El Siglo de Oro Español: Poesía, Narrativa y Teatro Barroco

El Barroco: Un Periodo de Profunda Transformación Literaria

El Barroco, que abarca desde el reinado de Felipe III hasta la muerte de Calderón de la Barca, marca un quiebre con el vitalismo renacentista. Se caracteriza por un profundo pesimismo, donde el arte se convierte en un medio de evasión o reflexión ante la fugacidad del tiempo, tema central de la época. La antítesis y el contraste son recursos estilísticos predominantes, buscando sorprender y conmover al espectador.

Marco Histórico: Decadencia y Conflictos

Este periodo se enmarca en la decadencia del Imperio Español, marcada por la bancarrota económica. Surge un conflicto entre la burguesía y la nobleza, aliada con la Iglesia. La Inquisición, además, limita la difusión de ideas que apoyan la razón.

La Lírica en el Barroco: Complejidad y Diversidad

La lírica barroca se distingue por su renovación temática y una notable complejidad formal. Se aprecian tres tendencias principales:

  • Autores que respetan el equilibrio: Buscan la armonía entre expresión y contenido, a menudo con una tendencia al pesimismo.
  • Conceptismo: Prioriza el contenido sobre la forma, utilizando juegos de palabras y recursos estilísticos como la metáfora y la comparación.
  • Culteranismo: Evolución del conceptismo, se caracteriza por referencias mitológicas y cultas, perífrasis y un lenguaje latinizante, dando mayor importancia a la expresión.

Clasicismo de Lope de Vega

Lope de Vega, uno de los escritores más importantes de España, destaca como uno de los mejores autores líricos del siglo XVII. Su obra poética incluye Rimas, Rimas Sacras y Rimas humanas y divinas del licenciado Tomé de Burguillos. Sus versos tienden al clasicismo, buscando el equilibrio entre fondo y forma, y se caracterizan por su ingenio y espontaneidad, revitalizando el verso octosílabo.

Lírica Conceptista: Francisco de Quevedo

Francisco de Quevedo es una figura prominente del siglo XVII, conocido por su personalidad llamativa, su poesía burlona, crítica y despiadada. Preocupado por los problemas de su tiempo, su obra poética es densa y sorprendente, abordando temas políticos, filosóficos, amorosos y burlescos. Sus poemas reflejan desconfianza en el ser humano y escepticismo, explorando el paso del tiempo, el envejecimiento y la muerte, así como el amor. Su poesía filosófica es inigualable, tratando el tópico del codidie morimur, concibiendo la vida como una sucesión de muertes.

Escuela Antequerano-Granadina

Este grupo de autores, dentro de la lírica barroca andaluza, muestra una tendencia al manierismo y un gusto por lo suntuoso y lo mitológico.

  • Pedro de Espinosa (1578-1650): Autor de poemas petrarquistas, obras religiosas y panegíricas, destaca por sus sonetos llenos de colorido.
  • Luis Carrillo y Sotomayor (1582-1610): Antecedente de Góngora, comparte su estilo refinado y la temática del tempus fugit.

El Culteranismo: Luis de Góngora

Luis de Góngora es el máximo exponente del culteranismo, con una expresividad sin igual en la literatura española. Su obra se divide en:

  • Poemas menores: letrillas, romances y sonetos.
  • Poemas mayores: cuya obra cumbre son las Soledades.

Su carácter innovador y vanguardista convirtió su poesía en un modelo de perfección formal. Su estilo evolucionó desde un carácter manierista en su primera época, con poemas sencillos, a una complejidad artificiosa en su segunda etapa. Su obra no fue plenamente valorada hasta la Generación del 27.

La Narrativa en el Barroco: Auge y Diversificación

La novela experimenta un gran desarrollo en el siglo XVII, continuando la narrativa realista iniciada con El Lazarillo de Tormes.

  • Género picaresco: Continuado por autores como Francisco de Quevedo con El Buscón.
  • Novelas breves a la italiana: Alcanzan gran éxito, destacando El Quijote de Cervantes.
  • Otros géneros cultivados: Novela pastoril (La Arcadia de Lope de Vega), Novela Bizantina (Los trabajos de Persiles y Segismunda) y la novela de caballería, que entra en decadencia tras El Quijote.

Quevedo y ‘El Buscón’

Publicada en 1626, El Buscón de Quevedo es una crítica social con fines humorísticos y de entretenimiento. Narra en primera persona el fracaso de Pablos, un hombre de origen humilde que busca ascender socialmente, pero solo encuentra frustraciones y humillaciones. Es considerada la obra picaresca más original, brillante y cruel, carente de compasión y un testimonio ideológico de la época, parodiando el género y destacando por sus personajes y humor.

El Teatro Barroco: La Comedia Nacional

El gran teatro clásico español florece a finales del siglo XVI con la obra de Lope de Vega, quien sentó las bases de la Comedia Nacional. En su tratado El arte nuevo de hacer comedias, Lope recogió las características de este nuevo teatro, fomentando la creatividad, la verosimilitud y el agrado al espectador.

Características de la Comedia Nueva

  • Las obras se dividen en 3 actos (exposición, nudo y desenlace), cada uno terminando con una acción intrigante.
  • No se respeta la regla de las tres unidades.
  • Se mezcla lo cómico (personajes humildes) y lo trágico (personajes nobles), aunque el final siempre es feliz.
  • Lope de Vega crea personajes arquetípicos: el caballero, el villano, el padre o mayordomo, el gracioso y el rey.

Corrales de Comedias

Las representaciones se llevaban a cabo en los patios centrales de las casas de vecinos. El público popular asistía de pie en el patio, mientras que la nobleza y los adinerados alquilaban los balcones. Las mujeres se situaban en la ‘cazuela’, separadas de los hombres. Las funciones se realizaban a la luz del día. A pesar de las prohibiciones por considerarse inmoral, los Corrales de la Cruz y del Príncipe en Madrid fueron escenarios de gran fama. El desarrollo de lugares específicos para el teatro impulsó la escenografía.

Lope de Vega: Obra Dramática y Estilo

La producción teatral de Lope de Vega es extensísima, conservándose más de 300 comedias y 42 autos sacramentales. Obras como Fuenteovejuna (tema nacional) y La dama boba (tema inventado) son representativas. Su estilo se caracteriza por la naturalidad y la espontaneidad, el juego de palabras, la integración de lo popular en lo culto, y la utilización de temas populares y estrofas tradicionales con una dimensión estética nueva y original. Su influencia se extiende a autores posteriores como Lorca.

Tirso de Molina: Originalidad y Talento Dramático

Insertado en la escuela de Lope, Tirso de Molina destaca por su originalidad y talento dramático. Escribió cerca de 80 dramas, entre los que sobresalen El burlador de Sevilla y La prudencia en la mujer. Su teatro posee rasgos propios, como la creación de caracteres con profundas características psicológicas y una comicidad crítica y mordaz que genera un tono satírico, elevando la figura del gracioso.

Calderón de la Barca: Culminación del Teatro Barroco

Calderón de la Barca lleva la comedia nacional a su punto culminante de perfección barroca. Su obra se divide en:

  • Primera etapa: Comedias cortesanas y de capa y espada, como La dama duende.
  • Segunda etapa: Alcanza la madurez como dramaturgo con obras como La vida es sueño, un drama sobre la libertad.

Su estilo se caracteriza por el orden en la estructura, la estilización del lenguaje y la intensificación del lenguaje, perfeccionando el sistema dramático creado por Lope.

Prerromanticismo: Anunciando Nuevas Sensibilidades

El Prerromanticismo presenta elementos que escapan al dominio de la razón, anunciando el Romanticismo del siglo XIX. Se observa una especial atención a lo melancólico, temas fúnebres, la naturaleza, y en ocasiones, crítica política y social.

La Prosa y el Ensayo: Reflexión y Divulgación

La prosa, con finalidad didáctica, se caracteriza por ser directa, clara y buscar la reflexión. El Padre Benito Jerónimo Feijoo inició este género, divulgándolo a través de la prensa.

  • José Cadalso: Figura fundamental del siglo XVIII, destacó en la prosa con Los eruditos a la violeta (1772), una sátira contra los falsos intelectuales, y Cartas marruecas (1793), que expone su pensamiento sobre la sociedad.

El Teatro Ilustrado: Razón y Enseñanza

Los ilustrados buscaron que el teatro respetara la regla de las tres unidades, la verosimilitud y la enseñanza útil, logrando agradar al público.

  • Autores destacados: Tomás de Iriarte (El señorito mimado y la señorita malcriada), Jovellanos (El delincuente honrado), Leandro Fernández de Moratín (El sí de las niñas) y Ramón de la Cruz (sainetes).
  • Gaspar Melchor de Jovellanos: Representante de la comedia sentimental, sus obras, con desenlaces felices, anteceden a los dramas románticos. Su finalidad era educar conmoviendo, utilizando personajes de bajo nivel social sensibles y un vocabulario científico o filosófico. Destaca por su coherencia.