La Filosofía de Platón: Justicia, Ética Política y la Jerarquía del Conocimiento

La Estructura de la Polis Justa en Platón: El Rol de los Guardianes

El concepto de la Polis Justa, tal como lo describe Platón, establece un conjunto estricto de normas para la clase de los guardianes, esenciales para la defensa y estabilidad del Estado. Estas reglas buscan asegurar que los guardianes mantengan su virtud y eviten la corrupción que surge del apego material (República, 416d-417b).

Reglas de Vida para los Guardianes

  1. Ninguno tendrá posesiones que le pertenezcan, excepto los objetos de primera necesidad.
  2. Ninguno tendrá casa o despensa donde no pueda entrar todo el que quiera.

En cuanto a sus alimentos, recibirán de los demás ciudadanos lo que puedan necesitar como guerreros-atletas, sobrios y valerosos, en recompensa por la defensa que les prestan. La cantidad será suficiente para todo el año, sin que nada les sobre ni les falte. Harán vida en común y sus comidas serán colectivas, como soldados en campaña.

La Prohibición del Oro Terrenal

Se les dirá que han tenido siempre en sus almas el oro y la plata divinos, que para nada necesitan el oro y la plata de los humanos, y que es impío manchar la posesión del oro divino con la del oro terrestre, mezclándolo, ya que muchos sacrilegios han nacido en torno a la moneda corriente, mientras que el oro que hay en ellos es puro. En el Estado, por consiguiente, únicamente a ellos no les estará permitido manipular ni tocar oro ni plata, ni siquiera cobijarse bajo el mismo techo que estos, ni adornarse con ellos, ni beber en vasos de oro o plata.

De ese modo se salvarán ellos y salvarán al Estado. Pues si adquieren tierras, casas y dinero, de guardianes se convertirán en administradores y labradores, y de defensores de los demás ciudadanos, en sus tiranos y enemigos. Odiarán y serán odiados, conspirarán y se conspirará contra ellos, y así pasarán toda la vida, temiendo mucho más a los enemigos de dentro que a los enemigos de fuera, con lo cual se aproximarán rápidamente a la destrucción de ellos mismos y del Estado.

La Teoría Platónica del Conocimiento y las Ideas

Platón llama Idea (o Forma) a aquello hacia donde tenemos que dirigir la “vista” si queremos responder a la pregunta qué es algo, es decir, si queremos conocer el ser de algo. Las Ideas se distinguen de las cosas sensibles por su unidad y permanencia (no les afecta el paso del tiempo) y, por eso, según Platón, no pueden estar “en este mundo” múltiple y cambiante, sino “fuera” de las cosas, en un mundo accesible solo mediante el Nous (entendimiento o inteligencia).

La Reminiscencia y el Origen del Saber

Cuando Menón, en el diálogo que lleva su nombre, le plantea a Sócrates la cuestión de cómo puede no saber qué es la virtud y al mismo tiempo rechazar lo que él le dice acerca de ella, Sócrates responde con la teoría de la reminiscencia, que luego desarrolla en el diálogo Fedón. El alma es inmortal y ha conocido las Ideas antes de unirse al cuerpo para formar el viviente humano. Al “nacer”, olvida lo que ha visto y vive inmerso en el mundo sensible sin sospechar siquiera que hay un mundo de Ideas del que “este mundo” depende en su propio ser: para los habitantes de la caverna, las sombras son la única realidad.

Conocer sería, entonces, un proceso de recuerdo de algo que el alma “en el fondo” ya sabe, y que comienza cuando nos preguntamos qué es algo y comprendemos que esa pregunta solo puede responderse “apartando la mirada” del mundo sensible y dirigiéndola hacia la Idea: este es el momento de “liberación” del prisionero de la caverna.

La Dialéctica como Método Filosófico

Platón descubre que las Ideas están ligadas entre sí por relaciones de inclusión y exclusión. Si pregunto qué es un gato, tengo que ir a una Idea superior —por ejemplo, “animal”— y luego, dado que hay muchos animales que no son gatos, tengo que dividir esa Idea en función de lo que el gato es y lo que no es.

Platón llama dialéctica al modo en que las Ideas están incluidas o excluidas entre sí y también al procedimiento para encontrar la unidad y la diferencia correctas:

  • Camino hacia arriba: Buscar una Idea “superior” común a muchas.
  • Camino hacia abajo: Dividirla luego hasta llegar a la Idea que queremos definir.

La Idea Suprema: El Bien

La Idea del Bien es la Idea suprema, de la que todas participan y que no puede ser conocida como las demás —no se puede “ascender” a una Idea superior—. Por eso Platón utiliza el lenguaje indirecto y dice que el Bien es al mundo inteligible como el sol al mundo sensible. Aunque exista lo visible y el ojo, el acto de ver no es posible sin luz. Del mismo modo, aunque exista el Nous (inteligencia) y las Ideas (lo inteligible), el acto de entender no es posible sin la Idea del Bien, que ilumina las Ideas y permite verlas precisamente como Ideas.

El conocimiento de la Idea del Bien distingue al filósofo de los demás hombres, que no entienden (no captan lo inteligible como tal, no saben tratar con Ideas), a pesar de tener Nous.

Los Grados del Conocimiento (Símil de la Línea)

Tras comparar la Idea del Bien con el sol, Platón distingue varios tipos de conocimiento en función de la mayor o menor claridad de su objeto, es decir, de su distancia a la Idea del Bien.

Doxa (Opinión)

Llama Doxa —opinión— al conocimiento del mundo sensible, el más alejado del Bien, de la fuente de luz. Las opiniones son cambiantes y contradictorias como el propio mundo sensible.

Episteme (Ciencia)

Dentro del mundo inteligible (Episteme) distingue dos niveles:

  1. Dianoia: Conocimiento que se refiere básicamente a las matemáticas y que se caracteriza por “no poder prescindir de imágenes” y por tomar las hipótesis como principios, utilizándolas para sacar conclusiones, sin volver a examinarlas.
  2. Noesis: Que prescinde completamente de las imágenes —se refiere única y exclusivamente a Ideas— y, si bien parte de hipótesis, las revisa una y otra vez hasta llegar a un principio no hipotético. La palabra Noesis significa “visión intelectual”, pero hay que tener en cuenta que las Ideas, como acabamos de decir, no pueden “verse” aisladas unas de otras.