La racionalidad de las formas del desarrollo histórico

Significa que todo cuanto existe es racional, es decir, ha tenido o tiene una función útil, ha facilitado dicho desarrollo.

Racionalidad originaria y sobreviviente

La primera es inmanente a cada fase del desarrollo histórico, pues el ajuste de la superestructura a la estructura es la razón suficiente del modo de vida social considerado. La segunda es trascendente a dicho desarrollo y deviene obstáculo para el acceso a formas superiores de vida social.

La racionalidad es un concepto histórico

Racional es el ser social cuya racionalidad es originaria y cuyo contenido potencial no ha sido plenamente expresado; irracional es la realidad cuya racionalidad es ideológica o sobreviviente.

La irracionalidad de la dictadura socialista

La racionalidad introducida por la fuerza política (dictadura socialista) es inherente al subdesarrollo histórico y es dudosa su operatividad hegemónica, a menos que se agote a corto plazo la potenciabilidad capitalista de sus estructuras.

La irracionalidad de las sociedades burguesas postindustriales

Las sociedades burguesas postindustriales se han hecho irracionales a causa de su ideología reaccionaria. Esta ideología es la forma de una sociedad de alienación, no porque reduzca a la gente a la miseria o imponga coerción policíaca (aunque tales calamidades no le sean ajenas), sino porque seduce, manipula o integra.

La interpretación teológica de los procesos históricos es idealista

Una de las características de la hegemonía judeocristiana es la de concebir el desarrollo histórico como un proceso racional que se propone fines y los alcanza voluntaria y conscientemente. La categoría de la finalidad es manejada por los adherentes a esta hegemonía de modo tal que la explotación y la alienación del sistema se convierten en un problema ético.

Desviaciones idealistas de la filosofía de la praxis

La propia filosofía de la praxis incurre en esta interpretación superestructural de la historia cuando atribuye a líderes o grupos la responsabilidad de la crisis en la edificación del socialismo. La filosofía de la praxis marxista ha demostrado que los hombres no hacen su propia historia con el propósito de marchar por un camino de progreso previamente trazado; la hacen aspirando a satisfacer sus necesidades.

Necesidades e intereses

El proceso que conduce a la liberación del hombre lo determinan, por tanto, las necesidades sociales que estimulan el comportamiento humano y su actividad creadora. El interés es la consecuencia de la necesidad; la esencia del interés reside en la orientación concreta hacia la satisfacción de una necesidad determinada.

La crítica del cientificismo

Se muestra también muy eficiente aun en el llamamiento a ocuparse de problemas nacionales y a hacer ciencia aplicada funcional, pues tal tarea, dentro del contexto de explotación capitalista, suele ser una manera de utilizar el nacionalismo y el prestigio de la ciencia en beneficio de los intereses de la burguesía.

La ciencia como empresa política

Es un sistema de conocimiento sobre las propiedades esenciales, las conexiones causales y las regularidades de la naturaleza, de la sociedad y el pensamiento, el cual es fijado bajo la forma de categorías, conceptos, leyes, teorías e hipótesis y cuya función radica en incrementar el dominio del contorno natural y social.

La técnica y la estructura económica

La técnica, por su parte, es un medio y un producto de la actividad física y psíquica del hombre que, mediante la utilización y aplicación de las leyes naturales, tiende a satisfacer necesidades sociales.

Valor de uso y valor de cambio de la tecnología

Como valor de uso, es utilizada a fin de realizar determinado propósito; como valor de cambio, la tecnología genera para el propietario un cierto grado de poder de mercado y el disfrute de la renta monopolística concomitante.

Tecnología y praxis política

El tratamiento del valor de cambio de la tecnología en los países dependientes requiere una política económica que actúe con eficacia sobre la inversión extranjera, la legislación de patentes y marcas de comercio, el control de la tecnología importada, etc.

Tecnología empaquetada

Consiste en un conjunto de conocimientos organizados de distintas clases, generalmente provenientes de diversas fuentes que utilizan métodos diferentes para la puesta en marcha de un proyecto.

Producción industrial de la tecnología

No es producida en laboratorios, sino en fábricas. De este modo, la tecnología es elaborada como mercancía tendiente a satisfacer una cierta demanda económica.

Las vías de autodeterminación científica y tecnológica

Requieren acciones concretas e inmediatas en el campo de transferencia de tecnología, de la regulación efectiva de la actividad de las empresas transnacionales y de la cooperación internacional para la generación autóctona de tecnología apropiada y el desarrollo social autosostenido.

Conciencia jurídica

Es un sistema de sentimientos, de estado de ánimo, de orientaciones de la voluntad, costumbres, pensamientos e ideales, que se expresa en valores y normas y que logra a través de la ideología jurídica una consistencia concentrada y sistemática.

La praxis política tópica material

La praxis política es, por tanto, un movimiento dialéctico que adquiere su sentido integral (incluida su propia posibilidad concreta) dentro de una especie de tesitura tópica externa. O dicho con otras palabras: la praxis es tópica material (ontológica), comprensible y proyectable por medio de una tópica formal (metodológica).

El derecho es la síntesis de la autonomía política

El derecho es, así, la racionalidad del bloque histórico, la síntesis de la autonomía política. La continuidad activa por medio del derecho no está exenta.

La praxis es un código de sentido

Toda praxis es por sí misma un código de sentido, y que ella se puede analizar por unidades o reglas. Concepción que debe ser proyectada a un modelo o lenguaje apto para la comprensión del proceso constitutivo de la hegemonía (racionalidad del desarrollo histórico).

Dictadura socialista y centralismo democrático

La dictadura socialista es una modalidad del centralismo democrático en el sentido en que la entendía Lenin, es decir, la forma de dirección política que conjuga el principio planificado y centralizado de la gestión con la amplia democracia y la iniciativa local.

La comunidad socialista

La vocación hegemónica de la dictadura del proletariado apunta a una sociedad civil autogestionada, solidaria y creativa, dentro de un contexto universal de constante crecimiento axiológico. La comunidad internacional socialista es, pues, el correlato de la personalidad ética y estéticamente enriquecida. Es la posibilidad concreta de la objetivación de la existencia genérica del hombre.