Vocabulario de Platón

ALEGORÍA

Figura literaria que consiste en expresar un pensamiento por medio de imágenes, de forma que haya correspondencia entre la imagen y la idea representada. Así la imagen de la alegoría del sol es el sol iluminando objetos, y la idea representada es el Bien haciendo que el resto de seres existan gracias a la participación.

ALMA

Lo que define esencialmente al hombre y cuya naturaleza es vivir separada del cuerpo. Tiene una estructura tripartita: alma racional (inmortal y facultad para conocer racionalmente. Situada en el cerebro); alma irascible (el carácter o la fuerza psíquica. Situada en el pecho); y el alma concupiscible (la capacidad de desear y sufrir pasiones. Situada debajo del vientre). La parte racional es inteligible y, por ello, superior e independiente del cuerpo, que se convierte en su cárcel- por tanto, la unión del cuerpo con el alma es accidental y temporal (dualismo antropológico).

Con camino del alma, Platón se refiere a la dialéctica, o sea, el método para ascender hasta las Ideas. Precisamente en griego método significa camino a través del que se llega. Es un conocimiento indispensable para el que ha de gobernar, distinguiéndose en ella un proceso ascendente hasta llegar a la Idea de Bien, y otro descendente hasta llegar a la idea de la que se ha partido. En sentido amplio es el proceso de conocimiento con dos fases: el camino de ascenso de lo sensible a lo inteligible e incluye el proceso educativo por el que se superan los distintos niveles de conocimiento. Este es el sentido que tiene en la alegoría de la caverna. Nos permite pasar de la multiplicidad de lo sensible a la multiplicidad de las Ideas, y después a las Ideas superiores hasta llegar a la Idea de Bien, último principio unificador; el camino de descenso tras llegar a la Idea de Bien. En la alegoría está representado por el camino de vuelta del prisionero. 

ÁMBITO INTELIGIBLE / ÁMBITO VISIBLE. 

Platón establece dos ámbitos de realidad o mundos distintos y separados. 1. El ámbito inteligible está formado por los seres inteligibles (entidades matemáticas e Ideas). Es objeto de conocimiento o episteme (con sus dos niveles: diánoia y nóesis). 2. El ámbito visible, constituido por los seres sensibles (seres físicos y sus imágenes) y que no es más que una copia imperfecta del anterior. Es objeto de opinión o doxa (con sus dos niveles; eikasia y pistis)

BIEN. Idea de Bien. 

Idea que ocupa la cúspide del ser y por ello es el objeto del estudio supremo (la dialéctica). Es causa de la bondad de los seres sensibles, de las Ideas, de las acciones privadas (ética) y de las públicas (política). Es la causa última de los seres sensibles, pero también de la esencia y existencia de las Ideas, y de su verdad (su ser cognoscible). Finalmente, es causa de que nuestra alma llegue a conocer las Ideas, es decir, de que tenga inteligencia. (Véase en los apuntes la función ontológica y epistemológica del Bien)

CADENAS.

Imagen de la alegoría de la caverna que explica por qué los prisioneros sólo ven sombras. Representan los hábitos y prejuicios que el hombre adquiere desde el nacimiento como consecuencia de su carácter corpóreo y que le impiden conocer lo inteligible. Al nacer, el alma olvida lo que ha conocido en su existencia anterior y, por la acción del cuerpo en el que se aloja, se acostumbra a valorar que lo conocido por los sentidos es lo real. Para superar esta opinión, tiene que liberarse del encadenamiento al que el cuerpo y sus sentidos la someten, y que le impiden conocer del modo que naturalmente le corresponde, mediante la inteligencia (ciencia dialéctica). Esa liberación se consigue gracias a la educación.

COSAS DE ARRIBA. 

Los objetos reales del exterior de la caverna. Se refiere a las entidades matemáticas y a las Ideas (véase).

COGNOSCIBLE. 

Los seres inteligibles, ya que al ser verdaderos, sólo ellos permiten un conocimiento verdadero. Cognoscible opone ser inteligible a ser sensible, que es opinable. FELIZ. Esta imagen representa la situación del hombre tras completar su educación y haber llegado a conocer la Idea de Bien. Por tanto, felicidad y conocimiento verdadero se dan a la vez.

EDUCACIÓN. 

Paso de la ignorancia (la opinión de que lo sensible es lo real) al conocimiento más elevado. Sólo los filósofos recorren ese camino completo. La educación ocupa un lugar central en el Estado platónico porque mejora a los ciudadanos. Quienes conozcan el bien, obrarán bien (intelectualismo moral), por eso, sólo una educación que enseñe qué es el Bien, mejorará a los ciudadanos. Por esa misma razón, sólo los conocedores del Bien, los filósofos, serán buenos gobernantes.
Sólo son aptas para lograr este propósito aquellas ciencias que obligan a contemplar las esencias y no lo que se genera. Las disciplinas que no son capaces de elevar al alma hacia el mundo inteligible son; la gimnástica que se afana en torno a lo que nace y muere, pues es el crecimiento y decadencia del cuerpo lo que ella preside, la música que procura por medio de la armonía cierta proporción armónica, pero no conocimientos, la historia o narraciones, ya sean fabulosas o verídicas, porque nos sitúan en un pasado más o menos alejado y los historiadores lo relatan desde su punto de vista, y en general todas las artes porque son innobles.
La educación es un ejercicio mediante el cual el maestro (representado por quien libera al prisionero), guía al hombre para que con sus capacidades recuerde por sí mismo la verdad que ya tiene en si (anamnesis). Esa concepción se opone a los sofistas, que entienden la educación como un proceso por el que el maestro transmite unos contenidos y técnicas.

HOMBRE.

Unión temporal y accidental de dos realidades completamente distintas y separadas: cuerpo y alma (dualismo antropológico). De estas dos el alma es la principal pues es la causa del ser del hombre y lo que lo define esencialmente, siendo el cuerpo una cárcel temporal del alma contraria a su naturaleza.

IDEAS. 

Son realidades eternas, inmateriales, inmutables, que existen independientemente del mundo sensible y de los sujetos que la piensen, es decir es un ser en sí y por sí. No es un concepto o una construcción mental, sino que son realidades objetivas y los únicos seres en sentido completo, ya que de ellas derivan todo lo que hay de real en el mundo sensible, es decir, constituyen la causa y esencia del mundo sensible (las cosas materiales participan o imitan a las Ideas).

IGNORANCIA. 

En la alegoría de la caverna, situación en la que se encuentran los prisioneros antes del proceso educativo. Son ignorantes porque no saben que su conocimiento es erróneo: creen conocer seres reales cuando conocen sombras, es decir de aquellos que consideran que el mundo sensible es el real.

IMÁGENES. 

Seres que forman el nivel inferior de seres sensibles, produciendo el tipo inferior de opinión o conjetura

INTELIGENCIA

Constituye la facultad más elevada del alma racional, destinada al conocimiento inmediato e intuitivo de las Ideas.

PRISIONERO. 

Alude a la condición misma del hombre al estar inexorablemente apresado por los sentidos y es una expresión que alude a quienes viven encadenados en la caverna prisión. Representa también a los que viven en la ignorancia al opinar que los seres sensibles son lo real. La mayoría de la humanidad permanece toda su vida presa del error, de los prejuicios, de la manipulación, mientras que una minoría consigue liberarse y acceder a una existencia superior gracias al conocimiento.

SABIDURÍA

Una de las tres virtudes necesarias (junto al valor y la templanza) para conseguir la justicia en el ámbito ético y político. El hombre será sabio si lo es su alma racional y esto se conseguirá cuando se alcance el conocimiento del Bien. De este modo se convierte en un filósofo, que deberá gobernar al Estado para que así también este sea sabio.

SOMBRAS. 

En la alegoría de la caverna esta expresión tiene sentido alegórico. Pueden ser las sombras de los objetos del interior de la caverna, que representan a las imágenes, o las sombras del exterior, que representarían a los seres inteligibles inferiores, los objetos matemáticos.