La Guerra de Sucesión y el Sistema de Utrecht: Los Pactos de Familia
El conflictivo testamento de Carlos II, en el que legó España a Felipe de Anjou, provocó un conflicto europeo, la Guerra de Sucesión (1701-1715), entre el candidato borbón y Carlos de Habsburgo. A Felipe de Borbón lo apoyaron la Francia de Luis XIV y Castilla, mientras que a Carlos lo ayudó la Gran Alianza Antiborbónica y la Corona de Aragón. En un principio, la contienda favoreció al aspirante austriaco, pero al heredar el Imperio en 1711, se precipitó el final de la guerra, tras el abandono de las tropas de la Alianza, que deseaban un acuerdo que fomentara un equilibrio de fuerzas en Europa.
Las victorias de Felipe en Almansa, Brihuega y Villaviciosa favorecieron la firma de las paces de Utrecht (1713) y Rastatt (1714). Como resultado, Inglaterra obtuvo Gibraltar y Menorca, junto a privilegios económicos como el navío de permiso, el fin del monopolio americano y el asiento de negros. Austria recibió Flandes, Milán, Nápoles y Cerdeña en Italia, mientras que Sicilia pasó a Saboya. Felipe V, tras comprometerse a no unir nunca las coronas francesa y española, obtuvo el trono español y las posesiones de América.
Los Pactos de Familia
Felipe V firmó el primer Pacto de Familia en la Guerra de Sucesión Polaca (1733), recuperando Nápoles y Sicilia, y el segundo Pacto de Familia en la Guerra de Sucesión Austriaca (1743), obteniendo Parma. Carlos III firmó el tercer Pacto de Familia en 1761, participando en la Guerra de los Siete Años y la Guerra de Independencia de Estados Unidos, obteniendo Florida y Menorca.
La Nueva Monarquía Borbónica: Decretos de Nueva Planta y Modelo de Estado
Con la llegada de los primeros Borbones (Felipe V, Fernando VI y Carlos III) se implementaron en España los modelos centralistas y absolutistas de Francia. Fruto de esta uniformidad, se promulgaron los Decretos de Nueva Planta (Aragón y Valencia, 1707; Mallorca, 1715; Cataluña, 1716), mediante los cuales se eliminaron los fueros, instituciones y privilegios de los reinos de la Corona de Aragón, como castigo al apoyo dado al archiduque Carlos durante la Guerra de Sucesión.
Reformas Administrativas y Territoriales
- Se sustituyeron los virreyes por capitanes generales.
- Desaparecieron las fronteras y aduanas interiores.
- Se creó la figura del intendente.
- Se castellanizó el reino, absorbiendo las Cortes castellanas a las aragonesas en las Cortes Generales de todo el Estado, siendo las únicas existentes (junto con las de Navarra, que, debido a su ayuda durante el conflicto sucesorio, mantuvieron sus fueros e instituciones).
- El ejército se profesionalizó, sustituyendo los tercios por regimientos, y se creó la Guardia Real.
Reformas en América y la Iglesia
En América se crearon dos nuevos Virreinatos (Río de la Plata y Nueva Granada) y cuatro Capitanías Generales (Cuba, Guatemala, Venezuela y Chile).
Se ejerció un mayor control sobre la Iglesia, intentando disolver a los jesuitas, controlar la Inquisición y aplicando el Regalismo y el Patronato Universal, refrendados por la firma de un Concordato con la Santa Sede.
La España del Siglo XVIII: Expansión y Transformaciones Económicas
Agricultura, Industria y Comercio con América
En el ámbito agrícola, se intentó cambiar el sistema de propiedad de la tierra (mayorazgos o amortizaciones) mediante arrendamientos o la colonización de Sierra Morena. Debido al crecimiento demográfico y de la demanda, se incrementaron las rentas de nobles y clero, que no las reinvirtieron en la industria. A pesar de ello, y del sistema gremial, la industria creció con las manufacturas reales, la industria naval y el proteccionismo.
El comercio mejoró gracias a las ideas introducidas por las Sociedades Económicas de Amigos del País y la emisión de deuda pública por medio del recién creado Banco de San Carlos. Las Leyes de Nueva Planta y el Catastro de Ensenada fomentaron las contribuciones únicas en los diferentes reinos.
En América, los cambios introducidos fomentaron el crecimiento económico peninsular, con la creación de compañías comerciales al estilo de las holandesas o inglesas (como la Real Compañía Guipuzcoana de Caracas), el Reglamento de Libre Comercio que permitió a otros puertos nacionales comerciar con América, o la llegada del navío de registro. A pesar de estas medidas, la demanda americana desde la península seguía sin satisfacerse plenamente.
El Despegue Económico de Cataluña
Cataluña creció con la consolidación de una burguesía agraria que obtuvo excedentes comerciales, especialmente gracias al comercio de vino, que invirtió en la futura industrialización textil.
Ideas Fundamentales de la Ilustración y el Despotismo Ilustrado: Carlos III
La Ilustración en España
La Ilustración fue un movimiento cultural que nació en Francia y trajo importantes reformas a la corte española. Buscaba, mediante la educación y el avance científico, la felicidad, la actitud crítica y el uso de la razón. Propuso un proteccionismo económico y fue difundida por Academias, Consulados, Sociedades Económicas de Amigos del País, la prensa y por la creación de la Biblioteca Nacional y las Reales Academias de la Lengua y de la Historia.
Carlos III y el Reformismo Ilustrado
Carlos III (1759-1788) llegó a España tras gobernar Nápoles, y fue el ejemplo del Reformismo Ilustrado típico del final del Antiguo Régimen, donde se buscaron políticas benefactoras, pero sin contar con el pueblo, bajo el lema: «Todo para el pueblo, pero sin el pueblo».
Llegó con secretarios italianos que impulsaron reformas, pero tras el Motín de Esquilache, provocado por el cambio en la indumentaria madrileña y la liberalización del precio del trigo, expulsó a este último junto con los jesuitas. Acabó rodeándose de secretarios españoles como el Conde de Aranda, Floridablanca, Campomanes, entre otros. Tomaron medidas como la urbanización de Madrid, la colonización de Sierra Morena, el inicio de la Reforma Agraria, y la entrada en el tercer Pacto de Familia en el contexto de la Guerra de los Siete Años y la Guerra de Independencia de Estados Unidos.