El Reinado de Carlos IV y la Guerra de Independencia Española (1788-1814)
El reinado de Carlos IV (1788-1808) estuvo marcado por una profunda crisis política y económica que culminaría en la Guerra de Independencia.
Política Exterior
La política exterior de Carlos IV se desarrolló en dos etapas principales:
- 1ª Etapa: Enfrentamiento con Francia (1789-1795)
- España participó en las coaliciones antirrepublicanas tras la Revolución Francesa.
- Surgieron pérdidas territoriales.
- El conflicto finalizó con la Paz de Basilea (1795), que permitió la recuperación de territorios a cambio de la cesión de Santo Domingo a Francia.
- 2ª Etapa: Alianza con Francia (1796-1808)
- Se estableció una alianza con Francia, lo que llevó a la guerra contra Gran Bretaña.
- España sufrió importantes derrotas navales en el Cabo de San Vicente (1797) y Trafalgar (1805), que diezmaron su flota.
- Se firmó el Tratado de Fontainebleau (1807) con Napoleón, que preveía la ocupación y el reparto de Portugal. Este tratado facilitó la entrada de tropas francesas en España.
Política Interior y Crisis del Antiguo Régimen
Las causas de la crisis económica fueron el hambre, las continuas guerras, los escasos ingresos de la Hacienda Real y los altos precios de los alimentos. El desencadenante de la crisis política fue el Motín de Aranjuez (marzo de 1808), que obligó a Carlos IV a abdicar en su hijo Fernando VII.
Para acabar con la ingobernabilidad de España, Napoleón invitó a padre e hijo a Bayona y los obligó a abdicar en su persona (Abdicaciones de Bayona). Este acto provocó la Rebelión del 2 de Mayo de 1808 en Madrid, que fue continuada por una brutal represión por parte del general Murat. Este levantamiento popular marcó el inicio de la Guerra de Independencia Española.
Fases de la Guerra de Independencia (1808-1814)
La guerra se desarrolló en tres fases principales:
- 1ª Fase: Mayo – Noviembre de 1808
- Las fuerzas napoleónicas sufrieron derrotas significativas en Bailén y en el Bruch.
- Se produjeron sitios de ciudades clave en núcleos de comunicación (Zaragoza, Gerona).
- 2ª Fase: Diciembre de 1808 – Junio de 1812
- La Grande Armée, liderada por el propio Napoleón, entró en España, derrotando a las tropas españolas y británicas.
- Se ocupó casi toda la península Ibérica, salvo Cádiz y el territorio protegido por las líneas de Torres Vedras en Portugal.
- 3ª Fase: Junio de 1812 – Noviembre de 1813
- El ejército anglo-luso-español, bajo el mando de Wellington, liberó Portugal y preparó su avance sobre el territorio español.
- Las victorias decisivas de Vitoria (1813) y San Marcial (1813) expulsaron al ejército napoleónico de la península, salvo Cataluña.
- Mediante el Tratado de Valençay (diciembre de 1813), Napoleón abdicó la corona española en la persona de Fernando VII, poniendo fin a la guerra.
La Guerrilla
Durante la Guerra de Independencia, surgió una forma de guerra popular e irregular conocida como la guerrilla. Estos grupos, formados por antiguos soldados o ciudadanos, se lanzaban al monte para hostigar a los franceses, provocando un gran desgaste y una sangría constante para el ejército napoleónico. La guerrilla fue uno de los dos grandes errores estratégicos de Napoleón en España.
Organización Política Durante la Guerra
Ante el apresamiento del monarca, el pueblo se sublevó y los nobles de cada provincia se organizaron en Juntas Provinciales. Estas Juntas, a su vez, se unieron en la Junta Central Suprema y Gubernativa del Reino, impulsada por la necesidad de los británicos de negociar con una única entidad. La Junta Central dio lugar al Consejo de Regencia, que finalmente se estableció en Cádiz.
Consecuencias de la Guerra
La guerra tuvo graves consecuencias, incluyendo pérdidas demográficas de más de 500.000 muertos, a lo que se unió una devastación económica y social.
Las Cortes de Cádiz y la Constitución de 1812
Las Cortes de Cádiz representaron un hito fundamental en la historia del liberalismo español.
Antecedentes: El Estatuto de Bayona
El Estatuto de Bayona (1808) fue una carta otorgada por Napoleón para el gobierno francés en España. Aunque no llegó a aplicarse plenamente, instauraba un sistema basado en principios liberales, pero con un carácter autoritario y siempre sometido a las necesidades de Napoleón.
Características del Estatuto de Bayona:
- Régimen autoritario.
- Órganos consultivos.
- Confesionalidad católica.
- Medidas modernizadoras, destacando la abolición de la jurisdicción señorial, la disolución de la Inquisición y el reconocimiento de limitados derechos.
Grupos Políticos Opuestos a Napoleón (Patriotas)
En España, se distinguieron tres grupos principales opuestos a la ocupación francesa:
- Serviles: Partidarios del absolutismo y del retorno de Fernando VII como monarca absoluto.
- Jovellanistas: Defensores de una conjunción entre el rey y un liberalismo moderado, buscando reformas ilustradas sin romper con la tradición.
- Liberales: Partidarios de un cambio radical, defensores de la soberanía nacional, las Cortes y una Constitución.
Origen del Constitucionalismo Español
El constitucionalismo español tuvo su origen en la organización política surgida durante la guerra: las Juntas Provinciales, la Junta Central Suprema y el Consejo de Regencia, que finalmente convocaron las Cortes Generales y Extraordinarias en Cádiz.
Ideologías Presentes en las Cortes de Cádiz
En las Cortes de Cádiz convivieron diversas ideologías:
- Liberales: Mayoritarios y promotores de las reformas más profundas.
- Renovadores o Jovellanistas: Buscaban un equilibrio entre tradición y modernidad.
- Absolutistas o Serviles: Defensores del Antiguo Régimen y la monarquía absoluta.
Ámbitos de Actuación de las Cortes de Cádiz
Las Cortes de Cádiz actuaron en dos ámbitos fundamentales:
- Político: Suprimir el absolutismo y establecer una Constitución que garantizara la soberanía nacional y la división de poderes.
- Social: Erradicar la sociedad estamental y los privilegios, estableciendo principios como la libertad, la igualdad, la propiedad y la seguridad jurídica.
Composición de las Cortes de Cádiz
Las Cortes de Cádiz estuvieron formadas por aproximadamente 300 diputados, procedentes de cada una de las provincias de España y de los virreinatos americanos. Abundaban profesionales liberales, funcionarios y eclesiásticos.
La Constitución de 1812 (La Pepa)
La Constitución de 1812, promulgada el 19 de marzo, fue la primera Constitución española y un referente para el liberalismo europeo. Sus principios fundamentales fueron:
- Soberanía nacional: El poder reside en la nación, no en el rey.
- Sufragio universal masculino indirecto: Derecho al voto para los hombres, aunque con un sistema de elección escalonado.
- División de poderes:
- Legislativo: En las Cortes unicamerales.
- Ejecutivo: En el rey y sus ministros, con el rey sometido a la Constitución.
- Judicial: En los tribunales de justicia.
- Régimen político: Monarquía parlamentaria.
- Derechos reconocidos: Libertad de imprenta, propiedad, inviolabilidad de domicilio, derecho a la educación, entre otros.
- Igualdad: Territorial (igualdad jurídica de todos los ciudadanos) e igualdad fiscal.
- Religión oficial: Católica, apostólica y romana.
Medidas Económicas y Sociales de las Cortes de Cádiz
Estas medidas supusieron una ruptura radical con el Antiguo Régimen y la sociedad estamental:
- Desamortización: Sobre bienes de afrancesados, órdenes militares, conventos y tierras municipales.
- Eliminación del mayorazgo: Permitiendo la libre disposición de las propiedades.
- Supresión del Régimen Señorial: Los señores dejaron de impartir justicia y de recibir rentas feudales, y los campesinos pasaron a ser libres.
- Libertad de trabajo y contratos: Fin del sistema gremial, que regulaba la producción y el acceso a los oficios.
- Supresión de la Inquisición: Abolición del tribunal eclesiástico.
La Guerra de Sucesión Española (1700-1714) y el Nuevo Orden Europeo
El siglo XVIII en España se inicia con un cambio dinástico y un conflicto internacional.
Causas y Contendientes
En el año 1700, muere Carlos II, el último rey de la Casa de Austria en España, sin descendencia directa. Declara como heredero a Felipe de Anjou (futuro Felipe V), nieto de Luis XIV de Francia. Esta decisión fue opuesta por Leopoldo I, emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, que defendía los derechos del archiduque Carlos (futuro Carlos VI).
La invasión de tropas francesas de los Países Bajos españoles llevó a la formación de la Gran Alianza de La Haya (1701), firmada por Inglaterra, las Provincias Unidas (Holanda), el Sacro Imperio, Saboya y Portugal, con el objetivo de evitar la unión de las coronas francesa y española bajo los Borbones.
Desarrollo del Conflicto
En 1705, la Corona de Aragón (Cataluña, Aragón, Valencia y Mallorca) se sublevó en apoyo del archiduque Carlos, temiendo la centralización borbónica. Los borbónicos sufrieron derrotas tanto en España como en Europa. Sin embargo, en 1711, se produjo una reacción franco-castellana. La situación cambió drásticamente cuando el archiduque Carlos se convirtió en emperador del Sacro Imperio (Carlos VI), lo que hizo que sus aliados (Inglaterra, Holanda, Portugal y Saboya) temieran ahora una excesiva concentración de poder en la Casa de Austria. Por ello, propusieron una paz a los Borbones.
El Tratado de Utrecht (1713) y Rastatt (1714)
La guerra finalizó con la firma del Tratado de Utrecht (1713) y el posterior Tratado de Rastatt (1714), que reconfiguraron el mapa político europeo y establecieron un nuevo equilibrio de poder. España fue la principal perdedora territorial:
- A Austria se le cedieron los Países Bajos españoles, Milán, Cerdeña y Nápoles.
- A Inglaterra (Gran Bretaña) se le cedieron Gibraltar y Menorca, además del Asiento de Negros (monopolio para comerciar con esclavos en América) y el Navío de Permiso (derecho a enviar un barco anual con mercancías a las colonias españolas).
- A Saboya se le cedió el este del río Ticino y Sicilia (que luego intercambiaría con Austria por Cerdeña).
- A Portugal se le cedió la Colonia del Sacramento (en la actual Uruguay).
- A las Provincias Unidas se les concedieron ventajas comerciales con las Indias.
- Francia, por su parte, cedió a Inglaterra Acadia, la Bahía de Hudson, Nueva Escocia y Terranova en América del Norte.
Los Pactos de Familia
Los Pactos de Familia fueron acuerdos de alianza militar y política firmados entre los Borbones franceses y españoles a lo largo del siglo XVIII, principalmente para enfrentarse a su enemigo común: Gran Bretaña. Se firmaron tres pactos:
- El objetivo de Francia era consolidarse como la primera potencia europea.
- El objetivo de España era reconquistar los territorios perdidos en Utrecht y recuperar las prebendas comerciales.
- En el Primer Pacto de Familia (1733), España obtuvo el Reino de las Dos Sicilias para el Infante Don Carlos (futuro Carlos III de España).
- En el Segundo Pacto de Familia (1743), España obtuvo los Ducados de Parma, Plasencia y Guastalla para el Infante Don Felipe.
- En el Tercer Pacto de Familia (1761), España recuperó Florida y Menorca.
La Nueva Monarquía Borbónica en España: Centralización y Reformas
Con la llegada de los Borbones, se estableció en España un modelo de monarquía absolutista, siguiendo el patrón francés.
Modelo de Monarquía Absolutista
Todos los poderes del Estado se concentraron en la figura del monarca. Los antiguos consejos, característicos de los Austrias, desaparecieron o vieron reducida su influencia, y surgieron los Ministerios (o Secretarías de Estado y del Despacho): Guerra, Estado, Hacienda, Marina e Indias, y Gracia y Justicia. Estos ministerios eran más eficientes y respondían directamente al rey.
Los Decretos de Nueva Planta
Los Decretos de Nueva Planta se instauraron en los territorios de la Corona de Aragón (Valencia y Aragón en 1707, Cataluña en 1714 y Mallorca en 1715), que habían apoyado al archiduque Carlos durante la Guerra de Sucesión. Estos territorios perdieron sus fueros e instituciones propias, y se les impuso el derecho castellano, que era el modelo del territorio fiel a los Borbones. Sin embargo, mantuvieron su derecho privado.
Navarra y el País Vasco, que habían apoyado a Felipe V, mantuvieron sus fueros, e incluso se les concedió un mayor gravamen fiscal para la reconstrucción de sus territorios.
Modelo Centralista de Administración
El modelo administrativo borbónico fue marcadamente centralista, con la Corte como centro de poder, seguida por las provincias y, por último, los municipios. El poder provincial se concentró en la figura del Intendente, un funcionario real que era jefe de todo en la provincia y respondía directamente ante el rey. Al frente de los municipios se situó un Alcalde, que ya no respondía ante el patriciado urbano local, sino ante la autoridad real.
La Sociedad y Economía Española en el Siglo XVIII: Transformaciones y Desafíos
El siglo XVIII, bajo la monarquía borbónica, experimentó cambios significativos en la sociedad y la economía española.
Sociedad Estamental
La sociedad española siguió manteniendo una estructura estamental, con clases privilegiadas (nobleza y clero) que no pagaban impuestos y gozaban de exenciones legales. La burguesía, aunque en ascenso, luchó por que sus oficios fueran declarados dignos y útiles, evitando así la leva militar que recaía principalmente en los campesinos.
Economía Agraria
La economía era principalmente agraria, con dos tipos principales de campesinos: los propietarios de tierra y, en mayor medida, los arrendatarios y los jornaleros, que vivían en condiciones más precarias.
Artesanía e Industria
En cuanto a la artesanía y la industria, se impulsó la modernización. Se enviaron especialistas a las fábricas holandesas y británicas para copiar sus modelos y técnicas, lo que permitió mejorar la producción en España.
Comercio con América
El comercio con América experimentó cambios importantes. Desaparecieron los antiguos sistemas de flotas y galeones, y el comercio se liberalizó, permitiéndose el intercambio entre diferentes puertos peninsulares y americanos, lo que impulsó el tráfico mercantil.
El Resurgimiento de Cataluña
El resurgimiento económico de Cataluña se vio favorecido por la política de reconstrucción del territorio después de la Guerra de Sucesión. Al estar controlada Cataluña por funcionarios castellanos poco relacionados con las élites locales, la corrupción fue menor, lo que permitió un desarrollo más eficiente. La capacidad de estos funcionarios se trasladó también a la administración en América, aunque en ocasiones provocó rebeliones en las colonias a lo largo del siglo XVIII debido a la mayor presión fiscal y administrativa.
La Ilustración en España y el Reinado de Carlos III: Reformismo Borbónico
La Ilustración fue una corriente de pensamiento clave en el siglo XVIII, que influyó profundamente en las políticas de la monarquía borbónica, especialmente durante el reinado de Carlos III.
Ideas Fundamentales de la Ilustración
La Ilustración, que se difundió por Europa en el siglo XVIII, se basaba en los siguientes principios:
- Predominio de la razón como fuente de conocimiento.
- La crítica y la libertad de pensamiento.
- La autonomía del poder político respecto a la religión.
- La tolerancia religiosa.
- Interés por la racionalización de la producción y la economía.
- Valoración de la educación como motor de progreso.
Canales de Difusión de la Ilustración en España
Los principales canales de difusión de las ideas ilustradas en España fueron:
- Las Academias (Real Academia Española, Real Academia de la Historia, etc.).
- Las Universidades, que comenzaron a reformarse.
- Las Sociedades Económicas de Amigos del País, que promovían el desarrollo económico y social.
En este periodo se promovieron expediciones científicas, como la de Malaspina, y en literatura se desarrollaron géneros como el ensayo, la comedia neoclásica y los libros de viaje.
Carlos III: El Rey Ilustrado (1759-1788)
El prototipo de rey ilustrado en España fue Carlos III. Trajo consigo ministros italianos (como Esquilache) y luego incorporó a destacados ministros ilustrados españoles como el Conde de Aranda, Floridablanca, Campomanes y Jovellanos. Carlos III realizó importantes reformas en distintos ámbitos:
Reformas de Carlos III:
- Religiosas: Limitó el poder de la Inquisición y aplicó políticas regalistas, buscando la supremacía del poder real sobre el eclesiástico.
- Económicas:
- Liberalización del comercio con América.
- Modernización de la agricultura (nuevos cultivos, repoblaciones).
- Limitación de los privilegios de la Mesta (asociación de ganaderos).
- Creación de Reales Fábricas (manufacturas estatales).
- Declaración de que todos los oficios son dignos y útiles (dignificación del trabajo).
- Creación del Banco de San Carlos (precursor del Banco de España).
- Educativas: Fomentó la educación pública, reformó la universidad y apoyó la creación de sociedades y academias.
Políticas Respecto a América:
Las reformas borbónicas en América, especialmente bajo Carlos III, buscaron aumentar el control y la rentabilidad de las colonias:
- Fomento de productos americanos que sirvieran para la metrópoli.
- Racionalización y modernización de su explotación.
- Reorganización territorial (creación de nuevos virreinatos y capitanías generales) y ampliación del territorio bajo control efectivo.
- Liberalización del comercio con América (fin del monopolio de Cádiz).
- Expulsión de los jesuitas (1767), vistos como una amenaza al poder real.
- Refuerzo del ejército profesional y creación de milicias de criollos.
- Impulso de la minería, las estancias y las plantaciones.
- Determinados productos fueron monopolizados por compañías comerciales.