El Siglo XVI en España: Los Reinados de Carlos I y Felipe II
A la muerte de Fernando el Católico, los reinos hispánicos quedaron vinculados a la familia de los Habsburgo (o Austrias), primero en la persona de su nieto Carlos, quien también se convirtió en emperador del Sacro Imperio, y, posteriormente, con Felipe II. Estos reinados cubren la mayor parte del siglo XVI.
El Imperio de Carlos V y la Monarquía Hispánica
El Imperio de Carlos V y la Monarquía Hispánica se levantaron sobre territorios muy heterogéneos que tuvieron su origen en la herencia que el monarca recibió de sus abuelos:
- De su abuelo paterno, el emperador Maximiliano, obtuvo los territorios austriacos de los Habsburgo y los derechos al trono del Sacro Imperio.
- De su abuela paterna, recibió la herencia borgoñona y los derechos sobre el condado de Borgoña.
- De sus abuelos maternos, los Reyes Católicos, los dominios aragoneses y castellanos, incluyendo los territorios americanos e italianos y las plazas norteafricanas.
Política Interior de Carlos I
Cuando Carlos V llegó a Castilla en 1517, fue recibido con desconfianza por sus nuevos súbditos debido al reparto de cargos (tradicionalmente destinados a los nobles castellanos) entre los componentes de su corte flamenca, al desconocimiento de la lengua castellana y a la actitud hacia su madre, la reina Juana, recluida en Tordesillas.
En 1520, tras la muerte de su abuelo paterno Maximiliano, las Cortes castellanas aprobaron recursos para su elección como emperador del Sacro Imperio a cambio de que prometiera devolver los cargos de Castilla a los castellanos y prohibir la salida de oro y plata del reino.
De forma paralela, en los reinos de Valencia y Mallorca surgió el movimiento de las Germanías (hermandades). Se trató de una revuelta antiseñorial protagonizada por los artesanos y clases populares contra el poder de la aristocracia, que ocupaba los cargos municipales aplicando una política a favor de sus intereses.
Política Exterior de Carlos I
Carlos V entró en guerra contra todo poder que se opusiera a sus esfuerzos por materializar su idea imperial. Esta política exterior se caracterizó, además, por intentar lograr la unión de los Estados cristianos europeos para defender la cristiandad contra turcos y protestantes y afianzar el dominio del emperador en Italia.
Sin embargo, este proyecto de unificación y dominio fue muy difícil de llevar a cabo debido a que el emperador debió hacer frente a otras problemáticas:
- Guerras con Francia: A causa de los intereses de Francia y España sobre el territorio italiano, se sucedieron cuatro guerras con Francisco I y otra contra su hijo Enrique II. En una de ellas, el papa se alió con el monarca francés, motivando el saqueo de Roma por las tropas imperiales.
- Amenaza Otomana: Constantes enfrentamientos con el Imperio Otomano en el Mediterráneo y Europa Central.
- Reforma Protestante: El surgimiento del protestantismo en Alemania, liderado por Martín Lutero, supuso un desafío a la unidad religiosa del Imperio y generó conflictos internos.
El Reinado de Felipe II
Felipe II fue educado por su padre para el gobierno. Fue un monarca responsable y trabajador, con ansias de conocer y controlar por sí mismo todos los asuntos, lo que retrasaba la resolución de las decisiones. Separado ya el Sacro Imperio de España, Felipe II hizo de la península el centro de su Imperio, y dentro de España fue Castilla el reino en el que más se apoyó. Buscando un lugar retirado, estableció la capital en Madrid.
Política Interior de Felipe II
- Unión con Portugal: En 1578, el rey de Portugal, Sebastián I, falleció sin descendencia, lo que planteó un problema sucesorio. Felipe II, como hijo de Isabel de Portugal, resultó ser el legítimo heredero. En 1581, en las Cortes de Tomar, Felipe II fue reconocido como rey de Portugal, logrando la Unión Ibérica.
- Problemas internos:
- Los procesos contra los protestantes.
- La Rebelión de los Moriscos Granadinos (1568-1571).
- El Asunto de Antonio Pérez.
Política Exterior de Felipe II
Su idea principal fue mantener la unidad y la defensa del catolicismo. Con Felipe II, España llegó a su máximo poder y grandeza, pero a un elevado coste económico para Castilla. El deseo por cumplir este objetivo le llevó a mantener varias guerras con otras potencias:
- La Guerra contra Francia: Las tropas de Felipe II vencieron en dos batallas (San Quintín, 1557 y Gravelinas, 1558). Francia reconoció la derrota y se firmó la Paz de Cateau-Cambrésis en 1559.
- Los Turcos en el Mediterráneo: Para detener el progreso turco, se decidió responder con una coalición entre distintos estados, culminando en la Batalla de Lepanto (1571).
- La Sublevación de los Países Bajos: Durante su reinado y el de su padre, este territorio había desarrollado el calvinismo y el protestantismo, dos desviaciones del catolicismo que Felipe II no estaba dispuesto a admitir, lo que llevó a un largo conflicto.
- Las Guerras de Religión en Francia: Desde la muerte de Enrique II, los enfrentamientos religiosos se acentuaron en Francia. Por un lado, estaban los católicos, defendidos por Enrique de Guisa. Por otro, los hugonotes o calvinistas, dirigidos por Enrique de Borbón. Felipe II intervino en apoyo de los católicos.
- Conflicto con Inglaterra: La rivalidad con Isabel I de Inglaterra, el apoyo inglés a los rebeldes holandeses y los ataques de corsarios ingleses a las flotas españolas llevaron al intento de invasión de la Armada Invencible (1588).
Economía y Sociedad en el Siglo XVI
A consecuencia de la apertura del mercado americano, la agricultura y la ganadería tuvieron una gran expansión en el siglo XVI. Se roturaron nuevas tierras y se amplió el cultivo del olivo y la vid. En la ganadería continuaron los privilegios de la Mesta, mientras que la producción artesanal siguió orientada al consumo interior y americano. Sin embargo, lo más destacado fue el alza de los precios propiciada por la llegada del tesoro americano, fenómeno conocido como la Revolución de los Precios.
Las Indias en el Siglo XVI: Expansión y Organización Colonial
Carlos I expandió el Imperio español por América mediante particulares que firmaban contratos (capitulaciones) con la Corona.
- La Primera Vuelta al Mundo: Al demostrar que América era un continente distinto a Asia, se continuó con el propósito de llegar a Asia por el oeste, culminando con la expedición de Magallanes y Elcano.
- Conquista de México: Hernán Cortés partió de Cuba en 1519 y desembarcó en el litoral, fundando la ciudad de Veracruz, para luego conquistar el Imperio Azteca.
- Conquista de Perú: Francisco Pizarro y Diego de Almagro comenzaron la conquista del Imperio Inca, en el que existía una crisis por la disputa por el poder de los hermanos Huáscar y Atahualpa.
Organización de la América Hispana
- Los territorios se gobernaban desde el Consejo de Indias, con sede en Castilla.
- La Casa de Contratación de Sevilla controlaba el comercio, la navegación y la elaboración de mapas.
Explotación Económica de las Indias
El oro, la plata y los metales preciosos impulsaron el crecimiento económico y se produjo un intercambio de plantas, animales y cultivos nuevos, como el maíz y el tomate.
La Sociedad Colonial
Las enfermedades, los enfrentamientos militares y el trabajo excesivo redujeron drásticamente el número de indígenas.
Cultura y Sociedad en la España del Siglo XVI
El Arte: Renacimiento y Manierismo
El arte predominante era el Renacimiento, que evolucionó del gótico y de la mezcla de ambos surgió una vertiente española llamada Plateresco. El triunfo de las corrientes renacentistas se observa en el Palacio de Carlos I en la Alhambra. Posteriormente, llegaron las influencias manieristas, observables en obras como El Entierro del Conde de Orgaz de El Greco.
La Inquisición
Fue un tribunal eclesiástico que perseguía y castigaba a herejes, brujas y blasfemos. Creó una censura ideológica y moral mediante el Índice de Libros Prohibidos, una lista de libros vetados. No fue exclusivo de España, sino que existió en toda Europa. El objetivo de la Inquisición moderna española (establecida en 1478) era juzgar y castigar a conversos falsos y, posteriormente, se extendió a moriscos y protestantes.