Valle-Inclan y García Lorca

Valle-inclan.

Rechaza el realismo burgués del teatro anterior y propone una total renovación de la escena española. Su producción se divide en: 

1.Mítico: constituido por comedias barbaras, el embrujado y divinas palabras. Se sitúan en una Galicia llena de supersticiones, con personajes falto de moral, donde convive los sobrenatural, lo misterioro y la muerte. De esta etapa es El embrujado. 

2.Farsa: donde se contrapone lo sentimental y lo grotesco para afrontar la realidad y desmitidicar la sociedad tradicional con un lenguaje cada vez más esperpéntico. De esta etapa es Farsa infantil de cabeza. 

3.Esperpento: el esperpento es un nuevo género que nace de una determinada situación histórica e intenta deformar la realidad para ofrecer una imagen grotesca. El esperpento busca una nueva visión del mundo desde una posición crítica que coincide con la protesta contra la sociedad burguesa, ya que muestra sus aspectos más corruptos e inauténticos con una clara intención renovadora de las formas literarias y del lenguaje. Se mezcla lo refinado y pedante con lo vulgar. Predomina la ironía y el sarcasmo con a inteicón de revelar lo absurdo de una sociedas grotesca que vive de las apariencias y desenmascara la corrupción en todos los estamentos sociales y formas de vida del pueblo. Se inicia con Luces de Bohemia y sigue con Martes de Carnaval.

Garcia Lorca. 

Es el dramaturgo español más imprtante que inicia su producción con El maleficio de la mariposa cuyo escaso éxito hace al autor experimentar nuevas fórmulas para acercarse al público. Lorca cree que el teatro debe levantar la sensibilidad del pueblo y en la fuerza del poeta para transformar con palabras la realidad, por eso hay en su producción teatral mucha poesía y sinbolismo. Su teatro es un espectáculo al que contribuyen la escenografía, la danza, todo lo que es capaz de comunicar. Su producción se clasifica en: 
1. Farsas: donde funde lo lírico y lo grotesco. De esta etapa es La zapatera prodigiosa. 
2. Las comedias imposibles: obras surrealistas y simbólicas dificiles de analizar llamadas  El público y Así que pasen cinco años. 
3. Tragedias de tema social: en las que lleva a escena amores condenados a la soledad o la muerte, casi siempre encarnados en mujeres. Los personajes están frustrados por el tiempo, la muerte y los prejucios. De esta etapa son Mariana Piedra, Bodas de Sangre, Yerma, Doña Rosita la soltera y La casa de Bernarda Alba.