La Geografía Económica de España: Transporte, Turismo y Estructuras Agrarias

El Transporte y las Comunicaciones en España

El sistema de transporte es el conjunto de medios que permite el desplazamiento de personas y mercancías entre lugares geográficos. Desempeña un importante papel económico. Por un lado, el transporte refleja los desequilibrios espaciales en la distribución de la población y en el desarrollo económico. Por otro lado, puede introducir cambios en el territorio, pues es un factor clave para el desarrollo de las regiones. A pesar de esto, las técnicas modernas han superado ciertas dificultades, permitiendo hablar de un sistema caracterizado por:

  • Las redes terrestres y aéreas son radiales, con centro en Madrid y radios hacia las fronteras y puertos principales.
  • Este modelo se inició en el siglo XVIII con la red de carreteras de los Borbones, y se consolidó en el XIX, ya que la red ferroviaria coincidió básicamente con la de carreteras.
  • En el tráfico de pasajeros y mercancías predomina la carretera.

La política de transportes de la Unión Europea (UE) pretende potenciar la integración de los países que la forman impulsando las redes transeuropeas a través de autovías y trenes de alta velocidad, mejorando las infraestructuras de las regiones periféricas.

Redes de Transporte Terrestre

Red de Carreteras

La red de carreteras conecta los distintos núcleos de población, por lo que es una infraestructura clave para la accesibilidad y la articulación del territorio. Sus características principales son:

  • Las competencias sobre la red se reparten entre el Estado y las comunidades autónomas.
  • La red de interés general del Estado enlaza los principales núcleos de población del país y comunica con la red internacional. Soporta el 60% del tráfico total.
  • Presenta un modelo radial, con centro en Madrid.
  • La carretera recibe la mayor parte del tráfico de viajeros y mercancías.
  • Existen claros desequilibrios territoriales en la densidad de la red y en la accesibilidad.
  • La red de carreteras españolas se integra en la de la Unión Europea. Se contemplan dos nuevos ejes transpirenaicos (Burdeos-Valencia y Barcelona-Toulouse), la financiación de nuevos tramos de gran capacidad y la mejora de la conexión con Portugal.

Red de Ferrocarril

Entre la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX, el ferrocarril fue el modo de transporte principal. Desde entonces, la competencia de otros medios lo ha colocado en una posición secundaria. Se compone de tres redes:

  1. Red Nacional de Ferrocarriles Españoles (RENFE): con estructura radial y arboriforme.
  2. Ferrocarriles de vía estrecha (FEVE): que se encuentran principalmente en la cornisa cantábrica.
  3. Red de alta velocidad (AVE): que se inició con la apertura de la línea Madrid-Sevilla.

Las características técnicas muestran vías que se han renovado y modernizado, y otras mediocres que incrementan el tiempo y el coste. La distribución de los ferrocarriles es muy desigual, siendo las redes más densas las de Madrid y las del cuadrante noreste, zonas más industrializadas y pobladas. La red transeuropea conectará directamente con Europa.

Transporte Marítimo

El transporte marítimo depende de las condiciones de los puertos. Esas condiciones son:

  • Técnicas: profundidad de las aguas.
  • Político-administrativas: facilidades de explotación, zonas francas, etc.
  • Geográficas: fácil accesibilidad del entorno terrestre y buenas condiciones de abrigo.
  • Económicas: que el entorno esté poblado e industrializado.

El transporte marítimo se caracteriza por:

  1. La red portuaria está distribuida entre el Estado y las comunidades autónomas.
  2. Los puertos que reúnen mejores condiciones son los del Cantábrico y los del Atlántico.
  3. Se requieren mejores técnicas.
  4. El tráfico de viajeros y mercancías presenta grandes contrastes.

Transporte Aéreo

El transporte aéreo ha experimentado un rápido desarrollo y presenta las siguientes características:

  • La red de aeropuertos se organiza jerárquicamente. Madrid-Barajas tiene conexiones directas con casi todos los aeropuertos españoles y con los principales del extranjero.
  • Los aeropuertos periféricos tienen que realizar en muchos casos sus enlaces a través de Barajas. De este modo, afirmamos que Barajas y El Prat son dos grandes hubs internacionales.
  • El tráfico de pasajeros y mercancías presenta notables diferencias a favor de los pasajeros, sobre todo en medias y largas distancias.
  • La entrada en la Unión Europea ha supuesto la liberalización de las tarifas y servicios y el tener que afrontar el saneamiento financiero de algunas compañías como Iberia.

El Sector Turístico Español

Importancia y Factores del Turismo en España

El turismo es la actividad que lleva implícito un desplazamiento temporal de residencia por razón de ocio, salud, negocios, etc. Será después de la II Guerra Mundial, y sobre todo en los años 60, cuando se produzca el actual fenómeno de masas. España, desde ese momento, se convierte en una gran potencia turística, siendo el tercer país receptor mundial. Hoy en día, la economía española no puede entenderse sin el turismo.

Los factores que hacen de España una gran potencia turística son:

  • La proximidad de España al mercado europeo.
  • Las excelentes condiciones climáticas.
  • La existencia de un rico patrimonio histórico, artístico y cultural.
  • Hasta hace pocos años, los bajos precios con respecto a los países emisores.

Actualmente, España ofrece productos turísticos de calidad, diversificados (ya no se explota solamente el turismo de sol y playa) y unos recursos materiales y humanos cualificados. Las diferentes administraciones (estatal, autonómica y local) invierten en campañas de promoción para atraer a los turistas de alto nivel adquisitivo, en un sector cada vez más competitivo.

Características de la Oferta y Tipos de Turismo

La Oferta Turística

La oferta turística es el conjunto de servicios puestos a disposición del turista. Entre los más destacados están:

  • Los vendedores del producto (agencias de viaje, mayoristas, turoperadores, etc.).
  • Las instalaciones turísticas (alojamiento, manutención, recreo, etc.).

Tipos de Turismo

Los tipos de turismo siguen encabezados por el de sol y playa, aunque desde la década de los 90 cobran importancia creciente otras modalidades. Las causas de este hecho son la exigencia de diversidad de la clientela y la demanda de espacios menos saturados.

  • Turismo de Sol y Playa: Es el que sustentaba el modelo turístico tradicional. Hoy en día se han diversificado las actividades marítimas, como es el caso de la vela, el surf, la pesca, etc. Incluimos también el turismo fluvial.
  • Turismo de Montaña: Es fundamentalmente un turismo de esquí, senderismo, alpinismo, etc.
  • Turismo de Salud: Cobra un auge reciente, sobre todo el termalismo.
  • Turismo Urbano: Es principalmente un turismo cultural, aunque está creciendo el turismo de negocios, basado en ferias y congresos.

Distribución Espacial y Demanda Turística

Las áreas turísticas son espacios amplios que cuentan con una elevada densidad de turistas. Diferenciamos entre:

  • Áreas turísticas de alta densidad: Son la costa mediterránea y los archipiélagos, favorecidas por las condiciones climáticas y la accesibilidad viaria.
  • Áreas turísticas de media y baja densidad: Se relacionan con la difusión del modelo de sol y playa hacia espacios litorales y prelitorales.

La demanda turística es, fundamentalmente, extranjera, aunque la demanda interna es cada vez más importante.

Problemas y Desafíos del Turismo

El sector turístico se enfrenta a ciertos problemas:

  • Impacto demográfico: Las grandes áreas turísticas del litoral aumentan su densidad, sobre todo en los meses de verano, a costa de un centro peninsular que se vacía. No obstante, las campañas de promoción del turismo cultural de interior han revitalizado demográficamente alguna de estas áreas.
  • Impacto medioambiental: Las actividades turísticas consumen grandes volúmenes de agua (campos de golf, parques, etc.) y son precisamente las principales áreas turísticas las que presentan déficit hídrico. Por otra parte, la masiva construcción de bloques de edificios durante los años 60 y 70 en el litoral español ha contribuido a estropear la belleza natural de algunos de esos parajes. La actual Ley de Costas intenta evitar esos desmanes e, incluso, y no sin polémica, ordena el derribo de estructuras arquitectónicas que estén en primera línea de playa.
  • El problema de la estacionalización: El turismo español se concentra en los meses de verano, por lo que la industria hotelera solo aprovecha al máximo rendimiento esos pocos meses. Para solucionarlo se plantean alternativas turísticas el resto del año: Baleares y Canarias pueden ofrecer turismo de sol y playa casi todo el año; Turismo de congresos y negocios, que se concentra en las principales ciudades de nuestro país, que cuentan con equipamientos comerciales y culturales de gran calidad; Turismo cultural (Granada, Toledo); Turismo de invierno y nieve (Sierra Nevada).
  • La competencia de países extranjeros: Países como los Balcanes, Marruecos, Túnez, etc., también ofertan turismo de sol y playa. Ante esta situación, el entramado turístico español solo tiene dos alternativas: o baja los precios o aumenta la calidad de los servicios turísticos ofertados, vía adoptada por todas las administraciones.

La Actividad Agraria y el Espacio Rural Español

Condicionantes de la Actividad Agraria

Condicionantes Naturales

Entre los condicionantes naturales destacan:

  1. El relieve: La topografía facilita o dificulta la práctica agrícola, por ello se aprecia una relación entre el mapa de aprovechamientos agrarios y el mapa de relieve. La altitud modifica las condiciones de humedad y temperatura.
  2. El clima: Condiciona los tipos de paisajes agrarios. Está presente a través de las temperaturas, precipitaciones y demás elementos climáticos (vientos, nubosidad…). El régimen climático de influencia más intensa es el mediterráneo.
  3. Los suelos: Condicionan la agricultura por su distinta naturaleza, estructura, composición y ubicación.
  4. La vegetación: En ocasiones se ha eliminado para lograr la total ocupación agrícola; otras veces se conserva con grandes rasgos de pureza, constituyendo la base de los aprovechamientos forestales.

Condicionantes Humanos e Históricos

Estos condicionantes son los responsables de la ordenación y usos del espacio agrario, así como de la expresión de las condiciones sociales, económicas, técnicas y políticas en las que la actividad se desenvuelve. El espacio agrario también acusa la influencia de los factores del pasado sobre los que se han formado y pervivido las estructuras agrarias.

  1. Condicionantes históricos: Roma realiza la primera ordenación agraria del territorio peninsular. Sus sistemas agrarios se basan en la trilogía mediterránea y la gran explotación. Posteriormente, los musulmanes reordenan el espacio agrario dando gran importancia al regadío y a la producción de frutas y hortalizas para la alimentación humana. La Reconquista y repoblación cristianas dan lugar a dos procesos de claras repercusiones en el agro español:
    1. Uso y ordenación de la tierra basado en la coexistencia de aprovechamientos cerealistas y ganaderos.
    2. Sistema de posesión de la tierra que será el responsable de grandes desigualdades de sociedades pasadas y base de la consideración de la tierra como problema.
  2. Condicionantes sociales y económicos: Propiedad, explotación y régimen de tenencia son elementos básicos de la estructura agraria. Es manifiesta su influencia en la conformación del paisaje, exponente de la ocupación y del uso del espacio por la sociedad.

Estructura Agraria: Propiedad y Explotación

El Régimen de Propiedad de la Tierra

La propiedad consiste en el derecho a gozar y disponer libremente de la tierra. La propiedad dominante en España es la propiedad privada. La influencia de las medidas desamortizadoras en la estructura agraria fue muy grande, pues supuso la transferencia de una cantidad ingente de tierra de propiedad colectiva a manos de particulares. En contra de lo que se pretendía, esto vino a reforzar la gran propiedad, pues, por lo general, los compradores ya tenían la condición de propietarios. Asimismo, la desamortización civil privó a los municipios de un amplísimo patrimonio, base del sustento de los más humildes.

El Régimen de Explotación de la Tierra

La noción de explotación agraria hace referencia a las condiciones técnicas. La explotación agraria guarda relación con la propiedad y, como sucede con esta, también se caracteriza por la dicotomía existente entre las pequeñas explotaciones o minifundios y las grandes explotaciones o latifundios, de tanta implantación en el sur y en el suroeste peninsular. Los datos extraídos del último censo agrario nos indican que más de la mitad de las explotaciones agrarias de España son minifundios de extensión inferior a cinco hectáreas, y que las explotaciones de extensión superior a 300 hectáreas representan tan solo un 1%, aunque concentran una cantidad considerable de tierra. Desde el Primer Censo Agrario, su número ha decrecido debido al éxodo rural.

El Régimen de Tenencia de la Tierra

En lo que a tenencia de la tierra se refiere, distinguimos entre régimen de explotación directa y régimen de explotación indirecta.

  • Explotación directa: Consiste en que el titular de la explotación agraria, con independencia de que trabaje físicamente en ella o no, es propietario de la tierra.
  • Explotación indirecta: Resulta cuando el titular de la explotación y el propietario de la tierra no es la misma persona. En estos casos, el propietario cede la tierra para su explotación en régimen de arrendamiento, aparcería o bajo cualquier otra fórmula. El arrendamiento es, de hecho, un alquiler y se establece mediante el pago de una renta cierta.

Usos, Aprovechamientos y la Influencia de la PAC

Usos y Aprovechamiento Agrario

Existe una relación intensa entre los mapas de cultivo y aprovechamiento con los componentes del medio geográfico, especialmente clima y relieve. Sobre los grupos de aprovechamientos existe coincidencia entre:

  • Espacios forestales y áreas de montaña: Se debe a que las montañas no son aptas para la agricultura, al abandono de los usos agrícolas tradicionales y a la repoblación forestal.

Las tierras cultivadas se encuentran en tres grandes conjuntos agrícolas: las cuencas interiores de la Meseta, las depresiones exteriores y el litoral mediterráneo. Las dos submesetas tienen un intenso uso agrario. La depresión del Ebro y del Guadalquivir son de gran aptitud agrícola. Las zonas del litoral mediterráneo se caracterizan por la intensidad del laboreo sobre una estrecha franja que presenta su mayor extensión en el golfo de Valencia. En los espacios de aprovechamiento agrícola destacan las zonas de regadío, que son hoy los principales soportes económicos de la agricultura española. Junto a ellos, destacan los espacios ocupados por cultivos forzados (enarenados, bajo plásticos) y subtropicales, modelo de aprovechamiento de las potencialidades que ofrece el clima y un claro exponente del dinamismo de la agricultura española.

La Influencia de la Política Agraria Común (PAC)

El sector agrario español participa de la Política Agraria Común (PAC) y ha cambiado mucho desde su ingreso en la UE. Han sido importantes las ayudas y subvenciones para mantener las producciones y las rentas de los agricultores y ganaderos, que ascienden a 6.500 millones de euros. Con vistas al futuro, las reformas de la PAC toman en consideración las nuevas pautas para el desarrollo rural, conscientes de que la evolución del sector agrario comunitario y nacional está relacionado con el desarrollo equilibrado y sostenible de los espacios rurales. Por esto se han concretado tres objetivos:

  1. El fomento de la competitividad de la agricultura.
  2. La preservación ambiental, con especial atención a la biodiversidad, al fomento de los sistemas con grandes valores ambientales, al agua y al cambio climático.
  3. La diversificación y mejora de las condiciones del medio rural.

Nuevos Usos y Funciones del Espacio Rural

España ha sido tradicionalmente agrícola, pero a mediados del siglo XX se produce la transformación agrícola y pesquera. El principal retroceso se produjo entre 1960-1970, siendo distinto en cada región: muy acusado en Madrid, País Vasco o Cataluña y menos en Extremadura y Galicia. En su dimensión económica, el sector primario ha alcanzado un PIB de 20.000 millones de euros, consecuencia de una gran producción agraria. Sin embargo, en el conjunto de la economía española su significado ha ido disminuyendo. Se ha llegado a una situación en la que el valor de la producción ganadera es superior a la agrícola.

A partir de los años 60, el campo sufre fuertes transformaciones debido a varios factores: el éxodo migratorio y la mecanización del campo. En 1933 (plena República) se aprueba el Plan Nacional de Obras Hidráulicas que pretende crear la infraestructura necesaria para ampliar los regadíos aprovechando los recursos hídricos, mediante la construcción de embalses.

Consecuencia de lo expuesto es que el espacio agrario español ha tomado una orientación productiva, se han roto los vínculos entre agricultura, ganadería y explotación forestal y ha surgido una disociación muy grande entre el mundo rural y el urbano. Además, la influencia de las políticas comunitarias ha sido un factor de modernización del campo. Todos los cambios expuestos anteriormente han alterado el concepto y el uso del espacio rural. Es por ello que el mundo rural acusa la presión del mundo moderno (vías de comunicación…) y hace necesario adoptar prácticas agrarias que favorezcan la preservación del entorno y la conservación de la naturaleza. También se hace necesario diversificar la economía, propiciar nuevos usos y actividades que generen empleos duraderos fuera del sector agrario y desarrollar programas integrados de desarrollo rural sobre la base del potencial endógeno. Las políticas europeas procuran mantener a la población en su ámbito, apoyar la implantación de nuevas empresas y actividades, conservar el medio natural y el patrimonio cultural como una baza para la generación de ingresos externos, como los que aporta el turismo.