El Pensamiento de Platón: Teoría de las Ideas, Mito de la Caverna y la Justicia en La República

La República y la Búsqueda de la Justicia

El texto al que nos enfrentamos pertenece a la obra más famosa de Platón, La República, en la que el filósofo pretende dar una definición de justicia para establecer una ordenación ideal de la ciudad. Explica alegóricamente el duro proceso educativo que permite al hombre escapar de la ignorancia para alcanzar las Ideas inmutables y eternas. Solo el filósofo será capaz de obtener un conocimiento verdadero acerca de la justicia.

El Mito de la Caverna: Ontología y Epistemología

El Mito de la Caverna también contiene los aspectos más importantes de la ontología y epistemología platónica, ligados con su concepción política y ética. Comencemos con la ontología:

La División Ontológica: Los Dos Mundos

Platón divide la realidad en dos mundos diferenciados:

  • El Mundo Sensible: Siempre cambiante, se encuentra entre el ser y el no-ser y posee un valor ontológico limitado. Su valor reside en que las cosas de este mundo imitan las Ideas inmutables.
  • El Mundo Inteligible (o Mundo de las Ideas): Eterno, perfecto e inmutable.

Grados del Conocimiento (Epistemología)

La división ontológica determina el carácter epistemológico.

1. Doxa (Opinión) – Correspondiente al Mundo Sensible

El mundo sensible es captado por los sentidos, ofreciendo un mundo cambiante, aparente y confuso. El grado de conocimiento asociado es la doxa (opinión). Platón establece dos grados dentro de esta:

  • Eikasía: El grado más imperfecto, basado en prejuicios y errores (imágenes, sombras).
  • Pistis: El grado más perfecto de la doxa, responsable del conocimiento de los objetos concretos.
2. Episteme (Ciencia o Conocimiento Verdadero) – Correspondiente al Mundo Inteligible

El mundo inteligible es captado por la razón, lo que permite alcanzar el conocimiento verdadero o episteme. La episteme posee dos grados de conocimiento:

  • Dianoia: Propia del razonamiento matemático.
  • Nóesis: El grado más elevado, el conocimiento puro de las Ideas.

La Dialéctica: El Camino hacia las Ideas

El conocimiento de las Ideas se alcanza a través de un proceso de elevación intelectual denominado dialéctica. Esta parte del mundo sensible para alcanzar el mundo inteligible y, en última instancia, la Idea de Bien.

  • Dialéctica Ascendente: Proceso de elevación desde lo sensible hasta la Idea de Bien.
  • Dialéctica Descendente: Proceso que, partiendo de la Idea de Bien, permite apreciar la relación entre las diferentes Ideas.

La importancia de las Ideas es crucial para poseer un recto conocimiento.

La Teoría de la Anámnesis (Reminiscencia)

El punto de partida para alcanzar las Ideas es el mundo sensible, lo cual se explica gracias a la teoría de la anámnesis (reminiscencia) de Platón.

Antaño, el alma inmortal del hombre contempló el Mundo de las Ideas. Accidentalmente, desciende al mundo sensible y se introduce en un cuerpo mortal, olvidando todo su conocimiento. Sin embargo, el contacto con los objetos sensibles despierta en él aquellas Ideas que previamente había aprendido. Como afirma Platón: «Conocer es recordar».

La Jerarquía de las Ideas y la Idea de Bien

Las Ideas se organizan jerárquicamente. Las que menos valor tienen son las más próximas a lo sensible. En la cúspide se encuentran las Ideas más importantes:

  • Idea de Belleza
  • Idea de Justicia
  • Idea de Bien

La Idea de Bien posee el máximo valor debido a la concepción teleológica de Platón: todas las cosas tienden a un fin último, y este es su bien. De la Idea de Bien dependen todas las demás Ideas y cosas. De la misma manera, el Sol que se encuentra fuera de la caverna es la fuente de toda vida, representando alegóricamente la Idea de Bien.

El mal, para Platón, es la falta de ser y se produce por ignorancia.

El Intelectualismo Moral

Esta identidad entre mal e ignorancia, y bien y conocimiento, es lo que se denomina intelectualismo moral, doctrina que Platón recibió de Sócrates. (Aristóteles rectificará a Platón diciendo que no es suficiente con conocer el bien, sino que además debemos practicarlo).

Filosofía Política y Ética en La República

La Educación del Filósofo Gobernante

La educación es un duro proceso a través del cual el filósofo se separa del mundo sensible para alcanzar las Ideas inmutables y eternas. Sin embargo, no todos pueden ser filósofos. Los futuros gobernantes son quienes recibirán una educación más exigente, ya que, al conocer la Idea de Bien, de Justicia y de Belleza, podrán implantarlas correctamente en la ciudad.

La Ciudad Ideal y las Tres Clases Sociales

Platón apuesta por un sistema de gobierno aristocrático. La ciudad debe estar formada por tres clases sociales, donde cada clase tiene potenciada una parte del alma a la que le corresponde una virtud específica:

Clase SocialFunciónParte del Alma PredominanteVirtud Correspondiente
Filósofos GobernantesBuen gobierno de la ciudadRacionalSabiduría (Prudencia)
Guerreros (Guardianes)Protección de la ciudadIrascibleFortaleza (Valor)
Productores (Artesanos)Producción de bienesConcupiscibleTemplanza

La Definición de Justicia

La virtud de la justicia se define como la perfecta armonía de las diferentes clases de la ciudad. La justicia reina cuando cada clase cumple su labor específica.

Para Platón, la ciudad es una reproducción del alma del ciudadano. Si no hay justicia en la ciudad, no puede haber justicia en los ciudadanos, y viceversa. Por lo tanto, la política y la ética están fuertemente unidas.

El Dualismo Antropológico: El Mito del Carro Alado

Platón explica su doctrina del alma en el Mito del Carro Alado. Desde un punto de vista antropológico, establece un claro dualismo entre el alma y el cuerpo.

La parte racional del alma debe dominar, con la ayuda de la parte irascible, a la parte concupiscible. El cometido al que debe aspirar el filósofo es alejarse del cuerpo y de la sensibilidad para acercarse a las Ideas, lo que le permitirá gobernar rectamente la ciudad.