Clasificación del Documento: La Institución Libre de Enseñanza
Se trata de un texto histórico, un fragmento del ensayo “La Institución Libre de Enseñanza”. Su naturaleza es expositiva y su temática, social y educativa. Tiene un carácter público y está destinado a quienes deseen conocer el funcionamiento y los valores de la Institución.
Su autor es Francisco Giner de los Ríos, profesor, catedrático y uno de los fundadores de dicha institución. Publicado en Ensayos (1876) y reproducido posteriormente por F. Díaz-Plaja en Historia de España en sus documentos. Siglo XIX (Madrid, Cátedra, 1983, pp. 375-376).
El contexto histórico es el inicio de la Restauración, durante el gobierno de Cánovas, cuando un grupo de profesores, expulsados de sus cátedras, deciden fundar una institución con principios educativos diferentes a los que regían en la época.
Contenido y Propósito del Texto
El texto puede dividirse en dos partes:
- En la primera, se expone que el objetivo primordial de la Institución Libre de Enseñanza era la formación global del alumno y no solo su instrucción. Giner de los Ríos señala que, para conseguir dicho objetivo, era imprescindible una relación más directa entre profesores y alumnos, así como la implicación de los profesores y de todo el personal laboral con dichos valores. Se alude también a la relación de la Institución con los movimientos pedagógicos europeos.
- En la segunda, el autor sostiene que esta educación integral y comprometida con el desarrollo de la personalidad individual es necesaria para hacer frente a las características del momento histórico y para terminar con los males que padece España, reafirmándose en que la educación ha de servir para fomentar: el amor al trabajo, el patriotismo leal, la sinceridad y un espíritu de equidad y tolerancia.
Contexto Histórico y Relevancia de la ILE
Desde las Cortes de Cádiz, los liberales intentaron introducir en España una enseñanza centralista, uniforme, regulada y financiada por el Estado, sin vinculación con la Iglesia Católica. Sin embargo, las dificultades del liberalismo durante el reinado de Fernando VII y la Guerra Carlista retrasaron el proyecto.
Consolidado el liberalismo moderado durante el reinado de Isabel II, se realizaron diferentes planes de estudio, entre los que destaca la Ley Moyano, que sentó las bases de la organización de la enseñanza durante el siglo XIX y buena parte del siglo XX. La Ley establecía, entre otros aspectos, que la educación primaria era obligatoria y gratuita; sin embargo, los problemas financieros del Estado y la influencia de la Iglesia tras la firma del Concordato impidieron que se desarrollara en su totalidad.
Desafíos Educativos Durante la Restauración
Durante la Restauración, periodo en el que se contextualiza el documento, la educación presentaba una serie de problemas, tales como:
- Una alfabetización por debajo de la media de Europa occidental, con una tasa de analfabetismo que se situaba en torno al 70% (con diferencias regionales y de clase), lo que suponía un lastre para el desarrollo económico y el cambio social.
- La falta de escuelas y maestros en algunas zonas rurales.
- La enorme influencia de la ética y moral católica, ya que las congregaciones religiosas controlaban gran parte de la educación secundaria.
- Una educación muy reducida para la mujer, a la que se educaba únicamente para ser madre y esposa. Se consideraba que en la mujer predominaban el sentimiento y el afecto frente a la razón y la inteligencia, por lo que debía reservarse para la maternidad y la familia. Esta concepción se traducía en la ausencia de la mujer en campos como la política o la cultura, y en una consideración de sumisión al hombre y de desigualdad respecto a este. Su acceso a la educación en igualdad de condiciones con el hombre le era negado. De hecho, el número de niñas matriculadas en las escuelas era muy inferior al de los niños, y la educación que recibían unas y otras respondía a modelos diferentes, dedicando las niñas más tiempo a la religión y las labores frente a otras disciplinas como la lectura o las matemáticas.
Fundación y Principios de la ILE
Como respuesta a la necesidad de renovación cultural y educativa, surge la Institución Libre de Enseñanza (ILE), fundada en 1876 por un grupo de catedráticos separados de la universidad por defender la libertad de cátedra y negarse a ajustar sus enseñanzas a los dogmas oficiales en materia religiosa, política o moral. Ello los obligó a proseguir su tarea educativa al margen de los centros del Estado mediante la creación de un establecimiento educativo privado. El proyecto se concretó en la creación de una escuela universitaria, primero, y de secciones de enseñanza primaria y secundaria, después. Al no ser reconocidos sus títulos universitarios por el Estado, acabó siendo solo un centro de enseñanza primaria y secundaria de enorme prestigio.
La influencia filosófica de esta institución se debe al llamado krausismo, corriente fundada por el filósofo alemán Karl Christian Friedrich Krause. Su filosofía insistía en buscar un pensamiento moral basado en la rectitud y la vida ejemplar, e influyó en los intelectuales españoles en la idea de regenerar y reconstruir la educación en España. También buscaba la formación de los individuos en libertad.
Las bases ideológicas de la Institución fueron: la neutralidad religiosa y política, la coeducación y la independencia total del Estado. Se insistía en las ideas de: secularización, primacía de la razón, libertad de investigación, importancia de la función educativa en la regeneración de la vida española y apertura hacia Europa. La nueva institución educativa continuó su tarea hasta la Guerra Civil, convirtiéndose en el centro más importante de la cultura española y en el cauce por donde se introdujeron en España las teorías más avanzadas en pedagogía y en el resto de disciplinas científicas.
Impacto y Legado de la ILE
La ILE formó a personalidades destacadas como: Joaquín Costa, Leopoldo Alas ‘Clarín’, los hermanos Machado, Juan Ramón Jiménez, Ortega y Gasset o Gregorio Marañón.
La ILE impulsó la creación de centros clave como:
- La Residencia de Estudiantes de Madrid (1910), que albergaría a personalidades como García Lorca, Dalí o Buñuel.
- La Junta para Ampliación de Estudios (JAE), cuyo cometido era enviar estudiantes becados al extranjero.
- La creación del Ministerio de Instrucción Pública.
La modernización científica constituyó una tarea más lenta. Se creó la Junta para Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas (JAE), presidida por Santiago Ramón y Cajal, y una red de centros de investigación que acogían a estudiantes e intelectuales con laboratorios científicos.
Sin embargo, la Institución solo educó a los hijos de la burguesía ilustrada y de las clases medias, con la idea de preparar una élite que pudiera formar una clase dirigente ilustrada y progresista.
Fue la primera experiencia de renovación pedagógica que se realizaba en España, incorporando entre sus métodos la escuela activa y poniendo en práctica por primera vez la coeducación. Hay que destacar también que fue la base para la política educativa y cultural de la Segunda República.
Legado y Relevancia Actual de la ILE
El texto es de gran importancia para darnos a conocer los valores de la Institución y su influencia decisiva en la modernización del panorama educativo español. Varias generaciones, entre ellas la de 1914 y la de 1927 (la Edad de Plata), estuvieron influenciadas por sus ideas, lo que indica el alto nivel cultural y artístico que fomentó la ILE. Su influencia pedagógica sigue teniendo un gran valor hoy en día.