España en el Siglo XIX: Desamortización, Unión Liberal y la Revolución Gloriosa

La Desamortización de Madoz y el Bienio Progresista (1854-1856)

La Ley de Desamortización General, impulsada por Pascual Madoz en 1855, reanudó el proceso desamortizador iniciado por Mendizábal. En esta ocasión, el foco principal recayó sobre los bienes comunales y de propios, aunque sin olvidar las propiedades rurales o urbanas de la Iglesia.

  • Bienes comunales: Eran propiedades de ayuntamientos o municipios, generalmente consistentes en pastos, tierras labrantías, dehesas o bosques. Su aprovechamiento era común y, en muchas ocasiones, gratuito, siendo esenciales para la subsistencia de los campesinos más pobres.
  • Bienes de propios: También de propiedad municipal o de corporaciones, su aprovechamiento no era colectivo, sino que se arrendaba a particulares a cambio de una renta. Esta renta se empleaba para costear los servicios públicos del ayuntamiento o para mejoras.

Con estas desamortizaciones, se liquidó prácticamente la totalidad de los bienes poseídos por los municipios, así como cualquier tipo de propiedad de la Iglesia. Esta actuación provocó un grave empeoramiento de la situación de los campesinos, quienes fueron inmediatamente desalojados de las tierras comunales, despojados así de su única fuente de ingresos para la subsistencia.

Los bienes obtenidos con la venta de estas propiedades se destinaron a la industrialización del país y a la expansión del ferrocarril. Los grupos beneficiados volvieron a ser la alta burguesía, ya que las tierras no se repartieron entre los menos favorecidos. Una consecuencia directa de esta desamortización fue la aparición del proletariado agrícola, formado por campesinos sin tierra (jornaleros) sometidos a la ley de la oferta y la demanda y a duras condiciones de trabajo.

Reformas y Conflictos del Bienio Progresista

  • Se elaboró una nueva Constitución de 1856, de carácter más progresista, que, aunque redactada, nunca llegó a ser aprobada, siendo conocida como la Constitución “non nata”.
  • Las clases populares, las más perjudicadas por la actuación del gobierno de Espartero, comenzaron a manifestarse violentamente. Cuando los movimientos se agravaron, Isabel II destituyó a Espartero y nombró como jefe del gobierno al general O’Donnell (1856-1863).

Estos acontecimientos pusieron fin al Bienio Progresista y dieron comienzo al gobierno de la Unión Liberal.

La Unión Liberal de O’Donnell (1856-1868)

La llegada al poder de O’Donnell y del nuevo partido, la Unión Liberal, un grupo centrista que intentó aunar a la “izquierda” de los moderados y a la “derecha” de los progresistas, coincidió con una época de euforia económica, marcada por la construcción de ferrocarriles y un aumento de las inversiones. Este gobierno contó con el apoyo de la burguesía y de los terratenientes, quienes buscaban garantizar la ley y el orden, necesarios para la expansión económica. Un caso a destacar es el del Marqués de Salamanca, un hombre hecho a sí mismo, capitalista emprendedor, hábil hombre de negocios, artífice y gestor de su propia prosperidad o ruina.

Conflictos durante el periodo de la Unión Liberal

  • El levantamiento campesino de Andalucía: Fue resultado de las desamortizaciones de Madoz, el sistema de quintas y los impuestos al consumo. Las protestas y levantamientos fueron reprimidos por la Guardia Civil.
  • El conflicto carlista: Enmarcado en el ciclo de la Segunda Guerra Carlista. Se produjo un levantamiento frustrado en 1860 en San Carlos de la Rápita (Castellón) del pretendiente Carlos VI, que fue sofocado y le obligó a renunciar a los derechos sucesorios y a abandonar España.

El Agotamiento del Sistema y el Fin de la Unión Liberal

El final del gobierno de la Unión Liberal fue provocado por el agotamiento del sistema en varios frentes:

  • Agotamiento biológico: Marcado por el envejecimiento o fallecimiento de los principales líderes, como O’Donnell y Narváez.
  • Agotamiento económico: La economía se había edificado sobre una base efímera y poco sólida (principalmente el ferrocarril). Se produjo una paralización de la industria textil catalana (una de las bases de la economía en este momento) por falta de materia prima, debido a que la Guerra de Secesión Americana paralizó el comercio del algodón.
  • Agotamiento político: Se produjo una escisión en la Unión Liberal por parte de los progresistas, dado el giro a la derecha que tomó el partido. Desde 1863 se sucedieron gobiernos moderados y unionistas inestables y autoritarios, presididos por O’Donnell.

Hacia la Revolución Gloriosa (1868)

Factores como la inseguridad, la depresión económica, las protestas estudiantiles (como la Noche de San Daniel) y la sublevación de los sargentos del Cuartel de San Gil en Madrid (en ambos casos hubo ejecuciones), llevaron a progresistas, demócratas, republicanos y también unionistas a firmar el Pacto de Ostende en 1866. Por este pacto, se acordó el destronamiento de Isabel II, a quien consideraban responsable de todos los males del país. A la muerte de O’Donnell en 1867, el general Serrano se adhirió al Pacto. Solo era necesario buscar el momento oportuno para poner fin al reinado de Isabel II.

Causas de la Revolución de 1868

En septiembre de 1868 se produjo el levantamiento en Cádiz, dando inicio a la revolución. Las principales causas de la Revolución del 68 fueron:

  • La exclusión del poder de los progresistas.
  • La crisis económica y los escándalos financieros de la camarilla de la reina.
  • Las protestas populares, como la Noche de San Daniel en 1865.

La Revolución de 1868: “La Gloriosa” y el Gobierno Provisional

La Revolución de 1868, conocida como “La Gloriosa”, tuvo su inicio entre los días 16 y 18 de septiembre de 1868. Los motivos y fines del movimiento revolucionario incluían la recuperación de la soberanía nacional, la creación de un gobierno provisional y el establecimiento del sufragio universal. La reina Isabel II abandonó España, exiliándose en Francia.

El 8 de octubre de 1868 se constituyó el Gobierno Provisional de coalición bajo la presidencia del general Francisco Serrano. El general Prim fue nombrado ministro de la Guerra.

Primeras Medidas del Gobierno Provisional

Las primeras medidas tomadas por el Gobierno Provisional fueron:

  • Decretar la libertad de cultos.
  • La supresión de órdenes religiosas (como los jesuitas).
  • Reanudar las desamortizaciones de bienes eclesiásticos.

Se convocaron elecciones a Cortes Constituyentes, que se celebraron mediante sufragio universal masculino y directo para mayores de 25 años, incluyendo a los habitantes de Cuba y Puerto Rico. En las elecciones, ganaron los partidarios de la monarquía parlamentaria y democrática (progresistas, unionistas y demócratas), quienes defendían la soberanía nacional, un gobierno elegido por las Cortes y responsable solo ante ellas, y la búsqueda de un nuevo monarca que no fuese Borbón.

La Constitución de 1869

La Constitución de 1869 estableció un marco legal progresista para España:

  • Sistema de Gobierno: Monarquía Constitucional.
  • Soberanía: Nacional.
  • Sufragio: Universal (masculino) para mayores de 25 años.
  • Poder Legislativo: Sistema bicameral con electividad total en el Senado y un Congreso que tenía la facultad de elegir al rey en caso de extinción de la dinastía.
  • Separación de Poderes:
    • Ejecutivo: Correspondía al monarca, aunque no gobernaría directamente, quedando el gobierno en manos del Consejo de Ministros y su Presidente.
    • Legislativo: En manos de las Cortes.
    • Judicial: En manos de jueces y tribunales.
  • Libertad de Culto: Reconocida, aunque el Estado era confesional y mantenía al clero y al culto.
  • Derechos y Libertades: Exhaustivo reconocimiento de libertades y derechos, destacando los de enseñanza, imprenta, reunión y asociación.
  • Garantías Personales: No podían ser suspendidas.

Retos y Reformas del Gobierno Provisional (1868-1870)

Durante este periodo, el general Prim, como ministro de la Guerra y figura clave, impulsó importantes reformas. En política económica, reorganizó la Hacienda Pública en dos aspectos principales:

  • Revisión de los aranceles: Se produjo un desarme arancelario de hasta un 15%.
  • Reforma del sistema monetario: Se estableció la peseta como moneda única.

Otra legislación importante incluyó:

  • La redacción de un Código Penal.
  • La redacción de la Ley Orgánica del Poder Judicial.
  • La redacción de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.
  • La redacción de la Ley de Orden Público.
  • La redacción de la Ley sobre Matrimonio Civil.

Problemas Fundamentales del Gobierno Provisional

El Gobierno Provisional enfrentó tres problemas fundamentales:

  • Los levantamientos republicanos: No aceptaban ni la Constitución ni el sistema monárquico.
  • Las revueltas campesinas: Resultado de las sucesivas desamortizaciones y agravadas por las malas cosechas.
  • La Guerra de Cuba: Igualmente importante fue el estallido de la Guerra de Cuba, de carácter independentista. Se trataba del descontento criollo por el monopolio español sobre sus productos y por los anticuados métodos de trabajo. A esta guerra se la conoció como la Guerra de los Diez Años (1868-1878) y causó estragos en la Hacienda Pública y en la acción del gobierno.