Este glosario presenta una recopilación de términos fundamentales en la obra de Friedrich Nietzsche, ofreciendo una comprensión profunda de su pensamiento filosófico. Cada concepto es crucial para desentrañar su crítica a la metafísica tradicional, su visión del arte, la moral y la existencia humana.
Artista Trágico
Para Nietzsche, la realidad es lo vital. Si la realidad es puro devenir, el concepto no puede captarla, sino la metáfora, pues esta no establece un significado unívoco (objetividad) sino que acepta la pluralidad y subjetividad de los mismos (perspectiva). El arte, para Nietzsche, es el único instrumento adecuado para entender la vida, porque afirma la multiplicidad y subjetividad de la realidad (devenir) utilizando la metáfora y no el concepto. Nietzsche considera que la tragedia es la forma suprema de arte, pues aúna las dimensiones apolínea y dionisiaca de la vida. La tragedia no pretende metas ni orígenes fuera de este mundo, sino que afirma la realidad, la vida, tal como nos aparece, incluso en sus aspectos más enigmáticos e irracionales, terribles y dolorosos. El artista trágico es el modelo de ser humano, por encima del santo, del filósofo o del científico.
Causa Sui
«Causa de sí mismo». Se aplica únicamente a Dios, ser que se da la existencia a sí mismo, o que existe por razón de su misma naturaleza. Es el ser subsistente por sí mismo; lo demás existe por causa de otro.
Conceptos Supremos
Se refiere a las categorías racionales que los filósofos han utilizado para referirse a la «verdadera» realidad del mundo inteligible. Estos conceptos pretenden designar las características de ese «mundo verdadero»: ser, sustancia, unidad, identidad, causa… Para Nietzsche, estos «conceptos supremos» son términos que elabora nuestra razón para referirse a un mundo inventado por nuestro recelo y cobardía ante la realidad del devenir.
Deshistorizar
Proceso por el cual los filósofos parmenídeo-platónicos eliminan el carácter dinámico de la realidad. Historia no debe entenderse aquí como una ciencia ni como el suceder de lo acontecido al ser humano, sino en un sentido más amplio: como el continuo devenir de lo real. Decir que el ser es historia o histórico es otro modo de decir que es devenir. Los filósofos han deshistorizado la realidad.
Devenir, lo que deviene
Se designa el ser como proceso, y que incluye todo cambio: movimiento, alteración, generación, corrupción. La afirmación del devenir se identifica con una concepción dinámica de la realidad, que en opinión de Nietzsche, recoge su verdadera naturaleza «histórica».
Dionisiaco / Apolíneo
Lo apolíneo, que toma como modelo al dios Apolo, representaría el ideal de belleza y de las formas acabadas, la medida, el orden: las características de la razón. Lo dionisiaco, que toma como modelo a Dionisos, representaría el desorden, lo inacabado: los valores de la tierra, las características de la vida. Ambos polos se necesitan mutuamente; ambos salen victoriosos y su expresión más acabada es la tragedia griega.
Dios
Concepto en el cual la filosofía ha aglutinado todas las características y valores positivos que atribuía al «mundo verdadero» por ella creado. Así, Dios es el ser, y se caracteriza porque es causa sui, inmutable, perfecto. Es el concepto supremo más elevado de todos y, por eso, el principio explicativo de todos los demás seres. Nietzsche considera que ese concepto, precisamente por ser el más elevado, es el más vacío. Lo llama «el último humo de la realidad».
Egipticismo
Imagen metafórica con la que Nietzsche señala la tendencia a negar el principal rasgo de la realidad: el devenir. Utiliza esta imagen porque la representación humana en la escultura y pintura egipcia se caracteriza por el hieratismo.
Eleatas
Grupo de presocráticos entre los que se encuentran Jenófanes, Parménides y Zenón. Su tesis central, y la que tanto critica Nietzsche, es una concepción estática del ser, la deducción racional de sus categorías y, por tanto, la negación de lo sensible.
Ens Realissimum
Significa «ente realísimo». «Ente» hace referencia a una cosa existente y a Dios como el ser máximamente real por ser perfecto, necesario y causa de sí mismo. Para Nietzsche, este concepto no es más que una ficción vacía.
Fetichismo
Nietzsche alude al proceso mediante el cual la proyección de la categoría gramatical de sujeto de la proposición en nuestra experiencia de lo real genera la falsa creencia de que en la realidad existen sujetos y predicados. El «fetichismo de la metafísica del lenguaje» consiste en dar un valor ontológico a las estructuras gramaticales.
Filosofía, Filósofos
Se refiere a los filósofos que mantienen una concepción estática de la realidad. Para Nietzsche, «filósofo» es sinónimo de platónico y «filosofía» de «filosofía platónica». Cuando Nietzsche califica algo de filosofía o de filósofo, está lanzando un ataque.
Idiosincrasia
Características propias y distintivas que definen cualquier cosa. Nietzsche utiliza esta expresión para referirse a las características que definen a los filósofos tradicionales, que son dos: la creación del ser estático y la transmutación ontológica.
Idolatría
El culto a los ídolos, entendiendo por tales cualquier cosa objeto de admirada exaltación. Para Nietzsche, estos conceptos supremos son pura apariencia que no designan nada realmente existente; son momias conceptuales.
Ilusión Óptico-Moral
Nietzsche caracteriza el mundo inteligible. Este «mundo verdadero» se ha elaborado a partir del único mundo real: el devenir. Partiendo de las características del devenir, se inventa una «realidad». Pero esta «realidad» no es más que un deseo, debido a la consideración del devenir como algo falso y erróneo.
Momias Conceptuales
Los conceptos que han utilizado los filósofos para referirse a la «verdadera» realidad son conceptos huecos. Para Nietzsche, el concepto es sepulcro de intuiciones: el concepto momifica el pensar y la realidad.
Monótono-Teísmo (Monoteísmo)
Se refiere al monoteísmo, no solo desde el punto de vista religioso, sino también desde el filosófico. La filosofía tradicional cae en el monoteísmo cuando renuncia a la vida y establece un principio inmutable.
Mundo Aparente / Mundo Verdadero
Ambos conceptos resumen la dualidad presente en la filosofía. El pensamiento parmenídeo-platónico ha afirmado la existencia de un «mundo verdadero» que se caracteriza por ser racional, estático, inmutable y bueno. El mundo conocido por los sentidos, que es devenir, multiplicidad, cambio y origen del mal, se ha calificado de «mundo aparente». Nietzsche cambia el sentido de esta pareja, afirmando que el único mundo real es el devenir.
Nihilismo (Voluntad de Nada)
Los valores creados por la cultura occidental son falsos valores y, en el fondo, proceden de una «voluntad de la nada». Este nihilismo es consecuencia de la interpretación que se ha hecho hasta ahora del valor de la existencia.
Prejuicio de la Razón
Cualquier elemento previo a la emisión de un juicio y que, a la vez, condiciona cómo se va a juzgar. La razón argumenta utilizando juicios que se componen de conceptos. El material de la razón es el concepto; no puede funcionar de otro modo. Según Nietzsche, esto ha llevado al ser humano a considerar que estos corresponden a seres realmente existentes.
Pueblo
Se refiere al conocimiento vulgar de quienes afirman como real y verdadero lo que les muestran sus sentidos (los encadenados en la caverna platónica). Los filósofos se separan de lo que dice el «pueblo», ya que afirman que el conocimiento superior es el propio de la razón. Los sentidos son fuente de error, por eso la mayoría (el pueblo) está equivocada (vive en las sombras) y, por tanto, los filósofos deben revelar al pueblo la verdad de un mundo inteligible para que crea en él y viva de acuerdo con él.
Razón
La razón se ha visto como la fuente de la verdad. Esta facultad ha generado un mundo verdadero, lo inteligible; y los sentidos nos han presentado un mundo aparente, el devenir. Nietzsche afirma que los sentidos son los únicos que nos atestiguan cómo es el devenir.
Sub Specie Aeterni
Nietzsche toma este concepto de Spinoza. Para este autor, lo que existe es una manifestación de Dios. La verdad se alcanza cuando se conoce «sub specie aeternitatis». El ser humano llegará a la verdad cuando, abandonando su perspectiva, vea las cosas como las conoce Dios.
Sustancia
Lo que existe por sí, y se opone a los accidentes. Calificar algo de sustancia supone introducir el concepto de ser permanente y estático. Para Nietzsche, la organización del mundo en sustancias y accidentes es una invención de la razón.
Valor, Valores Supremos
Un valor es una cualidad que atribuimos a las personas o cosas (valores positivos o valores negativos). Los valores supremos son los valores que la filosofía atribuye al mundo inteligible inventado por la razón: lo existente, lo bueno, lo verdadero, lo perfecto.
Vida
Criterio de valoración. Todas las tablas de valores son inventadas, pero solo aquellas que afirman la vida son aceptables.
Vida Descendente
Para Nietzsche, la cultura occidental, desde Sócrates, ha defendido valores contrarios a la vida y ha creado un mundo objetivo, verdadero, inmutable y racional, que fundamenta dichos valores antivitales. La «vida decadente» es la vida de quien cree en esos valores por encima de los valores de la tierra, del devenir. Es decadente todo lo que se opone a los valores del existir instintivo y biológico: la filosofía, la religión y la moral.