Fundamentos del Pensamiento Filosófico: Metafísica, Ética y Sociedad a través de las Edades

Edad Antigua: Aristóteles

El Problema de la Realidad y del Conocimiento

Aristóteles defiende una única realidad, la Physis. Divide la Physis en dos mundos:

  • Mundo Supralunar: El de los astros, hechos de éter, donde no hay corrupción.
  • Mundo Sublunar: El de la Tierra, compuesto por los cuatro elementos, donde sí hay cambio.

La Física estudia la Physis, mientras que la Metafísica estudia el fundamento último de la Physis, aquello que la hace real.

La Teoría Hilemórfica y la Sustancia

Aristóteles defiende la teoría hilemórfica: los seres se componen de Materia (hyle), de lo que están hechos, y Forma (morphé), su esencia, lo que les hace ser lo que son. Distingue:

  • Sustancia Primera: El individuo concreto (“este perro”).
  • Sustancia Segunda: La esencia o Forma intrínseca de los seres concretos, el universal (“ser perro”, la especie).

También diferencia el ser como sustancia (el individuo concreto y particular que es en sí mismo) del ser como accidente (la forma de ser que solo puede darse en otro, y que puede quitarse a una sustancia primera sin que esta deje de ser lo que es).

Concepción Teleológica y el Cambio

Aristóteles presenta una concepción teleológica de la realidad, donde los seres cambian buscando un fin, desarrollándose para alcanzar la perfección establecida por su propia esencia. Este cambio se produce por el paso del “ser en potencia” (lo que se puede llegar a ser) al “ser en acto” (lo que se es). El cambio es, por tanto, el paso de la potencia al acto, posibilitado por la propia esencia, ya que cada ser tiende a desarrollar las capacidades de su finalidad o Bien propio.

La Teoría de las Cuatro Causas

Para explicar todo ser natural (Physis), Aristóteles ofrece la teoría de las cuatro causas:

  1. Causa Formal: Lo que determina la forma de un ser, su esencia.
  2. Causa Material: De lo que está hecho un ser.
  3. Causa Eficiente o Agente: Lo que hace que un ser sea real.
  4. Causa Final: La finalidad que tiene.

Metafísica y Primer Motor Inmóvil

En su Metafísica, Aristóteles estudia el ente, el ser en cuanto ser, centrándose en lo universal que tienen en común los seres reales. La Metafísica establece los axiomas o primeros principios indemostrables y universales que rigen lo real (como el de no contradicción, el de identidad y el de causalidad), y las categorías, aquello que se puede predicar de los seres:

  • Sustancia, cantidad, cualidad, relación, lugar, tiempo, posición, estado, acción y pasión.

Aplicando el principio de causalidad al movimiento, Aristóteles afirma que la regresión causal no puede ser infinita, por lo que debe existir un Primer Motor Inmóvil, acto puro e inmaterial (ser “divino”). Este Primer Motor inició el movimiento y, por atracción, hace que las cosas busquen su propia perfección a través del cambio. Su única actividad es pensarse a sí mismo.

El Conocimiento

Aristóteles defiende que el conocimiento parte de los sentidos (sensibilidad) y se desarrolla a través de un proceso de inducción, de lo particular a lo universal. Tras la percepción sensible, la imaginación genera la imagen mental, que es retenida por el entendimiento para realizar la abstracción. Distingue:

  • Entendimiento Agente: Universal, permite abstraer la esencia de los seres.
  • Entendimiento Paciente: Individual, retiene las abstracciones para posibilitar los juicios.

Aristóteles fue el creador de la Lógica, ofreciendo un método para asegurar que toda argumentación sea rigurosa y coherente, preocupándose por la validez formal de la estructura (modos del silogismo válidos y falacias).

El Problema del Ser Humano

Aristóteles mantiene la teoría hilemórfica para el ser humano: el cuerpo (Materia) y el alma (Forma) forman una única sustancia natural indisoluble. El alma es principio de vida y es mortal (aunque el entendimiento agente es inmortal, no es personal). Establece tres funciones en el alma humana intelectiva:

  1. Vegetativa o Nutritiva: Capacidad para alimentarse y desarrollarse (propia de todos los seres vivos).
  2. Sensitiva: Permite la sensibilidad (propia de todos los animales).
  3. Intelectiva: Exclusiva de los seres racionales, posibilita el conocimiento.

La intelección es la función superior, la más característica y esencial, pues distingue al ser humano de los demás seres.

El Problema de la Moral o la Ética: Eudemonismo

La moral aristotélica se basa en su concepción teleológica: el fin supremo del ser humano es la felicidad (Eudemonia), por lo que su ética se denomina Eudemonismo. La felicidad consiste en desarrollar lo propio de cada ser de acuerdo con su esencia.

Virtudes Dianoéticas y Vida Contemplativa

La facultad intelectiva es lo característico del ser humano. Por ello, la actividad intelectual o vida contemplativa es lo que debemos desarrollar. Las virtudes dianoéticas o intelectuales perfeccionan el entendimiento (la sabiduría, la contemplación, la reflexión, el estudio). Sin embargo, el hombre no es solo entendimiento, sino que tiene facultades vegetativas y sensitivas, por lo que su felicidad es siempre limitada, siendo la felicidad absoluta exclusiva del Primer Motor.

Virtudes Éticas y el Término Medio

El correcto desarrollo de las facultades vegetativa y sensitiva se consigue con las virtudes éticas o prácticas, las más humanas. Estas virtudes organizan la vida para permitir la dedicación a la facultad intelectiva.

La virtud ética se define como un hábito, una disposición adquirida por la práctica frecuente, de determinar con prudencia (utilizando la razón) el término medio entre dos extremos viciosos (uno por defecto y otro por exceso). El término medio debe establecerse de forma personal, no es universal.

El Problema de la Sociedad o Política

El hombre es un ser social por naturaleza, un zoon politikon. Su sociabilidad está implícita en su esencia, pues posee el logos que le permite comunicarse racionalmente. La sociedad no es producto de la convención, sino que forma parte de la concepción teleológica del ser humano, siendo la polis el fin último de todo desarrollo humano.

La felicidad humana solo se puede conseguir dentro de una sociedad cuyas leyes posibiliten el desarrollo de las virtudes éticas en todos los ciudadanos. Por ello, el legislador debe ser prudente. La Justicia social se da cuando el gobierno no busca intereses particulares y posibilita la realización de la virtud en todos los ciudadanos.

Aristóteles distingue tres formas justas de gobierno, frente a sus respectivas corrupciones:

  • Monarquía (gobierno de uno solo) → Corrupción: Tiranía.
  • Aristocracia (gobierno de los mejores) → Corrupción: Oligarquía.
  • Democracia (gobierno del pueblo, considerada la mejor) → Corrupción: Demagogia.

Edad Media: San Agustín y Santo Tomás

San Agustín: El Problema de Dios, la Realidad y el Conocimiento

Creacionismo y el Mal

San Agustín defiende el Creacionismo: Dios ha creado el mundo y el tiempo ex nihilo (desde la nada). Esta creación se explica mediante la Teoría del Ejemplarismo: Dios realiza los seres concretos a partir de las ideas eternas (arquetipos) que están en su mente divina. Además, Dios depositó en la materia las razones seminales (gérmenes) de todos los seres futuros para que aparecieran progresivamente.

El problema del mal se resuelve considerando que todo lo creado por Dios es bueno. El mal o la imperfección no es algo real, sino carencia de ser o perfección. El mal moral humano es fruto de un bien mayor: la libertad.

Demostración de la Existencia de Dios

Aunque la existencia de Dios está asegurada por la fe, San Agustín ofrece argumentos racionales:

  1. Basado en la perfección, orden y grandeza de la creación.
  2. Basado en el consenso (la mayoría de los hombres creen en Dios).
  3. Basado en el carácter eterno e inmutable de ciertas ideas en nuestra alma, que deben tener como causa un ser eterno e inmutable: Dios.

Tipos de Conocimiento y la Iluminación

San Agustín afirma la existencia de la Verdad. Distingue varios tipos de conocimiento:

  • Conocimiento Sensible: Genera doxa u opinión, es cambiante.
  • Conocimiento Racional Inferior (Ciencia): Conoce lo universal y necesario relativo a las cosas temporales.
  • Conocimiento Racional Superior (Filosofía o Sabiduría): Posibilita el conocimiento de verdades eternas, inmutables y necesarias.

Según la teoría de la Iluminación, estas verdades eternas no se descubren por los sentidos, sino que se buscan en la intimidad de la conciencia, donde Dios las ha puesto. El hombre solo puede descubrir la verdad interior gracias a la iluminación divina o espiritual.

Relación entre Razón y Fe

San Agustín aborda la relación entre la Razón (Filosofía) y la Fe (Teología). Para él, no hay rivalidad, sino que ambas deben ayudarse mutuamente, aunque siempre debe predominar la fe. El lema de San Agustín es: Intellige ut credas, crede ut intelligas (comprende para creer y cree para comprender).

San Agustín: El Problema del Ser Humano y la Moral

Dualismo y Facultades del Alma

El ser humano está hecho a imagen y semejanza de Dios, poseyendo vida espiritual. San Agustín defiende el dualismo, afirmando que el hombre se compone de dos sustancias: el cuerpo (materia) y el alma (forma), cuya unión es accidental. El hombre es fundamentalmente un alma inmortal frente a un cuerpo mortal y corruptible.

El alma humana tiene tres facultades que la hacen una única persona:

  • Memoria: Permite unir presente y pasado, creando la identidad personal.
  • Inteligencia: Permite conocer la verdad.
  • Voluntad: Lleva a buscar el amor y la felicidad, que solo se encuentran plenamente en Dios.

Siendo el amor lo fundamental, el alma debe regir el cuerpo para volver a Dios.

Libre Albedrío y Pecado

San Agustín defiende el libre albedrío. La voluntad libre permite pecar (libertinaje) o vivir conforme a la ley de Dios (libertad). Sin embargo, debido al pecado original, el ser humano necesita la gracia, dada por Dios, para obrar correctamente. Una acción humana se juzga por la intención que la guía: si es conforme a la ley de Dios, será buena.

El mal moral es fruto del abuso del libre albedrío, por lo que el ser humano es responsable del pecado. La voluntad humana tiende a la felicidad, fin supremo que solo se consigue en la otra vida, con la contemplación y amor de Dios.

Santo Tomás: El Problema de la Sociedad o Política

Para Santo Tomás, el hombre es un ser social por naturaleza. El desarrollo de la esencia humana sigue la Ley Natural dada por Dios. Los preceptos de la ley natural son generales y deben ser concretados mediante la ley positiva (leyes que rigen una sociedad concreta).

Las leyes positivas son convencionales y deben ser una prolongación de la ley natural; si no la respetan, son injustas y existe el derecho a desobedecerlas. La búsqueda de la justicia es el punto de unión entre la moral y el derecho.

Las mejores formas de gobierno, siempre que respeten la ley natural, son la Monarquía, la Aristocracia y la Democracia.

Edad Moderna: Racionalismo, Empirismo e Ilustración

Descartes: El Problema de la Realidad y el Conocimiento (Racionalismo)

Descartes, fundador de la Filosofía Moderna y principal pensador del Racionalismo, considera a la Razón como única fuente de conocimiento verdadero. Su prioridad es buscar un conocimiento cierto y seguro mediante un método compatible con la forma de pensar de la Razón humana.

Modos de Conocimiento y Reglas del Método

En la Razón se distinguen dos modos de conocimiento seguros:

  • Intuición o Luz Natural: Conocimiento de ideas simples, claras y distintas, cuya verdad es evidente e indudable.
  • Deducción: Conocimiento de una sucesión de intuiciones para llegar a verdades complejas.

El método debe cumplir cuatro reglas:

  1. Evidencia: Aceptar como verdadero solo aquello que se muestra de forma clara y evidente.
  2. Análisis: Dividir las ideas complejas hasta llegar a las ideas simples y evidentes.
  3. Síntesis: Construir las verdades complejas a partir de lo ya intuido.
  4. Enumeración: Revisar los pasos anteriores para asegurar su correcta aplicación.

La Duda Metódica y el Cogito

Descartes aplica la duda metódica para buscar una verdad indudable:

  • Primera Duda: Duda del conocimiento sensible.
  • Segunda Duda: Duda de la existencia de la realidad extramental (imposibilidad de distinguir vigilia y sueño).
  • Tercera Duda: Duda del conocimiento racional (hipótesis del genio maligno).

Sin embargo, no se puede dudar que se duda. La primera intuición de una verdad indudable es: Pienso, luego existo (cogito ergo sum). Si existo, lo hago como un yo pensante, un cogito, afirmando la existencia de la sustancia pensante como primera verdad.

Tipos de Ideas y Sustancias

El cogito piensa ideas que se dividen en:

  • Adventicias: Parecen provenir del exterior.
  • Facticias: Construidas por la mente a partir de otras ideas.
  • Innatas: Aquellas que la razón tiene en sí misma.

Tras demostrar la existencia de Dios, Descartes afirma la existencia de tres sustancias (aquello que existe independientemente de cualquier otro ser):

  1. Sustancia Pensante (el cogito).
  2. Sustancia Infinita (Dios).
  3. Sustancia Extensa (realidad exterior).

En sentido estricto, solo Dios es sustancia, pero el cogito y la realidad exterior son independientes entre sí y por ello también son consideradas sustancias.

Descartes: El Problema de Dios

Entre las ideas innatas se encuentra la idea de Infinito, que Descartes identifica con Dios. Esta idea posee la mayor realidad objetiva (cualidades y características) e incluye las máximas perfecciones. Dado que la idea de Infinito no puede ser adventicia ni facticia, tiene que ser innata.

Descartes aplica el principio de causalidad: la causa de una idea debe tener una realidad formal igual o mayor que la realidad objetiva del efecto. La idea de infinito no puede haber sido causada por un ser finito, por lo que ha tenido que ser causada por un ser real que es infinito. Por ello, Dios existe como sustancia infinita.

Además, defiende una variante del Argumento Ontológico: el concepto de Dios, al implicar todas las perfecciones, necesariamente conlleva la afirmación de su existencia. Dios, la sustancia infinita, es infinito, omnisciente, perfecto y bueno.

La existencia de Dios es la garantía de que a nuestras ideas sobre el mundo exterior les corresponde una realidad extramental, pues Dios es bueno y no nos engaña. La sustancia extensa es concebida a través del Mecanicismo, como si fuera una máquina.

Rousseau: El Problema del Ser Humano

Rousseau establece una diferencia fundamental entre el hombre natural y el hombre social.

El Hombre Natural (Mito del Buen Salvaje)

El hombre natural vive en el estado de naturaleza (época hipotética). Era bueno y feliz, independiente, con un sano amor hacia sí (amour de soi) que no implicaba buscar el mal de los otros, hacia los que sentía compasión. Mantenía sentimientos puros y una relación directa con la naturaleza.

El Hombre Social y la Corrupción

El hombre social vive en el estado de sociedad o estado cultural (real). En este estado, el hombre no es feliz ni bueno, sino que está llevado por un egoísmo malsano. La cultura y el progreso no han hecho al ser humano más feliz, sino más desigual, injusto y profundamente infeliz. Cultura y progreso actúan como elementos que han corrompido a los hombres.

Hume: El Problema de la Moral o la Ética (Emotivismo)

Crítica a la Razón Moral

Hume critica las teorías éticas anteriores que basan la moral en la razón. Afirma que los juicios morales no son producto de la razón, pues:

  • No proceden del conocimiento de relaciones entre ideas (no son juicios analíticos a priori).
  • No proceden del conocimiento de cuestiones de hecho (no describen una realidad, sino que la juzgan, produciendo un juicio de valor del que es imposible tener impresión).

La razón puede clarificar la utilidad de las acciones, pero no puede impulsarnos o motivarnos a realizarlas. Por lo tanto, la moral no se fundamenta en la razón.

El Emotivismo Moral

Hume defiende el emotivismo moral, según el cual el fundamento de la moral reside en el sentimiento moral, una emoción o “gusto” interior que brota del sujeto y expresa agrado o desagrado ante las acciones. Esta emoción moral es universal y común a todas las personas debido a la universalidad de la naturaleza humana.

Este sentimiento moral se basa en dos principios:

  1. Utilidad: Depende de la expectativa de placer que una acción puede ocasionar. Las acciones que procuran más placer se califican como buenas (criterios pragmáticos).
  2. Simpatía: Inclinación que todos los seres humanos poseen a participar de los sentimientos e inclinaciones de los otros, lo que nos lleva a obrar moralmente buscando la felicidad ajena.

La moral humana no es un frío cálculo racional ni un puro sentimiento, sino que ambos factores se interrelacionan, garantizando que el sentimiento moral no sea individual ni egoísta, y que la moral se constituya desde un sentimiento característico de la humanidad, siendo universal.

Rousseau: El Problema de la Sociedad o la Política

La sociedad corrompe al hombre, pero Rousseau es consciente de que no se puede volver a un estado primitivo. Es necesario analizar la sociedad actual para reformarla y crear una comunidad que haga felices a los hombres.

Origen del Mal Social y la Desigualdad

Para Rousseau, el origen del mal en la sociedad es la desigualdad, fruto de la propiedad privada. Su surgimiento produjo que los hombres fueran socialmente desiguales, atesorando privilegios y fomentando el egoísmo, la codicia y el enfrentamiento. La sociedad actual es injusta e impide la realización plena de los seres humanos.

El Contrato Social y la Voluntad General

Rousseau propone un Contrato Social para establecer las bases de una sociedad justa y legítima, armonizando libertad, igualdad y poder político. En este pacto, el pueblo es el soberano.

La soberanía popular se expresa en la Voluntad General, que no es la suma de intereses egoístas individuales (Voluntad de Todos), sino el interés social común del sujeto colectivo. Con el Contrato Social, el individuo renuncia a sus egoísmos personales para someterse a las leyes establecidas desde la Voluntad General, asegurando así la igualdad y libertad de todos los ciudadanos.

La Educación

La educación es fundamental para la nueva sociedad, ya que interesa tanto a los padres como al Estado para formar al hombre y al ciudadano. En su obra Emilio, Rousseau considera que los niños deben ser instruidos desde la libertad, huyendo del academicismo y buscando abrir su mente a la curiosidad a través del contacto con la naturaleza. La finalidad última es formar buenos ciudadanos y contribuir a la mejora social.

De esta forma, los seres humanos pueden entrar en un nuevo estado, una sociedad racional y libre donde se erradicará el mal moral y la injusticia, permitiendo que cada uno alcance su felicidad y plena realización.

Edad Contemporánea: Nietzsche y Marx

Nietzsche: El Problema de la Realidad y el Conocimiento

Crítica a la Metafísica Tradicional y la Voluntad de Verdad

Nietzsche critica la metafísica tradicional (surgida con Platón) por considerar la realidad como algo estático, fijo e inmutable (las esencias). La invención de una “realidad verdadera y superior” es producto del resentimiento y temor de los filósofos hacia la vida tal y como es. Este impulso contra la vida es la Voluntad de Verdad, que utiliza la razón para afirmar la supremacía de lo estático, vengándose del devenir de la realidad.

El Devenir y el Perspectivismo

Frente a esto, Nietzsche afirma la realidad como devenir sin finalidad ni meta. Esta realidad cambiante y múltiple se presenta al ser humano a través de perspectivas, propias de cada momento de la vida individual. No existe una perspectiva verdadera, y la Voluntad de Verdad, que pretendía una verdad absoluta, es falsa.

La Voluntad de Poder

Nietzsche defiende la Voluntad de Poder, que implica asumir y enfrentarse a la realidad cambiante, afirmando una perspectiva individual de forma temporal para vivir más plenamente. Con la Voluntad de Poder se reconoce la inexistencia de la verdad, admitiendo la elección de una perspectiva entre las múltiples posibles para potenciar la propia vida.

Conceptos como Metáforas

Desde la Voluntad de Poder, los conceptos no son más que metáforas. Estas metáforas se generan a través de un proceso que nos aleja del original (la cosa real individual):

  1. La imagen mental (primera metáfora).
  2. La palabra (metáfora de la primera metáfora).
  3. El concepto universal (establecido por convención social y utilidad, olvidando su origen metafórico).

Las ideas más abstractas son las metáforas más alejadas de la realidad. La filosofía, al tratar los conceptos abstractos, llama “verdad” a lo más alejado de la realidad. El criterio de verdad es la Voluntad de Poder: solo se considerará “verdad” aquello que favorezca a la vida. Se exalta el poder de la metáfora como una perspectiva que ayuda a vivir plenamente.

Nietzsche: El Problema de Dios, el Ser Humano y la Moral

El Hombre como Puente hacia el Superhombre

Nietzsche tiene una visión pesimista del hombre, un animal débil que se cree el centro de la naturaleza. El ser humano es solo un puente hacia el Superhombre, aquel que tiene Voluntad de Poder, no de verdad.

La Moral de los Esclavos y la Muerte de Dios

El hombre débil sigue la moral tradicional o de los esclavos, basada en la resignación y el rechazo a la vida (antinatural). Su fundamento ha sido Dios, o la Razón entendida como un dios por la Voluntad de Verdad. Dios es el gran enemigo frente al surgimiento del Superhombre.

Para que el Superhombre pueda surgir y afirmar absolutamente la vida, es necesario acabar con Dios y con la Voluntad de Verdad que este representa. Dios ha muerto en la época moderna, lo que provoca el derrumbe de todos los valores tradicionales, surgiendo el nihilismo.

  • Nihilismo Negativo: Caída en la pasividad y el sinsentido.
  • Nihilismo Positivo: Oportunidad para la transmutación de los valores y el surgimiento del Superhombre.

La Transmutación de los Valores y el Superhombre

La transmutación de los valores implica cambiar radicalmente la forma de valorar, ya no desde el resentimiento, sino desde la Voluntad de Poder, potenciando los instintos vitales. Esta transmutación será realizada por el Superhombre, un ser fuerte, instintivo, destructor y creador constante que acepta lo trágico de la vida.

La evolución del espíritu hasta el Superhombre pasa por tres estadios:

  1. El Camello: Asume su deber racional.
  2. El León: El nihilista que se rebela, pero es incapaz de crear nuevos valores.
  3. El Niño o el Bailarín: Representación del Superhombre, que hace de la vida un juego y una creación artística.

El Superhombre admite la vida como un Eterno Retorno, rechaza la moral del esclavo y la conducta gregaria, y es un creador constante de nuevos valores, haciendo de su vida su propia obra de arte.

Marx: El Problema de la Realidad y la Sociedad (Materialismo Histórico)

Materialismo Histórico y Estructura Social

Para Marx, la realidad se construye y fundamenta en la relación dialéctica entre el ser humano y la naturaleza, realizada en un proceso de producción histórico-social. La realidad es la realidad social, estudiada por el Materialismo Histórico.

Toda sociedad se compone de una estructura básica:

  • Base Económica: Modo en que se organiza la producción material.
  • Superestructura: Conjunto de leyes, ideas y costumbres (cultura) que surge de dicha forma de producción.

La relación entre ambas es dialéctica, influyéndose mutuamente.

Contradicciones e Ideología

La base económica puede cambiar cuando surgen contradicciones (negatividad surgida del sistema) que exigen su superación racional y se traducen en condiciones necesarias para la revolución (objetivas y subjetivas).

Frente a la toma de conciencia de la injusticia, la superestructura genera la Ideología, una falsa conciencia que justifica y busca mantener la realidad tal y como es, impidiendo su transformación. Una forma importante de Ideología es la religión, que produce alienación religiosa: el ser humano pone en Dios aquello que él mismo debería ser y realizar, encontrando consuelo sin intentar cambiar este mundo. La religión es el “opio del pueblo” porque impide tomar conciencia de la necesaria transformación.

Capitalismo y Alienación en el Trabajo

Marx analiza el Capitalismo, afirmando que en él el ser humano no puede desarrollar libremente su praxis. La sociedad capitalista se divide en burguesía (propietaria de los medios de producción) y proletariado (solo posee su fuerza de trabajo). Se da la explotación de una clase sobre otra, lo que genera la lucha de clases.

Esta explotación se fundamenta en la Alienación en el trabajo. El valor del producto realizado por el trabajador no le pertenece, sino que beneficia al capitalista (plusvalía). La praxis del trabajador es utilizada como un “medio” para conseguir un beneficio, y no para crear un mundo más humano. La Alienación se produce porque la capacidad de transformación del mundo del trabajador no sirve para humanizarlo, sino para mantener el capitalismo y su propia explotación.

La Revolución y la Praxis

Es necesaria la Revolución para superar el capitalismo y la sociedad de clases. El interés del proletariado es universal, pues al liberarse a sí mismo, libera a todos. Para ello, el proletariado debe adquirir una conciencia de clase, superando la Ideología dominante. Con la revolución, los medios de producción serán socializados, comenzando la verdadera historia de la humanidad, donde los sujetos podrán desarrollar su praxis y ser realmente libres.

Marx: El Problema del Conocimiento y el Ser Humano

Para Marx, el auténtico conocimiento es la praxis, la actividad teórico-práctica a través de la cual el ser humano transforma la realidad. La praxis sigue un proceso dialéctico que implica utilizar el entendimiento (actividad teórica) para transformar racionalmente la realidad, y luego aplicar la sensibilidad activa (actividad práctica) para realizar esa racionalidad de forma concreta. Solo se podrá afirmar la verdad de lo pensado cuando se haya realizado en el mundo (“Los filósofos no han hecho más que interpretar de diversos modos el mundo, pero de lo que se trata es de transformarlo”).

El ser humano se realiza como tal al transformar la realidad y humanizarla, cumpliendo su praxis. Marx afirma que las relaciones sociales (de esclavitud, explotación, etc.) son relaciones existenciales, pues condicionan concretamente la existencia de cada individuo. Una sociedad será justa si permite a todo ser humano cumplir libremente esta praxis, desarrollando su racionalidad en condiciones de igualdad.