El Régimen Franquista: Institucionalización y Política Exterior (1939-1975)

La Institucionalización del Régimen Franquista (1939-1975)

El régimen de Franco careció de una constitución en el sentido formal de una Ley suprema definidora de los principios de orden político y de la organización de los poderes del Estado. Tuvo, sin embargo, un ordenamiento jurídico que se fue completando a lo largo de tres décadas, a través de las siete Leyes Fundamentales:

  1. El Fuero del Trabajo (1938): Fue una declaración en la que se contenían los principios de un nuevo orden social y económico. Se regulaban, por ejemplo, aspectos como la duración de la jornada laboral y los períodos de descanso. Se creaba la Magistratura de Trabajo y el Sindicato de estructura vertical y corporativa.
  2. La Ley Constitutiva de las Cortes (1942): Establecía las Cortes como el órgano parlamentario y superior de participación del pueblo en las tareas del Estado. Sus miembros eran elegidos por representación orgánica. Su representatividad se amplió ligeramente a partir de 1966, con la inclusión de los procuradores familiares.
  3. El Fuero de los Españoles (1945): En este fuero se reconocían los derechos y se establecían los deberes de los ciudadanos.
  4. La Ley de Referéndum Nacional (1945): Autorizaba al Jefe del Estado a consultar a la Nación sobre la aprobación de determinadas Leyes.
  5. La Ley de Sucesión en la Jefatura del Estado (1947): Establecía que Franco podría proponer a las Cortes una persona como sucesor suyo a título de Rey o de Regente. Se establecía la creación de un Consejo de Regencia, integrado por tres personas, encargado de asumir la Jefatura del Estado a la muerte de Franco. También creaba esta Ley el Consejo del Reino, que asesoraría al Jefe del Estado en los asuntos de especial trascendencia.
  6. La Ley de Principios del Movimiento Nacional (1958): En ella se definían los valores supremos y los principios básicos que debían inspirar toda la actuación del Estado. El juramento de fidelidad a esta ley era exigido para el ejercicio de cualquier cargo público.
  7. La Ley Orgánica del Estado (1967): Establecía la composición y competencia de los Altos Órganos del Estado y las relaciones entre sí, al tiempo que delimitaba las atribuciones ordinarias de la Jefatura del Estado, incluyendo la separación de los cargos de Jefe del Estado y Presidente de Gobierno.

El artículo décimo de la Ley de Sucesión ya había establecido cuál debería ser el procedimiento para reformar las Leyes Fundamentales: el acuerdo de las Cortes y un Referéndum de la Nación.

En la década de los cincuenta, Franco intentó una cierta apertura política, que se materializaría en la pérdida de peso específico de las personalidades del Movimiento Nacional a favor de ministros próximos al Opus Dei, así como en la promulgación de la Ley de Prensa (1966) y la Ley de Libertad Religiosa (1967).

En el ámbito internacional, el reconocimiento del régimen fue cada día más amplio, pero la solicitud de ingreso en la Comunidad Económica Europea fue denegada como consecuencia del carácter no democrático del régimen.

La Sucesión de Franco

La sucesión de Franco se planteó en dos aspectos:

  1. Como Jefe de Gobierno: En 1973, el cargo fue ocupado por Carrero Blanco. Tras su muerte, el cargo sería ocupado por Arias Navarro.
  2. Como Jefe de Estado: En 1969 fue designado como sucesor, a título de rey, don Juan Carlos de Borbón.

Evolución de la Política Exterior Franquista

El régimen de Franco se fue adaptando a lo largo de su larga existencia. De esta manera, podemos distinguir varias etapas en su política exterior:

  1. Alianza con los países del Eje (1939-1945)

    Aunque hubo una clara simpatía por los países del Eje, España se mantuvo oficialmente al margen del conflicto. La posición de Franco osciló entre la no beligerancia y la neutralidad. Este cambio se produjo al observarse un giro en el desarrollo de la Segunda Guerra Mundial.

  2. Giro Diplomático y Aislamiento (1945-1953)

    Tras la Segunda Guerra Mundial, el régimen de Franco se vio sometido a un riguroso cerco internacional. En 1946, la ONU condenó al régimen de Franco y decidió el aislamiento diplomático de España. Francia cerró la frontera con España. El bloqueo económico y diplomático obligó a prolongar la autarquía. Desde 1947, el régimen se definió como una monarquía hereditaria, y las conversaciones entre Franco y don Juan de Borbón cristalizaron en un acuerdo para que la educación del príncipe don Juan Carlos se realizara en España.

  3. Guerra Fría y Apertura a Occidente (1953-1973)

    Las relaciones internacionales tras la Guerra Mundial derivaron hacia la Guerra Fría. A partir de 1948, la situación internacional cambió a favor del régimen. El enfrentamiento entre Estados Unidos y la U.R.S.S. en la Guerra Fría obligó a los americanos a buscar aliados y bases militares intermedias por todo el mundo. Gracias a esta relación con los americanos, la dictadura rompió su aislamiento internacional y se fue incorporando progresivamente, aunque con limitaciones, en las instituciones internacionales. Los hechos más relevantes de este proceso de apertura fueron los siguientes:

    • El ingreso de España en diversos organismos internacionales.
    • La firma de un Concordato con la Santa Sede (1953).
    • La firma de un acuerdo con los Estados Unidos (1953).
    • El ingreso de España en la ONU en 1955.

    Desde 1958, España emprendió ciertas iniciativas que le otorgaron un limitado protagonismo del que carecía por completo en los años cuarenta y cincuenta. Entre los hechos más importantes de la política exterior española de estos años destacan los siguientes:

    • Visita oficial a España del presidente norteamericano Eisenhower.
    • Firma de un Acuerdo Preferencial en 1970 con la CEE.
    • Reconocimiento de la independencia de Marruecos y Guinea Ecuatorial.
    • Cesión de Ifni a Marruecos y la cuestión del Sáhara.
  4. Dificultades Exteriores y Últimos Años (1973-1975)

    Las relaciones exteriores también atravesaron momentos de serias dificultades a partir de 1973. Destacó el conflicto del Sáhara: España aceptó su descolonización, por lo que apoyó un referéndum de autodeterminación ante la presión del Frente Polisario. Sin embargo, Hassan II de Marruecos (con el apoyo de Estados Unidos) organizó la Marcha Verde, ante la cual España entregó el Sáhara a Marruecos y Mauritania, mediante el Acuerdo de Madrid, olvidando así el compromiso de referéndum. Por otra parte, en 1974 cayeron las dictaduras de Portugal y de Grecia, quedando España como la última dictadura que pervivía en Europa occidental.