De los Rollos de Papiro al Libro de Kells: La Evolución de los Manuscritos Antiguos

Los Manuscritos en la Antigüedad: Orígenes del Diseño Editorial

En la antigüedad clásica, los griegos y los romanos diseñaron e ilustraron manuscritos. Este método de diseño consistía en numerosas ilustraciones pequeñas, realizadas con una técnica fresca y sencilla, distribuidas por todo el texto. Su frecuencia creaba una secuencia gráfica cinemática, similar a la de los tebeos actuales.

La invención del pergamino, mucho más duradero que el papiro, y el formato de códice, capaz de absorber más pintura, abrieron nuevas y emocionantes posibilidades para el diseño y la ilustración.

El Virgilio Vaticano: Un Tesoro de la Roma Clásica

El manuscrito ilustrado más antiguo que se conserva data del final de la Antigüedad y comienzos de la era cristiana. Se trata del Virgilio Vaticano, creado a finales del siglo IV o principios del V. Este códice contiene dos obras importantes del principal poeta de Roma, Publio Virgilio Marón. En sus ilustraciones, aparecen en secuencia dos escenas que representan el fallecimiento de Laocoonte.

En el Virgilio Vaticano se utiliza un método de diseño homogéneo. El texto está escrito en mayúsculas rústicas apretadas, dispuesto en una sola columna ancha por página. Las ilustraciones, enmarcadas por franjas de un color vivo (frecuentemente rojo), son del mismo ancho que la columna de texto y están situadas en la parte superior, media o inferior de la página, junto al pasaje que ilustran. Incluye seis ilustraciones a toda página, y el ilustrador escribió cuidadosamente los nombres de las figuras principales sobre sus imágenes, una práctica similar a la de los caricaturistas políticos actuales.

El Virgilio Vaticano es totalmente romano y pagano en su concepción y ejecución. La escritura es romana y las ilustraciones recuerdan los colores intensos y la ilusión de espacio de los frescos murales que se conservaron en Pompeya. Este método representa el estilo clásico, que se utilizó en muchos de los primeros manuscritos cristianos y caracteriza el diseño romano tardío de los libros.

Identificación Visual en las Primeras Civilizaciones

La necesidad de una identificación visual se desarrolló con el incremento de la tenencia de propiedades y la especialización de las profesiones y oficios. Un ejemplo temprano son los sellos cilíndricos mesopotámicos, que proporcionaron un método a prueba de falsificaciones para sellar documentos y demostrar su autenticidad.

Materiales y Soportes de Escritura: Del Papiro al Pergamino

La evolución de los materiales fue clave en la historia del libro. Dos soportes dominaron la antigüedad: el papiro y, posteriormente, el pergamino.

La Era del Papiro

Probablemente, los rollos de papiro se introdujeron en Grecia en el siglo VII a. C. Esto dio inicio a una creciente exportación del material desde Egipto, y para el siglo V a. C., su uso parece haberse generalizado.

¿Cómo se fabricaba el papiro?
  1. Se pelaba la corteza de la planta de papiro.
  2. La médula se cortaba en tiras longitudinales que se extendían una al lado de la otra.
  3. Se colocaba una segunda capa de tiras encima de la primera, en sentido perpendicular.
  4. Las dos capas se ponían en remojo y luego se prensaban o martillaban hasta formar una sola lámina.
  5. Finalmente, tras secarlas al sol, las hojas se alisaban con un lustrador de marfil o piedra.

La Llegada del Pergamino

En el siglo III a. C., se comenzó a tratar el cuero para hacerlo más idóneo para la escritura, dando lugar al pergamino.

Proceso de elaboración del pergamino:
  • Se empleaba por lo general piel de cordero, ternero o cabra.
  • Se eliminaba el pelo, se raspaba la piel y se maceraba en agua con cal para eliminar la grasa.
  • Una vez seca y sin curtir, se frotaba con polvo de yeso y se pulía con piedra pómez u otro material semejante.
  • El material final ofrecía una superficie suave y regular tanto en el anverso como en el reverso.

Además de su perdurabilidad, superior a la del papiro, el pergamino tuvo una mayor difusión por la facilidad con la que podía ser raspado. Por ello, es común encontrar palimpsestos: manuscritos cuya escritura original fue borrada para escribir un nuevo texto encima.

La Revolución del Formato: Del Rollo al Códice

La forma en que se presentaban los textos también evolucionó, pasando del rollo de papiro al formato de libro que conocemos hoy.

Terminología del Rollo Antiguo

Los griegos y romanos tenían nombres específicos para las distintas partes y formatos del rollo:

  • Chartes (lat. charta): La hoja de papiro en blanco.
  • Biblion: La hoja ya escrita.
  • Kylindros (lat. volumen): El rollo de papiro completo. La palabra volumen ha perdurado en muchos idiomas para referirse a una parte de una obra.
  • Tomus (gr. tomos): Originalmente, un rollo compuesto por varios documentos pegados unos a otros.

El Nacimiento del Códice

Los códices estaban compuestos por cuadernos de pergamino plegados, cosidos y encuadernados, imitando las tablillas de cera. De hecho, el nombre códice procede del término latino codex, con el que se identificaban dichas tablillas.

Simbología Cristiana en los Manuscritos

Con la expansión del cristianismo, nuevos símbolos comenzaron a poblar el arte y los manuscritos.

El Crismón: Símbolo de Cristo

El crismón es un monograma de Cristo que aparece en sarcófagos paleocristianos, en las catacumbas y en las portadas románicas. Está formado por las dos primeras letras mayúsculas griegas del nombre de Cristo (Χ y Ρ). Junto a ellas, suelen aparecer el alfa (Α) y la omega (Ω), símbolos del principio y el fin. A menudo se añadía la cruz, y todo el conjunto se encerraba en un círculo, que representa la rueda solar y un simbolismo cosmológico asociado a Cristo como síntesis espiritual del universo. El emperador Constantino ya lo utilizó en sus estandartes con este significado.

El Esplendor del Arte Celta en los Manuscritos Iluminados

La conversión de los celtas al cristianismo a principios del siglo V propició una extraordinaria fusión de cultura y religión, dando lugar a un estilo de diseño de libros único.

Características del Diseño Celta

El diseño celta es abstracto y sumamente complejo. Sus motivos lineales zigzaguean y se retuercen, llenando el espacio con texturas visuales densas. Utiliza colores brillantes y puros en estrecha yuxtaposición. Esta tradición artesanal de diseños decorativos, intrincados y abstractos, se aplicó al diseño de libros en los scriptoria monásticos, dando lugar a un concepto y una imagen completamente nuevos del libro.

Técnicas de Ornamentación

La ornamentación en los manuscritos celtas se utilizaba principalmente de tres formas:

  • Se creaban orlas y marcos ornamentales en torno a ilustraciones que ocupaban toda una página.
  • Se iluminaban las páginas iniciales de cada evangelio y otros pasajes importantes, sobre todo mediante el diseño de iniciales floridas.
  • Se encuadernaban con el manuscrito páginas completas de diseño decorativo, llamadas páginas tapiz.

Obras Maestras del Estilo Celta

El Libro de Durrow

El Libro de Durrow es un ejemplo clave de esta fusión cultural y religiosa. Su ilustración y caligrafía se inspiran directamente en la geometría de los símbolos celtas tradicionales.

El Libro de Kells

El Libro de Kells, realizado en el siglo IX, es la obra maestra del estilo celta y una pieza fundamental del cristianismo irlandés. Considerado uno de los más bellos ejemplos del arte religioso medieval, este manuscrito en latín contiene los cuatro evangelios. Su decoración incluye marcos ornamentales que enmarcan retratos de los apóstoles. Es el manuscrito ilustrado más ejemplar del diseño celta, aunque quedó inacabado, posiblemente debido a las invasiones bárbaras.