El Teatro de la Generación del 27: Federico García Lorca y Otros Autores
La creación dramática de la Generación del 27 se caracteriza por tres facetas principales que, en ocasiones, pueden coincidir. El ejemplo máximo de esta confluencia es Federico García Lorca.
Facetas Clave en la Creación Dramática
- Depuración del teatro poético: Búsqueda de una expresión lírica y profunda en la escena.
- Incorporación de las formas de vanguardia: Experimentación con nuevas estructuras y lenguajes escénicos.
- Propósito de acercar el teatro al pueblo: Voluntad de crear un teatro accesible y relevante para la sociedad.
Autores Destacados de la Generación del 27
- Pedro Salinas: Apenas corresponde con el período. Una obra destacada es Judit y el tirano. Pocas obras suyas fueron representadas, a pesar de poseer grandes cualidades.
- Rafael Alberti: Se inició como autor de vanguardia con El hombre deshabitado (1930). Pero en el exilio cultivó otras líneas dramáticas.
- Miguel Hernández: Tras un admirable auto sacramental, Quien te ha visto y quien te ve y sombra de lo que eras (1934), pasó a cultivar el teatro social, aunque ese mismo año se entregó a un teatro de combate, con menos preocupaciones estéticas, como Pastor de la muerte.
- Alejandro Casona: Dramaturgo puro, galardonado con el Premio Lope de Vega (1934) por La sirena varada.
- Max Aub: Entre 1923 y 1935 escribió comedias de vanguardia, siendo pionero de la revolución escénica. Durante la Guerra Civil contribuyó al teatro político, pero sus obras más importantes surgieron tras el exilio, con dramas sobre el nazismo, la Guerra Mundial y sus secuelas, como Morir por cerrar los ojos.
En 1927, Jardiel Poncela y Mihura iniciaron su carrera teatral, aunque su obra más representativa corresponde a la posguerra.
El Esperpento: Visión Grotesca de la Realidad
El esperpento es una voz que designa lo feo, lo ridículo, lo que se escapa de lo normal, tendiendo a lo grotesco o monstruoso. Se concibe como un subgénero teatral o una visión particular de la realidad contemporánea, propia de Valle-Inclán.
Antecedentes del Esperpento
Sus antecedentes más lejanos se encuentran en Goya (Los Caprichos) y Quevedo (sonetos burlescos). Los más próximos son el teatro expresionista europeo (deformación de la realidad con el propósito de acentuar los aspectos significativos) o la ‘literatura de arrabal’ (obras teatrales breves en las que se parodiaban, con escaso intervalo de tiempo, dramas serios).
Luces de Bohemia: La Teoría del Esperpento
Luces de Bohemia es la primera obra a la que Valle-Inclán da ese nombre y que contiene una teoría explícita del nuevo género. Es el protagonista quien habla de la deformación grotesca de la civilización española, reflejada en los espejos cóncavos de la fachada de la calle del Gato. Se proponen tres modos de ver el mundo:
- Desde abajo: La realidad enaltecida, con héroes superiores.
- Al mismo nivel: Personajes como nuestros hermanos.
- Desde arriba: Personajes como muñecos o peleles.
En el esperpento, los dioses se convierten en personajes de sainete.
Rasgos Esenciales del Esperpento
- Deformación de los personajes: Con rasgos de animalización.
- Deformación de las situaciones: Volviéndolas grotescas o absurdas mediante la técnica del contraste (doloroso-grotesco; elevado-ridículo).
- Tipo de humor: Mordacidad, risa agria que sirve a los españoles de consuelo ‘del hambre y de los malos gobernantes’. Para Valle-Inclán, es una forma de ataque demoledor.
- Lenguaje: Asombra su riqueza y la variedad de registros utilizados. Se observa un lenguaje pedante o cursi, uso paródico de frases literarias, intención crítica, desgarro coloquial, vulgarismos y habla madrileña castiza, lo que demuestra un gran arte del diálogo.
- Acotaciones: Destaca el arte de las acotaciones, de carácter literario y con una calidad pictórica en el escenario, tanto en los bocetos de los personajes como en la descripción de actitudes.
En resumen, los rasgos esenciales del esperpento son la deformación, la impasibilidad y el distanciamiento.
Ramón María del Valle-Inclán: Vida y Obra Dramática
Biografía y Formación
Nacido en Pontevedra (1866), estudió Derecho, pero antes de finalizar la carrera se trasladó a México, donde asimiló el Modernismo. A su regreso, llevó una vida bohemia en Madrid y fue autodidacta. En este período se fue conformando su sensibilidad literaria. Llamó la atención por su profunda rebeldía ante la vulgaridad de la sociedad moderna. Se casó en 1907, tuvo hijos, fue nombrado director de la Academia Española de Roma y murió de cáncer en Compostela en 1936.
Trayectoria Ideológica y Literaria
Valle-Inclán evolucionó desde un conservadurismo inicial hacia un compromiso social extremo con los más débiles y maltratados, lo cual se hace evidente en Luces de Bohemia. Era profundamente antiburgués, y su obra fue una evolución constante. Como autor de teatro, su obra es una de las muestras literarias más sugestivas por su novedad artística y su compromiso personal, mostrando una evolución compleja desde las corrientes modernistas al esperpento. Su singular evolución va de un Modernismo elegante y nostálgico a una literatura crítica basada en una feroz distorsión de la realidad. Se distinguen 5 períodos:
Períodos de la Obra Dramática de Valle-Inclán
- Ciclo Modernista: Representado por las Sonatas (1902-1905), protagonizadas por el Marqués de Bradomín, basadas en el modernismo de Rubén Darío.
- Ciclo Mítico: Partiendo de Galicia, crea un mundo mítico e intemporal cuyos personajes se mueven por el mal. Destaca Divinas palabras.
- Ciclo de la Farsa: Grupo de comedias recogidas en Tablado de marionetas para educación de príncipes (1909, 1912, 1920), donde contrasta lo sentimental y lo grotesco, con personajes que actúan como marionetas.
- Luces de Bohemia (Esperpento): Representa una nueva forma de ver el mundo, que deforma y distorsiona la realidad. Relata el viaje nocturno de Max Estrella y Don Latino por diferentes sitios de Madrid. Es un viaje tétrico donde se encuentran con todo tipo de personajes. Los protagonistas son representantes del idealismo y del egoísmo, respectivamente. La obra es una dura crítica contra la sociedad y la política del momento.
- Ciclo Final: Última etapa, donde lleva a su extremo las propuestas dramáticas anteriores (presencia de lo irracional e instintivo, personajes deshumanizados, técnica distorsionante del esperpento). Destaca Retablo de la avaricia, la lujuria y la muerte.
La Renovación Teatral Española de Fin de Siglo
El teatro español necesitaba una renovación para estar a la altura del europeo. Sin embargo, en este período se produjo en nuestro país un movimiento teatral poderoso, condicionado por los siguientes factores:
Condiciones del Teatro Español a Principios del Siglo XX
- Abundancia de instalaciones y recintos dedicados al teatro (aunque los medios eran anticuados).
- Fuertes condiciones comerciales: para los empresarios, el teatro era un negocio y tenían en cuenta la opinión del público más potencial, los burgueses.
- El público carecía de formación para apreciar las innovaciones teatrales.
- Mal funcionamiento de las compañías teatrales.
- Aparición del cine como competidor del teatro.
Los autores más innovadores se vieron en el dilema de claudicar o asumir que tendrían pocos lectores. Esto explica que el teatro español hasta la Guerra Civil se divida en dos fases:
El Teatro Español hasta la Guerra Civil: Dos Fases
El Teatro que Triunfa
- La comedia benaventina: Jacinto Benavente (Premio Nobel 1922) y sus seguidores cultivaron una comedia burguesa. Su obra Los intereses creados utiliza el ambiente y personajes de la vieja Commedia dell’arte, pero con la visión de los ideales burgueses. De este autor arranca una línea teatral que se prolongó 30 años con Luca de Tena, Calvo Sotelo, entre otros.
- El teatro en verso: Combinaba rasgos posrománticos con otros de estilo modernista (verso sonoro, efectos coloristas…). Todo esto asociado con una ideología tradicional que, ante la crisis espiritual de la época, respondía exaltando los ideales nobiliarios y los grandes hechos del pasado. Mostraba cierta voluntad de emular el teatro del Siglo de Oro (Villaespesa, Marquina y los hermanos Machado).
- El teatro cómico: Representado fundamentalmente por el sainete (obra breve, cómica y satírica) y la comedia costumbrista, que tuvo gran éxito entre el público. A este grupo pertenecen los hermanos Álvarez Quintero, con comedias hábiles y bien acabadas (que representaban Andalucía de forma positiva, donde los únicos problemas eran los sentimentales), y Carlos Arniches (autor dramático del ‘género chico’ y especializado en el sainete de costumbres madrileñas). Con él surge la tragicomedia en 1910, una propuesta tímida pero interesante, como La señorita de Trevélez.
El Teatro Innovador
Se buscaba una renovación teatral acorde con el teatro universal, pero el ambiente teatral español no estaba a la altura de los autores innovadores. Este teatro quería plantear problemas existenciales o sociales para sacudir la conciencia burguesa. Se distinguen cuatro generaciones de dramaturgos:
- Generación del 98: Unamuno, Azorín y Valle-Inclán.
- Generación del 14: Rivas Cheriff y Jacinto Grau (El señor Pigmalión).
- Generación de Alberti, Salinas y Lorca: Buscaban incorporar la tradición, las vanguardias y la depuración al teatro poético.
- Generación del 36: Teatro posterior a la Guerra Civil, con autores como Hernández, Casona, Jardiel Poncela o Mihura.