Reforma Agraria: Contexto y Ejecución
El texto a comentar tiene claramente dos partes diferenciadas:
- Una primera parte donde aparecen tres artículos de la Ley de Bases de la Reforma Agraria que se refieren a las tierras que pueden ser objeto de expropiación (Artículos 15 y 7).
- La segunda parte es una relación de las expropiaciones y ocupaciones llevadas a cabo en dos momentos concretos, en una primera fase desde su creación hasta diciembre de 1934. Es difícil cuantificar principalmente las expropiaciones llevadas a cabo durante 1933, durante los últimos meses del bienio progresista, ya que durante el bienio conservador se paralizaron las expropiaciones y asentamientos.
Comentario Histórico sobre la Reforma Agraria
La Ley de Bases de Reforma Agraria fue la ley de más calado social que abordó la Segunda República, pretendiendo con ella abordar uno de los problemas estructurales de España: el reparto de la tierra o, lo que es lo mismo en un país fundamentalmente rural, el reparto de la riqueza. El desigual reparto de la tierra afectaba a España desde hacía varios siglos y había impedido el progreso económico y, en consecuencia, su modernidad.
El origen del problema radicaba prácticamente desde la Edad Media, cuando la Reconquista y la consiguiente repoblación habían desconfigurado una estructura socioeconómica basada en los señoríos laicos y religiosos. Esta estructura se basaba en la propiedad de la tierra, donde esta constituía bienes de manos muertas, una propiedad no susceptible de estar sujeta a la ley del mercado.
En el siglo XIX, los liberales progresistas intentaron atacar los problemas con las desamortizaciones de Mendizábal y de Madoz, pero resultaron absolutamente fallidas, ya que no solo no acabaron con el problema del reparto de tierras, sino que lo aumentaron al quedarse la burguesía con las tierras expropiadas (provenientes del clero y los bienes del Ayuntamiento).
La Segunda República tenía como uno de sus objetivos acabar con este problema. Es por ello que, aprobada la Constitución, se puso manos a la obra para abordar esta cuestión. La ley se aprobó el 9 de septiembre de 1932, aprovechando el entusiasmo republicano que había provocado el fallido golpe militar de Sanjurjo.
La ley recorrió un camino difícil por varias razones:
- No tuvo suficientes recursos económicos.
- Estuvo sujeta a cambios políticos.
- Sufrió el boicot por parte de los propietarios.
- Los campesinos beneficiarios de la ley se sintieron decepcionados por la lentitud con la que se llevó a cabo.
El Manifiesto del Frente Popular (1936)
El documento se estructura en dos partes principales:
- Relación de fuerzas políticas: Es una relación de las fuerzas políticas firmantes del documento que formaron parte de la coalición que acudió a las elecciones generales de febrero de 1936. En esta relación hay fuerzas burguesas (como Izquierda Republicana) y fuerzas obreras (PSOE, POUM). Los anarquistas no firmaron este documento, dejando libertad a sus afiliados.
- Programa de Gobierno: Contiene una serie de apartados donde se recogen algunas ideas que habrían de guiar la tarea del gobierno. Se establece que sería una República que se asentaría en los principios de la libertad y el progreso social, y que tendría como principal objetivo la dignificación de la clase trabajadora.
H3.1. Principios Ideológicos y Educación
El párrafo 7 habla de la enseñanza, que debe ser impartida por el Estado y debe ser universal, de calidad y laica. Estos principios se encuadran dentro de los principios ideológicos de la Institución Libre de Enseñanza (ILE).
H3.2. Contexto Histórico del Frente Popular
Los Frentes Populares surgen en Europa en la década de 1930. La unión de todos los partidos de izquierda fue defendida desde Moscú por la Komintern; por este motivo, el PCE estuvo presente. La causa era defender los sistemas democráticos frente a los totalitarismos (fascismo y nazismo).
El Frente Popular constituye la última etapa de unos cinco años muy convulsos, en medio de un clima político y social conflictivo. Vencedor de las elecciones de febrero de 1936, sus comienzos fueron difíciles porque la derecha no aceptó el resultado electoral.
Tal como decía el manifiesto, el gobierno que se formó después de las elecciones estaba compuesto por partidos republicanos, pero con el apoyo de partidos obreros.
Algunas de las medidas que tomó el nuevo gobierno estaban recogidas en el Manifiesto:
- Amnistía a los presos políticos de la Revolución de Octubre de 1934.
- Devolución de facultades a la Generalitat de Cataluña.
- Aceleración de la Reforma Agraria.
Pero las tensiones sociales seguían produciéndose. La clase trabajadora no se identificaba plenamente con este gobierno y ocupaba tierras; además, el sindicato anarquista amenazaba con manifestaciones.
Por otra parte, los militares preparaban un golpe militar que se tenía que producir el 18 de abril, pero se retrasó. Entonces, la Segunda República pide gobierno a Casares Quiroga.
A partir de la primavera, la violencia social en las calles aumentó. Suceden asesinatos por ambos bandos: el asesinato del teniente de la Guardia de Asalto José Castillo, seguido por el asesinato de José Calvo Sotelo.
Este suceso acabó por precipitar los acontecimientos. El 17 de julio, un grupo de militares proclamó el estado de guerra.
La Guerra Civil Española: Interpretación y Desarrollo
El autor plantea en el texto una interpretación actualizada de la Guerra Civil Española. En primer lugar, la Guerra Civil se considera inscrita en un marco europeo de crisis general.
H3.1. Causas y Dimensiones del Conflicto
Sobre sus causas, el autor propone que solo en su primera fase se ha de entender la guerra en clave exclusivamente española y como consecuencia de viejos conflictos no resueltos.
En su segunda fase, sin embargo, la guerra amplía su dimensión y pasa a ser el primer episodio en el enfrentamiento entre países europeos: unos de convicciones democráticas, otros de principios fascistas.
H3.2. El Fracaso de la República
Sobre el fracaso de la República en la guerra, según el autor, existieron dos tipos de responsables:
- Países Europeos: Tanto los fascistas (por su apoyo a los sublevados) como los democráticos (por su política de No Intervención).
- Responsables dentro de España: Se otorga responsabilidad a las concesiones de extrema izquierda, indicando la responsabilidad de aquellos que impusieron una estrategia que priorizaba la revolución social por encima de la necesidad de unirse para ganar la guerra.
Comentario Histórico sobre la Guerra Civil
La Guerra Civil Española fue un acontecimiento bélico nacional que, al participar factores ideológicos, políticos y económicos del resto de Europa, hizo que España se convirtiera en un país para la experimentación bélica.
Dentro de España, las fuertes tensiones sociales derivadas del atraso económico del país y la desigual distribución de la riqueza habían derivado en la polarización política.
El intento de los sectores reformistas republicanos por modernizar el país chocó con la oposición de los sectores conservadores más poderosos, así como con la oposición de la Iglesia.
Por otro lado, la Segunda República se encontró con la impaciencia de algunos sectores sindicales que dificultaban el éxito de algunas de estas reformas. Así, estas divergencias desembocaron en el triunfo del Frente Popular.
La causa de la Guerra Civil fue un golpe de Estado fallido organizado por sectores del ejército en connivencia con sectores oligárquicos.
El conflicto se inició el 17 de julio de 1936 con el alzamiento de una fracción del ejército encabezado por el general Franco, con el propósito de acabar con el gobierno republicano constitucional del Frente Popular.
El bando sublevado contaba con el apoyo de la Falange, los grupos carlistas y las potencias fascistas italiana y alemana, mientras que la República recibió apoyo de la URSS y se vio afectada por el Comité de No Intervención.
Una vez que el gobierno de las diversas localidades quedó en manos de los rebeldes, se formó en Burgos una Junta de Defensa Nacional que actuó como dirección política. Francisco Franco ocupó el mando con el cargo de Jefe de Gobierno del Estado. En este proceso fue muy importante la unificación de Falange y las JONS.
A diferencia de la unificación política lograda por Franco, el gobierno republicano padecía divisiones internas entre anarquistas y comunistas.
En noviembre de 1938, ante la inminente derrota, Juan Negrín buscó la paz negociada, pero Franco no quiso, pues exigía la rendición total de la República.
El 28 de marzo de 1939, las tropas franquistas entraban en Madrid y tres días más tarde, en las últimas plazas leales al gobierno republicano. La guerra se dio por terminada el 1 de abril de 1939.
La Ley de Responsabilidades Políticas (1939)
El texto presenta un fragmento de la Ley de Responsabilidades Políticas de 1939. En cuanto a su análisis literal, se diferencian varios artículos:
- Artículo Primero: Se declara la responsabilidad política de las personas partidarias de la República y opuestas al Movimiento Nacional, ya sea de forma activa o bien por “pasividad grave”, extendiendo su origen a la Revolución de 1934.
- Artículo Segundo: Se ilegalizan todos los partidos, agrupaciones políticas y sociales que se opusieron al Movimiento.
- Artículo Tercero: Los imputados automáticamente pierden sus derechos y propiedades.
H3.1. Idea Fundamental y Consecuencias
La idea fundamental que se extrae de estos datos es que el Gobierno de Franco decidió aprobar la ley para condenar a los que el régimen consideraba responsables políticos del estallido de la Guerra Civil de 1936-1939. Esto es, los partidos y agrupaciones políticas y sociales que, desde la convocatoria de las elecciones celebradas el 16 de febrero de 1936, habían integrado el llamado Frente Popular, así como los partidos y agrupaciones adheridos a este por el solo hecho de serlo, las organizaciones separatistas y todas aquellas que se hayan opuesto al Triunfo del Movimiento Nacional.
En segundo lugar, señala las consecuencias para los imputados: la pérdida de todos sus derechos y sus bienes.
Comentario sobre la Represión Franquista
A la hora de valorar el texto, son varios los aspectos a tener en cuenta. En primer lugar, la etapa de represión que los vencedores inician incluso antes de acabarse la Guerra Civil Española, con la finalidad de atemorizar a todos aquellos que no se identificaban con el nuevo régimen.
En febrero de 1939 se promulgó la Ley de Responsabilidades Políticas, según la cual podían ser condenados no solo aquellos que habían colaborado con el gobierno legal de la República, sino también aquellos que supuestamente hubieran mostrado una “pasividad grave”. Esta ley forma parte de una serie de disposiciones legales que sirvieron al nuevo régimen franquista, ejerciendo la represión contra los vencidos, mientras una ley de amnistía de septiembre de 1939 borraba los delitos de los vencedores que habían actuado contra la II República.
H4.1. Campos de Concentración y Trabajos Forzosos
En la geografía española surgieron numerosos campos de concentración donde se hacinaban cientos de miles de detenidos, viviendo en condiciones de malos tratos y muertes arbitrarias. Además, algunos represaliados republicanos sometidos se vieron obligados a realizar trabajos forzosos.
La principal obra que acometieron estos batallones de reclusos fue la construcción del Valle de los Caídos, basílica que alojó la tumba del propio Franco, cuyo proyecto se dio a conocer el 1 de abril de 1940.
H4.2. La Represión Judicial y Administrativa
El franquismo tuvo especial cuidado en que los tribunales estuviesen compuestos por personas afines. Estaban compuestos principalmente por militares y falangistas. Los juicios en ocasiones eran en grupo y sin las garantías mínimas.
Además de la represión judicial, también se aplicaron otras formas de represión: la administrativa y la económica. El franquismo, en su afán de combatir al “enemigo interior”:
- Depuró todos los organismos oficiales (siendo maestros y catedráticos “sospechosos”, puso especial atención en la depuración de la enseñanza).
- La economía se montó favoreciendo a los adictos al Régimen, excluyendo de ella a todo sospechoso de desafección.
En todas las ciudades y pueblos, la autoridad civil (falangistas, militares) y religiosa (encarnada por el párroco) emitían informes que, en el caso de ser negativos, conllevaban sanciones de todo tipo.