El Crack de 1929 y sus consecuencias en la economía mundial

El Crack de 1929

En 1929 se produjo el hundimiento, crack, de la Bolsa de Nueva York, lo cual derivó en una depresión que afectó a casi todo el planeta. Las causas fueron fundamentalmente financieras, mientras que una serie de desequilibrios en la economía real generaron la depresión.



El Fascismo

El término “fascismo” designa una serie de movimientos radicales surgidos en países europeos durante el período de entreguerras. Se inició en Italia en 1922 y continuó en Alemania bajo el nombre de nazismo a partir de la llegada al poder de Hitler.



El New Deal

Franklin Delano Roosevelt combinó una intervención masiva del Estado con las cuestiones económicas, respetando las leyes del mercado y la propiedad privada. Su objetivo fundamental fue la reactivación de la economía americana.



La etapa de Lenin

En 1917 se produjo en Petrogrado la toma del poder por un Consejo de Comisarios del Pueblo. El Decreto de la Paz significaba la salida de Rusia de la Primera Guerra Mundial y la firma de la paz con Alemania. El Decreto de la Tierra era otro importante objetivo de Lenin. Las tierras fueron expropiadas a sus antiguos dueños y distribuidas a los campesinos, a quienes también se les condonaron las deudas. Estalló una guerra civil en Rusia. Contra el gobierno de Lenin se unieron mencheviques, social-revolucionarios, liberales y zaristas, constituyendo el ejército blanco al que las potencias extranjeras ofrecieron ayuda económica y apoyo en la retaguardia. Durante el periodo de comunismo de guerra entre 1918 y 1921, el objetivo fue el control absoluto de la economía por el Estado para acelerar al máximo la productividad en todos los sectores.



La institucionalización de la paz

Durante la guerra se celebraron encuentros entre los máximos dirigentes aliados. Se firmó la Carta del Atlántico, documento que empezó a denominarse Declaración de Naciones Unidas, punto de arranque de la futura ONU. En 1943 se celebraron las conferencias de Casablanca, El Cairo y Teherán. En 1945, en Yalta, los tres aliados reconocieron el derecho al autogobierno de los pueblos, fijaron las condiciones para la paz y estipularon ayudas para las naciones necesitadas. En 1945, se celebró la conferencia de Potsdam. La principal consecuencia de estas conferencias fue el reparto de Europa y del mundo entre las dos grandes superpotencias: EEUU y URSS. Mussolini-En octubre de 1922, Mussolini se ofreció como única salida a la crisis. Para convencer al rey anunció una marcha sobre Roma de miles de camisas negras. Víctor Manuel III, impresionado por la movilización, cedió y encargó a Mussolini el 29 de octubre un gobierno de concentración. Investido de plenos poderes por el Parlamento, elaboró una nueva ley electoral que favorecía a la minoría más votada. Las elecciones de abril de 1924 fueron ganadas por los fascistas gracias al empleo de la violencia. El diputado socialista Giacomo Matteotti, que denunció ante el Parlamento las irregularidades, fue asesinado por los escuadristas. Mussolini anunció la promulgación de leyes de excepción que suprimieron la libertad de prensa y de reunión y privaron a los diputados de la oposición de sus escaños. Mussolini actuó como un dictador.



Segunda Guerra Mundial

El 1 de septiembre de 1939, las tropas alemanas cruzaron la frontera polaca. Una nueva estrategia militar empezó a ponerse en práctica desde los primeros días de la guerra, la llamada guerra relámpago o Blitzkrieg. Tras las primeras grandes victorias de Hitler, solo le quedó un único adversario: Reino Unido. La batalla de Inglaterra se prolongó hasta mayo de 1941, sin que este país consiguiera su rendición. En noviembre de 1942, el VI ejército alemán mandado por el mariscal Von Paulus consiguió ocupar la ciudad rusa de Stalingrado. Inmediatamente se produjo el contraataque soviético que recuperó la ciudad en enero de 1943. El ejército alemán se rindió y esto constituyó una derrota decisiva en el frente del Este. En el norte de África, las tropas del mariscal Rommel llegaron hasta El Alemein, donde fueron derrotadas por el general británico Montgomery. Tras esa derrota y el desembarco norteamericano en Casablanca (1943), los alemanes terminaron rindiéndose en mayo del mismo año. En el Extremo Oriente, los norteamericanos derrotaron a los japoneses en mayo de 1942 en la batalla naval de Mar del Coral y un mes después en Midway, lo que confirmó la supremacía naval estadounidense.



Los primeros signos de deshielo

Los primeros signos de cambio en los dirigentes de las grandes potencias se percibieron en la URSS, cuando tras la muerte de Stalin en 1953, el nuevo secretario general del PCUS, Nikita Jruschev, denunció los crímenes de Stalin e inició un proceso de desestalinización. En EEUU los cambios fueron más lentos. En 1956 fue reelegido el presidente republicano Eisenhower y poco a poco fue apartando del gobierno a los anticomunistas más radicales como el senador McCarthy, promotor de la llamada “caza de brujas”. El vuelco más importante en la política norteamericana lo daría, a partir de 1960, el presidente del Partido Demócrata John F. Kennedy. Impulsó un programa de gobierno conocido como la Nueva Frontera en el que apostó por el desarrollo de programas sociales y en política exterior apostó por la coexistencia pacífica.



El retorno de la tensión

A finales de la década de 1970 se produjeron nuevos focos de conflicto que hicieron aflorar las tensiones de los años de la Guerra Fría. El hecho más relevante fue la intervención soviética en Afganistán, donde tras la caída de la monarquía y la proclamación de la República, en 1978 se había instalado un gobierno comunista con la ayuda de la URSS, algo que enfadó a los EEUU, que llegaron a boicotear los Juegos Olímpicos de Moscú en 1980. Con la elección de Ronald Reagan a la presidencia de los EEUU, se recrudeció la tensión entre bloques. Durante su mandato, EEUU invadió la isla de Granada y apoyó dictaduras militares en El Salvador y Honduras, además de financiar la Contra nicaragüense. Además, en esta época, hubo un relanzamiento del programa nuclear con la llamada Guerra de las Galaxias, para interceptar en vuelo los misiles nucleares enemigos.