Revoluciones en Rusia y conflictos internacionales: Resumen histórico

La Revolución de 1905: Un levantamiento popular en el Imperio Ruso

La Revolución de 1905 fue un levantamiento popular en el Imperio Ruso en respuesta a la represión política y económica del régimen zarista. Comenzó con una manifestación pacífica en San Petersburgo liderada por el sacerdote ortodoxo Georgy Gapon, pero la represión violenta del gobierno zarista provocó un aumento de la agitación en todo el país. Los trabajadores y campesinos se organizaron en sindicatos y consejos obreros (soviets) y participaron en huelgas y manifestaciones. El zar Nicolás II emitió el Manifiesto de Octubre en 1905, prometiendo reformas políticas y sociales, lo que sentó las bases para futuros levantamientos y revoluciones en Rusia.



La Revolución de Febrero de 1917: El fin del régimen zarista

La Revolución de Febrero de 1917 fue un levantamiento popular en el Imperio Ruso, liderado por los trabajadores y campesinos contra el régimen zarista. La revolución fue provocada por la agitación política, social y económica en el país, así como por la desastrosa participación de Rusia en la Primera Guerra Mundial. La revolución comenzó el 23 de febrero de 1917 con una huelga de mujeres trabajadoras en Petrogrado, que se extendió rápidamente por toda la ciudad. Los líderes socialistas moderados se unieron a la lucha y formaron el Soviet de Petrogrado, que se convirtió en el principal centro de poder durante la revolución. El zar Nicolás II abdicó el 2 de marzo de 1917, y se estableció un Gobierno Provisional liderado por Aleksandr Kérenski. La Revolución de Febrero de 1917 puso fin al régimen zarista y estableció un nuevo gobierno provisional, sentando las bases para la Revolución de Octubre liderada por los bolcheviques que establecería el primer estado socialista del mundo.



Conflictos internacionales en el siglo XX

  • Primera crisis marroquí (1905)

    El káiser Guillermo II desembarcó en Tánger pronunciando un discurso favorable al mantenimiento de la independencia marroquí en contra de los intereses de Francia. En la Conferencia de Algeciras (1906) convocada para resolver el conflicto se acordó que Francia y España establecieran un protectorado conjunto en Marruecos. Alemania no pudo evitar la expansión del imperio francés ni obtener permiso para colonizar Libia.

  • Primera crisis balcánica (1908)

    El triunfo de la revuelta de los Jóvenes Turcos facilitó la declaración de independencia de Bulgaria y la anexión de Bosnia por Austria-Hungría, que administraba el territorio desde 1878. Esta incorporación disgustó a Rusia y Serbia, que alentó movimientos nacionalistas antiaustríacos en Bosnia.

  • Segunda crisis marroquí (1911)

    Bajo la excusa de proteger a los ciudadanos alemanes de los disturbios locales contra el dominio francés, Guillermo II envió un cañonero al puerto de Agadir. Ante la amenaza que suponía su presencia para el dominio francés del territorio, París aceptó revisar el reparto colonial de África: Francia cedió Camerún a los alemanes a cambio del reconocimiento de éstos a su protectorado de Marruecos.

  • Segunda crisis balcánica (1912-1913)

    En 1912 estalló la primera guerra balcánica, que enfrentó a Bulgaria, Grecia y Serbia (Liga Balcánica) con Estambul por el control de los territorios turcos en Europa. Pese a su éxito, los miembros de la Liga no se pusieron de acuerdo en un reparto que benefició a Sofía (creación de la Gran Bulgaria). Bulgaria fue derrotada en la segunda guerra balcánica (1913) por serbios (apoyados por Rusia), griegos y turcos, lo que finalizó con el Tratado de Bucarest.



La Segunda Guerra Mundial: Un conflicto global

La Segunda Guerra Mundial se inició el 1 de septiembre de 1939 cuando Alemania invadió Polonia. Como este país tenía una alianza defensiva con Francia y Gran Bretaña, estos dos estados se declararon la guerra a Alemania. Durante 1940, Alemania ocupó Dinamarca, Noruega, Bélgica, los Países Bajos y Francia. Paralelamente, Italia invadió Albania y Grecia, pero sufrió varias derrotas. Por esta razón, Hitler decidió invadir la península de los Balcanes y ocupar Yugoslavia, Alemania y Grecia. En 1941, la guerra adquirió un giro dramático, ya que Alemania invadió la Unión Soviética. Poco después, se produjo el ataque a Pearl Harbor: Japón lanzó un ataque aéreo sorpresivo contra una base militar estadounidense en Hawái. A partir de entonces, Estados Unidos y la Unión Soviética se aliaron a Gran Bretaña, que resistía en soledad los ataques de la aviación alemana.



Durante 1942, las fuerzas del Eje siguieron conquistando territorios, pero a partir de 1943 empezaron a retroceder. Este año, Mussolini fue sustituido por un nuevo gobierno que rompió la alianza con Hitler. Mientras tanto, la Unión Soviética, luego de frenar el avance alemán en la batalla de Stalingrado, comenzó a recuperar territorios que había perdido. Japón, por su parte, sufrió varias derrotas a manos de los Estados Unidos. Durante 1944, los aliados llevaron a cabo el desembarco de Normandía en Francia. En poco tiempo, París fue liberada y los aliados atacaron las fronteras alemanas. La guerra en Europa llegó a su fin en mayo de 1945, cuando las fuerzas aliadas ocuparon Berlín y consiguieron la rendición de Alemania, luego del suicidio de Hitler. En Oriente, el conflicto bélico finalizó en septiembre, luego de que los Estados Unidos arrojaran bombas atómicas sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki.