de Bohemia. Esta obra cuenta el recorrido de Max Estrella y su compañero Don Latino por la noche madrileña. La grandeza clásica de Max contrasta con la sordidez de una realidad vulgar, con personajes vacíos y grotescos. Se presencia la descomposición de un mundo regido por la estupidez, la injusticia y la violencia.

4. El teatro de la Generación del 27: Federico García Lorca

En la Generación del 27, Federico García Lorca cultiva un teatro poético que gira en torno a símbolos como la sangre, el cuchillo… Se desarrolla en espacios míticos o de un realismo trascendente y refleja un eje dramático básico: el choque entre la libertad y el sentimiento. Su producción dramática puede ser agrupada en tres conjuntos:

4.1. Primeras piezas teatrales

Mariana Pineda, drama histórico basado en la heroína ajusticiada por Fernando VII por bordar una bandera liberal. Se le unen las farsas trágicas como La zapatera prodigiosa y el teatro de marionetas.

4.2. El teatro vanguardista

Las comedias imposibles o misteriosas. Les dio este nombre a las comedias creadas bajo el influjo surrealista, que le valen para explorar los instintos ocultos del hombre: la oposición entre la realidad y los sueños o el rechazo al amor homosexual. Destaca El público.

4.3. La etapa de plenitud

Escribe durante los años treinta obras teatrales que alcanzarán el éxito comercial: Bodas de sangre, Yerma y La casa de Bernarda Alba. Todas tienen en común el protagonismo de las mujeres y el tema común de la marginación social. Bodas de sangre y Yerma son dos tragedias de aire clásico, que mezclan la prosa y el verso, utilizan coros para comentar la acción y manejan elementos simbólicos. Los temas característicos son el amor, la violencia y la muerte.

4.4. “La casa de Bernarda Alba”

La casa de Bernarda Alba: no fue representada ni publicada en vida de Lorca. Es la obra más “realista”, la acción se desarrolla con personajes de “carne y hueso”, en un ambiente rural verosímil, con la presencia de elementos “poéticos” como símbolos y metáforas. El tema es la lucha de la autoridad contra la libertad y el destino trágico. Critica la sumisión y el encerramiento de las mujeres.