Transformaciones y Corrientes en la Poesía Española de la Democracia
El fin del franquismo y la llegada de la democracia en España supusieron enormes cambios en las costumbres, la lengua de la calle y, por supuesto, en la lengua poética. Se produjo el final de la censura, la vuelta de poetas exiliados y la incorporación plena de España al bloque occidental. Sin embargo, las expectativas iniciales de libertad y novedades artísticas se fueron, en cierta medida, desinflando con el tiempo, y el género poético, a pesar de la apertura, siguió en muchos casos reducido a un público minoritario.
Desde los años 70, la poesía española ha presentado una gran variedad de tendencias. A continuación, se exploran las más representativas.
Principales Corrientes Poéticas Postfranquistas
Poesía Culturalista o de los Novísimos
La poesía culturalista hunde sus raíces en la segunda mitad del siglo XX y supuso una superación del realismo social y del intimismo confesional. Tras la revolución cultural de Mayo del 68, irrumpe el grupo de los Novísimos (también conocidos como Generación del 68), quienes aportan nuevos aires a la poesía. El poema se llena de referencias culturales, con una notable influencia del mundo clásico grecolatino y de los mitos de la civilización moderna (cine, música, cultura pop, etc.). Su lenguaje es marcadamente esteticista y refinado.
Los poetas de esta corriente, muchos agrupados en torno a la antología de José María Castellet, Nueve novísimos poetas españoles, muestran rasgos como:
- Combinación de tradición y vanguardia.
- Influencia de los medios de comunicación y referencias a la sociedad de consumo (cine, música pop, deporte, tebeos).
- Defensa de la ineficacia de la poesía para cambiar el mundo, justificando la creación artística a través de la experimentación lingüística.
- Cultivo de un nuevo vanguardismo y defensa de la libertad absoluta del poeta: escritura automática, incorporación de técnicas de collage, verso libre amplio, prosa libre.
Autores destacados: Pedro Gimferrer (Arde el mar), Antonio Martínez Sarrión (Una tromba mortal para los balleneros), Félix de Azúa (Lengua de cal), Luis Antonio de Villena, Guillermo Carnero. Posteriormente, destacan figuras como Ana Rossetti, con poemas llenos de erotismo, y Luis Martínez de Merlo.
Poesía de la Experiencia
Esta tendencia se desarrolla principalmente durante los años ochenta y noventa. En 1983, Álvaro Salvador, Javier Egea y Luis García Montero firmaron un manifiesto conjunto titulado La otra sentimentalidad, invocando el magisterio de Antonio Machado, Rafael Alberti y Jaime Gil de Biedma.
Características principales:
- Propugna una nueva sentimentalidad que parte de la tradición y la inteligibilidad del texto.
- Recuperación de la métrica, la rima y la estrofa.
- Poesía realista que habla de la vida cotidiana y la realidad, con una expresión coloquial.
- Revalorización del humor y búsqueda de empatía con el lector, ofreciendo una visión del mundo muy próxima.
- Con el tiempo, algunos autores manifestaron una inclinación hacia un compromiso social frente a un mundo considerado injusto e insolidario.
Poetas más significativos: Luis García Montero (Diario cómplice), Felipe Benítez Reyes (Sombras particulares), Carlos Marzal y Vicente Gallego.
Poesía Neovanguardista
A partir de los años 80 y 90, se extiende la estética de la posmodernidad, que asume presupuestos artísticos transgresores de las vanguardias de inicios del siglo XX. Esta corriente persigue una nueva escritura que transforma el propio concepto de poesía, incluyendo en ocasiones fotografías, objetos y símbolos para sorprender al lector.
Autores destacados: Juan Eduardo Cirlot, Juan Hidalgo, Francisco. También Blanca Andreu o Leopoldo María Panero, quienes desarrollan elementos surrealistas.
Poesía Visual
Dentro del neovanguardismo, o como corriente afín, se encuentra la poesía visual, que parte del futurismo, el dadaísmo y el cubismo. Por medio de palabras, intenta reflejar imágenes siguiendo estructuras caligramáticas. Destacan Fernando Millán y Antonio Gómez.
Otras Tendencias Significativas
Poesía Minimalista
Esencial y conceptual, esta poesía es tan estilizada que se hace casi abstracta. Destacan autoras como Clara Janés y Chantal Maillard.
Poesía del Compromiso Civil
Retoma la estela de los poetas sociales de los años 50, como Gabriel Celaya y Blas de Otero, pero incorporando técnicas y logros de las vanguardias. Encontramos poetas como Jorge Riechmann o Pablo García Casado.
Poesía de la Contemplación y del Conocimiento
Entronca con la obra de Claudio Rodríguez. En ella participan poetas de la experiencia e incluso algunos novísimos. Entienden la poesía como una indagación de la relación entre el sujeto lírico y la naturaleza. Destacan Mario Mínguez y Antonio Moreno.
La Poesía en el Siglo XXI: Nuevas Voces y Plataformas
Poesía 2.0 y el Impacto de las Redes Sociales
La llamada “poesía 2.0” cultiva los temas de siempre, como el amor, el desamor, la soledad o la insatisfacción, y se ha impulsado notablemente gracias a las redes sociales. Muchos poetas están viendo publicados en papel versos que nacieron en blogs, Twitter, Facebook o Instagram.
Ejemplos: Pablo Benavente con Circo de Quimeras o Elvira Sastre con La soledad de un cuerpo acostumbrado a la herida. En 2018, César Brandon ganó un popular programa de cazatalentos con sus poemas.
Cantautores, Poetas Urbanos y el Debate sobre el Rap
No se puede olvidar la relevancia alcanzada en los últimos años por cantautores como Marwan, así como por algunos poetas urbanos y raperos. Para muchos críticos, el rap no puede considerarse poesía en sentido estricto, aunque su base consista en hacer rimas, a menudo de forma improvisada, sobre una base rítmica.