El Franquismo y su Impacto en la Literatura
Primera Etapa: Represión y Censura
Durante la primera etapa del franquismo, la represión fue muy dura. Toda la producción literaria era sometida a un estricto control de censura. Nuestra literatura sufrió una doble persecución: además de la censura, existía el impedimento lingüístico. Solo podían aparecer insignificantes muestras poéticas de escasa incidencia y de temática predominantemente religiosa. Fueron años de gran aislamiento exterior e interior, en los que miles de personas tuvieron que exiliarse y otras fueron depuradas o encarceladas.
Segunda Etapa: Liberalización Aparente y Consolidación del Régimen
En la segunda etapa, tras la derrota de los regímenes afines, Franco se vio obligado a liberalizar parcialmente el régimen dictatorial. Esta fue una estrategia para aparentar tolerancia y asegurar la supervivencia del régimen ante una Europa y unos Estados Unidos hostiles a las dictaduras. Es la etapa de consolidación del régimen. Se autorizó la realización de actos públicos de escritores de expresión no castellana, así como la creación de nuevas editoriales y premios literarios. Nuestra literatura comenzaba a salir de la clandestinidad y ensanchaba sus horizontes, especialmente en el género novelístico, que casi había desaparecido.
Tercera Etapa: Popularización Cultural y Transición
La tercera etapa corresponde a los tiempos en que nuestra cultura se fue popularizando a través de diferentes plataformas. Este periodo tuvo continuidad durante los años 70 y enlazaría con la transición política hacia la democracia.
El Exilio Exterior: Voces Silenciadas Fuera de España
Los primeros años de la posguerra estuvieron marcados por el miedo, la represión, el exilio y la clandestinidad. Todavía durante la guerra, y a medida que las tropas franquistas iban ocupando los territorios, se iban aplicando las nuevas leyes totalitarias. Entre las multitudes que abandonaban el país, se encontraban los intelectuales y los escritores más significativos e influyentes del momento.
Destinos del Exilio y Supervivencia Cultural
Para los que se marcharon, los destinos principales fueron dos:
- Francia (donde más tarde algunos vivirían la ocupación nazi, otros volverían a España para unirse a la resistencia clandestina).
- Hispanoamérica.
Los que permanecieron en el exilio continuarían manteniendo la dignidad cultural con su obra. Esta se publicaba con grandes dificultades; la distribución, sumamente precaria, se compensaba con grandes dosis de entusiasmo y voluntad de subsistencia.
Autores Destacados en el Exilio Exterior
Pere Quart (Joan Oliver)
Pere Quart (Joan Oliver) se exilió en Francia y en Chile, hasta su regreso en 1948. Su obra poética explora la condición humana desde el realismo, el humorismo o la sátira mordaz, como en Circumstàncies.
Pere Calders
Pere Calders se plantea la recreación de la realidad mediante la imaginación y la fantasía. Sus cuentos se caracterizan por la utilización de la ironía y un punto de vista narrativo subjetivo, pero con un lenguaje distanciado y de apariencia neutra. Sus personajes, a menudo rutinarios, se encuentran siempre en situaciones insólitas a las que se adaptan con una despreocupación sorprendente. Cròniques de la veritat oculta es la obra con más eco de su producción.
El Exilio Interior y la Clandestinidad
Los escritores que permanecieron en el país tuvieron que renunciar a una presencia pública. Pero, a pesar de todo, se fueron rehaciendo lazos que testimoniaban la supervivencia cultural. Así, se organizaban sesiones clandestinas del Institut d’Estudis Catalans en casas particulares, además de tertulias, lecturas de poemas o representaciones teatrales privadas.
Autores Destacados en el Exilio Interior
J.V. Foix
J.V. Foix elabora una poética que sintetiza elementos novecentistas y técnicas vanguardistas. La dialéctica entre la racionalidad y la irracionalidad, y el contraste entre modernidad y clasicismo, son una constante en su producción.
Xavier Casp
Xavier Casp tuvo un papel decisivo en la fundación de la editorial Torre y en la defensa del uso de la lengua catalana entre los jóvenes autores. Su obra, de raíz simbolista, se caracteriza por el juego conceptual, la musicalidad y el dominio de la metáfora y de la imagen.
Llorenç Villalonga
Llorenç Villalonga es uno de los máximos exponentes de la novela psicológica.
Enric Valor
Enric Valor es muy conocido como gramático y compilador de cuentos (rondalles). Obras como L’ambició d’Aleix y el Cicle de Cassana, que siguen el modelo de novela tradicional, revisan la clase social privilegiada de la que partía, al reflexionar sobre los acontecimientos contemporáneos.
Josep Pla
Josep Pla es uno de los escritores que más y mejor ha escrito en catalán en el siglo XX. Su obra completa reúne 45 volúmenes, y el grueso de su producción lo constituyen los escritos memorialísticos y los dietarios. Destaca por aproximar el lenguaje literario al habla habitual. Sus textos son aparentemente sencillos pero a la vez ricos y variados, con una precisión extraordinaria y un finísimo sentido del humor.
Nuevos Aires: Hacia el Final del Franquismo
Los tiempos estaban cambiando. Los últimos años del franquismo coincidieron con una cierta prosperidad económica y con los nuevos aires de cambio que invadían el mundo occidental. Aparecen autores que no habían vivido la guerra directamente, se publican nuevas revistas y se crean nuevos premios literarios.
Figuras Emergentes y Renovación Cultural
Montserrat Roig
Montserrat Roig dejó una obra intensa y muy interesante, que abarca el periodismo, la novela, la narrativa corta, la crítica literaria y el ensayo.
Renovación Teatral
En cuanto al teatro y los espectáculos teatrales, entre los años 60 y 70 aparece una nueva generación de dramaturgos que intenta acercarse a las innovaciones escénicas europeas. Adoptan propuestas escénicas muy atrevidas y realizan crítica social y política. El teatro independiente buscaba un público con un cierto nivel cultural, capaz de seguir obras de comprensión a menudo difícil. Uno de los modelos más ensayados fue el teatro épico de Bertolt Brecht.