El Régimen de la Restauración: Características y Funcionamiento del Sistema Canovista
1. Introducción
La Restauración es el periodo de la historia de España que abarca desde el pronunciamiento de Martínez Campos en 1874 hasta 1902.
Supone la vuelta de la dinastía de los Borbones tras el exilio de Isabel II y los fallidos intentos democráticos que trajo la Revolución de 1868.
La Restauración es un período de estabilidad constitucional y modernización económica, pero también de caciquismo y falseamiento electoral, y con problemas muy importantes como los nacionalismos catalán y vasco.
2. Fundamentos de la Restauración
2.1. Características y Bases del Sistema Canovista
El pronunciamiento de Martínez Campos significó la restauración de la monarquía en la persona de Alfonso XII. El nuevo sistema fue configurado por Cánovas del Castillo, quien asumió la regencia hasta la llegada del rey. Este sistema conservador fue recibido con entusiasmo.
Cánovas del Castillo creó un sistema político basado en cuatro pilares:
- El Rey
- Las Cortes
- Una Constitución escrita
- Bipartidismo y turnismo de los partidos políticos
El régimen se apoyaba en la Corona, partidos dinásticos y ejército.
Se convocaron elecciones para cortes constituyentes por sufragio universal que promulgaron la Constitución de 1876, moderada y donde se buscaba que los valores tradicionales prevalecieran:
- Soberanía compartida entre las Cortes y la Corona.
- Confesionalidad del Estado y se restableció el presupuesto de culto y clero.
- Declaración de derechos que en la práctica eran restringidos.
2.2. La Alternancia en el Poder (Turnismo)
Es un sistema bipartidista basado en el Partido Conservador y el Partido Liberal, que coincidían ideológicamente en lo fundamental, pero asumían papeles diferentes. Así, ambos defendían la monarquía, la Constitución y la propiedad privada. Además, aunque hubiera diferencias entre ellos, sus actuaciones no diferían mucho, ya que existía un acuerdo de no promulgar una ley de carácter radical que obligara al otro partido a abolirla.
- El Partido Liberal-Conservador se organizó en torno a su líder Cánovas del Castillo y era apoyado por los sectores más conservadores y tradicionales.
- El Partido Liberal-Fusionista tenía como líder a Sagasta y reunió a antiguos progresistas, unionistas y algunos exrepublicanos moderados, teniendo entre sus bases a industriales y comerciantes.
Para gobernar, se turnaban pacíficamente para asegurar la estabilidad institucional.
Este sistema funcionó a la perfección durante el reinado de Alfonso XII, pero a su muerte, dejando a la reina embarazada y sin heredero varón, en 1885 se puso en peligro la estabilidad del sistema.
2.3. El Fraude del Sistema y sus Consecuencias
La alternancia en el gobierno se hizo por un sistema electoral corrupto y manipulador que compraba votos, falsificaba actas y coaccionaba a los votantes usando la influencia y poder económico de los caciques sobre la sociedad. Así, se restableció el sufragio censitario.
El proceso era de la siguiente forma: El ministro de la Gobernación elaboraba la lista electoral y los candidatos que debían ser elegidos, y la hacía llegar a los gobernadores provinciales, quienes a su vez la hacían llegar a alcaldes y caciques, que se ocupaban de asegurar los resultados esperados con “trampas electorales” en las que destacan el encasillado y el pucherazo.
Era fundamental el papel de los caciques. Estos eran individuos o familias con poder económico y/o político que controlaban una determinada circunscripción electoral. Esto era más notable en las zonas rurales, donde controlaban los ayuntamientos y, por tanto, realizaban informes y certificados, controlaban el sorteo de quintas, etc.
Las tristes consecuencias de la corrupción del sistema fueron la falsificación de la democracia, el control político ejercido por la oligarquía, la marginación de la gran masa del país y la incapacidad del régimen para la educación política del pueblo español.
3. Fin de los Conflictos Bélicos
- Fin Guerra Carlista: La restauración borbónica fue un golpe para los carlistas y destacados dirigentes reconocieron a Alfonso XII. Tras la derrota carlista, se abolió el régimen foral, quedando los vascos sujetos al pago de impuestos y servicio militar como el resto de España.
- Fin del conflicto con Cuba (temporalmente): Con la combinación de la actuación de los militares y de la negociación, se firmó la Paz de Zanjón.
4. Dentro y Fuera del Turno Dinástico
En la Restauración, el gobierno estuvo en manos de los dos partidos citados, de forma que la oposición real no consiguió nunca un número de diputados como para formar gobierno ni hacer verdadera oposición.
4.1. Los Gobiernos del Turno
El turno funcionó con regularidad hasta 1898, cuando el impacto de la crisis afectó a los políticos y a estos partidos. Sin embargo, a principios de siglo, en algunas grandes ciudades ganaron las fuerzas de la oposición.
El Partido Conservador gobernó durante la mayor parte del reinado de Alfonso XII. Si bien, el Partido Liberal tuvo su gran oportunidad durante el llamado Gobierno largo, tras la muerte de este rey y cuando, ante el temor a una desestabilización del sistema político, se llegó al Pacto del Pardo, que dio paso a un gobierno liberal que, con las reformas, perpetuó el sistema incorporando algunos derechos vinculados al 68.
4.2. La Oposición: Republicanos, Carlistas, Nacionalistas y Socialistas
- Los Carlistas: Tras su fracaso bélico, la dirección marchó a Francia y empezó a conspirar, formándose partidas de combatientes e introduciendo armas, pero carecían de capacidad y apoyos para grandes levantamientos.
- El Republicanismo: Se enfrentaban a la decepción de sus seguidores, a la represión y a las divisiones internas.
- Regionalistas y Nacionalistas: A finales del siglo XIX nacen en Cataluña y País Vasco movimientos que cuestionan la existencia de una única nación española. El punto de partida es la afirmación de que estos territorios son naciones y, por lo tanto, tienen derecho de autogobierno basándose en diferencias de lengua y derechos.
- Socialismo: Un grupo de obreros de Madrid, expulsados de la FRE y dirigido por Pablo Iglesias, creó el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) con los objetivos: abolición de las clases y emancipación de los trabajadores.
- Sindicalismo Católico: A finales del XIX también se intentó un movimiento obrero de inspiración católica.
5. Nueva Conflictividad Social
A lo largo del siglo XIX, a la par de la industrialización, se fue desarrollando en España el movimiento obrero, siendo sus reivindicaciones en torno al derecho de asociación y el mantenimiento del sueldo.
La clase obrera industrial en principio fue un grupo pequeño y en torno a Madrid, Barcelona y el núcleo siderúrgico de Málaga. En su aparición tuvieron que ver las duras situaciones laborales: salarios bajos que no les daban para vivir, jornada laboral muy larga y malas condiciones de trabajo y de vida. Por esto, fueron creando asociaciones de ayuda mutua para protegerse en caso de necesidad, pero no será hasta el Sexenio cuando el movimiento obrero tiene un gran impulso por la creación de la AIT.
La vuelta de la Monarquía en la Restauración provocó que el Movimiento Obrero tuviera que vivir los primeros años en clandestinidad. Su evolución se divide en:
- Anarquismo: Se organizaron a través de la Federación de los Trabajadores de la Región Española (FTRE), mientras que la acción directa se imponía con la aparición de sociedades secretas.
- Socialismo: Un grupo de obreros de Madrid, expulsados de la FRE y dirigido por Pablo Iglesias, creó el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) con los objetivos: abolición de las clases y emancipación de los trabajadores.
- Sindicalismo Católico: A finales del XIX también se intentó un movimiento obrero de inspiración católica.
Conclusión
Con el sistema político de la Restauración, España perdió la oportunidad de convertirse en un país democrático. Cuando surge el regeneracionismo, a partir del 98, este no se materializa en la vida política.