Teatro en España (Siglo de Oro)
El teatro español del Siglo de Oro se caracteriza, en gran medida, por ir en contra de la regla de las tres unidades clásicas:
- Lugar: La acción no siempre se desarrolla en un único lugar o en lugares próximos.
- Tiempo: La trama puede extenderse más allá de un solo día.
- Acción: A menudo existen tramas secundarias además de la acción central principal.
Personajes Típicos
Los personajes que suelen aparecer son arquetipos:
- El galán
- La dama
- El criado (a menudo confidente del galán)
- El barba (personaje de autoridad, como un padre o rey)
- La figura del gracioso: tiene como finalidad aliviar la tensión dramática de la obra haciendo comentarios chistosos.
El número de personajes en ocasiones es multitudinario.
Lenguaje y Estructura
El lenguaje se adecúa a la condición social de los personajes (decoro poético). La obra se divide generalmente en tres actos o jornadas, que suelen corresponder al planteamiento, nudo y desenlace.
Temas Comunes
- Históricos y legendarios.
- Comedias urbanas o de “capa y espada”.
- El amor idealizado que vence enredos y dificultades.
- La honra y el honor (un tema central en la sociedad de la época).
Teatro Popular y Corrales de Comedias
En España se desarrolla un teatro eminentemente popular, hecho para entretener y divertir a la gente pagando. Las representaciones tenían lugar en corrales de comedias: amplios patios de vecindad donde se aprovechaba el patio central (para el público masculino de pie, los “mosqueteros”), las ventanas y los balcones (aposentos para nobles y la “cazuela” para las mujeres). El público era muy participativo, a menudo ruidoso.
Al principio, en las compañías de actores solo había hombres (que interpretaban también los papeles femeninos), pudiendo llegar hasta veinte actores. A finales del siglo XVI, se permitió actuar a las mujeres.
Teatro Cortesano
Las mejores compañías también actuaban ante el rey y la corte. Con el paso del tiempo, el teatro cortesano adquiere más importancia. Se representaba para nobles y reyes en salones de palacios o teatros construidos a tal efecto. Este tipo de teatro permitía una escenografía más complicada y espectacular, el uso frecuente de música y, a veces, incluso la intervención de los propios nobles en el espectáculo.
Autos Sacramentales
El auto sacramental era una obra dramática en un solo acto, con personajes alegóricos (la Fe, el Pecado, la Gracia…), que desarrollaba un tema religioso (generalmente la Eucaristía) con un fin didáctico. Tiene su origen en la tradición medieval de las dramatizaciones religiosas. Se representaban en las plazas públicas durante la fiesta del Corpus Christi, utilizando carros como escenarios rudimentarios.
En resumen, en España coexistían un teatro eclesiástico (ligado a fiestas religiosas como el Corpus o vidas de santos), un teatro cortesano (para la nobleza) y un vibrante teatro popular (en los corrales).
Mientras Inglaterra y España presentan formas y temas de teatro popular y nacional, Francia practica un teatro más cortesano y apegado a los moldes clásicos.
Teatro en Inglaterra (Época Isabelina)
Orígenes e Influencias
El teatro religioso pervive, pero el teatro popular se consolidó gracias a la influencia italiana y la inspiración en la historia nacional. Surge así el llamado teatro isabelino (y posteriormente jacobino).
Espacios Escénicos
Inicialmente, las representaciones se realizaban en locales improvisados o en patios de posadas (inn-yards). Después, pasan a ser representados en teatros construidos específicamente, como “The Theatre”, “The Globe” o “The Swan”. Eran construcciones generalmente circulares o poligonales, al aire libre, con un patio central donde se situaba el escenario y el público de pie, rodeado de galerías para espectadores de mayor poder adquisitivo.
Forma y Características
Se desarrolla un arte al margen de las formas clásicas:
- No se respeta la regla de las tres unidades (lugar, tiempo, acción).
- Lo cómico tiene cabida dentro de lo trágico.
- Se mezcla en la obra prosa y verso.
- Se combina lo sublime con lo popular.
- Existe la figura del clown, que corresponde en parte al gracioso del teatro español, aportando elementos cómicos.
Teatro en Francia (Clasicismo)
Contexto Teatral
Aunque los géneros medievales (como las farsas) se siguen representando, el teatro francés del siglo XVII, bajo la influencia del Cardenal Richelieu y la Academia Francesa, sigue líneas diferentes al español y al inglés, buscando la regularidad clásica. Junto a los teatros improvisados, existen un par de teatros fijos importantes en París (Hôtel de Bourgogne, Théâtre du Marais) y otros en residencias reales. Sus teatros son diferentes a los ingleses y españoles, ya que son salas cubiertas, más parecidas a los teatros actuales.
Características Principales
- Separación de géneros y estilos: La tragedia, considerada el género noble, se escribe en verso (alejandrinos) y trata temas elevados con personajes nobles. Los personajes burgueses o vasallos quedan relegados a la comedia, escrita en prosa o verso.
- Estructura: Las obras constan de cinco actos.
- Reglas Clásicas: Debe respetarse la regla de las tres unidades (acción, tiempo y lugar) y el decoro poético.
Autores Destacados
William Shakespeare (Inglaterra, 1564-1616)
Su obra dramática se compone de unas 37 piezas, que incluyen tragedias, comedias y dramas históricos.
Características de su Obra
- Libertad creativa: En su obra no se encuentran las unidades clásicas ni la uniformidad en el estilo.
- Variedad métrica: Las formas métricas son variadas; se mezcla prosa y verso en una misma obra.
- Mezcla de tonos: Combina lo cómico y lo trágico. Es característico el uso del clown.
- Fantasía y Realidad: Se mezcla la fantasía con la realidad.
- Estructura compleja: Junto a la acción principal, aparece una serie de acciones secundarias.
- Flexibilidad espacio-temporal: No hay unidad de espacio (se alternan interiores con exteriores) y también hay despreocupación por el tiempo de la acción.
Arte y Estilo
Se puede destacar la variedad de registros en los diálogos y la diversidad de tonos a la hora de expresar los sentimientos humanos, con una profundidad psicológica notable en sus personajes.
Molière (Jean-Baptiste Poquelin) (Francia, 1622-1673)
Su obra se compone de unas 30 comedias. Las farsas son sus primeras obras, y la alta comedia es el nombre que refleja la elevación que Molière dio al género, criticando vicios y costumbres de su tiempo.
Aunque inicialmente experimentó con formas más libres, acabó aceptando las reglas del Clasicismo francés. Es considerado el gran creador de personajes cómicos universales (el avaro, el hipócrita, el misántropo, etc.).
Recursos Cómicos
Utiliza diversos grados o tipos de recursos de comicidad:
- Comicidad de gestos y movimientos: Muecas, caídas, golpes (propio de la farsa).
- Comicidad verbal: Juegos de palabras, repeticiones, exageraciones.
- Comicidad de situación: Encuentros fortuitos, malentendidos que se prolongan, enredos.
- Comicidad de carácter: Derivada de la psicología y obsesiones de los personajes.
Estilo y Lenguaje
Representa las reglas de las unidades clásicas. Sus comedias están escritas tanto en verso (alejandrinos) como en prosa. Su lenguaje se caracteriza por una profunda expresividad y naturalidad, adaptado a cada personaje.
Figuras Retóricas (Recursos Literarios)
- Aliteración: Consiste en repetir uno o varios fonemas con la intención de expresar una idea o producir efectos sensoriales.
- Onomatopeya: Es una variante de la aliteración que consiste en imitar los ruidos que existen en la naturaleza.
- Paronomasia: Es la proximidad de palabras que tienen sonidos parecidos pero significados distintos.
- Similicadencia: Consiste en colocar de forma próxima palabras que poseen sonidos semejantes (ej. terminaciones verbales iguales).
- Comparación o Símil: Consiste en relacionar dos palabras cuyos significados tienen algún parecido, usando un nexo comparativo (como, parece, cual…). Comparar una idea con otra más conocida, más clara o más expresiva.
- Metáfora: Es el recurso que consiste en identificar un término real con otro imaginario por su semejanza. Sustituir una idea por otra más expresiva. Si a una comparación le quitamos el enlace comparativo, la convertimos en metáfora.
- Alegoría: Es una metáfora continuada a lo largo de varias frases o de una obra entera.
- Metonimia: Consiste en designar algo con otro nombre, basándose en una relación de causa-efecto, contenedor-contenido, autor-obra, etc.
- Personificación o Prosopopeya: Consiste en atribuir cualidades humanas a los seres inanimados o irracionales.
- Apóstrofe: Consiste en dirigir exclamaciones o preguntas con vehemencia a seres animados o inanimados, presentes o ausentes.
- Hipérbole: Es una exageración desmesurada de las cualidades o acciones.
- Juego de palabras: Consiste en utilizar dos o más palabras que se escriben o se pronuncian igual (homónimas) o de forma parecida (parónimas), pero tienen significados diferentes, creando un efecto ingenioso o cómico.
- Enumeración: Es el recurso que consiste en acumular sustantivos, adjetivos o verbos para describir algo o intensificar una idea.
- Epíteto: Es la utilización de adjetivos que expresan una cualidad inherente al sustantivo (la blanca nieve), generalmente con fines estéticos para añadir viveza y colorido, sin añadir información nueva esencial.
- Hipérbaton: Consiste en cambiar el orden lógico o gramatical de las palabras en una oración.
- Anáfora: Consiste en repetir una o varias palabras al principio de versos u oraciones consecutivas.
- Asíndeton: Es la supresión intencionada de las conjunciones o nexos que unen oraciones o palabras, buscando un efecto de rapidez o acumulación.
- Polisíndeton: Consiste en la repetición innecesaria de conjunciones para dar más énfasis o lentitud a la expresión.
- Paralelismo: Consiste en repetir una misma estructura sintáctica en oraciones o versos seguidos, para conseguir un efecto rítmico o enfático.