La Poesía Durante la Guerra Civil Española (Años 30)

Durante la Guerra Civil Española, hacia los años 30, se desarrolló una poesía utilizada como propaganda por ambos bandos. Las circunstancias exigían una «Literatura de urgencia», en la que cabe destacar:

• Del bando republicano:
  • Antonio Machado («El crimen fue en Granada»)
  • Rafael Alberti («Romance de la defensa de Madrid»)
  • Miguel Hernández («Para la libertad»)
• Del bando falangista:
  • Dionisio Ridruejo
  • Leopoldo Panero
  • L. F. Vivanco
  • José María Pemán
  • Agustín de Foxá

Miguel Hernández (1910-1942)

Miguel Hernández se sitúa entre la Generación del 27 y la Generación del 36. A pesar de su falta de estudios académicos, su vasta lectura compensaba esta carencia. Los tres temas fundamentales de su poesía son: el amor, la muerte y la vida, patentes en poemas como «Llegó con tres heridas».

Su estilo es sencillo, caracterizado por la espontaneidad, una voz directa y transparente, y la búsqueda de la perfección formal. Su poesía se divide en tres etapas:

• Primera etapa (aprendizaje): Influenciado por autores como Góngora. Sus primeros poemas fueron los de Perito en lunas. En esta etapa, el paisaje y la naturaleza tienen gran importancia.
• Segunda etapa (Guerra Civil): Desarrolla una poesía bélica y comprometida, como se observa en Viento del pueblo. El lenguaje empleado es accesible.
• Tercera etapa (tras la guerra): Su obra principal en esta etapa es Cancionero y romancero de ausencias, donde refleja su dramática experiencia personal (muerte de su hijo, la cárcel, la enfermedad).

La Poesía de Posguerra (Años 40)

Tras finalizar la Guerra Civil, muchos poetas se vieron obligados a marchar al exilio, entre ellos: Luis Cernuda, Pedro Salinas, Jorge Guillén, Rafael Alberti, Concha Méndez y Ernestina de Champourcín.

León Felipe (1884-1968) se exilió a México, donde publicó Ganarás la luz, obra que aborda la existencia humana y la soledad.

Tendencias Poéticas en España (Años 40)

Durante la década de los 40, en España se desarrollaron dos tendencias que Dámaso Alonso denominó:

• Poesía arraigada: De corte clásico, métrica tradicional, visión positiva y belleza formal, donde el paisaje y la religión son los temas más tratados. Entre sus autores destacan: Luis Rosales con La casa encendida y Rimas, José García Nieto, Luis Felipe Vivanco y Dionisio Ridruejo.
• Poesía desarraigada (o existencial): Caracterizada por una visión del mundo como caos y angustia. Uno de sus principales autores es Dámaso Alonso (1898-1990). En su juventud predominó una poesía pura (Poemillas de la Ciudad), y después de la guerra escribió Hijos de la ira, obra que marca el inicio de su etapa existencialista. Los temas tratados son la muerte y la injusticia, y las dudas existenciales crean la necesidad de creer en Dios. Otros autores de la poesía desarraigada son: Victoriano Crémer, Carlos Bousoño, Eugenio García de Nora, Leopoldo de Luis, José Luis Hidalgo, Vicente Gaos y Ramón Garciasol.

Otras Corrientes Relevantes

Al margen de estas dos corrientes, merecen destacarse:

• Carlos Edmundo de Ory: Fundador del Postismo (Postsurrealismo), con el objetivo de recuperar la poesía vanguardista.
• Pablo García Baena: Principal representante de Cántico, donde el amor es el tema fundamental.

La Poesía Social (Años 50)

En los años 50, la evolución de la poesía desarraigada de la década anterior desembocó en la poesía social. Los poetas emplearon sus versos con una dimensión política y un valor de denuncia, cuyo objetivo era la búsqueda de la transformación social. Los temas más recurrentes fueron: la preocupación por España, la defensa de la libertad y la solidaridad con los marginados u oprimidos. En esta década, el tema constituyó la base del poema, rechazándose el esteticismo y la poesía pura.

Autores Destacados de la Poesía Social

• Blas Otero: Sus obras transitan del «yo» al «nosotros». Se dividen en tres etapas:
  • Primera etapa: Manifiesta una preocupación existencial y religiosa, con obras como Ancia.
  • Segunda etapa: Desarrolla una poesía social, que se muestra en su libro Pido la paz y la palabra.
  • Tercera etapa: Busca nuevas formas, con una métrica más libre e intimista (vida personal, experiencia).
• Gabriel Celaya: Destaca por su estilo directo, sencillo y coloquial. Se caracteriza por la denuncia y la concienciación social. Su obra Cantos íberos es representativa.
• José Hierro: Busca la conciencia social empleando la subjetividad intimista. Trata temas como el ser humano y la realidad que vive (histórica, temporal, social). Entre sus obras destacan: Quinta del 42 y Cuaderno de Nueva York (su última obra).

La Generación del 50 (Años 60)

En los años 60, emergió una serie de poetas que se apartaron de la poesía social, conformando la denominada Generación del 50. Estos escritores, nacidos entre 1925 y 1936, no participaron en la guerra. Consideraban la poesía como un medio de conocimiento del mundo. Las características de esta generación incluyen:

• Muchos de ellos iniciaron su trayectoria con una poesía social.
• Lo esencial no era que su obra fuera dirigida a un público amplio.
• Los principales temas son el intimismo y la experiencia personal (conocida como poesía de la experiencia).
• El lenguaje se caracteriza por un tono coloquial, sencillo y comunicativo.
• En la métrica, emplean el verso libre y, ocasionalmente, estrofas clásicas.
• Uso frecuente de la segunda persona, que confiere una sensación de extrañeza ante los acontecimientos vividos.

Autores Destacados de la Generación del 50

• Ángel González: Influido por Antonio Machado, su poesía es crítica y social, con presencia del «yo» personal y tendencia a la sencillez, pero con un lenguaje cuidado. Una de sus obras es Áspero mundo.
• José Ángel Valente: Defendía la poesía como medio de conocimiento. Sus obras son muy personales e independientes. Su obra más importante es Punto cero.
• Jaime Gil de Biedma: Desarrolla la poesía de la experiencia. Sus temas más empleados son el amor y el sexo, y la reflexión sobre el paso del tiempo. Destaca el título Las personas del verbo.

Conceptos Lingüísticos Relevantes

• Morfología:
  • Morfema flexivo: VT (Voz, Tiempo), TAM (Tiempo, Aspecto, Modo), NP (Número, Persona).
  • Morfemas derivativos: prefijos y sufijos.
  • Tipos de palabras: simple, derivada, compuesta, parasintética.
• Conectores y Marcadores Discursivos:
  • Para comenzar, primeramente, como consecuencia, ahora bien, nos vemos en la disyuntiva de…, y por esta razón es incomprensible que…, es decir, en otras palabras, en cierto modo, ciertamente, en síntesis.
• Tipos de Oraciones:
  • Coordinadas: (p1 y p2).
  • Yuxtapuestas: (van con comas y no hay dependencia sintáctica).
  • Sustantivas:
    • De sujeto (que).
    • De complemento directo (quien, que).
    • De complemento indirecto (a que, al que).
    • De complemento de régimen (de que).
    • De complemento del nombre (de que).
    • De complemento del adjetivo (a que).
    • De complemento adverbial (por quien).
  • Adjetivas: (que, cual, cuyo, como).
    • Especificativas (sin comas).
    • Adjetivas sustantivadas.
  • Adverbiales:
    • De lugar (donde).
    • De tiempo.
    • De modo (como).
    • Comparativas.
    • Causales (porque).
    • Consecutivas.
    • Condicionales (si).
    • Concesivas (aunque).
    • Finales (para lo que).
• Análisis Textual:
  • Características lingüísticas.
  • Tipo de autor.
  • Función del lenguaje.
  • Público.
  • Tono.
  • Tipologías textuales (según la intencionalidad comunicativa: informativa, narrativa, descriptiva, etc.).
  • Variedad del discurso (narración, descripción).
  • Ámbito temático (técnico, científico).
  • Coherencia (tema, estructura).
  • Cohesión (conectores, elementos léxicos).
  • Adecuación (emisor, receptor).