El Periodo Moderado de Isabel II (1844-1854)

La Década Moderada (1844-1854)

Tras la regencia de Espartero, las Cortes de mayoría moderada decidieron anticipar la mayoría de edad de Isabel II, que acababa de cumplir los trece años. La Corona vuelve a desempeñar las atribuciones que le confiere la Constitución y hace uso de ellas una vez más en favor de los moderados. Con la llegada de Narváez a la presidencia del Consejo de Ministros y con unas Cortes de mayoría moderada, se inició una nueva etapa política caracterizada por el predominio absoluto de los moderados, que gobernaron durante la mayor parte del reinado. Se emprende la institucionalización del régimen liberal, bajo el signo ideológico del moderantismo de influencia francesa que aspiraba a la centralización y la burocratización del Estado.

La llamada Década Moderada (1844-1854) fue, en ese sentido, una fase crucial para la reorientación y consolidación del nuevo Estado, durante la cual se adoptaron importantes medidas:

Medidas Clave de la Década Moderada

La Constitución de 1845

La nueva Constitución de 1845, así como las leyes que la complementan, configuran el nuevo modelo de Estado liberal y traducen a la práctica la concepción doctrinaria del liberalismo moderado. La Constitución de 1845, que venía a sustituir a la de 1837, otorga mayores prerrogativas a la Corona, la cual, además de nombrar los ministros, disolver las Cortes y sancionar las leyes, ahora podrá designar, sin limitación alguna, a todos los miembros de una de las Cámaras, en concreto del Senado. La Constitución de 1845 niega el principio de la soberanía nacional, sustituyéndolo por la soberanía conjunta de la Corona y las Cortes. Las leyes orgánicas que se desarrollan a partir de la nueva Constitución aseguran el control político de la burguesía terrateniente e impiden la recuperación electoral de los progresistas.

Ley Electoral de 1846

La ley electoral de 1846 planteó un sufragio censitario muy restringido, reduciendo la participación al 1,7% de la población y privando a los progresistas de sus apoyos en las clases medias urbanas. Este hecho les forzó a plantear la lucha política fuera del marco constitucional. Igualmente se recorta la libertad de expresión. Se imponen fuertes obstáculos al derecho de reunión y a la libertad de imprenta, se suprime el jurado y se prevé la posibilidad de suspender los medios de prensa e información.

Reforma de la Hacienda de 1845

  • La reforma de la Hacienda de 1845 acabó definitivamente con el caótico sistema fiscal del Antiguo Régimen. Alejandro Mon, ministro de Hacienda en el gobierno de Narváez, introduce en nuestro país un sistema hacendístico simplificado y moderno cuyas líneas generales se han mantenido hasta nuestros días. Proporciona un sistema de impuestos más uniforme y equitativo que suprime los privilegios fiscales particulares y regionales.

Reforma de la Administración Pública

  • Las medidas de reforma de la Administración pública, modeladas bajo el signo del centralismo, se extienden a todas las esferas legales. Se reorganizaron los cargos del Estado y se creó una ley de funcionarios que regulaba su acceso. También se reordenó la administración territorial, siguiendo los criterios centralizadores de la división provincial de 1833, con el fortalecimiento de las diputaciones provinciales y los gobiernos civiles y militares. En otro orden de cosas se aprobó el nuevo Código Penal (1848) y se creó la Guardia Civil (1844).

Ley de Ayuntamientos de 1845

La Ley de organización y atribuciones de los Ayuntamientos de 1845 reserva a la Corona la designación de alcaldes en las capitales de provincia y municipios con una población de más de 2.000 habitantes. En el resto de los municipios su nombramiento se atribuye al gobernador civil. Con esta ley, la administración provincial y local cae bajo el control absoluto del gobierno central en Madrid, especialmente del Ministerio de la Gobernación, poniendo fin a la autonomía y a la democracia municipal.

Sistema Nacional de Instrucción Pública

Se estableció un sistema nacional de instrucción pública, que regulaba los diferentes niveles de la enseñanza (educación elemental, secundaria y universitaria) y elaboraba los planes de estudio. Esta legislación se completó poco después de terminar la Década Moderada con la Ley Moyano de 1857, que fue la primera gran ley de educación del país.

El Concordato de 1851

  • El Concordato de 1851 restableció las relaciones con la Santa Sede, muy deterioradas hasta entonces por la hostilidad de la Iglesia hacia el liberalismo y sus medidas desamortizadoras. El Estado se comprometía al sostenimiento de la Iglesia española (presupuesto de culto y clero), al restablecimiento de las órdenes regulares, a la concesión a la Iglesia de amplias competencias en materia de educación y al reconocimiento del catolicismo como religión oficial del país.

Caída del Régimen Moderado

La caída del régimen moderado se produjo a raíz de la revolución de 1854, que permitió que los progresistas regresaran al poder. Se produjo un pronunciamiento militar de generales moderados descontentos con las medidas autoritarias de su propio partido que encontró apoyo en los progresistas y en la revuelta popular. Las citadas medidas autoritarias las quiso sacar adelante el gobierno de Bravo Murillo, el cual propuso una reforma constitucional que transformaba el Estado en una dictadura tecnocrática, ya que contemplaba la posibilidad de gobernar por decreto y suspender indefinidamente las Cortes. En definitiva, esta reforma suponía en la práctica la desaparición del régimen parlamentario.