Lírica Barroca Española: Maestros del Siglo de Oro, Góngora y Calderón

La Lírica Barroca: Características y Corrientes

La lírica barroca parte de unos modelos heredados del Renacimiento: el petrarquismo, el género bucólico, formas métricas de origen italiano…

Pero la lírica de esta época aprovecha también aspectos de la poesía popular y tradicional castellana, estando presentes los romances, las canciones o las letrillas.

Este legado es sometido a una profunda renovación. El Renacimiento ahora entiende que la creación debe ser invención y originalidad, y su finalidad es producir asombro en el lector y poner en práctica todos los recursos y artificios de que disponga el poeta.

Este proceso de renovación se desarrolla a través de dos corrientes principales: el Conceptismo y el Culteranismo, representadas por Quevedo y Góngora, respectivamente. Existe una tercera tendencia: el Clasicismo, que tiene como poeta más destacado a Lope de Vega.

La Poesía Culterana: Estilo y Representantes

Este estilo se caracteriza por las alusiones a la mitología, el uso de la metáfora y la presencia de elementos sensoriales; la alteración de la sintaxis con hipérbatos y estructuras latinas; y el uso de cultismos.

Corriente criticada por su acumulación de recursos retóricos; sin embargo, esta tendencia influyó en varios autores de la época. Entre ellos, destacan el Conde de Villamediana o Pedro Soto de Rojas, quienes partieron del petrarquismo y evolucionaron hacia el culteranismo.

Luis de Góngora: El Maestro del Culteranismo

Vida y Trayectoria

Nació en 1561 y murió en 1627.

Perteneció a una familia acomodada de Córdoba y creció en un ambiente de interés por la cultura y los libros. Estudió Derecho en Salamanca y en 1615 se trasladó a Madrid. Fue capellán real y conoció la vida de la corte con sus intrigas y su ambición. Estas costumbres cortesanas provocaron en Góngora un profundo desengaño, agravado por lo precario de su situación económica y ciertos problemas de salud, por lo que tuvo que regresar a Córdoba en 1626 y, años más tarde, murió.

Su Poesía: Dos Planos Paralelos

Su poesía se caracteriza por llevar al extremo los rasgos culteranos, de forma que se llegó a acuñar el término gongorismo para designar una modalidad más compleja y retorcida del culteranismo. Podría hablarse de un doble Góngora, pues en la trayectoria del poeta se aprecian dos planos paralelos: el de una poesía más accesible (la poesía popular) y el de su producción más hermética (poesía culterana).

Atendiendo a la temática, vemos en este poeta una vertiente entusiasta y vital, y otra escéptica y pesimista. Estas dos vertientes se alternan en paralelo a lo largo de la trayectoria del escritor.

Poesía Popular

Retoma la métrica tradicional castellana (letrillas, romances o décimas) para abordar diversos temas: amorosos, burlescos o mitológicos.

Destacan los romances, que abarcan distintas modalidades (pastoril, caballeresca o amorosa), y en cuya estructura se utiliza con frecuencia el estribillo.

Los Sonetos

Escribió numerosos sonetos de distintos temas: amorosos, satíricos, de circunstancias, morales.

Obra Culterana: Polifemo y Soledades

En 1613, Góngora provoca una polémica literaria en su época cuando da a conocer estas dos obras, de marcada estética culterana. Por una parte, están los defensores del estilo intrincado y complejo que define estos libros; por otra, quienes consideran que este estilo es pedante y corrompe el idioma con sus excesos retóricos.

La Fábula de Polifemo y Galatea

Es un poema narrativo escrito en octavas reales, que recrea el mito del monstruoso cíclope Polifemo y la hermosa ninfa Galatea.

Góngora se inspira en las Metamorfosis de Ovidio: Polifemo, enamorado de Galatea, le declara su pasión, pero ella ama a un pastor, Acis. El gigante le hace mil promesas y halagos a Galatea, pero al ser rechazado, asesina a Acis aplastándolo con una piedra. Su sangre es transformada en agua de río por los dioses.

El Polifemo encierra las características de la poesía gongorina: acumulación de recursos expresivos (hipérbatos, metáforas), léxico sensorial y colorista, cultismos y sintaxis latina.

Las Soledades

Poema escrito en silvas que consta de dos partes: Soledad I y Soledad II.

El poema narra la historia de un náufrago que, tras sufrir un desengaño amoroso, llega a una costa donde es acogido por unos pastores. Tiene la oportunidad de comenzar una nueva vida en el campo, lejos de las intrigas de la corte. Así, la defensa de la vida en la naturaleza, sencilla y sincera frente a la falsedad del ambiente urbano, es el tema central de la obra.

El estilo, como en el Polifemo, se caracteriza por los rasgos culteranos y por la frecuencia de las alusiones mitológicas.

Calderón de la Barca: El Dramaturgo Filosófico

Vida y Contexto

Pedro Calderón de la Barca nació en Madrid en 1600 y murió en 1681.

Características de su Teatro

  • Destaca la presencia de lo ideológico y lo filosófico, personajes concebidos a veces como símbolos, y el gusto por la escenografía y la tramoya.
  • En su estilo, se siente mayor preocupación por la forma, lo que lo hace adentrarse en los terrenos del Culteranismo y del Conceptismo.
  • También destaca la presencia del monólogo, en el que el protagonista expresa sus sentimientos, pensamientos y pasiones, y presenta un tono más reflexivo con respecto a Lope de Vega.

Clasificación de su Obra

Se conservan en torno a 120 comedias y 80 autos sacramentales, que pueden clasificarse con arreglo a los siguientes criterios:

  • Dramas de honor: Se observa toda la crudeza del código de honor y aporta posibilidades dramáticas a causa de sus leyes rigurosas.
    • Destacan: El médico de su honra o la comedia El alcalde de Zalamea.
  • Comedias de enredo: Es el grupo más numeroso de su obra y se caracteriza por la presencia de situaciones de capa y espada con enredos y ambiente urbano, en el que es importante el protagonismo femenino, ya que sustentan la trama y provocan el enredo.
    • Destaca: La dama duende.
  • Obras de tema religioso: Tratan asuntos bíblicos y de reflexión sobre los dogmas y la fe.
    • Destacan: El príncipe constante, La devoción de la cruz.
  • Dramas filosóficos: La reflexión sobre temas trascendentales.
    • Destacan: La hija del aire, La vida es sueño (que trata sobre el sentido de la existencia humana).
  • Autos sacramentales: Calderón se mostró muy prolífico y les dio un gran rigor teológico. Los definió como “sermones puestos en versos”.
    • Destaca: El gran teatro del mundo.

También escribió algunas piezas de teatro breve, como entremeses, jácaras y mojigangas. Estas últimas servían para complementar los autos sacramentales en la festividad del Corpus Christi.

Cultivó la comedia musical, que estuvo ligada a las representaciones que se hacían en el Palacio ante los Reyes y nobles. Estas fiestas se llamaron de la Zarzuela, por el Palacio en que tenían lugar, de donde pasaron a llamarse zarzuelas. Entre las que escribió se encuentra:

La vida es sueño: Obra Cumbre

Es el drama filosófico más intenso de la literatura barroca, en el que se plantea la idea de la vida como un sueño, marcada por el pesimismo, donde la existencia humana era algo inconsciente.

Su rasgo característico es la doble acción que ofrece la obra: una se centra en la figura de Segismundo; la otra, en la de Rosaura y la defensa de su honor.

Argumento de La vida es sueño

El rey de Polonia encierra a su hijo Segismundo en una torre cuando los astrólogos predijeron que se convertiría en un malvado tirano. Para ponerlo a prueba, el rey lo saca narcotizado de su encierro y lo lleva al Palacio, donde su comportamiento es violento, por lo que, de nuevo narcotizado, es devuelto a la torre. Cuando Segismundo despierta, cree haber soñado su estancia en el Palacio, lo que le produce una confusión entre la vida y el sueño. Cuando se convirtió en rey, perdonó a quienes no lo trataron bien. La acción secundaria muestra a Rosaura en busca de Astolfo, quien la deshonró. Clotaldo, padre de la dama, es el ayo de Segismundo.

El tema del libre albedrío había enfrentado a los filósofos y los teólogos, quienes se planteaban hasta qué punto el ser humano es libre de decidir su destino si Dios lo tiene ya prefijado.

Segismundo es privado de su libertad, pero al final él muestra con su elección del bien que el hombre tiene la capacidad para escoger ese destino personal. Según los teólogos católicos, el ser humano está dotado con la gracia de Dios para tomar el camino del bien.