Antropología Filosófica: Un Viaje por la Comprensión del Ser Humano

1. Antropología Filosófica: Origen y Evolución

La reflexión filosófica sobre el ser humano es casi tan antigua como la filosofía misma. Sin embargo, la antropología filosófica no se consolidó como disciplina independiente hasta finales del siglo XIX.

A partir de Aristóteles, se comenzó a dedicar atención especial al alma humana, lo que llevó a la creación de la psicología racional. Esta disciplina reflexionaba racionalmente sobre aquello que se consideraba superior en el ser humano y que solo podía conocerse por medio de la razón.

A finales del siglo XIX, con la aparición de la psicología experimental, la psicología racional fue gradualmente abandonada.

Durante el siglo XX, dos grandes guerras mundiales convirtieron al ser humano en un problema filosófico fundamental, lo que despertó un gran interés en la antropología filosófica.

2. El Ser Humano como Problema: Carácter Problemático de su Definición

El ser humano siempre se había concebido como un ser superior. No obstante, con la llegada del Renacimiento, sufrió tres humillaciones que socavaron esa seguridad y confianza:

  • Humillación Cosmológica: La Tierra dejó de ser el centro del universo, y el ser humano perdió su lugar privilegiado en el cosmos.

  • Humillación Biológica: Darwin demostró que no existe un abismo insalvable que separe al ser humano del resto de las especies biológicas.

  • Humillación Psicológica: Freud derribó el mito del carácter puramente racional del ser humano, destacando la influencia de la irracionalidad en su conducta.

Estas humillaciones llevaron al ser humano a preguntarse: “¿Qué es el hombre? ¿Cuál es su verdadera esencia?”. Dar una respuesta a estas preguntas es la tarea de la antropología filosófica, que aborda la complejidad del ser humano desde una perspectiva que reconoce la posibilidad de la contradicción.

3. Antropología Filosófica: Definición y Relación con la Ciencia

La antropología filosófica es una disciplina cuyo objeto de conocimiento es el ser humano en su integridad. En ella se produce una identidad única entre sujeto y objeto de conocimiento, una particularidad que no se encuentra en otros campos.

La antropología filosófica no es ni puede ser una ciencia en el sentido empírico, ya que las ciencias son inherentemente limitadas, parciales y especializadas, lo que les impide una perspectiva integral. Las ciencias delimitan su campo de acción; por ejemplo, la física no se pregunta por qué existe el universo. Su objetivo es explicar los fenómenos de los que se ocupan, pero no abordan la totalidad del mundo humano, porque el ser humano es libre (sus acciones no están sometidas a leyes deterministas) e inteligente (interpreta la realidad y confiere sentido a sus acciones), lo que dificulta una aproximación puramente objetiva. En contraste, en la antropología filosófica, la objetividad estricta es inalcanzable; en su lugar, se busca la conexión y comprensión entre distintas subjetividades.

4. El Ser Humano en la Antigüedad Griega

En la mitología griega ya existía un interés por comprender y describir al ser humano. Homero nos presenta un ser humano concebido como un héroe, capaz de afrontar todo tipo de riesgos y de liderar. El mérito y el conocimiento eran los valores supremos del modelo de ser humano propuesto por la mitología homérica, donde el individuo no se concebía fuera de su entorno.

5. Antropología de Sócrates

Sócrates centró el interés de la filosofía en el ser humano. Utilizaba la mayéutica, una técnica de preguntas y respuestas cortas, con el objetivo de que el interlocutor llegara a una contradicción y, de este modo, descartara una verdad o revelara las inconsistencias de su propio pensamiento, especialmente frente a los sofistas.

6. Antropología de Platón

Para Platón, los seres humanos somos un compuesto de alma y cuerpo. El alma tiene naturaleza racional y es inmortal; el cuerpo, en cambio, es material y mortal. Consideraba que el alma está dividida en tres partes: la razón, el ánimo y el apetito.

7. Antropología de Aristóteles

Para Aristóteles, el ser humano es un ser natural y está sometido a cambios que se orientan hacia la perfección de su naturaleza. Esta perfección consiste en la plena realización de su esencia.

Consideraba que las características principales de la esencia humana son:

  • Racionalidad: La capacidad de contemplación de la realidad.

  • Sociabilidad: La necesidad de convivir en sociedad para la plena realización humana.

Pensaba que el alma es lo que da forma a la materia de la que está hecho el cuerpo. La muerte del ser humano implica la muerte de su alma.

8. Antropología Helenística

La conquista de Grecia por Alejandro Magno puso fin a las ciudades-estado o polis, marcando el inicio del periodo helenístico. Los griegos se sintieron desorientados, y surgieron dos escuelas filosóficas principales para ofrecer una nueva visión del ser humano y su búsqueda de la felicidad: el epicureísmo (felicidad = placer) y el estoicismo (felicidad = razón). Para ellos, el alma era material, al igual que el cuerpo, y sostenían que su labor como filósofos consistía en servir de guía para alcanzar la felicidad.

9. Antropología de Agustín de Hipona

Agustín de Hipona pensaba que era necesario comprender al ser humano desde su interioridad, con un objetivo distinto: comprender primero la creación para poder, después, acercarse al Creador. En su obra “Confesiones”, habla de un ser desgarrado por un combate interno de la voluntad: por una parte, se resiste a la fe y desea placeres mundanos; por otra, anhela comprender a Dios para poder creer. San Agustín coincide con Platón en que el alma se sirve temporalmente de un cuerpo. Sin embargo, alma y cuerpo adquieren nuevos significados debido a la influencia de la doctrina de la Creación y la Resurrección.

El alma es una imagen de la Trinidad divina. El alma humana es una, pero posee tres facultades: memoria (pasado), entendimiento (presente) y voluntad (futuro).

10. Antropología de Tomás de Aquino

Según Tomás de Aquino, la naturaleza humana se compone de cuerpo y alma. El cuerpo es material y mortal, y el alma espiritual e inmortal. El alma da vida al cuerpo, aunque no necesita de este para seguir existiendo cuando el cuerpo muere; percibe sensaciones y forma sus ideas a partir de la experiencia sensorial.

La composición de cuerpo y alma le sirve a Tomás de Aquino para explicar la existencia de la libertad en el obrar humano. El alma cuenta con dos facultades principales: la inteligencia y la voluntad.

  1. Por la primera (la inteligencia), aprehende los objetos que la rodean.

  2. La segunda (la voluntad) persigue el bien. Así, en cuanto el intelecto capta la presencia del bien en un objeto, la voluntad orienta la acción humana para alcanzarlo y hacerlo suyo.

11. Antropología de la Modernidad

El Renacimiento marcó el fin del sometimiento del ser humano a un estado superior. Esto impactó al individuo no solo como objeto de conocimiento, sino como una realidad en sí misma. La humillación cosmológica, paradójicamente, generó un renovado orgullo por la defensa de la dignidad humana. Nuestra condición se vio revalorizada, pues el ser humano pasó a ser considerado valioso por sí mismo y merecedor de una atención y un conocimiento especiales.

14. Antropología Empirista: Hobbes

El principal interés de Hobbes fue hallar la forma de gobierno más adecuada para la sociedad humana, lo que le llevó a preguntarse cómo era el ser humano antes de vivir en sociedad. Llegó a la conclusión de que, sin restricciones, los seres humanos son egoístas y violentos. Esto implicaba que la vida en el estado de naturaleza era peligrosa: una guerra de todos contra todos. La sociedad, entonces, surgiría para proporcionar paz y seguridad a aquellos que vivían en un estado salvaje.

15. Antropología Empirista: Locke

Locke estuvo especialmente interesado en el problema de la libertad humana, buscando no solo comprenderla, sino también promover la autonomía, la autoestima y el nivel cultural del individuo.

Destacó la libertad moral, entendida como la capacidad del ser humano para tomar decisiones y asumir sus consecuencias, y la libertad política, que, paradójicamente, implicaba la necesidad de que el ser humano renunciara a parte de su libertad natural para vivir en sociedad.

16. Antropología Empirista: Hume

El empeño de Hume consistía en elaborar una ciencia sobre la naturaleza humana, aplicando el mismo método experimental al conocimiento. Llegó a la conclusión de que en el ser humano los elementos irracionales tienen mayor importancia que los racionales, lo cual se manifiesta tanto en el ámbito del conocimiento como en el de la acción.

17. Antropología en la Ilustración

Los ilustrados no solo buscaban conocer la auténtica esencia humana, sino también promover su autonomía, autoestima y nivel cultural.

El pensamiento ilustrado presenta las siguientes características:

  • Confianza en la razón humana.

  • Existencia de derechos humanos universales.

  • Importancia de la educación para que los individuos utilicen la razón sin temor.

  • Idea de progreso.

Rousseau, aunque parte de la Ilustración, no compartió algunas ideas de este movimiento. Pensaba que la propiedad privada había provocado la aparición de conflictos y que estos podrían resolverse mediante la educación.

18. Antropología en el Siglo XIX: Características, Corrientes y Aportes Científicos

El interés por el ser humano en el siglo XIX presentó dos rasgos característicos:

  • Importancia concedida al individuo.

  • Cultivo de las ciencias humanas (como la psicología, la sociología, etc.).

Tres corrientes filosóficas que marcaron la concepción del ser humano en este siglo fueron:

  • Positivismo

  • Marxismo

  • Vitalismo

Los elementos introducidos por las ciencias humanas fueron:

  1. En primer lugar, la profundización en las humillaciones biológica y psicológica, estudiadas y documentadas por la antropología física y la psicología.

  2. En segundo lugar, un intenso debate sobre cuál era el método de investigación adecuado, con dos posturas principales:

  • Positivismo

  • Historicismo

19. Positivismo

El positivismo, impulsado por Auguste Comte (su fundador), promovía el aumento del conocimiento científico de la realidad y el dominio de la naturaleza por parte de la humanidad. Comte pensaba que la ciencia sería la nueva religión y los científicos, sus sacerdotes.

20. Marxismo

El marxismo buscaba la mejora de las condiciones de vida en el seno de la sociedad mediante la lucha de clases, un motor fundamental de la historia. Su objetivo era una sociedad sin clases sociales ni propiedad privada.

21. Vitalismo

El vitalismo se caracterizó por una crítica radical a todos los valores que habían sustentado la sociedad occidental. Destacaron pensadores como Nietzsche y Arthur Schopenhauer, quienes enfatizaron la vida en el presente y a menudo concibieron el futuro como un descenso o algo que sucede de forma incontrolable. Nietzsche, en particular, postuló la idea del Übermensch (superhombre).

22. Antropología en el Siglo XX: Factores Clave, Consecuencias y Corrientes Principales

Pensadores como Nietzsche y Freud se encargaron de romper con la concepción de que el ser humano es puramente racional, postulando que la conducta humana se guía más por impulsos irracionales que por la razón.

Factores clave del siglo XX que impactaron la concepción del ser humano incluyen:

  • El desarrollo tecnológico, que se creó para servir a los seres humanos, terminó, paradójicamente, poniéndolos a su servicio, convirtiéndose en una trampa.

  • El desarrollo económico, que permitió un incremento de la producción para abastecer a todo el mundo, desembocó en una gran crisis.

  • Finalmente, el desarrollo político y las alianzas internacionales provocaron dos grandes guerras con consecuencias devastadoras.

El resultado de estos factores fue una profunda crisis de identidad en el ser humano.

Corrientes filosóficas principales del siglo XX que abordaron la cuestión del ser humano:

23. Existencialismo

Corriente filosófica que prestó especial atención a la libertad, a la responsabilidad humana y a la cuestión del sentido de la vida y la consciencia de la muerte.

24. Estructuralismo

Corriente filosófica que tomó como base el carácter simbólico del ser humano para lograr una comprensión de los fenómenos sociales.

25. Personalismo

Corriente filosófica que atendió al carácter personal del ser humano y las implicaciones que esto supone para la percepción que el individuo tiene de sí mismo, de su relación con los demás y de la trascendencia.

27. El Problema Antropológico de la Muerte

La muerte se define como la pérdida de las características propias de la vida. El ser humano es el único ser consciente de su propia muerte; por ello, nuestra conciencia nos obliga a darle un sentido a nuestra existencia. La muerte se puede concebir como un final definitivo (perspectiva monista) o como un tránsito (perspectiva dualista) hacia otro tipo de existencia.

Heidegger afirma que el sentido de la vida radica en su temporalidad, pues es finita. Ante esta finitud, caben dos actitudes:

  • Vivir una existencia inauténtica: Olvidándose de su finitud y considerándose una realidad permanente.

  • Vivir una existencia auténtica: Siendo consciente de la limitación temporal y asumiendo la vida como un proyecto cuyo tiempo se agota.