La Baja Edad Media en Europa

La Baja Edad Media se da desde los siglos XIV y XV. En toda Europa y los reinos peninsulares fue una etapa de crisis (agraria, demográfica, social y política), pero con evolución desigual en Castilla y Aragón. Mientras Castilla consiguió en el siglo XV superar las dificultades económicas y demográficas y fortalecer el poder real, a pesar de las guerras civiles, la Corona de Aragón, lastrada por la profunda crisis, sobre todo en Cataluña, no consiguió superar muchas de sus dificultades del siglo XIV. Por otro lado, se consolidaron dos modelos políticos diferentes: la monarquía centralista y autoritaria en Castilla y la monarquía pactista
que limitaba el poder del rey en Aragón donde cada territorio mantuvo sus propias Cortes.

CRISIS

a) Crisis agraria. Durante la primera mitad del siglo XIV se repitieron en Europa ciclos de malas cosechas, que desencadenaron crisis de subsistencias. b) Crisis demográfica. La Peste Negra de 1348 fue una epidemia que provocó un aumento de la mortalidad y el despoblamiento de numerosos lugares.c) Crisis social. La nobleza y el clero vieron disminuir sus vasallos y sus rentas y trataron de recuperar sus pérdidas a cota de la monarquía y los campesinos. Por otro lado, el descontento generalizado provocó rebeliones campesinas y conflictos en las ciudades. d) Crisis política. Los monarcas iniciaron el camino para fortalecer y centralizar su poder, chocando con la nobleza y clero, originándose guerras civiles en Castilla y Aragón. Las guerras civiles

En la primera guerra (1351-1369), Pedro I

gobernó desentendiéndose de la nobleza, lo que le provocó una fuerte oposición, que se organizó en torno a Enrique de Trastámara. La contienda finalizó con el asesinato de Pedro I y la victoria de su hermanastro, que accedió al trono como Enrique II. Apareció así la dinastía Trastámara. La segunda guerra de sucesión (1475-1479) aconteció entre los partidarios de Juana (hija del difunto Enrique IV) y los de Isabel, al final reconocida como reina de Castilla. También hubo tensiones sociales, que ocasionaron diferentes revueltas campesinas por toda Castilla y en Galicia contra la nobleza, así como persecuciones a los judíos (pogromos) en las ciudades, como la de 1391.

La expansión territorial

Durante la Baja Edad Media, las conquistas de territorios musulmanes se paralizaron hasta que en 1492 Castilla toma el reino de Granada. Además, arrebatar el estrecho de Gibraltar al Reino de Granada y los avances técnicos en la navegación permitieron la exploración y conquista de las islas Canarias bajo dos reinados: el de Enrique IV y el de Isabel I la Católica.

La recuperación demográfica y económica

Hay que distinguir entre el siglo XIV (crisis agraria y demográfica, primera guerra de sucesión al trono y tensiones sociales) y el siglo XV (recuperación demográfica y económica, aunque pervivieron los conflictos sociales y hubo una segunda guerra de sucesión).

Las instituciones políticas

La difusión de ideas políticas que defendían la supremacía del rey reforzó el poder real, apareciendo el modelo autoritario y centralista castellano. El rey tenía la facultad legislativa en exclusiva y era señor de sus súbditos y sólo responsable de sus actos ante Dios. Las principales instituciones políticas fueron: -las Cortes de Castilla y León. -el Consejo Real para asesoramiento al rey, formado por doce miembros, de los que ocho eran especialistas en jurisprudencia. -la Audiencia como órgano supremo de justicia y dependiente solo del rey. En el siglo XV se estableció una sede fija en Valladolid, llamada ‘Chancillería’. -A nivel municipal, se crearon los regimientos, que sustituyeron a los viejos concejos, y apareció el corregidor o representante de la Corona en los municipios.

La expansión mediterránea

Desde finales del siglo XIII y hasta el XV los reyes aragoneses desarrollaron una expansión política por el Mediterráneo, incorporando territorios: Sicilia, Cerdeña, el reino de Nápoles y los ducados de Atenas y Neopatria. Pero la caída del Constantinopla a manos de los turcos en 1453 y las nuevas rutas por el Atlántico hicieron decaer el comercio en todo el Mediterráneo. La Corona estaba formada por una confederación de territorios con leyes e instituciones propias, y se caracterizó por su doctrina pactista. La monarquía mantuvo su carácter feudal de pacto: el origen se remonta a 1283, cuando Pedro III tuvo que conceder a las Cortes y a los nobles el Privilegio General, por el que se comprometió a reunir periódicamente a las Cortes y pedir su consentimiento en asuntos importantes. Las Cortes limitaron así el poder real.

La estructura política aragonesa

-Los virreyes, que representaban el poder real donde no residía el rey. -Las Cortes de Cataluña, Aragón y Valencia. Limitaban el poder real y además eran independientes. -Las Diputaciones, que en su origen fueron comisiones para organizar y recaudar las prestaciones económicas concedidas al rey, se volvieron permanentes. La primera fue la de Cataluña en 1359 (actual Generalitat). Después se crearon las diputaciones de Aragón y Valencia. -El Justicia de Aragón, que era un noble designado por las Cortes y cuya función era la interpretación y defensa de los Fueros de Aragón frente a cualquier pretensión autoritaria de la monarquía. -Los municipios en la Corona de Aragón fueron cayendo en manos de las oligarquías.

CONCLUSIÓN

Tras Enrique IV de Castilla y Juan II de Aragón llegaron al poder a finales del XV los Reyes Católicos: Isabel I y Fernando II, cuyo matrimonio no unió ambas coronas, que atravesaban una situación muy desigual: Castilla estaba en crecimiento y vivía un fuerte dinamismo. Aragón, en cambio, seguía sin recuperar el crecimiento y eso le hizo perder peso.