Quattrocento Italiano: Arte, Arquitectura y Escultura del Renacimiento en Florencia

Introducción al Renacimiento

El Renacimiento surgió en Florencia y se caracterizó por un profundo estudio de las humanidades. Se exaltaron las virtudes del arte grecorromano, tomándolo como modelo y objeto de estudio, pero adaptadas al cristianismo. La nueva concepción del mundo se resume con el antropocentrismo; por ejemplo, en el arte se le da prioridad a la figura humana y se defiende el libre albedrío. Se estableció el canon de 8 cabezas y se inventó la perspectiva.

El Quattrocento Italiano

La Italia del siglo XV era una convivencia de ciudades-estado gobernadas por príncipes. Los más importantes fueron Francesco Sforza (Milán) y la familia de los Médici en Florencia, quienes se convirtieron en importantes mecenas.

Arquitectura: Brunelleschi y Alberti

Los dos arquitectos más importantes del Quattrocento italiano son Filippo Brunelleschi y León Battista Alberti.

Brunelleschi (Florencia, 1377-1446)

Comenzó como escultor. En 1401, participó en el concurso para realizar las segundas puertas del Baptisterio de Florencia, que ganaría Ghiberti. Decepcionado, marchó a Roma, donde cambió su vocación de escultor a arquitecto.

En 1414, coincidió con Ghiberti en el concurso de la cúpula de la Catedral de Florencia, el cual ganó con un proyecto que cubría el tambor octogonal con dos cúpulas superpuestas, dejando una cámara de aire entre una y otra. El peso de los materiales disminuyó, lo que le permitió elevar la cúpula hasta los 56 metros.

Brunelleschi parte de la idea de que hay que seguir a los maestros de la Antigüedad, pero que las técnicas se pueden mejorar. Entre los elementos clásicos, prefiere las columnas de fuste liso (pórticos y basílicas) y las pilastras (capillas) con capiteles corintios de ocho volutas y arcos de medio punto.

La proporción vendrá determinada por el espacio de separación entre los soportes. Brunelleschi fue el creador de la perspectiva renacentista: una armonización visual del edificio.

Todo esto se puede observar en:

  • El Hospital de los Inocentes.
  • La Basílica del Espíritu Santo.
  • La Basílica de San Lorenzo; dentro de ella construyó la Sacristía Vieja.
  • La Capilla Pazzi en el convento de Santa Croce:
    • Pórtico exterior sobre columnas.
    • Cúpula interior con pechinas.
    • Juega con el color de los materiales, proporcionándole claridad al edificio.

Alberti (Génova, 1404 – Roma, 1472)

Fue un genio renacentista que sobresalió en todas las artes. Sobre arquitectura escribió De re aedificatoria, en el que defiende la importancia del trabajo intelectual del arquitecto.

En 1446, Rucellai le encargó la construcción de un palacio que se convertiría en el prototipo de mansión urbana del Renacimiento. Para Alberti, estas casas deben ser dignas y cómodas, pero no ostentosas. Basándose en el Coliseo, organizó la fachada en tres pisos de órdenes superpuestos.

Se dedicó, sobre todo, a remodelar edificios medievales con fachadas renacentistas:

  1. La Basílica de Santa María Novella, en la que utilizó el cuadrado como módulo compositivo y la policromía como elemento visual básico.
  2. El Tempio Malatestiano (antiguo convento de San Francisco):
    • Malatesta quiso reunir en él los restos de sus antepasados, de su amante y de los artistas que daban brillo a su corte.
    • Recubrió el templo de mármoles y lo decoró con un arco de triunfo romano.
    • Tanto lo transformó que el Papa Pío II dijo que parecía un lugar de culto para el demonio.

Pero su edificio religioso más importante fue la Iglesia de San Andrés, en Mantua:

  • Fachada sobre un podio y con un arco central profundo que recuerda a los templos romanos.
  • Planta de nave única con capillas entre contrafuertes.

La Escultura: Ghiberti y Donatello

Ghiberti (Florencia, 1378-1455)

Fue el ganador del concurso de las Segundas Puertas del Baptisterio de Florencia. Debió ajustarse al modelo establecido en 1336 por Andrea Pisano, por lo que las fragmentó en veintiocho cuadros y desarrolló en ellos escenas del Nuevo Testamento e imágenes de los evangelistas y doctores de la Iglesia.

Poco después se le encargaron las Terceras Puertas. Varios cambios lo sitúan en el estilo renacentista:

  • Sustituyó las casillas lobuladas por diez espacios cuadrados para poder tratar las escenas del Antiguo Testamento con mayor amplitud.
  • Utilizó la perspectiva lineal de Uccello y los efectos de profundidad del schiacciato.
  • Decoró los marcos con reproducciones de esculturas griegas y festones de plantas y animales.

Estas Puertas recibieron numerosos elogios, como el de Miguel Ángel Buonarroti.

Ghiberti realizó estatuas independientes; las más importantes son la de San Juan Bautista y San Mateo, llenas de gracia y dulzura.

Donatello (Florencia, 1386-1468)

Es el escultor más influyente del siglo XV, equiparado con Miguel Ángel y Bernini. Sus cualidades más importantes son:

  • El dominio de todas las técnicas y materiales.
  • La profundidad psicológica en los sentimientos humanos.
  • Su capacidad para definir y dar forma renacentista a ciertas construcciones.

En su trayectoria, podemos distinguir las siguientes etapas:

  1. Fase inicial de adolescencia y madurez en Florencia. Aprendió las técnicas de la fundición del bronce en el taller de Ghiberti. En la Capilla de Orsanmichele talló un San Marcos, que le encargaron los pañeros, y un San Jorge. Esta imagen incorpora a sus pies un relieve de la Muerte del Dragón que combina la perspectiva lineal con el schiacciato.

Formó equipo con Michelozzo, de cuya alianza saldría la forma definitiva de la tumba y el púlpito renacentista:

  1. Esquema simple: arco de triunfo adosado a una pared y superponer en su interior:
    • El sarcófago sostenido por Virtudes.
    • La inscripción sobre la fama del difunto.
    • Un tondo con la imagen de la Virgen.

    La más importante es la tumba del Cardenal Rainaldo Branacci.

  2. La predicación de dominicos y franciscanos en las calles aconsejó la construcción de púlpitos al aire libre.
  • El Púlpito en la esquina sur de la Catedral de Prato para guardar El Cinturón de la Virgen. Presenta dos novedades:
    • Plataforma colgada de la pared.
    • Antepecho decorado con niños danzantes llamados putti.

Disuelta la sociedad con Michelozzo, Donatello esculpiría la Cantoría de la Catedral de Florencia. A continuación, realizó el tabernáculo de la Capilla Cavalcanti, en la Iglesia de la Santa Croce de Florencia, con el tema de la Anunciación y una de sus obras más conocidas: la estatua en bronce de un David adolescente para el Palacio Medici.

  1. Estancia en Padua (1443-1453). Durante la década que permaneció en esta ciudad, realizó los bajorrelieves con los Milagros de San Antonio. También realizó la estatua ecuestre de Erasmo da Narni, más conocido como “el Gattamelata”, la estatua que lo inmortalizaría. El personaje es un capitán de mercenarios que había defendido la República de Venecia contra Milán. A partir de la estatua romana de Marco Aurelio, Donatello esculpió la imagen de un militar poderoso que simboliza el ideal humanista.
  2. Última etapa en Florencia (1453-1468). Con más de sesenta y cinco años, sufrió una crisis religiosa que parece promovida por el fraile dominico San Antonino, el cual se paseaba por la ciudad con harapos y predicaba a sus vecinos que abandonaran las costumbres licenciosas. Uno de sus sermones inspiró la Magdalena penitente.

Pintura: Fra Angélico, Masaccio, Piero della Francesca y Botticelli

Fra Angélico (Florencia, 1400 – Roma, 1455)

Sus obras son herederas del gótico, solo se incluye en el Quattrocento por el uso de la arquitectura y de la perspectiva brunelleschiana.

En el retablo de La Anunciación (1430), utilizó colores brillantes y fondos dorados, imágenes estilizadas y una luz especial que dota al cuadro de un ambiente primaveral.

En 1438, recibió el encargo de decorar el Convento de San Marcos. Serán 50 frescos que dotarán al convento de un mensaje de espiritualidad, con una técnica detallista y minuciosa.

Masaccio (Arezzo, 1401 – Roma, 1428)

Puede considerarse el fundador de la pintura moderna y es el primer pintor que construye con el color. Sus primeras pinturas, los frescos de la Capilla Brancacci, en la Iglesia florentina del Carmine, son ya una obra maestra:

  1. Brancacci quiso decorar su tumba con un ciclo iconográfico dedicado a San Pedro.
    • Fue encargado a Masaccio y a Masolino de Panicale.
    • La más famosa es El Tributo de la Moneda, que fragmenta en tres escenas yuxtapuestas:
      • En el centro, Cristo es requerido por el recaudador de impuestos de Cafarnaún.
      • A la izquierda, se observa a San Pedro pescando un pez en el lago de Genezaret.
      • A la derecha, Pedro entrega la moneda al recaudador.

Otro importante cuadro de Masaccio es La Trinidad, pintado para la Iglesia de Santa María Novella de Florencia:

  1. Se observa el conocimiento del autor sobre la perspectiva de Brunelleschi.
  2. Los tres grupos se recortan sobre un tabernáculo, cubierto por una bóveda, lo que crea una ilusión de profundidad.
  3. Debajo de la pintura, hay una falsa mesa de altar con un esqueleto y una inscripción.
  4. La pintura puede leerse en sentido vertical ascendente, desde el esqueleto hasta la Vida eterna, pasando por la oración, la intercesión de los santos y la redención.

Piero della Francesca (Arezzo, 1420-1492)

Se educó en Florencia y su primera gran obra (1452-1460) fue la decoración de la Capilla familiar de los Bacci en la Basílica de San Francisco, en Arezzo.

Desarrolló en ella la Historia de la Vera Cruz:

  1. Cuenta la historia de la madera que se usó en la cruz de Cristo:
    • Comienza cuando los hijos de Adán colocan bajo su lengua una ramita del Árbol de la Vida.
    • Este árbol fue talado por Salomón y su tronco utilizado en la construcción de un puente.
    • Reconocido por la reina de Saba en un viaje, lo “adoró devotamente”.
    • Las siguientes escenas relatan el recorrido de la madera después de la resurrección de Cristo.
  2. Las características de esta obra son:
    • Modelación de los hombres, los objetos y el paisaje a través de la luz y el color.
    • Reducción de la naturaleza a figuras geométricas.
    • Uso de la perspectiva con rigor matemático.
  3. Esto lo convirtió en un precursor de pintores.

Della Francesca es también un importante pintor de retratos. Hizo cuadros de varios príncipes y tiranos.

En Urbino, entró en contacto con la pintura flamenca, cuya técnica utilizará en su Virgen de Senigallia y en la Pala de Brera de Milán.

Sandro Botticelli (Florencia, 1447-1510)

Su producción pictórica puede dividirse en dos etapas:

  1. Hasta 1492, desarrolló obras de tema mitológico y contenido moralizante, influido por el círculo neoplatónico de los Médici.

    Las obras principales de este periodo son tres:

    1. La Primavera es un horóscopo para celebrar las bodas de Lorenzo de Pierfrancesco:
      • Con el fondo de un bosquecillo, Venus libera a las Gracias, que bailan a su derecha junto a Mercurio, y a Flora.
      • Botticelli representa la doble naturaleza del amor: la gracia de las artes liberales y los vientos de la pasión en un paisaje de ensueño.
    2. El nacimiento de Venus:
      • A la derecha, Céfiro abraza a la ninfa Cloris.
      • De su unión, nace Flora, que ofrece una túnica a Venus.
      • Según la mitología clásica, Venus nació de los testículos de Urano al contacto con el mar.
    3. Palas domando al Centauro:
      • Se repite el modelo femenino de postura agraciada y bucles. Esta vez, Palas Atenea representa la Sabiduría.
      • Los anillos que decoran su vestido son el emblema de Lorenzo “el Magnífico”.

      La obra se convierte así en una alegoría del conocimiento político de Lorenzo de Médici y de su buen gobierno de Florencia.

  2. La irrupción de Savonarola en Florencia influyó en el cambio de la obra de Botticelli.

    Savonarola fue un fraile dominico que predicó contra el lujo y la opulencia que reinaba en Florencia y se enfrentó a los neoplatónicos y a los pintores y coleccionistas de cuadros, a los que acusó de escandalizar al pueblo. Los cuadros más representativos de este periodo son Los milagros de San Cenobio y La natividad mística.

    El arte de Botticelli, seguidor del fraile, se volvió dramático. Sus últimas obras están dotadas de un fuerte sentido religioso.