El Auge del Turismo en España (Década de 1960)
Desde la década de 1960, España experimentó un gran desarrollo turístico y, en la actualidad, es la segunda potencia turística del mundo por número de visitantes y por ingresos turísticos. Esto se debe a los recursos naturales (gran variedad de relieves y de formaciones geológicas, excelentes playas, climas con veranos secos y calurosos) y culturales (sitios arqueológicos, monumentos, ciudades históricas, museos, centros religiosos, ferias, congresos y fiestas) que posee.
El Modelo de Turismo de Masas: “Sol y Playa”
El modelo turístico implantado en la década de 1960 fue el turismo de masas de “sol y playa”. Se caracterizó por una oferta turística abundante y barata, dirigida a una demanda homogénea y masiva, de poder adquisitivo medio o bajo. Es un turismo concentrado temporalmente en verano y especialmente en el litoral peninsular e insular. Presenta una gran dependencia de tour-operadores internacionales e, inicialmente, una gran despreocupación por los impactos medioambientales.
Factores que Justificaron su Desarrollo
Los factores que justifican el desarrollo de este tipo de turismo son dos:
- a) Externos: Por un lado, el desarrollo económico de Europa Occidental y Septentrional tras la Segunda Guerra Mundial incrementó la clase media y permitió a los trabajadores disfrutar de tiempo libre y dinero para el ocio. Por otra parte, el progreso del transporte facilitó el traslado: se abarató el avión y mejoraron la red ferroviaria y de carreteras.
- b) Internos: La proximidad geográfica de España a la clientela europea, los excedentes de recursos naturales y culturales, el bajo coste debido a la devaluación de la peseta en 1959, la existencia de infraestructuras y servicios, y la política estatal de promoción turística.
El Turismo Español en Crisis (1973-1985)
Durante el periodo 1973-1985, el turismo español pasó por un momento de crisis. Esta situación se debió a causas coyunturales, como la crisis económica mundial que afectó a la demanda turística, y a causas más profundas: por una parte, los problemas de la oferta turística española, cuyos precios aumentaron sin un incremento paralelo de la calidad; y por otra parte, la aparición de nuevos destinos turísticos competidores en áreas próximas (Norte de África, Balcanes) y en áreas alejadas (Caribe).
La Transformación del Modelo Turístico (A partir de 1985)
A partir de 1985, el nuevo modelo turístico se caracteriza por una oferta de calidad dirigida a una demanda más diferenciada y menos numerosa, con mayor poder adquisitivo y mejor repartida en el tiempo y en el espacio, como resultado de una mayor diversificación de las modalidades del turismo. Los factores que influyeron en esta orientación fueron el ingreso de España en la Unión Europea (1986), el crecimiento del turismo interno y el inicio de la reconversión hacia un nuevo modelo turístico basado en la mejora de la calidad de la oferta, su diversificación, la reducción de la dependencia de la demanda exterior en cuanto a la comercialización, así como en la sostenibilidad medioambiental.
Impactos y Consecuencias del Turismo en España
El desarrollo turístico en España ha generado diversas consecuencias:
a) Repercusiones Demográficas:
En áreas litorales de turismo, incrementa los efectivos de la población, con adultos jóvenes que acuden en busca de trabajo, y con adultos o jubilados que deciden instalarse allí por motivos empresariales, terapéuticos o de ocio. Además, el turismo aumenta la población ocupada en el sector terciario y en la construcción. En ciertas áreas rurales y de montaña, y en ciudades históricas, puede contribuir al declive de la artesanía y de las tradiciones locales.
b) Impacto en el Poblamiento:
En el litoral, se forman conurbaciones por la expansión de las áreas turísticas con alta densidad edificatoria. En espacios rurales de montaña y ciertos espacios urbanos, el turismo ha colaborado en la rehabilitación del patrimonio edificado.
c) Consecuencias Económicas:
El turismo genera más del 12% del empleo, tanto en servicios turísticos como en servicios mixtos para turistas y no turistas. Gran parte de este empleo es estacional. Además, el turismo ejerce un efecto multiplicador sobre otras actividades de la economía (construcción, comercio, agricultura, transporte, ocio…). Aporta riqueza al país, compensa la balanza comercial frenando el endeudamiento externo e influye también en la política de transportes para dotar de accesibilidad a los núcleos turísticos.
d) Consecuencias Políticas, Culturales y Sociológicas:
El turismo fomenta el acercamiento entre los pueblos y las culturas, favoreciendo el entendimiento político entre los estados. Incide sobre la sociedad local, positivamente cuando estimula el cambio y la modernización social, y negativamente cuando conlleva la pérdida de costumbres y señas de identidad propias, o cuando empeora la calidad de vida de los residentes por la saturación de servicios e infraestructuras.
e) Impacto en la Ordenación del Territorio:
El turismo no solo repercute en aspectos turísticos próximos, sino también en su entorno, donde implanta actividades y servicios que pueden ocasionar conflictos con otras actividades. En las áreas litorales más turísticas, el turismo ordena los espacios próximos en función de sus necesidades, provocando alteraciones en el medio y el paisaje, transformaciones económicas y potenciación de las actividades demandadas por el turismo. Esto crea conflictos por el uso del suelo y los recursos. En las áreas de turismo rural y de montaña, el turismo puede crear conflictos con las actividades agrarias o fomentar el servicio al turista (artesanía local, recuerdos, establecimientos de alojamiento y de restauración), y en sus periferias se instalan segundas residencias y hoteles para satisfacer la demanda.
f) Consecuencias Medioambientales:
Las consecuencias fueron el levantamiento de grandes bloques de hoteles y apartamentos junto a playas; las urbanizaciones en espacios naturales de gran valor, con la destrucción de bosques y ecosistemas; la contaminación atmosférica, de las aguas y de las playas; el exceso de ruido y la acumulación de un gran volumen de residuos.