La Conquista y Evolución de Al Ándalus

1. La conquista musulmana 711-728

La conquista musulmana de la península ibérica puede explicarse por dos razones. El reino visigodo padecía una profunda crisis por los continuos problemas sucesorios de la monarquía y el ímpetu expansivo del islam. En este contexto, un ejército bereber dirigido por Tarik cruzó el estrecho de Gibraltar en el año 721 como aliado de una facción visigoda tras derrotar al rey don Rodrigo en Guadalete.

1.2 El emirato dependiente 714-756

En al Ándalus se estableció un emirato sometido a la autoridad del califato de Damasco. En el año 750, la dinastía Omega fue depuesta del poder violentamente y una nueva dinastía pasó a dirigir el Califato la Abasí. Uno de sus primeros objetivos fue eliminar a la familia Omeya. Abu al Rahman logró sobrevivir y huyó a al Ándalus, proclamándose emir en 756.

1.3 El emirato independiente 756-929

Los emires ejercieron el poder político y militar de forma autónoma, aunque se siguió respetando la autoridad religiosa del califa de Bagdad.

1.4 El califato 929-1031

Abad al-Rahman se proclamó califa en el año 929, lo que significaba desligarse de la sumisión religiosa y el fin de cualquier dependencia del califato de Bagdad. Los reinos cristianos los logró convertirlos en tributarios y vasallos de Córdoba, convirtiendo a al Ándalus en la potencia hegemónica de la religión. A la muerte de Al Hakam 4 se inició un periodo de pérdida del poder efectivo de los califas. Quien realmente gobernaba el califato era Almanzor, un hachís que concentró gran poder político y militar. Almanzor realizó razias de saqueo contra los cristianos. A la muerte de Almanzor, hubo un periodo de inestabilidad política, y la disgregación política de al Ándalus en 1031.

1.5 Los primeros reinos taifas 1081-1086

La desintegración del califato dio lugar a una veintena de pequeños Estados independientes llamados taifas. Estas se hallaban enfrentadas entre sí y las más pequeñas fueron absorbidas por las más poderosas. Los reinos cristianos aprovecharon esas rivalidades y a cambio de apoyo y protección les obligaron a pagar parias. En 1085, Alfonso V de Castilla ocupó Toledo. Ante el creciente expansionismo cristiano, las principales taifas buscaron la ayuda de los almorávides.

1.6 Los almorávides 1086-1144

Los almorávides eran bereberes del norte de África que profesaban los principios más estrictos del islam. En 1086, los almorávides cruzaron el estrecho de Gibraltar y derrotaron a los cristianos en Sagrajas. Más tarde, en 1089, iniciaron la ocupación de taifas. Los avances cristianos y la impopularidad de las medidas almorávides, como la implantación de impuestos extraordinarios, provocaron revueltas que llevaron a su caída en 1144. Como consecuencia, al Ándalus volvió a fragmentarse en pequeños Estados, los denominados reinos taifas.

1.7 Los almohades 1146-1232

En el siglo XII, algunas taifas pidieron ayuda a los almohades que dominaban el Magreb. La derrota en las Navas de Tolosa en 1212 frente al rey Castellano Alfonso VIII marcó el principio de la decadencia almohade en al Ándalus. La subsiguiente fragmentación del poder político permitió unas terceras taifas.

1.8 El reino nazarí de Granada 1246-1492

La dinastía de los nazaríes mantuvo la independencia de Granada gracias a tres factores: la ayuda de los musulmanes del norte de África, las guerras fronterizas entre Castilla y Aragón, y las frecuentes guerras civiles en Castilla entre el rey y la nobleza. A principios del siglo XV, los problemas necesarios del reino desestabilizaron. Finalmente, los reyes católicos pactaron con el rey Boabdil la rendición de Granada en 1442.

2. La organización del Estado en al Ándalus

2.1 Gobierno y administración

El emir era un gobernador que dependía del califa de Damasco y que contaba con amplios poderes políticos y económicos. La proclamación de Abd al Rahman 111 unía la jefatura religiosa y política. El emir o el califa a menudo delegaba tareas de gobierno en una especie de primer ministro, el hachib, quien controlaba la administración dividida en departamentos llamados divanes que estaban dirigidos por visires. El territorio de al Ándalus estaba dividido en provincias o cazas, cuya capital era la residencia del gobernador o valí. En las zonas fronterizas con los cristianos estaban las marcas, en ellas el valí gozaba de gran poder militar.

2.2 La Hacienda Pública

Entre los impuestos ordinarios destacaban la limosna legal que se aplicaba a los musulmanes. Los mozárabes y los judíos pagaban una tasa personal de capitación.

3. La economía y la sociedad andalusíes

3.1 La economía de al Ándalus

La sociedad andalusí fue urbana y mercantil. La Agricultura: los principales cultivos eran la tríada mediterránea (cereales, vid y olivo). Las zonas más fértiles se localizaban en las vegas de los ríos. Allí se desarrolló el regadío. Se cultivaba arroz, hortalizas, algodón, lino, cítricos. La Ganadería: destacó la ovina y la caballa. La Minería: oro, plata, hierro. La Artesanía: el sector textil fue la actividad manufacturera más importante, con tejidos de seda o lino. También destacó el trabajo del cuero, la producción de pergaminos y de papel, la de vidrio y fabricación cerámica, las armas, la orfebrería y la construcción naval. El Comercio: alcanzó una notable importancia. En las ciudades, las principales zonas comerciales eran los zocos. El comercio exterior se basó en el dinar de oro y el dirhams de plata. El Papel de las ciudades: desempeñaron un papel fundamental en la civilización andalusí. Algunas de estas ciudades alcanzaron un considerable tamaño para la época, como Córdoba, Sevilla y Toledo. En las ciudades islámicas, los espacios públicos por excelencia eran la mezquita y el zoco. Las ciudades estaban amuralladas, estaba la zona protegida (Medina), la fortaleza militar (alcazabas), si la ciudad se expandía con nuevos barrios (Larrabalas).

3.2 La sociedad andalusí

La sociedad andalusí era muy heterogénea. La minoría de origen árabe formaba la élite social. Eran grandes propietarios de tierras y ocupaban los altos cargos en la administración califal. El grupo de origen bereber tenía una posición inferior. La población hispano-visigoda, una gran mayoría, se convirtió al Islam, muladíes. Pervinieron también minorías que practicaban otras religiones: los mozárabes (comunidades cristianas) y los judíos (una minoría influyente en al Ándalus). En el escalón social más bajo estaban los esclavos.