Descubriendo el Relieve de España: Formación y Características de sus Cordilleras y Sistemas Insulares

Sistemas Montañosos Interiores a la Meseta

Continuación de los Sistemas Centrales

Cordillera Cantábrica

La Cordillera Cantábrica tiene dos sectores diferenciados:

  • El Macizo Asturiano (sector Oeste): Se formó por levantamiento de bloques. Destacan los Picos de Europa, donde se dan las mayores alturas de la cordillera (Torre de Cerredo, Naranjo de Bulnes).
  • La Montaña Cantábrica (sector Este): Se extiende desde Cantabria hasta el País Vasco. Se formó por el plegamiento de materiales secundarios, principalmente calizas.

Sistema Ibérico

Se formó por el plegamiento de materiales secundarios depositados por el mar al este del zócalo de la Meseta. Por ello, sus materiales son principalmente calizos, aunque presentan sectores arcillosos.

El tercio norte (dirección NO – SE) incluye las mayores alturas, donde destacan las sierras del Moncayo, los Picos de Urbión, Cebollera y la Demanda. Desde el sureste de Soria, el sistema se bifurca en dos ramas:

  • Rama Interior: Con las sierras de Albarracín y la Serranía de Cuenca.
  • Rama Exterior: Con las sierras de Javalambre y Gúdar.

Sierra Morena

Se formó por el empuje desde el sur al levantarse las Cordilleras Béticas y separa la Meseta del valle del Guadalquivir. El roquedo es paleozoico, de color oscuro (de ahí su nombre), y su altitud es baja (1200 – 1400 m). Destacan las sierras de Madrona, Pedroches y Aracena.

Montañas y Depresiones Exteriores a la Meseta

Montañas Exteriores

Se formaron en la orogénesis alpina de la Era Terciaria, al plegarse los sedimentos secundarios depositados en las fosas oceánicas pirenaica y bética, por lo que predominan los materiales calizos.

Los Pirineos

Se extienden del Golfo de Vizcaya al Cabo de Creus y son asimétricos. Se estructuran en:

  • Zona Axial (Pirineo propiamente dicho): Compuesta por materiales paleozoicos, destacando el Aneto en los Montes Malditos (segunda altura mayor de la Península Ibérica, 3.404 m).
  • Prepirineo: Formado por un arco interior y otro exterior a la zona axial, con materiales mesozoicos. De Este a Oeste destacan las sierras de Cadí, Montsec, Guara, Leire y Abodi.

Otros Sistemas Exteriores

  • Montes Vascos: Son una prolongación de los Pirineos hacia el Oeste, de roquedo calizo, formas suaves y altitud moderada.
  • Cordillera Costero-Catalana: Es un relieve poco destacado causado por la transformación de la zona oriental de los Pirineos e integrada por materiales paleozoicos y mesozoicos.

Las Cordilleras Béticas

Se extienden desde Gibraltar al Cabo de la Nao. Se estructuran en dos sistemas montañosos separados por depresiones:

  • Cordillera Subbética: Situada en el interior, se formó por el plegamiento de materiales secundarios; destacan las sierras de Alcaraz, Cazorla y Segura.
  • Cordillera Penibética: Borda la costa. Sus materiales son paleozoicos y el relieve encierra las cimas más elevadas de la Península en Sierra Nevada (Mulhacén – 3479 m – y Veleta); destacan también las Alpujarras y la Sierra de Ronda.

Depresiones Exteriores

Son cuencas triangulares formadas en el Terciario en paralelo a las cordilleras alpinas. Se rellenaron con sedimentos terciarios y cuaternarios y hoy son relieves prácticamente horizontales.

La Depresión del Ebro

Divide el Sistema Ibérico y los Pirineos. En el Terciario estuvo ocupada por mar, pero con el plegamiento alpino se cerró, transformándose en un gran lago, posteriormente sedimentado y por el que el río Ebro se abrió paso hasta el Mediterráneo. Sus materiales son marinos y continentales, lo que origina formas del relieve variadas, según la dureza y aridez del clima.

La Depresión del Guadalquivir

Divide las Cordilleras Béticas y Sierra Morena. Primero estuvo abierta al Atlántico, luego se convirtió en una albufera (lago litoral) y se rellenó después con arcillas, calizas y margas. El relieve forma campiñas suavemente onduladas en zonas donde predominan las arcillas, y mesas y cerros testigo donde predominan las calizas.

Relieve en la España Insular: Baleares y Canarias

Las Islas Baleares

Las islas mayores del archipiélago balear son Mallorca, Menorca, Ibiza, Formentera y Cabrera. Su relieve constituye una prolongación de las Cordilleras Béticas, a las que se une por un estrecho brazo que se sumergió bajo el mar a finales del Terciario, por lo que mantiene los elementos propios del levante peninsular.

Las islas están formadas mayoritariamente por calizas, por lo que destaca el modelado kárstico (ej. Cuevas del Drac, en Mallorca). La mayor parte de las islas está formada por zonas bajas y llanas. La llanura más extensa es el Pla, en Mallorca, de roquedo arcilloso y relieve suave. Los accidentes topográficos más importantes son las sierras del Levante (< 500m) y la Sierra de Tramuntana con el pico Puig Major (1445 m, Mallorca).

Las Islas Canarias

Situadas en el océano Atlántico frente a la costa africana, son el territorio más meridional de España. Es un archipiélago muy montañoso cuyas islas principales son Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria, Tenerife, La Gomera, La Palma y El Hierro. En Tenerife se encuentra el Teide (3718 m), el pico más alto de España.

Las Islas Canarias, localizadas en la placa africana, tienen un origen volcánico. La compresión de materiales de las dos placas (africana y eurasiática) durante la Era Terciaria originó fallas a través de las que ascendió el magma, que dio origen a cada isla y generó un relieve volcánico (conos volcánicos, calderas, malpaíses, roques y barrancos). Sigue existiendo actividad volcánica que transforma el relieve y la línea de costa; entre las erupciones históricas destaca la de Timanfaya, que constituye un Parque Nacional.