Introducción: La Guerra Civil Española (1936-1939)
La Guerra Civil Española fue un conflicto bélico que enfrentó al Gobierno de la Segunda República contra una parte del ejército y los partidos conservadores, estallando tras el golpe de Estado en julio de 1936. Este conflicto se extendió desde el 17 de julio de 1936 hasta el 1 de abril de 1939, finalizando con la imposición de una dictadura. Como antecedentes, se destaca la proclamación de la Segunda República. En este periodo, el último Gobierno del Frente Popular incrementó la oposición de las derechas y del ejército, lo que finalmente condujo al golpe de Estado de 1936.
1. De la Sublevación Militar a la Guerra Civil
Tras la victoria del Frente Popular, creció la oposición de la oligarquía dominante, que empezó a conspirar contra la República. El bando franquista contaba con los altos mandos del ejército y partidos conservadores, mientras que el bando republicano se apoyó en los partidos de izquierdas, sectores urbanos y sindicatos como la UGT y la CNT. La conspiración fue llevada a cabo por el General Mola, Sanjurjo y, más tarde, Franco. El golpe se dio el 17 de julio de 1936, iniciando así la Guerra Civil Española.
2. Desarrollo Militar de la Guerra
Inicio: Avance hacia Madrid y Batallas en el Entorno
El inicio del golpe tuvo lugar en Marruecos, donde llegó Franco el 18 de julio para hacerse cargo de las tropas. El 5 de agosto, las tropas sublevadas cruzaron el Estrecho de Gibraltar. La flota republicana no pudo cerrar el paso a las tropas de Franco. Otros mandos militares se sublevaron en diversas zonas españolas, pero fracasaron. Tras el fracaso del golpe inicial, España quedó dividida en dos zonas enfrentadas:
- España Republicana: Comprendía el sur de Castilla y Extremadura, Madrid, Andalucía, la cornisa cantábrica y Levante. En esta zona se encontraban las grandes ciudades y el Banco de España.
- España Sublevada: Abarcaba el norte de Castilla y Extremadura, Galicia, Aragón y los archipiélagos.
En cuanto a las fuerzas militares, la mitad del ejército de tierra, casi toda la Marina, parte de las fuerzas aéreas, la mitad de la Guardia Civil y la Guardia de Asalto pertenecían a la República. Los franquistas, por su parte, contaban con las tropas del ejército español más numerosas, incluyendo a los carlistas. El objetivo inicial de los sublevados era cruzar hasta Madrid desde el norte y el sur, pero fracasaron; el ataque fue detenido por las defensas republicanas. En el norte, los sublevados tomaron Irún, San Sebastián y parte de Asturias.
Batallas Alrededor de Madrid y Conquista del Norte y Andalucía Occidental
Franco cambió de plan al no poder entrar en Madrid e intentó una táctica para aislarla, pero también fracasó. El Gobierno republicano se trasladó a Valencia. Con ayuda de los alemanes e italianos, Franco ocupó Andalucía occidental. En Aragón, la milicia republicana consiguió recuperar parte del territorio. Los sublevados, con el apoyo de la Legión Cóndor alemana, conquistaron Vizcaya, Santander y Asturias. A finales de 1937, los sublevados controlaban la franja cantábrica.
Avance hacia el Mediterráneo
Los republicanos iniciaron una ofensiva para romper el cerco sobre Madrid en Zaragoza y Teruel. En abril de 1938, los sublevados llegaron al Mediterráneo, dividiendo la zona republicana en dos partes. Aragón y Castellón fueron ocupadas en primavera. La España republicana quedó dividida en Cataluña, Madrid, Valencia y Almería.
Batalla del Ebro y Ocupación de Cataluña
En julio de 1938, el general republicano Vicente Rojo intentó una ofensiva en el Ebro. Fue la batalla más larga y sangrienta de la guerra. La derrota de los republicanos dejó despejada la ruta hacia Cataluña para Franco. Barcelona cayó en enero de 1939.
El Final de la Guerra
La República se dividió entre aquellos que querían seguir luchando y los que buscaban una negociación honrosa. En Madrid, se produjo una sublevación contra la República. El General Casado y Julián Besteiro intentaron negociar la rendición. El 28 de marzo, las tropas franquistas ocuparon la capital. Finalmente, cayeron Valencia, Cartagena y otras zonas. El 1 de abril de 1939, la guerra se declaró finalizada.
3. Significado Político y Dimensión Internacional
En España, el conflicto se extendió como un enfrentamiento entre las fuerzas obreras, progresistas y democráticas contra los grupos de poder tradicionales. La España sublevada contó con el apoyo del ejército y tuvo un predominio militar. La España republicana, por su parte, enfrentó dos conflictos: la guerra y una revolución social interna. La Guerra Civil tuvo un carácter internacional, con enfrentamientos entre demócratas y fascistas. Este hecho potenció el apoyo de la Iglesia a Franco. La República recibió el apoyo de la URSS, México y otras naciones de escasa potencia militar. Las potencias temerosas de una escalada militar practicaron la política de no intervención. Hoy en día, la Guerra Civil Española se ve como el antecedente de la Segunda Guerra Mundial.
4. Evolución Política y Social en Ambas Zonas
Zona Republicana
Tras el golpe, se extendió por la España republicana el dominio de comités y milicias de partidos y sindicatos. Se recompuso el ejército y la autoridad del Gobierno central pasó a Juan Negrín, quien trató de reconducir la guerra, encontrar una negociación y resistir hasta el comienzo de la Segunda Guerra Mundial.
Zona Sublevada
Se creó un Estado totalitario con concentración de poder en el General Franco. Se estableció un partido único en manos del jefe del Estado y del Gobierno, Franco. En ambas zonas hubo una dura represión. Fueron fusilados aquellos que se opusieron al golpe militar.
5. Consecuencias de la Guerra
Demográficas
La guerra dejó una gran cantidad de víctimas humanas y una dura represión sobre la población. Se estiman entre 500.000 y 600.000 muertos, a lo que hay que añadir los heridos y exiliados.
Económicas
Se produjo la pérdida de oro en el Banco de España, la destrucción del tejido industrial y la devastación de pueblos y ciudades. La situación de España era ruinosa.
Políticas
Se paralizaron los intentos de democratizar y modernizar España, iniciándose una dictadura.
Sociales
Se recuperó la hegemonía social, económica e ideológica por parte de la oligarquía terrateniente. Los trabajadores perdieron los derechos conseguidos en la República y la mujer perdió su igualdad.
Culturales
Se produjo la muerte de intelectuales, el exilio o la represión. La nueva cultura regresó a tiempos pasados.
6. Conclusión
La Guerra Civil constituye un periodo crucial y trágico de la historia de los españoles del siglo XX. Puede interpretarse como la culminación del enfrentamiento de clases en España, el conflicto entre los viejos grupos dominantes y los grupos obreros que querían democratizar y modernizar el país. Este choque dio lugar a una guerra que supuso la ruptura del país. Esta guerra fue un acontecimiento de dimensión mundial, cuyo apoyo a cada bando atrajo la atención de la opinión pública internacional. Hay que destacar el avance del fascismo. La victoria de los franquistas marcó el comienzo de una dictadura militar. La memoria de la República se mantuvo viva durante el franquismo.