De la Dictadura a la Democracia: La Historia Política y Social de España (1939-Actualidad)

El Franquismo: Ideología, Apoyos y Estructuras

Grupos Ideológicos y Apoyos Sociales del Régimen Franquista

En la instauración y consolidación del régimen, colaboraron los grupos ideológicos que apoyaban la sublevación militar, siguiendo una serie de ideas:

  • La confesionalidad católica del Estado: Esto quería decir que la Iglesia católica legitimó al Estado franquista, mostrando su apoyo mediante propaganda. Los católicos eran seguidores de dos organizaciones: la Asociación Católica Nacional de Propagandistas y el Opus Dei, cuya primera intervención era su defensa de la enseñanza católica. El Opus Dei proporcionó tecnócratas.
  • La implantación de un poder nacionalista (nacionalcatolicismo): Sustentado por el apoyo del ejército.
  • La imposición de un orden social rígido: Apoyado por la FET y de las JONS. También se crearon cuatro organizaciones de masas:
    • El Frente de Juventudes para la formación de la juventud.
    • La Sección Femenina, encargada de formar a las mujeres en valores cristianos, liderada por Pilar Primo de Rivera.
    • El SEU (Sindicato Español Universitario), que controlaba prácticamente a los estudiantes.
    • La CNS (Central Nacional Sindicalista), que integraba a empresarios y obreros en el sindicato vertical.

En cuanto a los apoyos sociales, teníamos:

  • Los sectores populares: Los cuales hicieron la primera oposición al franquismo, pero la represión hizo que adoptaran la aceptación del régimen, incluso cuando no era respaldado por la dictadura.
  • Las élites económicas: Con la oligarquía terrateniente.
  • Los propietarios agrícolas del Norte de España y las clases medias: Que eran beneficiadas por las depuraciones masivas (ej. profesores, militares).

La ideología del régimen se apoyaba en la demostración de aceptación al Caudillo y la integración en el Movimiento Nacional.

El Declive del Franquismo y la Transición Democrática

Causas de la Crisis Final del Franquismo (1973)

Franco, entonces líder de España, separó por primera vez la jefatura del Gobierno y del Estado, nombrando a Luis Carrero Blanco, quien era una persona clave para mantener la unión del franquismo y la continuidad del régimen. Sin embargo, fue asesinado por ETA en un atentado en 1973, lo que desató una crisis política interna: se formó un nuevo gobierno presidido por Arias Navarro en 1974, el cual habló de una apertura del régimen. Al enfermar Franco gravemente y fracasar los intentos aperturistas, el “búnker” (un grupo de altos rangos militares) frenó cualquier apertura y ejerció violencia.

Por otro lado, se creó la Junta Democrática (1974), la cual apoyaba un régimen democrático. En cuanto al PSOE, impulsó la Plataforma de Convergencia Democrática (1975), integrada por UGT y PNV. La represión fue muy dura: se ejecutó a Salvador Puig Antich (anarquista) y se promulgó la Ley Antiterrorista, en virtud de la cual fueron ejecutados dos miembros de ETA y tres del FRAP (lo que provocó protestas internacionales y el asesinato de cuatro policías).

En cuanto a la crisis exterior, destacó el conflicto del Sáhara, donde España aceptó su descolonización, y la caída de las dictaduras de Portugal y Grecia. En cuanto a la crisis económica, fue la subida del petróleo en 1973 y la economía española sufrió un gran auge debido al retorno de inmigrantes y el notable aumento de la inflación. Así fue como en 1975 murió Franco, abriendo la Transición Democrática.

Evolución Política del Régimen Franquista: Relaciones Internacionales

El régimen franquista experimentó varios cambios en su política exterior:

  • Alianza con los países del Eje: El régimen mostró interés por integrarse de forma activa en el bloque de las potencias fascistas. Hitler y Franco se reunieron en Hendaya, donde firmaron un protocolo secreto, pero fracasó. Más tarde, Franco y Mussolini se reunieron en Bordighera, donde se consiguió que se cambiara la posición de neutral a no beligerancia. También apareció la División Azul, un grupo de voluntarios que combatieron con los alemanes.
  • Gran aislamiento diplomático (1944-1948): El Eje se mantuvo neutral de 1944 a 1945. Se publicó el Manifiesto de Lausana, y México y Polonia denunciaron el carácter fascista del régimen en la Conferencia de San Francisco. En 1946, la ONU excluyó a España de sus organizaciones y organismos, y también fue excluida de las ayudas del Plan Marshall.
  • Guerra Fría y la apertura al Occidente (a partir de 1948): A partir de 1948, la situación comercial cambió a favor del régimen y se abrió la Guerra Fría. Así, en 1950, España fue admitida en la FAO y la UNESCO, y la ONU permitió su regreso en 1955. Ante esta situación, Franco remodeló el gobierno en 1951 con la intención de homologar la democracia española. Finalmente, en 1953, España firmó un Concordato con la Santa Sede y, en ese mismo año, los Pactos de Madrid con Estados Unidos. Sin embargo, no consiguió la admisión de España en la OTAN ni la descolonización del Protectorado de Marruecos. En cuanto a las dificultades exteriores, destacó el conflicto del Sáhara, donde España apoyó un referéndum ante el Frente Polisario, pero el rey de Marruecos organizó la Marcha Verde, ante la cual España entregó el Sáhara a Marruecos. También influyeron las caídas de las dictaduras de Portugal y Grecia.

Política Económica del Franquismo: Etapas Clave

La política económica del franquismo se desarrolló en diferentes etapas:

  1. La España de la autarquía (1939-1951): Tras la Guerra Civil, el franquismo adoptó un modelo de política económica que buscaba la autosuficiencia de España. Este modelo condujo al estancamiento económico: el Servicio Nacional del Trigo fijaba el precio para asegurar el abastecimiento de la población; los agricultores estaban obligados a vender sus productos al Estado a bajo precio; las cosechas disminuían y había mucha hambre. Se impulsó el regadío, la concentración parcelaria y el establecimiento de colonos en tierras ganadas al cultivo.
  2. El agotamiento de la autarquía y el proceso liberalizador (1951-1959): El Plan de Estabilización se inició en 1951, cuando comenzó una liberalización de precios. En 1957, Franco decidió entregar la dirección del gobierno a los tecnócratas del Opus Dei, cuyo objetivo era incorporar la racionalidad y la eficacia a la gestión del Estado. Por otra parte, se puso en práctica el Plan de Estabilización y, por último, el Desarrollismo, que se puso en marcha con ideas de Rodó, donde la actividad económica dejó de ser la agricultura para pasar a ser la industria. El sector primario se modernizó, la concentración industrial aumentó, pero, sin embargo, la crisis mundial del petróleo provocó un freno al crecimiento económico del país.

Transformaciones Sociales en España durante el Franquismo

En los primeros años del franquismo, se impuso un control ideológico donde el catolicismo era el fundamento principal de la ideología y la educación. Se crearon organizaciones como el Frente de Juventudes y la Sección Femenina de la FET y de las JONS, se impuso una fuerte censura y se introdujeron en la enseñanza clases de Formación del Espíritu Nacional.

Los cambios económicos introdujeron transformaciones en la estructura social: esto provocó la aparición de obreros y el aumento de las clases medias y de la burguesía. La población rural acabó descendiendo. En cuanto al comportamiento, hubo cambios como la reducción del analfabetismo y el aumento de universitarios; la familia aumentó su movilidad y los hogares se equiparon con electrodomésticos y coches.

En la segunda mitad de los sesenta, la sociedad española comenzó con el baby boom, el gran aumento de las escuelas y la lenta incorporación de la mujer al mundo laboral. Una nueva sociedad generó una nueva mentalidad, difundiendo el turismo y el consumo, impulsada por los tecnócratas del desarrollismo. Sin embargo, ya en los años 70, la Iglesia se distanció del régimen, haciendo que su renovación con el Vaticano II se viera comprometida en 1970.

Otro frente fue el del ministro de Trabajo, Solís, que permitió la negociación colectiva entre patronos y obreros, lo que fue aprovechado por CCOO para infiltrarse con gran eficacia en las negociaciones. El último frente fue el de las revueltas estudiantiles, donde la universidad se convertía en un foco de oposición al franquismo, destacando la trágica muerte del estudiante Enrique Ruano.

La Transición Española y la Consolidación Democrática

Alternativas Políticas tras la Muerte de Franco

La muerte de Franco en 1975 fue recibida con calma por la población. Juan Carlos I juró ante las Cortes, asumiendo la sucesión de Franco, y juró lealtad a los Principios del Movimiento Nacional y las Leyes Fundamentales. La población española buscó alternativas posibles para el futuro del país, las cuales fueron:

  1. La continuidad del régimen: Con el mantenimiento de sus viejas estructuras. Era defendida por el “búnker”, financiado por las más grandes instituciones políticas y el ejército.
  2. La reforma política: Que, partiendo de las mismas leyes del franquismo, pretendía una liberalización paulatina desde dentro hasta llegar a su equiparación con una democracia. Era una vía propuesta por los aperturistas del régimen. Lo más importante era sustituir el gobierno de Franco por uno nuevo. El hombre elegido para este puesto fue Torcuato Fernández-Miranda. El cargo de Jefe de Gobierno recayó en Arias Navarro y algunos ministros como Osorio o Fraga. Estos emprendieron la tarea de una democratización parcial que, sin molestar a los ultras, contentase a los ultras y al pueblo. La elección de Arias no gustó y el inmovilismo del gobierno favoreció la conflictividad laboral y la confrontación política. Se aprobó el indulto y Fraga promulgó la Ley Reguladora del Derecho de Reunión.
  3. La ruptura democrática: Que quería acabar con el viejo régimen dictatorial y restaurar la democracia. Era una estrategia defendida por los antifranquistas, quienes formaron la Coordinación Democrática, conocida como Platajunta, cuyos integrantes defendían la ruptura democrática, la amnistía a los condenados por delitos y la convocatoria de elecciones democráticas. Se hicieron multitud de huelgas que acabaron con la muerte de cinco trabajadores por disparos de la policía en Vitoria. Así fue como en 1976 Arias Navarro dejó su puesto.

Actuaciones Impulsadas por el Presidente Adolfo Suárez

La Transición Española fue un proceso de desmantelamiento de la dictadura que culminó en un régimen democrático tras la muerte de Franco el 20 de noviembre de 1975. Una parte del país quería de nuevo la democracia; por otra, estaba el “búnker”; y, por otra, el Rey. El primer acto del Rey fue el nombramiento de Arias Navarro, quien quiso una democratización parcial, lo cual llevó a la oposición a endurecer su postura. En 1976, Arias dimitió y fue sustituido por Adolfo Suárez, cuya elección fue importante para Torcuato Fernández-Miranda.

Como primera intervención, Suárez anunció que quería una relación franca con la oposición, la instauración de un régimen democrático y la posibilidad de votar antes de un año. El obstáculo era el lado franquista, pero aun así presentó un proyecto de reforma política, el cual fue aceptado con la condición de que no se legalizara el Partido Comunista. El siguiente paso era que las Cortes aceptasen su reforma voluntariamente. La Ley para la Reforma Política fue aprobada en 1976 por las Cortes, la cual desmanteló el régimen. Se trató de una ley con rango fundamental que permitía la ruptura pactada del sistema, intentando ir “de la ley a la ley a través de la ley”, lo cual evitaba problemas. También recuperaba la soberanía, establecía unas Cortes elegidas por sufragio universal, defendía los derechos y reconocía el pluripartidismo.

La oposición democrática renunció a la ruptura total, lo que provocó bastantes problemas, pero para tranquilizarlos, el PCE aceptó la bandera y la Monarquía. Ya en 1977, Suárez anunció elecciones, cuyos partidos que se presentaban eran: UCD (Unión de Centro Democrático), liderada por él mismo, que pretendía aglutinar al sector moderado; PSOE y PCE, partidos de la izquierda; y partidos nacionalistas. La convocatoria de elecciones fue el paso para restablecer el sistema parlamentario de España. Se aplicó la Ley D’Hondt y, al final, se formó un gobierno de UCD, presidido por Suárez.

Preautonomías de Cataluña y País Vasco

Había dos partidos nacionalistas, el catalán y el vasco. El nacionalismo catalán defendía dos corrientes de pensamiento: una radical y de izquierdas, que era Esquerra Republicana de Catalunya; y otra de derechas, Pacte Democràtic per Catalunya (PDC), que seguía la línea de la Lliga Regionalista. En cambio, el nacionalismo vasco seguía al PNV (conservador) y a Euskadiko Ezkerra.

La Generalitat de Cataluña se mantuvo en el exilio y en 1977 fue presidida por Josep Tarradellas, decretándose su restablecimiento ese mismo año. Para el texto preautonómico vasco, se constituyó el Consejo General Vasco, presidido por Carlos Garaikoetxea del PNV. Además, miembros de la asamblea parlamentaria veían necesario pactar con ETA para el territorio: retirada de la Policía Nacional y sustitución por policía autóctona, y el derecho de autodeterminación. Así fue como la preautonomía no consiguió acabar con ETA.

La Constitución Española de 1978

Se decidió elaborar una nueva Constitución en vez de reformar las leyes franquistas. Por ello, las Cortes se convirtieron en constituyentes. La Comisión de Asuntos Constitucionales del Congreso fue la encargada de elaborar una Constitución consensuada por siete de sus miembros (UCD, PSOE, PCE, AP y los catalanes), conocida como la Ponencia, que consistía en redactar un anteproyecto de Constitución. En ese mismo año, 1978, la Constitución se sometió a referéndum, y los votos fueron claramente favorables a la Constitución. La Constitución se firmó tras los Pactos de la Moncloa.

En cuanto a la Constitución, es un texto extenso y define a España como un Estado Social y Democrático de Derecho que propugna valores como la libertad, la justicia, etc. La libertad se convertía en el “valor de valores”. También proclamaba la soberanía nacional, que residía en el pueblo español, cuya forma política era la monarquía parlamentaria, defendida como la indisoluble unidad de la Nación Española, al mismo tiempo que protegía el derecho a la autonomía. También garantizaba los derechos humanos y las libertades, y establecía un Estado aconfesional.

En cuanto a los poderes, los dividía en cuatro:

  • El Jefe de Estado (el Rey), que tenía un poder muy limitado.
  • El poder ejecutivo, que recaía en el Gobierno, cuyo presidente era nombrado por el monarca. Las cámaras controlaban el ejecutivo a través de la investidura y las mociones de censura.
  • El poder legislativo, que recaía en las Cortes, formadas por Congreso y Senado, elegidos por sufragio universal.
  • El poder judicial, en manos de jueces y magistrados que administran la justicia a través de leyes.

Mientras se elaboraba la Constitución, gobierno y oposición iniciaron el proceso preautonómico y la descentralización del Estado para aquellas regiones que lo solicitasen.

España Democrática: Etapas Políticas desde 1979 hasta la Actualidad

Cuando se aprobó la Constitución, se optó por disolver las Cortes y convocar elecciones. Así, en 1979, ganó UCD con Adolfo Suárez al mando. Este gobierno se caracterizó por una profunda inestabilidad y varios problemas, entre los que destacan: las divergencias en el seno de UCD, las autonomías, la crisis económica, el paro, la inflación y ETA. Por estos problemas y algunos más, Suárez decidió dimitir en 1981. Como sucesor se propuso a Leopoldo Calvo-Sotelo, pero el día que iba a ser votado por el Congreso fue el momento elegido por un grupo del ejército para proclamar un golpe de Estado. Sin embargo, el Rey desautorizó a los sublevados y el golpe fracasó.

Calvo-Sotelo disolvió las Cortes y convocó nuevas elecciones. Así fue como en 1982 el PSOE ganó las elecciones por mayoría absoluta con su líder Felipe González. En su programa de reformas, tenía como prioridad la lucha contra la crisis, la reconversión industrial, la mejora de la sanidad, asentar las bases del Estado de Bienestar y la reforma de los cuerpos del ejército. Se pretendió la integración en la Comunidad Económica Europea y la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte). España ingresó en la OTAN en 1982 bajo el mandato de Calvo-Sotelo. La entrada de España en la Comunidad Económica Europea se produjo en 1986. Desde entonces, se implicó en el Tratado de la Unión Europea.

En 1989, se volvió a votar, pero se empezó a iniciar el declive del PSOE. Fue entonces cuando Alianza Popular se transformó en Partido Popular y eligieron como líder a José María Aznar. Pero ya en 1993, el PSOE perdió la mayoría absoluta y pactó con CiU y el PNV. Fue entonces cuando se descubrieron el caso Guerra, el caso Filesa y los escándalos de corrupción de Mariano Rubio.

Pero ya en 1996, ganó el PP con Aznar como líder, aunque sin mucha diferencia, por lo que se alió con CiU (Convergència i Unió) para gobernar. Dicho gobierno consiguió cumplir con los criterios económicos pactados en Maastricht y firmó el acuerdo sobre la consolidación y la racionalización de la Seguridad Social para garantizar las pensiones. En 1997, pactó la reforma laboral; en 2001, aprobó la abolición del servicio militar obligatorio; y en 2000, se aprobó la Ley de Extranjería, la cual regulaba la inmigración.

Pero ya en 2004, volvió a gobernar el PSOE con el líder José Luis Rodríguez Zapatero. Dicho gobierno desarrolló una intensa política social y mantuvo el gobierno paritario. Entre las cosas más destacadas que hizo Zapatero, fue la promulgación de las leyes de matrimonios homosexuales y la revisión de algunos estatutos de autonomía. Pero lo más importante es la grave crisis financiera que ocurrió en 2008, destacando el boom inmobiliario. Por eso, en 2011, debido a la ineficacia del gobierno para hacer frente a la crisis, ganó el PP con Mariano Rajoy al cargo, quien tuvo que hacer frente a la gran crisis. El gobierno acabó aprobando una ley de medidas urgentes para la reforma del mercado laboral y se empezó a conocer una gran serie de escándalos de corrupción que afectaron al PP.