La Novela Española desde los Años 70 hasta la Actualidad
Contexto: La Transición a la Democracia
La muerte del dictador Francisco Franco en 1975 y la proclamación de Juan Carlos I como rey de España pusieron en marcha un crucial proceso de democratización. En este periodo se reconocieron libertades fundamentales, como la de expresión y asociación, al mismo tiempo que se suprimió la censura. Con la llegada de la democracia, el panorama de la narrativa española se diversificó notablemente. La novela presentó diferentes tendencias, dividiéndose en distintos tipos.
Tendencias y Tipos de Novela
Las características generales de la novela en la narrativa actual incluyen: la recuperación de la importancia de la trama, la mezcla de géneros, el uso de la historia como materia de ficción, la memoria como parte integrante de la ficción, y el reflejo de la crisis de valores de la sociedad española y la crisis de identidad del individuo.
Novela Policiaca
Sus características principales son:
- Plantea un caso que incluye asesinatos y violencia.
- La figura del detective se presenta como un individuo complejo e irónico.
- Incorpora elementos de la investigación, una ambientación predominantemente urbana.
- Uso de la primera persona, a menudo combinada con otros puntos de vista narrativos.
Entre sus autores destacan:
- Eduardo Mendoza, con la publicación de La verdad sobre el caso Savolta.
- Manuel Vázquez Montalbán, quien creó la saga en torno al detective Pepe Carvalho, destacando con su obra Los mares del Sur.
- Antonio Muñoz Molina, con su obra El invierno en Lisboa.
Novela Poemática
Combina elementos de la narración con la poesía. Sus características son:
- Uso de la primera persona, a menudo a través del monólogo interior.
- Profunda caracterización psicológica de los personajes.
- La trama suele tener un papel secundario, destacando una cadencia musical en la construcción oracional.
Autores destacados incluyen a:
- Juan Benet con Saúl ante Samuel.
- Julio Llamazares con La lluvia amarilla.
Novela Histórica
Combina una base histórica bien documentada con elementos ficticios introducidos por el autor. Destacan entre sus autores:
- Julio Llamazares con su obra Luna de lobos.
- Miguel Delibes con su obra El hereje.
- Arturo Pérez-Reverte con la saga de El capitán Alatriste.
- Carlos Ruiz Zafón con La sombra del viento.
- Juan Eslava Galán con En busca del unicornio.
Novela de Memorias
Sus características son:
- Combinación de vivencias autobiográficas y elementos ficticios.
- Profunda introspección en los personajes, que presentan un mundo interior complejo.
- Los protagonistas suelen ser vulnerables y realizan reflexiones existenciales.
- Se mezcla con otros subgéneros novelescos como la novela reflexiva o la metanovela.
Autores destacados son:
- Terenci Moix con El peso de la paja.
- Carmen Martín Gaite con El cuarto de atrás.
Novela de Testimonio
Ambientada en momentos de la historia reciente de España. Sus características incluyen:
- Reconstrucción de las costumbres de la época y, a menudo, un enfoque en la vida urbana.
- Cuestionamiento de las conductas y actitudes morales impuestas por la sociedad.
- Posee un carácter crítico con la sociedad retratada, reflejando la situación de ciertos grupos sociales como los afectados por la crisis, las mujeres y los jóvenes.
Autores destacados:
- Rafael Chirbes con su obra Crematorio.
- Rosa Montero con Te trataré como a una reina.
- Almudena Grandes con Malena es un nombre de tango.
Otros Subgéneros y Tendencias
Novela Reflexiva
Prosa en la que la narración compite con el pensamiento y la reflexión. Suele tener un corte filosófico, abordando temas como la verdad, el paso del tiempo, la muerte, el azar o el fracaso de las relaciones amorosas. Destacan autores como:
- Javier Marías con Corazón tan blanco.
- Juan José Millás con El desorden de tu nombre.
Metanovela
Este subgénero, que no suele darse de manera pura sino mezclado con otras modalidades, se caracteriza porque el discurso no solo cuenta una historia, sino que también reflexiona sobre el propio proceso de narración. Destacan autores como:
- Carmen Martín Gaite con El cuarto de atrás.
- Camilo José Cela con Mazurca para dos muertos.
La Novela Española desde 1939 hasta los Años 70
Contexto Histórico y Cultural
Política y socialmente, fue un periodo de grandes convulsiones. España seguía siendo un país predominantemente agrario y atrasado, aunque comenzaba a experimentar cierto despliegue industrial. Esto conllevó a agudos conflictos sociales entre la burguesía y el proletariado. En este periodo, la influencia de filósofos como Schopenhauer o Nietzsche acentuó el pesimismo y la desorientación vital.
Características Generales de la Novela del Periodo
Tanto para la novela como para los demás géneros literarios, la Guerra Civil (1936-1939) supuso una fractura total con la tradición literaria anterior. Las nuevas condiciones políticas, sociales e ideológicas determinaron profundamente las obras de esta época.
Evolución por Décadas y Corrientes
Novelistas en el Exilio
Esta corriente se caracteriza por:
- El recuerdo persistente de España y la Guerra Civil.
- La presencia de los nuevos lugares de exilio.
- La reflexión sobre temas universales que afectan a la naturaleza y existencia del ser humano.
- La crítica a las clases dirigentes.
- El uso frecuente de un narrador externo en tercera persona.
Autores destacados:
- Ramón J. Sender: Gran parte de su obra se centra en el tema de España y la Guerra Civil. Destaca Crónica del alba.
- Max Aub: Escritor comprometido con los desfavorecidos. Sus obras sobre la Guerra Civil se agrupan en ciclos novelísticos como El laberinto mágico.
- Rosa Chacel: Sus novelas están influidas por las ideas de Ortega y Gasset. Destaca Memorias de Leticia Valle.
- Francisco Ayala: Critica los regímenes opresivos. Destaca Los usurpadores.
Novela Desarraigada (Años 40)
Aborda el tema de España, pero generalmente sin una crítica social o política directa, centrándose en la angustia vital. Se divide en dos tendencias principales:
Tremendismo
Busca reflejar la vida en sus aspectos más crudos y sórdidos, con personajes violentos o marginales, a menudo como reflejo de las vivencias de la Guerra Civil. Se caracteriza por descripciones detalladas y, frecuentemente, un narrador interno en primera persona. El máximo exponente es Camilo José Cela con La familia de Pascual Duarte, obra que se recrea en los aspectos más desagradables y violentos de una realidad miserable de la que el protagonista no puede escapar.
Novela Existencial
Refleja el clima de miseria y angustia de la primera posguerra. Los personajes se muestran disconformes con el mundo que les ha tocado vivir, adoptando una actitud pesimista. Destaca Carmen Laforet con Nada, un retrato de la burguesía catalana en la posguerra.
Década de los 50: Novela Social (Realismo Social)
Su objetivo principal es reflejar la realidad española de la época con una clara intención de denunciar las injusticias sociales. Características principales:
- Temas centrados en lo cotidiano, la soledad y la incomunicación.
- Predominio de la sencillez en el lenguaje.
- Abundancia de diálogos, especialmente en estilo directo.
- La acción suele concentrarse en pocos escenarios y en un breve lapso temporal.
Autores y obras representativas:
- Miguel Delibes: Con El camino, muestra la oposición entre los habitantes del pueblo castellano y las clases medias urbanas.
- Gonzalo Torrente Ballester: Con su trilogía Los gozos y las sombras, analiza la sociedad gallega de preguerra.
- Camilo José Cela: En La colmena, retrata la dura realidad de la posguerra madrileña de 1943, con múltiples personajes cuyas vidas se entrecruzan.
- Carmen Martín Gaite: Profundiza en el análisis de la condición femenina en Entre visillos.
- Ana María Matute: Explora un mundo marcado por la guerra desde una perspectiva infantil en obras como Los niños tontos.
- Rafael Sánchez Ferlosio: Con El Jarama, ofrece un retrato de una juventud condicionada por las circunstancias sociales.
La Novela de los Años 60: Renovación Formal
Las técnicas narrativas de esta década se caracterizan por una profunda renovación:
- Narración desde múltiples perspectivas (varios narradores).
- Uso extendido del monólogo interior.
- Desorden cronológico y saltos temporales.
- Incorporación de lo imaginativo y lo irracional.
- Protagonista a menudo en conflicto con su entorno y consigo mismo, en busca de su identidad.
- Utilización de distintos registros lingüísticos.
- Inclusión de elementos ajenos a lo estrictamente narrativo (ensayísticos, poéticos, etc.).
Luis Martín-Santos inaugura esta nueva etapa narrativa con Tiempo de silencio. A esta corriente se incorporan otros autores:
- Miguel Delibes: Con Cinco horas con Mario, un extenso monólogo que combina la primera y segunda persona narrativa.
- Gonzalo Torrente Ballester: Con La saga/fuga de J.B., que relata las peripecias de una serie de personajes de distintas épocas, todos con las iniciales J.B.
- Juan Goytisolo: Con Señas de identidad, donde ataca la realidad de la España tradicional y conservadora a través de la parodia.
- Juan Benet: Con Volverás a Región, una novela experimental en torno a un espacio mítico e imaginario.
- Juan Marsé: Con Últimas tardes con Teresa, una sátira de las diferencias de clase.
La Novela de los Años 70: Transición y Diversidad
Inicialmente, los escritores de este periodo continúan la senda experimental de los años 60. No obstante, pronto se observa una evolución hacia:
- Un cierto cansancio del formalismo extremo.
- Un retorno a aspectos de la novela tradicional (como la importancia de la trama).
- La recuperación de géneros considerados marginales (policiaco, histórico, etc.).
- Un predominio de temas relacionados con preocupaciones existenciales y sentimientos íntimos.
Autores destacados de esta transición:
- Eduardo Mendoza: Con La verdad sobre el caso Savolta, que marca un punto de inflexión.
- Luis Goytisolo: Quien publica su tetralogía Antagonía.
- Manuel Vázquez Montalbán: Cultivador del género policiaco con obras como Los mares del Sur.
- Francisco Umbral: Con una prosa muy personal que mezcla géneros, destacando obras como Mortal y rosa.