El Final del Franquismo: Causas y Acontecimientos Decisivos (1973-1975)

El Declive del Franquismo: Causas y Acontecimientos Decisivos (1973-1975)

Este documento detalla las causas de la crisis final del franquismo desde 1973, un periodo marcado por la agudización de las contradicciones internas y externas que precipitaron el fin de la dictadura.

Contexto de la Crisis Final del Franquismo

La crisis del franquismo se agudiza a partir de 1973, impulsada por una confluencia de factores: las contradicciones sociales producto de la situación económica, la decadencia física del dictador, el distanciamiento de parte de la Iglesia y la reorganización de las fuerzas de oposición.

Factores Económicos y Sociales

Los años 70 presenciaron un progresivo aumento del paro y el retorno de una buena parte de los emigrantes que habían encontrado trabajo en la Europa desarrollada (Francia, Alemania, Suiza, Bélgica, entre otros), puesto que la crisis económica afectaba también a estos países europeos. Estos trabajadores, aunque vivían en condiciones muy duras en Europa, habían conocido la experiencia democrática y de libertad sindical.

La inestabilidad laboral reforzó los conflictos huelguísticos que, en el contexto del franquismo, al estar prohibida la huelga, se politizaron inmediatamente. Las estructuras del sindicato vertical (la Central Nacional Sindicalista), el único permitido, se vieron pulverizadas, puesto que la clase obrera elegía a representantes de los sindicatos clandestinos. Aquí surgen las Comisiones Obreras, que terminaron constituyéndose en un sindicato próximo al PCE. Esto provocó que los cargos del sindicato vertical estuvieran controlados por trabajadores afines a la oposición antifranquista.

La Sucesión y las Divisiones Internas del Régimen

El envejecimiento de Franco suscitó el debate sobre la continuidad de la Dictadura. Dentro del régimen se fue produciendo una ruptura entre los llamados aperturistas, partidarios de reformar el sistema para ir acercándolo progresivamente a un modelo parlamentario, y los sectores más inmovilistas, opuestos a cualquier cambio, denominados “el búnker”.

En un intento de gestionar la sucesión y la creciente protesta, Franco decidió separar por vez primera la jefatura del Estado y la del Gobierno. Nombró presidente del Gobierno a Carrero Blanco, quien formó un gabinete con mayoría de miembros del Opus Dei y de franquistas “puros”. El objetivo era atajar la creciente protesta en las calles y preparar el futuro relevo en la jefatura del Estado. Sin embargo, en diciembre del mismo año, el almirante Carrero Blanco muere víctima de un atentado reivindicado por ETA, un golpe devastador para la continuidad del régimen.

El Gobierno de Arias Navarro y la Represión

Tras la muerte de Carrero Blanco, Franco nombró como presidente del Gobierno a Carlos Arias Navarro, quien era el ministro de Gobernación en el momento del atentado. Este propugnó inicialmente un programa aperturista, conocido como “el espíritu del 12 de Febrero de 1974”, pero pronto demostró su talante represivo al decidir la ejecución, mediante garrote vil, del anarquista catalán Salvador Puig Antich, en marzo de 1974.

Conflicto con la Iglesia Católica

El mismo mes, el régimen enfrentó graves problemas con la Iglesia Católica. La tensión había aumentado desde que el cardenal Tarancón, abiertamente antifranquista, dirigía la Conferencia Episcopal. Una homilía del obispo de Bilbao, monseñor Añoveros, en la que defendía el respeto a los derechos de los pueblos, provocó una amenaza de expulsión por parte del gobierno (fue confinado en su domicilio). El Vaticano contestó con la amenaza de excomunión a Franco. Este optó por ordenar a Arias que cediera, pero la ruptura con la Iglesia era ya un hecho.

Aislamiento Internacional y Agudización de la Crisis

En abril de 1974 estalló la Revolución de los Claveles en Portugal y en julio cayó la dictadura griega, lo que dejó a la dictadura de Franco cada vez más aislada en el panorama internacional. En el verano, Franco fue hospitalizado con graves problemas cardiovasculares, mientras el príncipe Juan Carlos de Borbón asumió temporalmente la jefatura del Estado.

Ante la sorpresa general, Franco reasumió el poder en septiembre. Días después, estalló una bomba en la madrileña calle del Correo (junto a la Dirección General de Seguridad), con el trágico resultado de 12 muertos y más de 50 heridos. El atentado no fue reivindicado por ningún grupo armado, por lo que sigue siendo uno de los misterios todavía sin resolver. Franco y Arias Navarro reorganizaron el gobierno, del que salieron los pocos ministros reformistas que había.

Escalada de Protestas y Represión (1975)

El año 1975 se inició con el recrudecimiento de las protestas y el aumento de la represión. En abril se decretó el estado de excepción en Guipúzcoa y Vizcaya por tres meses; en junio se extendieron los conflictos en las industrias y el sector del transporte.

Las fuerzas del orden público tuvieron verdaderos problemas para mantener la tranquilidad en las calles, y su actuación provocó diversas muertes. Su acción de represión contrastaba con la tolerancia que tenían, en esa época, los grupos violentos de extrema derecha como los Guerrilleros de Cristo Rey. Estos grupos practicaban ataques contra locales, librerías y personas de significación demócrata.

Unificación de la Oposición y Últimas Ejecuciones

La oposición se organizó en dos grandes sectores, que terminaron reuniéndose en la PlataJunta, una simbiosis de la Plataforma de Convergencia Democrática y la Junta Democrática.

Tras el verano, los acontecimientos se precipitaron. Varios miembros de ETA y FRAP (Frente Revolucionario Antifascista y Patriota) fueron juzgados y doce de ellos condenados a muerte. En medio de manifestaciones en todas las capitales europeas y de una lluvia de peticiones de clemencia, el 27 de septiembre cinco de los condenados fueron ejecutados. En octubre, Franco cayó nuevamente enfermo.

La Crisis del Sahara Occidental

Por si fuera poco la tensión en el interior del país, el rey de Marruecos, Hassan II, aprovechó la coyuntura para reivindicar la soberanía de la colonia española del Sahara Occidental. El gobierno español se enfrentó a los ataques del Frente Polisario, grupo independentista saharaui, pero no se decidía a conceder la independencia al Sahara, según recomendaba la ONU. Finalmente, Hassan II organizó una multitudinaria marcha sobre el Sahara, integrada por marroquíes, conocida como la Marcha Verde. Esta puso al ejército español en estado de máxima tensión.

El gobierno de Arias Navarro cedió a las presiones y firmó la Declaración de Madrid, el 14 de noviembre de 1975, que cedía el Sahara Occidental a Marruecos y Mauritania, mientras que el Frente Polisario inició una larga lucha de resistencia al proclamar la República Árabe Saharaui Democrática.

El Fin de una Era

Finalmente, Franco murió el 20 de noviembre de 1975, tras una larga y dolorosa agonía, marcando el fin de la dictadura y el inicio de la Transición Española.