El Franquismo Tardío: Desarrollismo, Inmovilismo y Crisis (1959-1975)

Este documento explora la etapa final del régimen franquista, caracterizada por una profunda transformación económica y social, así como por la persistencia del inmovilismo político y la posterior crisis que culminaría con la muerte del dictador.

1. Desarrollismo Económico

1.1. Los Gobiernos del Desarrollismo

El gobierno formado por Franco en 1957 y los que le sucedieron en la década de los 60 supusieron un giro profundo en la orientación del franquismo y marcaron la transición de una primera etapa dominada por los principios del falangismo a una segunda con el predominio de los tecnócratas: jóvenes economistas que consideraban el crecimiento económico como principal garantía de estabilidad social. Era necesaria una nueva orientación de la economía. Desarrollaron un Plan de Estabilización de 1959.

Objetivos del Plan de Estabilización:

• Poner fin al fuerte intervencionismo estatal y suprimir los obstáculos a la liberalización comercial y financiera.
• Estabilización de la economía mediante la reducción de la inflación y del déficit público.
• Liberalización interior y exterior de la economía: se eliminan los obstáculos a la entrada de mercancías extranjeras y se facilita la inversión de capitales exteriores, y se anunció la convertibilidad de la peseta.

1.2. Factores del Desarrollo Económico

El desarrollo económico fue posible gracias a:

• Fin de la agricultura tradicional: concentración parcelaria y regadíos, mecanización agrícola, aumento de la productividad agrícola y reducción de la mano de obra agraria, promoción de la ganadería y sus derivados. Desde el gobierno se estimuló la concentración parcelaria y se promovió la construcción de nuevos regadíos.
• Rápida industrialización: importación de tecnología, modernización de los sistemas productivos y expansión geográfica del tejido industrial.
• Aumento de los servicios: crecimiento del turismo y actividades complementarias, e incremento del sector administrativo y financiero.

El boom turístico de la década de 1960 fue un factor clave. A pesar de todo esto, la economía española tuvo una serie de limitaciones que se pusieron en evidencia con la crisis económica de 1973.

2. Modernización Social

2.1. Crecimiento Demográfico y Cambio Social

• Aumento de la población: como consecuencia de un descenso de la mortalidad, sobre todo infantil, y una elevada natalidad, resultado de unas mejores condiciones de vida.
• Movimientos migratorios: éxodo rural de las zonas agrícolas de España (Andalucía, Extremadura, las dos Castillas, Murcia y Galicia) que buscaron oportunidades de vida en ciudades industriales españolas y europeas (Francia, Alemania, Suiza y Bélgica). Dentro de las migraciones interiores, hubo un aumento de población en las zonas de mayor dinamismo económico como Madrid, Cataluña, País Vasco y Valencia. Dado que la mayor parte de los inmigrantes eran jóvenes, su llegada provocó un incremento de la natalidad. Estos movimientos de población agudizaron los desequilibrios demográficos y económicos entre los distintos territorios de España. Mientras las áreas más dinámicas concentraban la mayor parte de la población, tenían un intenso proceso de urbanización y crecían sin las infraestructuras necesarias para acogerlos, dando lugar al chabolismo; otras se estancaban y despoblaban paulatinamente.
• Cambios en la estructura social: el desarrollo de la economía industrial y la expansión del sector servicios dieron lugar a una transformación y supusieron la consolidación de una sociedad capitalista industrializada en la que los sectores asalariados eran amplios y diversificados, al tiempo que la clase media aumentaba su peso de manera considerable y se iba consolidando una burguesía urbana.

3. Reformismo Franquista e Inmovilismo

3.1. El Gobierno de los Tecnócratas

La apertura al exterior, el desarrollo económico y la radical transformación de la sociedad llevaron al gobierno a emprender una serie de reformas políticas que enmascararan algunos de los aspectos más dictatoriales del franquismo. La ascensión política del almirante Carrero Blanco significó el reforzamiento en el seno del gobierno de los tecnócratas.

3.2. Las Reformas Legislativas

La nueva orientación del gobierno hizo necesario un impulso legislativo para modernizar las instituciones, apaciguar las tensiones sociales y canalizar las discrepancias entre las familias del régimen. Por ejemplo, en 1963 se creó el TOP (Tribunal de Orden Público) para que fuera este, y no el ejército, quien practicara la política represiva. Aunque no disminuía la represión, en los Consejos de Guerra la indefensión era casi total.

Entre las leyes más destacadas se encuentran:

• 1966: Ley de Prensa, que suprimía la censura previa.
• 1967: Ley de Libertad Religiosa, que establecía la igualdad de todas las religiones y la libertad de práctica.
• 1967: Ley Orgánica del Estado, que consolidaba la institución monárquica del régimen, mantenía la concentración de poderes del dictador, pero introducía la separación entre el jefe de Estado y el presidente del gobierno.
• 1967: Ley de la Seguridad Social.

En 1969, de acuerdo con lo estipulado en la Ley de Sucesión, Franco designó a Juan Carlos de Borbón como su sucesor.

3.3. Las Relaciones Internacionales

En 1962, España solicitó el ingreso en la CEE. España también participó en el proceso de descolonización africano, iniciado en 1956.

3.4. El Triunfo del Inmovilismo

Las disensiones entre aperturistas e inmovilistas estallaron en 1969 a raíz del escándalo de Matesa, una empresa de maquinaria textil conectada con el entorno del Opus Dei. La empresa protagonizó un fraude financiero relacionado con la exportación de maquinaria textil. El escándalo fue difundido por la prensa y los sectores más inmovilistas culparon a la apertura informativa propiciada por la Ley de Prensa. El caso Matesa tuvo repercusiones políticas. El vicepresidente del gobierno, Carrero Blanco, defendió la necesidad de endurecer la política interna y modificar en sentido restrictivo la Ley de Prensa, aumentando la represión.

4. La Crisis de la Dictadura

La crisis del régimen se manifestó tras la muerte de Franco el 20 de noviembre de 1975.

4.1. La Crisis Política del Régimen

En junio de 1973, Carrero Blanco fue nombrado presidente del gobierno, una persona clave para mantener la unión de todas las familias franquistas y asegurar la continuidad del régimen después de la muerte de Franco. Estos planes quedaron truncados cuando Carrero Blanco fue asesinado por ETA en un atentado perpetrado en Madrid.

A partir de ese momento, la fractura entre los inmovilistas y los aperturistas fue haciéndose cada vez mayor. En enero de 1974, se formó un nuevo gobierno presidido por Arias Navarro que pretendía unir a ambos. Su programa quedó resumido en el llamado “espíritu del 12 de febrero”, fecha en la que el presidente pronunció un discurso que presentaba un proyecto de apertura hacia un mayor pluralismo político, una nueva Ley Municipal, anunció reformas sindicales y una nueva ley sobre asociaciones políticas.

Los sectores ultraderechistas denunciaron el peligro de destrucción del régimen y forzaron a que Navarro se decantase hacia el inmovilismo. Ante la escasez de reformas, los aperturistas salieron del gobierno. El intento de apertura había fracasado, mostrando la incapacidad del franquismo para democratizarse desde dentro.

4.2. El Auge del Antifranquismo

El auge del antifranquismo se manifestó en la protesta obrera y estudiantil. Los grupos de oposición crearon organismos para reivindicar la democratización e impedir la continuidad del franquismo. En 1974, se constituyó en París la Junta Democrática de España. Su programa propugnaba la formación de un gobierno provisional que implantase un régimen democrático.

4.3. La Muerte de Franco y el Conflicto del Sáhara

Con el dictador sin poder ejercer sus funciones, el gobierno tuvo que hacer frente al conflicto del Sáhara. Este territorio era ambicionado por Argelia, Mauritania y Marruecos.

En 1973, los saharauis habían creado el Frente Polisario, una formación que abogaba por la independencia. España optó por la descolonización y permitió un referéndum de autodeterminación en el territorio. En octubre de 1975, el rey Hassan II de Marruecos, que contaba con el apoyo de EE. UU. para frenar una expansión de Argelia socialista, organizó la Marcha Verde, invasión pacífica del territorio que movilizó a miles de civiles. Ante el peligro de un conflicto bélico con Marruecos, España optó por claudicar; el 14 de noviembre se firmó el Acuerdo de Madrid, que suponía la entrega del Sáhara a Marruecos y a Mauritania. El abandono de España inició un conflicto todavía no resuelto en la actualidad entre el Frente Polisario, que proclamó la República Árabe Saharaui Democrática, y Marruecos.

Franco falleció el 20 de noviembre de 1975.