El Barroco Literario Español
El Barroco, un periodo artístico y literario del siglo XVII, se caracteriza por su complejidad y ornamentación. En la literatura española, podemos observar dos tendencias principales: el conceptismo y el culteranismo.
Soneto Barroco: El Carpe Diem en Góngora
Este soneto del siglo XVII de Luis de Góngora es un claro ejemplo del culteranismo.
Tópicos
- Carpe diem: “aprovecha el tiempo”, con la idea de la muerte inminente.
- Tempus fugit: el tiempo huye.
- Donna angelicata (transformada al Barroco).
- Descriptio puellae: descripción de la dama.
Tema
La exhortación que la voz lírica hace a la dama para que disfrute sin demora de la juventud y la belleza, advirtiéndole que la muerte llegará pronto y reducirá todo aquello que ahora es frescura y belleza al olvido y a la nada.
Estructura
- Elementos: Cuartetos (belleza) y tercetos (exhortación al disfrute).
- Estructura externa: Soneto clásico y perfecto. ABBA ABBA en los cuartetos. Rima consonante y versos endecasílabos. Tercetos encadenados CDCDCD, lo que le otorga una musicalidad más marcada.
(Todo este poema es una sola oración que gravita en torno a la palabra “goza”)
Partes del Soneto
- 1ª Parte: Aparición de las partes destacadas de la dama.
- 2ª Parte: Falta de correspondencia, falta de armonía y equilibrio (entre la belleza y su fugacidad).
Figuras Retóricas y Elementos Destacados
- Goza: Imperativo (palabra clave, posiblemente la “última” en importancia o posición en la idea central).
- Mientras: Anáfora (aplicada a “cabello, frente, labios, cuello”).
- Mira: Personificación (“triunfa”).
- Hipérbaton: Ejemplo: “tu cabello oro, frente el lilio, cristal tu gentil cuello” (reordenación sintáctica).
- Adjetivación: Uso de epítetos.
- Enumeraciones: Términos reales e imaginarios (posiblemente en los tercetos).
Soneto Barroco: El Amor Constante en Quevedo
Este soneto (probablemente “Cerrar podrá mis ojos la postrera sombra”) aborda el tema del amor que perdura más allá de la muerte, asociado al conceptismo.
Tópicos
- Amor post mortem: el alma se niega a perder el amor.
- Memento mori: recuerda que tienes que morir.
Tema
El amor después de la muerte y la presencia inalterable de ese amor a pesar de la muerte. Ese “nada” o polvo seguirá profundamente enamorado después de la muerte de la dama.
La voz lírica expresa su decisión de que su amor permanezca de forma inalterable aun después de su muerte. Incumple la ley severa (la de la muerte) cruzando de vuelta las aguas de la laguna (Estigia o Aqueronte) para conservar su amor.
Estructura
- Estructura interna: Soneto clásico, 2 cuartetos y 2 tercetos encadenados, rima consonante, endecasílabo.
(Poema basado en metáforas; ninguna palabra es literal, son figuradas)
Partes del Soneto
- 1ª Parte: Uso de eufemismos (palabras que sustituyen a otras menos ofensivas o malsonantes).
- 2ª Parte: Aunque todo se convierta en cenizas, tendrá un sentido: ese amor permanecerá.
Figuras Retóricas y Elementos Destacados
- Simbología, juego de palabras, metáforas, eufemismos y antítesis.
- Cerrar: Morirse (“esotra” vida, quizás).
- Sombra: Muerte (“llama” del amor).
- Hora: Ahora (“ley severa”).
- 2 primeras líneas: Metáfora eufemística.
- 1ª frase, 3º verso: Introducción del tema del amor.
- Frío: Muerte.
Conceptismo y Culteranismo
En el estilo barroco se han distinguido dos tendencias principales:
- Conceptismo: Basado en el ingenio, se centra en juegos de ideas o conceptos a través de paradojas, antítesis, polisemia, etc. Tiende a la concisión expresiva y suele emplear metáforas, a menudo despectivas. Francisco de Quevedo y Baltasar Gracián son sus principales representantes.
- Culteranismo: Preocupado por la belleza formal, sigue la tendencia estética iniciada por Fernando de Herrera. Aspira a crear un lenguaje poético diferente de la lengua común mediante la intensificación y acumulación de recursos (hipérbaton, cultismos, metáforas complejas). Luis de Góngora es su máximo exponente.
Aunque tradicionalmente se han diferenciado, en realidad no hay una oposición tajante entre ellas, ya que ambas buscan una expresión complicada mediante asociaciones ingeniosas y tienen una voluntad minoritaria, obligando al lector a un esfuerzo interpretativo. Ambos movimientos forman parte de una sensibilidad estética general del Barroco; de hecho, el culteranismo puede considerarse un aspecto del conceptismo.
El Teatro de los Corrales
El teatro popular alcanzó un gran éxito de público en el siglo XVII, tanto en España (con Lope de Vega, Calderón de la Barca y otros) como en Inglaterra (con Shakespeare). Las representaciones teatrales constituían verdaderos acontecimientos sociales, siendo el espectáculo más popular de la época.
El teatro cobró gran importancia no solo como fenómeno literario, sino también como espectáculo relevante para la sociedad. Mientras en Portugal el teatro popular se prohibió y desapareció, y en Francia solo pervivió el teatro cortesano, solo España e Inglaterra desarrollaron un teatro popular concebido como espectáculo para divertir a gentes variadas que pagaban por asistir.
Temas del Teatro de Lope de Vega
Lope de Vega defendía la libertad en la elección de temas, presentando una temática muy variada (religiosa, histórico-legendaria, de enredo…), aunque opinaba que los temas que más conmovían al público eran los conflictos de honra y honor.
- Tema religioso: Aparece en autos sacramentales y comedias que dramatizan vidas de santos, recogen leyendas medievales o tienen inspiración bíblica.
- Comedias de historia y leyendas españolas: Muchas se ambientan en la Edad Media, como El caballero de Olmedo. Incluyen los dramas del poder injusto, que plantean conflictos entre el pueblo y la nobleza. En Fuente Ovejuna, la figura del rey queda fortalecida y es aclamado por el pueblo por representar la justicia frente al abuso feudal.
- Comedias contemporáneas de amor y enredo: Obras llenas de equívocos e intrigas que giran en torno al tema amoroso. Suelen tener un tono desenfadado y un final feliz. Destacan El perro del hortelano y La dama boba.