Grandes Hitos de la Historia de España: De Hispania Romana a la Constitución de 1978

Cronología de Hispania: De la Conquista Púnica a la Invasión Musulmana (225 a.C. – 711 d.C.)

A continuación, se presenta una línea del tiempo con los hitos más relevantes de la historia de Hispania, desde el periodo púnico hasta el fin del reino visigodo.

  • 225 a.C.: Fundación de Cartago Nova por los cartagineses.
  • 218 a.C.: Llegada del general romano Escipión a Ampurias e inicio de la Segunda Guerra Púnica.
  • 154 a.C.: Inicio de las guerras lusitanas y celtíberas.
  • 133 a.C.: Destrucción de Numancia por los romanos.
  • 99 a.C.: Sublevación de los celtíberos.
  • 19 a.C.: Inicio de las guerras de los romanos contra los cántabro-astures.
  • 14 a.C.: Fundación de Caesar Augusta (Zaragoza).
  • 74 d.C.: Vespasiano concede a los hispanos el derecho de ciudadanos latinos.
  • 98 d.C.: Trajano, natural de Itálica (Sevilla), es proclamado emperador romano.
  • 117 d.C.: Adriano, descendiente de hispanos, es proclamado emperador romano.
  • 212 d.C.: El emperador Caracalla concede la ciudadanía romana a toda la población libre del imperio.
  • 380 d.C.: Edicto por el que Teodosio declara el cristianismo religión oficial del Imperio Romano.
  • 409 d.C.: Vándalos, suevos y alanos invaden Hispania.
  • 418 d.C.: Los visigodos se instalan en Aquitania (Francia) por acuerdo con el Imperio Romano.
  • 476 d.C.: Destitución del último emperador romano (fin del Imperio Romano de Occidente).
  • 507 d.C.: Los visigodos son derrotados en Vouillé por los francos y se desplazan a Hispania.
  • 556 d.C.: Toledo es declarada capital del reino visigodo.
  • 586 d.C.: Leovigildo derrota a los suevos y anexiona su territorio.
  • 589 d.C.: El rey visigodo Recaredo se convierte al catolicismo y la monarquía abandona el arrianismo (III Concilio de Toledo).
  • 622 d.C.: El rey visigodo Suíntila expulsa a los bizantinos de los territorios ocupados en la península.
  • 654 d.C.: Se elabora el Fuero Juzgo, código del rey Recesvinto común a hispanorromanos y visigodos.
  • 711 d.C.: Invasión norteafricana dirigida por Tariq y derrota del rey Rodrigo en Guadalete.

Corrientes Ideológicas del Movimiento Obrero Español (Finales del Siglo XIX)

El movimiento obrero y campesino español, durante el último cuarto del siglo XIX, se basó principalmente en dos grandes corrientes ideológicas: el Marxismo y el Anarquismo, aunque inicialmente existió el socialismo utópico.

El Marxismo

El marxismo, la corriente más importante del socialismo, debe su nombre a Karl Marx. Esta teoría afirma que en las sociedades industriales existe una lucha de clases entre la burguesía (propietarios de los medios de producción) y los obreros o el proletariado. Marx propone que los trabajadores lleven a cabo una revolución para destruir el capitalismo y dar el poder a los trabajadores. Defendió la intervención de organizaciones y partidos obreros en la lucha política, origen de los partidos socialistas posteriores.

El Anarquismo

El anarquismo se opone al Estado y aspira a sustituirlo por algún tipo de asociación voluntaria entre las personas. Rechaza la política, los partidos políticos y la participación en elecciones. Destacan figuras como Proudhon y Bakunin.

Evolución y la Primera Internacional

Aunque en un principio las ideas obreristas se acercaron al mutualismo y el cooperativismo, en el último cuarto del siglo XIX, la tendencia se inclinó hacia el Anarquismo debido a la influencia de la I Internacional o la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT). Giuseppe Fanelli viajó a Cataluña, Madrid y Valencia, y se fueron formando núcleos de la AIT.

El Anarquismo prendió con más rapidez y fuerza que el marxismo en España. Una de las razones fue la proximidad ideológica con el republicanismo federal (defensa de la soberanía popular, el ateísmo, y la fe en la progresión y la ciencia). En Barcelona surgió la Federación Obrera Española (FRE) dentro de la AIT, de tendencia bakunista. La división interna de la AIT entre marxistas y anarquistas favoreció la aparición de la corriente anarcosindicalista, partidaria de la acción sindical directa.

Fases Militares de la Guerra Civil Española (1936-1939)

La sublevación militar provocó la revolución social y la desintegración del ejército regular republicano, dejando a la República prácticamente sin tropas para defenderse. Militarmente, el conflicto se divide en cuatro grandes fases:

1. La Batalla de Madrid (Agosto de 1936 – Marzo de 1937)

El principal objetivo de los militares rebeldes era una rápida conquista de Madrid. Mola inició las primeras operaciones, pero el avance quedó detenido en la Sierra de Guadarrama. Ante este fracaso, el protagonismo recayó en el Ejército de África al mando de Franco. Una columna de legionarios y regulares inició una rápida marcha sobre Madrid por la carretera de Extremadura y tomó Badajoz.

Franco decidió aplazar la conquista de Madrid para liberar el Alcázar de Toledo. Su liberación supuso un triunfo político y propagandístico para Franco, quien fue designado Generalísimo de las fuerzas sublevadas por la Junta de Defensa de Burgos. El retraso por la operación del Alcázar permitió a los republicanos organizar la defensa de Madrid con las primeras armas compradas a la Unión Soviética. El gobierno republicano se trasladó a Valencia, confiando la resistencia a la Junta de Defensa de Madrid.

El teniente coronel Vicente Rojo ideó un sólido dispositivo defensivo para frenar el avance hasta la llegada de refuerzos. La superioridad militar de las tropas sublevadas hacía temer la pronta caída de Madrid, pero los sindicatos y partidos obreros alentaron un espíritu de resistencia bajo el grito de «¡No pasarán!». Las tropas republicanas consiguieron resistir ante los continuos bombardeos de aviones alemanes.

En diciembre, Franco renunció al asalto frontal a la capital. La batalla de Madrid se prolongó hasta febrero y marzo de 1937, con la Batalla del Jarama y la de Guadalajara, en la que el Ejército Popular derrotó al cuerpo del ejército italiano. La victoria republicana de Guadalajara obligó a Franco a abandonar la ofensiva directa sobre Madrid. Al mismo tiempo, tras un intenso bombardeo de la Legión Cóndor y la Aviazione Legionaria, las tropas nacionales ocuparon toda la provincia de Málaga.

2. La Caída del Norte (Abril – Octubre de 1937)

Los fracasos en Madrid hicieron que Franco modificara su estrategia. Inició una guerra de desgaste, de ocupación sistemática del territorio y de aniquilamiento del ejército republicano. Por razones estratégicas y económicas, Franco se dirigió contra el norte industrial y minero, bajo dominio republicano. Era una zona aislada del resto de la España republicana y fragmentada políticamente.

La ofensiva de los sublevados contra Vizcaya comenzó con apoyo de la Legión Cóndor. Aviones de la Legión Cóndor lanzaron bombas incendiarias sobre la población civil indefensa de Durango y Guernica. Para detener la ofensiva franquista sobre Santander, se preparó una operación militar de gran envergadura en Brunete que terminó en fracaso para las tropas republicanas y no logró evitar la toma de Santander. Para salvar Asturias, los republicanos trataron de conquistar Zaragoza con una ofensiva en Belchite. Sus resultados fueron desastrosos e impidieron que las tropas franquistas entrasen en Gijón.

3. De la Ofensiva sobre Teruel a la Batalla del Ebro (Diciembre de 1937 – Noviembre de 1938)

Tras tomar el Norte, Franco volvió sobre Madrid. El gobierno de Negrín llevó a cabo una ofensiva en Teruel. Franco renunció de nuevo a Madrid y ordenó una contraofensiva para reconquistar la ciudad. Entre enero y febrero de 1938 tuvo lugar la Batalla de Teruel, una de las más crueles de la guerra, en la cual se impuso el franquismo.

La derrota tuvo unos resultados desastrosos para la República por las enormes pérdidas en hombres y armamento. Franco lanzó una ofensiva general en el frente de Aragón, y ante la superioridad aérea y artillera de las tropas nacionales, el ejército republicano se desplomó. Las tropas de Franco alcanzaron el Mediterráneo y la España republicana quedó partida en dos zonas, aislando Cataluña.

En junio de 1938, Negrín decidió desencadenar una ofensiva en el Ebro para unir de nuevo las dos zonas republicanas y alargar el conflicto a la espera de la guerra en Europa. Rojo preparó una gran ofensiva que dio lugar a la Batalla del Ebro (julio a noviembre), la más encarnizada de la guerra. Fue una batalla de desgaste que agotó al ejército republicano.

4. El Fin de la Guerra (Diciembre de 1938 – Abril de 1939)

A finales de 1938 se produjo la ofensiva franquista sobre Cataluña, frente a un ejército republicano desmoralizado y falto de armamento. Franco opuso un ejército de soldados experimentados y con muchos medios. El 26 de enero de 1939, Barcelona fue ocupada por las tropas de Franco y pocos días después, Gerona.

Negrín defendió una política de resistencia para alargar el conflicto ante el inminente estallido de una guerra mundial que permitiera a la República encontrar aliados, pero ya era prácticamente imposible conseguir suministros del exterior. En Madrid, el coronel Casado, junto a dirigentes socialistas de la CNT, de Unión Republicana e Izquierda Republicana, se sublevaron contra el gobierno de Negrín. Pretendían negociar una paz con Franco.

Madrid fue durante varios días escenario de una guerra civil dentro de la guerra civil. Franco mantuvo su postura intransigente y exigió una rendición incondicional. A finales de marzo, los ejércitos franquistas reanudaron su ofensiva y entraron en Madrid sin apenas resistencia, y después ocuparon el resto del país. El 1 de abril, Franco firmó en Burgos que la guerra civil había terminado.

La Constitución Española de 1978: Proceso y Características Esenciales

Proceso de Elaboración y Aprobación

La Comisión de Asuntos Constitucionales del Congreso fue la encargada de elaborar la Constitución. Siete de sus miembros, conocidos como los “padres de la Constitución”, fueron comisionados para su redacción: tres pertenecientes a UCD, y uno por cada uno de los siguientes cuatro partidos: PSOE, AP, PCE y Minoría Catalana. Este proceso se caracterizó por la búsqueda de un amplio consenso político.

El Congreso y el Senado aprobaron el texto constitucional en octubre de 1978 en una sesión conjunta. El 6 de diciembre de 1978, la Constitución se sometió a referéndum. Votó el 67% del electorado y fue aprobada por el 87% de los votantes.

Características Esenciales

La Carta Magna recogía en sus 169 artículos las características esenciales de las democracias occidentales:

  • El Título Preliminar define a España como un Estado democrático de Derecho.
  • La forma política es la monarquía parlamentaria.
  • Se fundamenta en la indisoluble unidad de la Nación española, a la vez que se reconoce el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran.
  • Establece la separación e independencia de los tres poderes fundamentales del Estado (Ejecutivo, Legislativo y Judicial).
  • Garantiza en sus distintos artículos los derechos humanos y las libertades fundamentales.