Novecentismo y Vanguardias: Claves de la Renovación Estética en la Literatura Española del Siglo XX

El Contexto Histórico y el Surgimiento del Novecentismo

En la década de 1920, España estaba lejos de superar sus problemas económicos y sociales. Ocurrieron una serie de acontecimientos políticos cruciales: el agotamiento de la Restauración, la dictadura de Primo de Rivera, la proclamación de la Segunda República en 1931 y el estallido de la Guerra Civil. En este clima de conflictos y depresión económica surge el **Novecentismo**, también llamado **Generación de 1914**, un movimiento de transición entre el Modernismo y las Vanguardias, que supuso una revolución formal en el arte.

El Novecentismo, alejado de lo romántico y sentimental, se caracteriza por lo **clásico** y lo **sereno**, en una búsqueda del **arte puro** y equilibrado que está destinado al placer estético de una **minoría intelectual**.

Características y Representantes de la Generación de 1914

El Novecentismo estuvo compuesto por autores, filósofos, científicos y filólogos. Estos intelectuales (Ortega, D’Ors, Azaña, Marañón, Pérez de Ayala, entre otros) dominaron, junto a figuras como Unamuno, Juan Ramón Jiménez, Antonio Machado o Valle-Inclán, el panorama cultural español en la segunda y tercera décadas del siglo XX.

El término «Novecentismo» alude a una característica fundamental de este grupo de escritores: el deseo de **renovación estética**. Los intelectuales novecentistas presentan una serie de rasgos comunes:

  • Sólida formación cultural.
  • Son **europeístas**.
  • Son **racionalistas** (defienden un arte intelectual e inteligente, frente al sentimentalismo).
  • Cultivan una literatura culta destinada a las minorías intelectuales.
  • Son en su mayoría **reformistas** y, con el tiempo, republicanos.

La estética novecentista se caracteriza por la **precisión de ideas**, la **serenidad**, la **pulcritud** y el **equilibrio** para conseguir un arte puro cuyo único objetivo era el placer estético.

Juan Ramón Jiménez: La Poesía Novecentista

El principal representante de la poesía novecentista es **Juan Ramón Jiménez**, cuyo magisterio es muy visible en los principales poetas españoles de la primera mitad del siglo XX. Su producción lírica se divide en tres etapas:

1. Etapa Sensitiva (hasta 1915)

De corte modernista, con una poesía intimista, melancólica y musical, de influencia simbolista. Obras destacadas: Arias tristes (1903) y Jardines lejanos (1904).

2. Etapa Intelectual (1916-1936)

Se inicia con Diario de un poeta recién casado, obra que rompe con el Modernismo y se abre a las innovaciones vanguardistas. Sus poemas suelen ser breves pero densos, buscando la perfección y la depuración. Obras destacadas: Eternidades (1918) y Piedra y cielo (1919).

3. Etapa Suficiente o Verdadera (desde 1936 hasta su muerte)

Su poesía adquiere un tono místico, con una fijación por la muerte y la eternidad, y una depuración verbal. Obras más destacadas: Espacio y Dios deseado y deseante.

Aparte de poesía, Juan Ramón Jiménez también escribió numerosos libros en prosa, entre los que destaca su obra más conocida: ***Platero y yo***.

Géneros Literarios del Novecentismo

El Ensayo: El Género Predilecto

El **ensayo** es el género que mejor se adapta a los intereses novecentistas, ya que refleja el carácter intelectual de los escritores y su tendencia a la reflexión, dando cabida a la profundidad de ideas.

José Ortega y Gasset

Fue uno de los intelectuales más influyentes. En su producción ensayística aborda distintos tipos:

  • Ensayos filosóficos: Defiende la concepción de la vida humana.
  • Ensayos estéticos: Sobre cuestiones artísticas y literarias (ej. La deshumanización del arte, 1925).
  • Ensayos sociológicos: Reflexionan principalmente sobre el tema de España (ej. La rebelión de las masas, 1930).

Otros autores que realizaron obras ensayísticas son **Eugenio D’Ors** y **Manuel Azaña**.

La Novela Novecentista

La novela destaca por su **lirismo**, el **intelectualismo** y la presencia de pasajes ensayísticos. Se trata de obras en las que lo fundamental es la reflexión y la descripción de personajes, quedando el argumento reducido a mínimos sucesos. Entre los novelistas sobresalen **Ramón Pérez de Ayala** y **Gabriel Miró**.

Ramón Pérez de Ayala

Sus obras se caracterizan por su intelectualismo y sus inicios se hallan próximos a la Generación del 98. Sus novelas se singularizan por el humor, la mezcla de lo culto y lo vulgar, y el uso de recursos literarios. Su obra maestra fue ***Belarmino y Apolonio*** (1921), pero también destacan Luna de miel, luna de hiel, Los trabajos de Urbano y Simona, Tigre Juan y El curandero de su honra.

Gabriel Miró

Su narrativa está determinada por el lirismo y se distinguen dos etapas:

  • Primera etapa: Está presente la influencia modernista (ej. Las cerezas del cementerio).
  • Segunda etapa: Busca la perfección formal, caracterizada por extensas descripciones de sensaciones y ambientes. Sus dos novelas más importantes son Nuestro Padre San Daniel y El obispo leproso.

Las Vanguardias: La Ruptura Estética

Aunque los novecentistas trajeron novedades importantes, la verdadera ruptura con la estética anterior se produce con la llegada de los movimientos de **Vanguardia**. Con este término se designa a aquellos movimientos que rechazan la tradición estética occidental y proponen nuevas concepciones artísticas. El conjunto de las diferentes escuelas vanguardistas se conoce con el nombre de **ismos**.

Rasgos Comunes de los Ismos

Estos movimientos comparten algunos rasgos comunes:

  • La **destrucción del pasado** y la tradición.
  • El enfrentamiento con la sociedad burguesa.
  • El afán de **experimentación**, rebeldía y provocación.
  • La defensa de la **libertad formal**, la intención lúdica y la originalidad.

Principales Movimientos de Vanguardia Europeos

Entre los que se consolidan e influyen en la literatura posterior podemos citar los siguientes:

  • Futurismo: Fundado por **Filippo Tommaso Marinetti** (1909). Reivindica un arte dinámico, huyendo del sentimentalismo y optando por reflejar la **velocidad** y la **modernidad** a través de las máquinas. En literatura, se caracteriza por la supresión de los signos de puntuación, el empleo de signos matemáticos y musicales, y el uso de verbos en infinitivo.
  • Cubismo: Creado por **Guillaume Apollinaire** en 1913. Se basa en descomponer la realidad para recomponerla de nuevo libremente. Los escritores hacen uso de distintos tipos de letra, disposiciones tipográficas de los versos y suprimen signos de puntuación.
  • Dadaísmo: Instaurado por **Tristan Tzara** en 1916. Proponen una literatura radicalmente libre, donde la lógica y el sentido común no intervienen. Utilizan la combinación de palabras al azar, un lenguaje incoherente y asociaciones disparatadas.
  • Surrealismo: Fue promovido por **André Breton** en 1924 y es la vanguardia de mayor trascendencia posterior, siendo especialmente influyente en España. Exploran el mundo del **subconsciente** con una voluntad creativa. Hacen uso de la **escritura automática**, las enumeraciones caóticas, las imágenes oníricas y el verso libre.

Ismos Hispanos: Ultraísmo y Creacionismo

Entre los diferentes movimientos de vanguardia que alcanzan eco y desarrollo en la literatura española durante las tres primeras décadas del siglo XX, es destacable la presencia de dos ismos hispanos:

  • Creacionismo: Iniciado por **Vicente Huidobro**, quien consideraba que el poeta no debe imitar la naturaleza, sino crear su propia realidad, ser un «pequeño dios». Se da la máxima importancia a la **metáfora** y se prescinde de lo anecdótico y descriptivo. En España influyó en poetas como Gerardo Diego y Juan Larrea.
  • Ultraísmo: Fundado por **Guillermo de Torre**. Es un movimiento de inspiración futurista caracterizado por el antisentimentalismo, la deshumanización y el empleo de **metáforas e imágenes insólitas**. Otros autores ultraístas fueron Juan Larrea y Jorge Luis Borges.

En definitiva, el Novecentismo y los movimientos de vanguardia europeos y españoles dibujan un panorama artístico inédito y rompedor que tendrá como consecuencia la configuración de un grupo poético inigualable: la **Generación del 27**, una generación de poetas e intelectuales que iluminarán nuestra historia literaria con un fulgor tan intenso que llega hasta nuestros días.