La Huelga General de 1917 y la Opinión Pública Obrera

Nos encontramos ante un manifiesto lanzado por los socialistas para justificar la convocatoria de una huelga general para el 3 de agosto de 1917, solicitando la adhesión de todos los obreros y de todo el pueblo español. Dada la situación de crisis del sistema de la Restauración y las demandas que desde distintas instituciones se habían realizado, los obreros se suman ahora para conseguir un cambio de régimen político que solucione los problemas del país. Este manifiesto, firmado por importantes figuras del socialismo español, tanto de la UGT como del PSOE, fue convocado el 12 de agosto de 1917 para el día siguiente.

Ideas Principales y Secundarias del Manifiesto

Idea Principal:

La idea principal es la convocatoria de una huelga general obrera con el objetivo de conseguir un cambio de régimen que solucione los problemas del país.

Ideas Secundarias:

• Justifica la necesidad de un cambio de régimen, defendido también por otros organismos.
• En el segundo párrafo, se señala que la huelga se lanza como apoyo a los ferroviarios valencianos y que no cesará hasta que no se produzca un cambio de régimen.
• Finaliza con un llamamiento a los ciudadanos para que se sumen a la huelga, destacando el sacrificio de los obreros por el bien del país y desmintiendo que sean un instrumento de desorden, como se quiere hacer ver desde el gobierno.

Contexto Histórico: La Profunda Crisis de la Restauración (Reinado de Alfonso XIII)

Este texto se encuadra dentro de la profunda crisis del sistema que tuvo lugar durante el reinado de Alfonso XIII y que tuvo uno de sus momentos cruciales en 1917 con los sucesos que se desarrollaron ese año. Dentro del reinado de Alfonso XIII, hay que distinguir varias fases:

Fases de la Crisis del Sistema de la Restauración

• La Crisis de 1905: Provocada por la victoria nacionalista en las elecciones municipales catalanas y el intervencionismo militar ante lo que ellos consideraron una “victoria separatista”, lo que consiguió el reparto del gobierno.
• La Semana Trágica de Barcelona de 1909: Fruto de la guerra que se inicia en Marruecos, la llamada a los reservistas catalanes evidenció las desigualdades sociales y el injusto sistema de quintas imperante, las duras condiciones de vida obrera y el anticlericalismo radical, que degeneró en unos violentos sucesos y una dura represión.
• La Crisis de 1917: Una triple crisis generada por los efectos de la Primera Guerra Mundial:
  • Crisis Militar: Surgida en la Junta de Defensa Militar, que protestaba contra los ascensos de los militares africanistas, reclamaba mejoras laborales y pedía un mayor respeto al ejército. El gobierno accedería a sus peticiones en la Ley del Ejército de 1918.
  • Crisis Política (1916-1917): Se cerraron las Cortes por posibles casos de corrupción. Como reacción, se organizó en Barcelona una Asamblea de Parlamentarios que exigía la formación de un gobierno provisional para reformar el sistema de la Restauración.
  • Crisis Social: En 1917, la organización obrera convocó una huelga general revolucionaria para acabar con la monarquía, pero fracasó y surgió una dura represión del gobierno con ayuda del ejército.
• La Descomposición del Sistema: Durante esta etapa, cabe destacar la inestabilidad política y la incapacidad para hacer reformas, así como la enorme conflictividad social después de 1917, como el denominado Trienio Bolchevique y el pistolerismo en Cataluña. Un acontecimiento especial fue el desastre militar de Annual en Marruecos, que demostró negligencia por parte del ejército y el monarca. El golpe de Primo de Rivera vino en auxilio de la monarquía.

Manifiesto de la Agrupación de Intelectuales al Servicio de la República (1931)

Los autores de este manifiesto son un grupo de intelectuales que se asociaron bajo el nombre de la Agrupación al Servicio de la República, un movimiento político español creado a principios de 1931 por José Ortega y Gasset, Gregorio Marañón y Ramón Pérez de Ayala. Su objetivo era modernizar España y abrirla a Europa. Para ello, consideraban necesario acabar con la monarquía y traer la República.

En las elecciones municipales del 12 de abril de 1931, la Agrupación al Servicio de la República no presentó candidatos, pero pidió el voto para la candidatura republicana. Posteriormente, se convirtió en partido político de signo liberal y en las elecciones constituyentes del 28 de junio de 1931 consiguió 13 diputados en las Cortes Constituyentes, siendo relativamente poco influyente. Las diferencias internas y el desencanto respecto al nuevo régimen, así como el cariz demasiado extremista que tomaba, provocaron su disolución a fines de 1932.

Ideas Clave del Manifiesto

Idea Principal:

La idea principal del manifiesto es explicar la necesidad de sustituir la monarquía borbónica (la «Monarquía de Sagunto», a la que se refiere el texto, iniciada con el reinado de Alfonso XII y en manos de Alfonso XIII en ese momento), que mostraba signos de crisis y agotamiento, por la República, para lo cual era necesaria la presión de la opinión pública.

Ideas Secundarias:

• Necesidad de generar una gran presión popular para acabar con la monarquía borbónica de la Restauración y traer una República.
• Para ello, impulsan la creación de un movimiento de intelectuales al servicio de la República (la Agrupación de Intelectuales al Servicio de la República), que sería un grupo de presión influyente para divulgar los ideales republicanos entre los españoles, sin llegar a constituir un partido político.
• Exponen sus objetivos: movilizar a los intelectuales de ideología republicana para que hagan campaña a favor de la República e influyan sobre la sociedad española para alcanzar la creación de un Estado republicano mediante el triunfo en unas elecciones a Cortes Constituyentes «con las máximas garantías de pulcritud civil» (es decir, libres de la corrupción electoral de la Restauración), y organicen la vida pública en todos los rincones del país, para que el próximo Estado republicano se cree y funcione con unas bases sólidas y modélicas.

El Declive de la Monarquía de Alfonso XIII

Alfonso XIII estaba convencido del protagonismo político que le otorgaba la Constitución de 1876 y en ningún momento estuvo dispuesto a renunciar a su soberanía compartida con las Cortes. El papel activo del Rey se manifestó en los continuos cambios de gobierno que promovió y en su decidido apoyo al estamento militar, lo que generó un intervencionismo militar creciente en la vida política que, a la postre, acabaría desprestigiando a la institución monárquica.

Por tanto, el fin de la monarquía no fue el resultado de una revolución, sino del deterioro del propio sistema político de la Restauración, iniciado en 1898 y progresivamente debilitado con las crisis de 1905 (crisis nacionalista), 1909 (Semana Trágica), 1917 (triple crisis provocada por los efectos de la Primera Guerra Mundial y la crisis general del sistema político de la Restauración) y, finalmente, 1923 (golpe de Estado militar). Además, la propia actuación real, con su apoyo a la Dictadura de Miguel Primo de Rivera, provocaría el descrédito final de la Monarquía.

Contexto Inmediato a la Proclamación de la República

Este texto se enmarca en el período comprendido entre el final de la Dictadura de Primo de Rivera (enero de 1930) y la proclamación de la Segunda República (abril de 1931).

El apoyo del rey Alfonso XIII a la Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930) provocó el desafecto de gran parte de la población hacia la monarquía. Tras la dimisión de Primo de Rivera, Alfonso XIII intentó volver al régimen constitucional en vigor hasta 1923 y, para ello, nombró presidente de gobierno al general Berenguer, que inauguró la llamada «Dictablanda». La oposición republicana se movilizó inmediatamente y en agosto de 1930 estableció el llamado Pacto de San Sebastián, un acuerdo para poner fin a la monarquía, al que se unieron los socialistas y algunos intelectuales como Fernando de los Ríos, Ortega y Gasset o Gregorio Marañón. También se creó un Comité Revolucionario presidido por Niceto Alcalá Zamora, se programó una huelga general y un pronunciamiento militar que fracasó (la sublevación militar de Jaca, diciembre de 1930). La población comenzó a asociar República con libertad. En este contexto se publica el Manifiesto de la Agrupación de Intelectuales al Servicio de la República (10 de febrero de 1931). Pocos días después, el rey sustituyó a Berenguer por el almirante Aznar como jefe de gobierno con el objetivo de convocar unas elecciones municipales para el 12 de abril de 1931, que preparasen el camino para volver a la normalidad constitucional de la Restauración, pero estas se convirtieron en un plebiscito entre monarquía y República.

La Revolución de Asturias de 1934: Última Proclama del Comité Revolucionario

Nos encontramos ante la última proclama del Comité Revolucionario de Asturias, que fue el único lugar donde triunfó la Revolución de 1934.

Tras el triunfo de las derechas en las elecciones de 1933, en España se vivía un ambiente de polarización política y radicalización de algunos grupos. La entrada de tres ministros de la CEDA en el gobierno desencadenó una reacción por parte de las izquierdas, que convocaron una huelga general contra el gobierno. En Asturias se llevó a cabo una revolución duramente reprimida por el gobierno.

Autoría y Contexto de la Proclama

Los autores del texto son los integrantes del Comité Provincial Revolucionario de Asturias, dirigentes de las fuerzas políticas y sindicales obreras que habían liderado la insurrección armada de octubre de 1934 en Asturias, es decir, socialistas, anarquistas y comunistas, que en esos momentos estaban dirigidos por el socialista Belarmino Tomás. Esta proclama se fecha el 18 de octubre de 1934, en los momentos finales de esta revolución, cuando estaba siendo ya controlada por parte de las tropas enviadas por el gobierno radical-cedista y se estaba negociando la rendición.

Ideas Centrales de la Proclama

Idea Principal:

La idea principal del texto es el llamamiento a los revolucionarios obreros para que vuelvan al trabajo y se produzca una tregua en la lucha.

Ideas Secundarias:

• Inicia la proclama exaltando los logros conseguidos por los revolucionarios para hacer más asumible la derrota entre los obreros.
• A continuación, se solicita que se abandone la lucha y se vuelva al trabajo, debido a los motivos del fracaso de la revolución: la superioridad militar y de armamento del gobierno y la intención de evitar más muertes.
• Insisten en que es un paréntesis en la lucha contra el fascismo; aunque hayan fracasado, la lucha continuará.

Causas de la Revolución de 1934

La victoria en las elecciones de noviembre de 1933 del centro-derecha y la política de paralización de las reformas llevadas a cabo durante el bienio anterior, así como la crisis económica internacional y la tensión en Europa entre fascismo y comunismo, generaron en España una creciente tensión entre los dos polos políticos. Esta tensión culminó con la entrada de tres ministros de la CEDA en el gobierno, lo que fue interpretado por la izquierda como el triunfo del fascismo en el país, debido a los antecedentes europeos como el nazismo. La izquierda era cada vez más extremista y los grupos: UGT, CNT, PSOE y PCE, llamaron a la huelga general en octubre de 1934.

Desarrollo de la Insurrección

El movimiento tuvo un seguimiento desigual en cada zona del país:

• En Madrid y Vizcaya, el movimiento fracasó, pues fue reprimido rápidamente por el gobierno.
• En Barcelona, Companys declaró el Estado Catalán dentro de la República Federal Española, lo que provocó la rápida intervención del gobierno y acabó con la suspensión del Estatuto de Autonomía.
• Asturias se llevó la peor parte: la huelga general triunfó y desencadenó una revolución organizada por la UGT, la CNT y los comunistas, que tomaron la cuenca minera, Oviedo y algunas fábricas. Incluso se establecieron comunas obreras en algunas localidades. Ante esta situación, la represión por parte del gobierno fue brutal y estuvo dirigida por el General Franco.

Consecuencias de la Revolución de Asturias

• Más de 1300 muertos y miles de heridos.
• Más de 3000 encarcelados, entre ellos Companys, Azaña y algunos dirigentes del PSOE.
• Diferencias en el gobierno de la CEDA y el Partido Radical que provocaron la convocatoria de elecciones para febrero de 1936.
• En Cataluña, el gobierno nacionalista fue detenido y la autonomía catalana suspendida.
• La dura represión generó el deseo de revancha de los represaliados y la polarización y radicalización política en ambos partidos.
• Todo ello favoreció la formación del Frente Popular, coalición de izquierdas que obtuvo la victoria en las elecciones de febrero de 1936.

La Revolución de Asturias fue la culminación de la polarización política en España; las diferencias políticas y la división entre españoles eran cada vez más notables y el conflicto era casi inevitable.

Características Esenciales de la Constitución de 1931

Contexto y Proclamación de la Segunda República

Tras las elecciones municipales (12 de abril de 1931), convocadas por el almirante Aznar, las candidaturas republicanas vencieron en las grandes ciudades, lo cual provocó la proclamación de la Segunda República el 14 de abril de 1931. Se creó un Gobierno Provisional dirigido por Niceto Alcalá Zamora y formado por republicanos de derecha e izquierda, socialistas y nacionalistas. El nuevo gobierno tuvo que responder al ansia general de reformas, por lo que se llevaron a cabo unas primeras medidas urgentes, con el objetivo de garantizar el trabajo y el salario de los jornaleros, así como reformas militares y educativas. A pesar de estas reformas, la República tuvo que enfrentarse a todo tipo de dificultades: el catalanismo, la radicalización de la CNT y la hostilidad de la Iglesia hacia el nuevo régimen, junto con el anticlericalismo de algunos sectores de la izquierda.

Elaboración y Aprobación de la Constitución

El Gobierno Provisional convocó elecciones a Cortes Constituyentes para junio de 1931. En estas elecciones, vencieron las izquierdas. La composición de estas Cortes, de mayoría de izquierda, elaboraría y aprobaría la Constitución de 1931 (9 de diciembre de 1931):

Principales Características de la Constitución de 1931

• Fue una Constitución partidista, con falta de consenso, pero profundamente democrática y laica.
• Se implantó una República de trabajadores.
• Se aprobó la soberanía popular.
• Se estableció el sufragio universal masculino y femenino.
• Se estableció la división de poderes:
  • Ejecutivo: Presidente de la República, Presidente del Gobierno y ministros.
  • Legislativo: Cortes unicamerales.
  • Judicial: Tribunales de Justicia y juicios por jurado.
• Amplia declaración de derechos y libertades.
• Se estableció el derecho de las regiones a establecer Estatutos de Autonomía, con el propósito de permitir a las regiones con sentimientos nacionalistas tener autonomía dentro de la unidad del Estado español.
• Se estableció el derecho a la expropiación con indemnización por motivos de interés nacional.
• En materia religiosa, se estableció un Estado laico y la separación entre la Iglesia y el Estado. Se limitó el poder y la influencia de la Iglesia Católica, estableciéndose lo siguiente:
  • Libertad de cultos.
  • Supresión del presupuesto de culto y clero (es decir, el Estado no mantendría económicamente a la Iglesia católica).
  • Prohibición a la Iglesia de ejercer la enseñanza.
  • Se aprobó el matrimonio civil, el divorcio y la secularización de los cementerios.
  • Se expulsó a la Compañía de Jesús.

Impacto y Controversias

Tras la aprobación de la Constitución, se nombró y se hizo cargo de la Presidencia del Gobierno a Manuel Azaña, con un gobierno formado por republicanos de izquierda, socialistas y nacionalistas, y se nombró como Presidente de la República a Niceto Alcalá Zamora. La Constitución no consiguió el consenso (acuerdo) de todas las fuerzas políticas y puso de manifiesto las profundas discrepancias (diferencias) entre la derecha y la izquierda, sobre todo en lo referente a las cuestiones religiosa y autonómica.

La Monarquía Visigoda: Unificación bajo Leovigildo y Recaredo

Orígenes y Consolidación del Reino Visigodo

En el año 409, diversos pueblos bárbaros atravesaron la frontera del Imperio Romano y penetraron en la Península Ibérica sin encontrar mucha resistencia. Para frenar este avance, el debilitado Imperio Romano pactó un acuerdo con otro pueblo bárbaro ya romanizado: los visigodos. Al desaparecer el Imperio Romano de Occidente en 476 d.C., el reino visigodo se extendía desde el sur de la Galia hasta el río Tajo. En los años siguientes, el reino visigodo se fue consolidando y extendiéndose por Hispania. En 507, los visigodos fueron derrotados por los francos en la Batalla de Vouillé, lo que les obligó a desplazarse desde la Galia hacia Hispania, donde establecieron un reino visigodo independiente con capital en Toledo.

El Proceso de Unificación Visigoda

La monarquía visigoda realizó un proceso de unificación territorial, político-jurídico y religioso, llevado a cabo principalmente durante los reinados de Leovigildo y su hijo Recaredo. Con ellos, se expandió el dominio visigodo en el territorio peninsular y se estableció la igualdad de derechos entre hispanorromanos y visigodos, derogando la ley que prohibía los matrimonios mixtos. Posteriormente, su hijo Recaredo abandonó el arrianismo y se convirtió al cristianismo.

Instituciones y Legado

La monarquía visigoda contó con instituciones de gobierno entre las que destacan el Aula Regia y los Concilios de Toledo. Para la unidad religiosa, Recesvinto, a mediados del siglo VII, creó la igualdad legal entre visigodos e hispanorromanos tras la promulgación del Fuero Juzgo, que constituiría el principal legado visigodo a los futuros reinos peninsulares. También encontramos muestras de su orfebrería y pequeñas iglesias con los característicos arcos de herradura.

Al-Ándalus: El Esplendor del Califato de Córdoba

El Califato de Córdoba: Apogeo y Fragmentación

Al-Ándalus fue el nombre que le dieron los musulmanes a la zona de la Península Ibérica que controlaban, y que fue variando con el tiempo. El Califato de Córdoba fue un Estado musulmán de Al-Ándalus con capital en Córdoba. En el año 929, Abderramán III se proclamó califa, asumiendo el poder político y religioso, y puso fin al emirato independiente instaurado por Abderramán I. El Califato fue la época de máximo esplendor político, cultural y comercial de Al-Ándalus. Su organización política implicaba un gobierno centralizado y el territorio se dividía en provincias. Con el hijo de Abderramán III, Al-Hakam II, continuó la época dorada del Califato. Tras él, Almanzor se hizo con el poder político a partir del califa Hisham II. A su muerte, comenzó la decadencia del Califato, entrando en un periodo de descomposición que culminó en el año 1031 con la fragmentación del Califato en pequeños reinos llamados Taifas.

Economía y Sociedad en Al-Ándalus

En las ciudades existía un desarrollado artesanado y una importante actividad comercial en los mercados. También tuvo mucha importancia el comercio exterior con Europa, África y Oriente. En la sociedad de Al-Ándalus convivían diferentes culturas y religiones: musulmanes (árabes, bereberes y muladíes) y no musulmanes que pagaban tributos (mozárabes y judíos).

Esplendor Cultural y Artístico

El mundo islámico tuvo un gran esplendor cultural y artístico, destacando en matemáticas, ciencias, medicina y gastronomía. Dentro del arte, predominaba la arquitectura, caracterizada por el uso de materiales modestos, la utilización de diversos tipos de arcos y cúpulas, y una gran decoración de los edificios. Ejemplos notables son la Mezquita de Córdoba y el Palacio de Medina Azahara.

Los Decretos de Nueva Planta y el Centralismo Borbónico

Reorganización Política y Administrativa

La reforma de la reorganización política y administrativa del Estado, llevada a cabo por los Borbones, trataba de centralizar los poderes del Estado en el monarca. El principal instrumento utilizado en esta reforma fueron los Decretos de Nueva Planta, aplicados en los territorios de la Corona de Aragón (1707: Aragón y Valencia; 1715: Mallorca; 1716: Cataluña). Ahora, los reinos de la Corona de Aragón se convirtieron en provincias y los virreyes fueron sustituidos por los Capitanes Generales, que tenían tareas militares y de gobierno. La Audiencia acaparaba la tarea judicial y servía de consejera al Capitán General. También se introdujo la figura de los intendentes, que eran representantes del rey en la provincia con amplias y diversas funciones, que iban desde el reclutamiento y la recaudación de impuestos hasta el impulso de reformas en el territorio. En la administración local, existía la figura del corregidor, representante del rey en la administración del concejo o ayuntamiento.

Administración Central y Regalismo

En la administración central, los antiguos consejos fueron perdiendo fuerza. Las Cortes perdieron importancia y el poder ejecutivo pasó directamente al rey, que contaba con el asesoramiento de las Secretarías de Estado y de Despacho. La política regalista, la imposición de la autoridad del rey sobre asuntos de índole religioso, alcanzaría su punto culminante con Carlos III. El control de la Iglesia se ejerció mediante las siguientes medidas:

• Derecho del monarca a nombrar cargos eclesiásticos.
• Limitación de la jurisdicción de la Iglesia.
• Disminución de la presencia de las órdenes religiosas.
• Expulsión de los jesuitas en 1767.

Reformas en América

Se llevaron a cabo reformas en los territorios americanos con el fin de controlarlos con mayor eficacia y obtener de ellos un mayor rendimiento económico y fiscal.

La Semana Trágica de Barcelona (1909)

Desarrollo de los Acontecimientos

Se denomina así a los violentos acontecimientos sucedidos el 27 de julio de 1909 en Barcelona. Inicialmente se produjeron manifestaciones y luego se declaró la huelga general, promovida por anarquistas, socialistas y radicales lerrouxistas, que degeneró en una violenta insurrección obrera espontánea. La ciudad quedó paralizada y las masas ocuparon las calles. Se levantaron barricadas, se volcaron tranvías y quedaron cortadas las comunicaciones con el resto de España. Fueron incendiados conventos e iglesias y profanadas muchas tumbas, ante la indignación de la aterrorizada burguesía. En el reinado de Alfonso XIII, el gobierno presidido por el conservador Antonio Maura proclamó el estado de guerra y envió al ejército para sofocar la insurrección.

Causas de la Semana Trágica

Las causas fueron la protesta contra la guerra colonial de Marruecos, también contra el injusto sistema de quintas, el anticlericalismo irracional fuertemente arraigado en las clases populares (alimentado por la propaganda de Lerroux, líder del Partido Republicano Radical) y el continuo malestar social y económico del proletariado barcelonés.

Consecuencias

Las consecuencias fueron la caída del gobierno conservador de Maura y la vuelta al gobierno del Partido Liberal. Las fuerzas de izquierda criticaron a la Lliga Regionalista y a la burguesía por haber apoyado la represión gubernamental, surgiendo un nacionalismo catalán republicano de izquierda. También se produjo un acercamiento de las fuerzas de izquierda que creó la Conjunción Republicano-Socialista.

Glosario de Términos Económicos

Agroindustria

Conjunto de industrias unidas a la agricultura. También es la actividad económica que se dedica a la producción y comercialización de productos agropecuarios, forestales, etc., destacando vinos, mermeladas, embutidos, lácteos, harinas y galletas, azúcar y conservas.

Balanza Comercial

Contabiliza la diferencia entre las importaciones y las exportaciones de todo tipo de productos. Es positiva si se exportan productos por más valor de los que se importan y negativa si es al revés.

Bienes de Equipo

Herramientas y maquinarias necesarias para la transformación de las materias primas en productos elaborados o semielaborados.

Comercio

Actividad económica consistente en el cambio de bienes y servicios por dinero (o por otro bien o servicio) entre un vendedor y un comprador. Se distinguen dos tipos:

• Comercio Interior: Se realiza entre agentes económicos (vendedor-comprador) presentes en el mismo país y se someten a la misma normativa.
• Comercio Exterior: Se realiza entre agentes económicos (vendedor-comprador) con residencia legal en diferentes países.

Globalización

Proceso creciente de interdependencia económica mundial provocado por el aumento del comercio internacional de bienes y servicios, de los flujos internacionales de capitales, de la mano de obra y de la generalización de la tecnología.

Industria de Base o Básica

Aquellas que transforman determinadas materias primas de la naturaleza en productos semielaborados que utilizarán otras industrias. Es el caso de la industria siderúrgica, metalúrgica o química. Requieren grandes inversiones.

Industria Pesada

Aquellas que trabajan con grandes cantidades de materia prima que se convierten en productos semielaborados para que las industrias ligeras los transformen en maquinaria o productos finales para el consumo.

Industria de Alta Tecnología

Industrias que están en expansión y crecimiento de su producción por estar relacionadas con la informática, las telecomunicaciones y la electrónica.

Multinacional

Empresa de un país que desarrolla parte de su negocio en otros países.

PIB (Producto Interior Bruto)

Suma de todos los bienes y servicios producidos en un país durante un tiempo determinado, generalmente un año. Se incluyen los producidos dentro del país por empresas extranjeras.

Parque Tecnológico

Espacio de alta capacidad que concentra empresas y entidades dedicadas fundamentalmente a actividades de I+D+i (investigación, desarrollo e innovación), promoción cultural y otras de alto valor añadido. Se localizan en lugares bien comunicados, próximos a universidades o centros de investigación.

Reconversión Industrial

Procesos de modernización y políticas para la adaptación de la producción industrial a las nuevas demandas del mercado. Se da en los sectores tradicionales como el textil, el calzado, la siderurgia, la metalurgia o la construcción naval.

Renta per Cápita

Resultado de dividir la renta nacional disponible entre el número de habitantes de dicha nación.

Sector Primario

Conjunto de actividades económicas que obtienen productos de la naturaleza, pero sin transformarlos. Son la agricultura, la ganadería, la explotación forestal, la pesca, la caza, la apicultura y la acuicultura. La aportación del sector primario al PIB nacional se sitúa en el 4%.

Sector Secundario

Actividades económicas en las que se transforman las materias primas extraídas de la naturaleza o producidas en productos de consumo, como la artesanía, la industria, la construcción, la minería y la obtención de energía. La aportación del sector secundario al PIB nacional se sitúa en el 20%.

Sector Terciario

Actividades económicas que no producen bienes, sino que prestan servicios demandados por la población para satisfacer sus necesidades. Se trata de un sector que incluye actividades públicas y privadas: comercio, hostelería, restauración, sanidad, educación, turismo, etc. También se conoce como el sector servicios. La aportación del sector terciario al PIB nacional se sitúa en el 70%.

Terciarización

Es un proceso de trasvase de población activa del sector primario y secundario al terciario, que se convierte en predominante.

Transporte

Actividad económica dedicada a trasladar viajeros y mercancías entre dos o más lugares.

Turismo

Según la Organización Mundial del Turismo (OMT), es el conjunto de actividades que realizan las personas durante sus viajes y estancias en lugares distintos al de su entorno habitual, por un periodo de tiempo consecutivo inferior a un año, con fines de ocio, por negocios y otros motivos.