Maestros del Barroco: Velázquez, Bernini y la Grandeza del Arte del Siglo XVII

Velázquez: La Perfección Barroca en “Las Meninas”

La Obra Cumbre y su Significado

La obra cumbre de Velázquez, Las Meninas, representa la culminación de todo lo experimentado por el pintor a lo largo de su vida. Su significado simbólico la eleva a la categoría de obra de arte perfecta en todos los sentidos. A través de este cuadro, Velázquez logró lo que ningún otro pintor había conseguido antes: obtener un título de nobleza, abriendo así el camino para que futuros pintores también pudieran ser ennobrecidos. Felipe IV, fascinado por esta obra y por la grandeza del pintor, le otorgó el título de Caballero de Santiago. Se cree que la cruz de caballero que Velázquez luce en su pecho fue pintada directamente por el rey, aficionado al arte, después de la muerte del pintor. Este reconocimiento, otorgado por el monarca, fue un hito, ya que nadie con un oficio manual podía alcanzar un título de nobleza. Esto demuestra la profunda admiración y el respeto que el rey sintió por Velázquez durante toda su vida.

Personajes de “Las Meninas”

  • Infanta Margarita María: En el centro, atendida por dos meninas.
  • Menina Izquierda: María Agustina Sarmiento.
  • Menina Derecha: Isabel de Velasco.
  • Los Enanos: Nicolás Pertusato y Mari Bárbola.
  • El Perro: Un mastín.
  • Don José Nieto: Bajando la escalera al fondo.
  • Marcela de Ulloa: Dama de honor, en segundo plano.
  • Velázquez: Autorretrato del pintor.
  • Felipe IV y Mariana de Austria: Reflejados en el espejo al fondo.

Composición de la Escena

La acción transcurre en un lugar real, aunque hoy desaparecido: una galería en las dependencias del Alcázar, cercana a los aposentos del príncipe Baltasar Carlos. Existen varias interpretaciones sobre la escena:

  1. Velázquez pinta a los Reyes, y los demás personajes pasan por allí y les saludan (el espectador asume el rol de los Reyes).
  2. Velázquez pinta a las Meninas, y los Reyes entran en la estancia, reflejándose en el espejo.

Las figuras se agrupan en varios conjuntos: la infanta y las dos meninas, los enanos y el perro, los dos sirvientes, los reyes al fondo, y Velázquez en medio, participando en la escena pero apartado, respetando a los demás personajes. Las dos meninas crean una doble diagonal en el centro del cuadro.

Técnica y Perspectiva Aérea

Es una composición frontal donde todo gira en torno a la infanta (la segunda teoría es la más acertada). Velázquez logra la máxima expresión de la perspectiva aérea, siendo capaz de pintar el ambiente que rodea y envuelve a las figuras en todos los planos, desde el primer plano hasta el espejo del fondo (un ingenioso truco barroco). Utiliza el difuminado para crear esa atmósfera, especialmente alrededor de los rostros, y el claroscuro para destacar la importancia de unas zonas respecto a otras, logrando un realismo casi fotográfico.

Legado y Trascendencia

Con Las Meninas, Velázquez logra ennoblecer la pintura, convirtiéndola en arte y no en un simple trabajo manual. También consigue la máxima participación del espectador en la obra, situándolos en la misma posición que a los Reyes de España. Se puede decir que Velázquez alcanza la perfección del arte barroco, tanto en el uso de los trucos pictóricos como en la idea final que desea plasmar. Es considerado uno de los mejores cuadros de la historia de la pintura mundial. El siglo XX fue testigo de varias reinterpretaciones, como las realizadas por Picasso o el Equipo Crónica.

Definición: Tenebrismo

El Tenebrismo es un estilo pictórico característico del Barroco que se define por el violento contraste de luces y sombras, logrado mediante una iluminación forzada.

Bernini: El Genio Escultórico y Arquitectónico del Barroco

Introducción a Gian Lorenzo Bernini

Gian Lorenzo Bernini (segunda mitad del siglo XVII) fue un genio barroco a la altura de Miguel Ángel. Destacó como arquitecto, escultor y urbanista. Tuvo clientes importantes, como el papa Urbano VIII, quien le hizo sus mayores encargos; posteriormente, trabajó para Alejandro VII.

Arquitectura Civil de Bernini

En su arquitectura civil destacan dos palacios:

  • El Palacio Ludovisi (notable por su fachada).
  • El Palacio Chigi, de estilo clasicista.

Obras Religiosas Emblemáticas

El Baldaquino de San Pedro de Roma

El Baldaquino de San Pedro de Roma fue su primer encargo de Urbano VIII, quien a partir de entonces lo nombró arquitecto del Vaticano hasta su muerte. El baldaquino servía para resaltar y cobijar la tumba de San Pedro. Lo realizó en bronce; ante la escasez de material, el papa retiró el bronce del Panteón para dárselo a Bernini. Sobre unas columnas salomónicas, Bernini colocó un dosel que imita los flecos de un paño. Su remate está compuesto por cuatro volutas que se unen en el centro y sostienen una bola rematada por una cruz. Las volutas son la ondulación de las columnas que se juntan en la cruz. Colocó ángeles y querubines con atributos papales de Urbano VIII, como la hoja de laurel y soles. Bernini logró una gran obra que resume por sí sola los caracteres del Barroco: la unión de las tres artes mayores (la arquitectura del baldaquino, la escultura representada por los angelotes, y la pintura por el contraste del bronce y el mármol de la basílica). Se complementa con cuatro esculturas en los nichos, de las cuales Bernini realizó una: la de San Longinos. El baldaquino está situado en el centro de la basílica; detrás se observa la Cátedra de San Pedro. Todo el conjunto está iluminado por medio de un gran óculo ovalado que Bernini creó a partir de una ventana construida por Miguel Ángel, pero que no era ovalada, siendo la figura ovalada una de las preferidas de Bernini.

La Columnata y Plaza del Vaticano

La Columnata y Plaza del Vaticano, realizada en época de Alejandro VII, quien, aunque no era tan amigo de Bernini como Urbano VIII, lo favoreció, otorgándole los mejores proyectos. El papa necesitaba un gran recinto para recibir a los peregrinos y dar la bendición en los días señalados. El problema consistía en que la fachada de Maderno era muy ancha, ya que estaba obligado a empezar la construcción de las dos torres laterales, pero solo se hizo el cuerpo inferior, absorbido por la fachada. Otra exigencia era que la cúpula de Miguel Ángel debía destacar sobre el conjunto. Para cubrir ambas necesidades, Bernini pensó en el óvalo, que creaba espacio sin ser circular, centrando así la imagen general que había que destacar (fachada y cúpula). Además, este óvalo confiere un carácter triunfal a la entrada al Vaticano, ya que acoge al peregrino como en un gran abrazo, pues la columnata se asemeja a dos brazos que se abren. Para profundizar este efecto simbólico, creó un primer tramo estrecho que se abre hacia el interior del óvalo, hasta entrar en él de modo inesperado. Al fondo del óvalo, colocó otro tramo trapezoidal para integrarlo en la entrada. La columnata está formada por columnas toscanas de cuatro en fondo, a modo de pasadizo. El óvalo lo dispuso con su eje mayor paralelo a la entrada, creando un efecto de expansión que abarca todo lo que el ojo puede ver de un golpe.

La Scala Regia del Vaticano

La Scala Regia del Vaticano: esta escalera une el Palacio Vaticano con la basílica. El espacio era difícil; Bernini jugó con la perspectiva, cubriendo los escalones con un techo en bóveda de cañón prolongada y una ventana al fondo. La entrada está precedida por dos serafines y el escudo papal. A los lados, hileras de columnas jónicas, separadas de la pared. En el arco de entrada, colocó palmetas, al estilo clásico.

Otras Obras Religiosas

  • Cátedra de San Pedro
  • Iglesia de San Andrés del Quirinal