La Construcción de la Lengua Escrita: Perspectivas de Emilia Ferreiro y Ana Teberosky

1. La Alfabetización a Partir de Soportes Textuales Diversos

La alfabetización comienza siempre a partir de la exposición a soportes textuales y diferentes clases de textos, utilizando todo tipo de materiales escritos. Como señala Emilia Ferreiro en su trabajo sobre el nombre propio, el docente debe promover o brindar múltiples oportunidades para que los alumnos entren en contacto con una diversidad de materiales escritos.

El Rol del Docente y la Biblioteca de Aula

El objetivo es formar parte de una comunidad de lectores en la cual se recurra cotidianamente a los textos para informarse, entretenerse, compartir noticias sorprendentes o indignantes, y para vivir juntos. El docente debe propiciar situaciones donde los niños tengan la biblioteca de aula a mano, permitiéndoles explorar y manipular los soportes textuales.

Además, el docente debe realizar una lectura en voz alta, la cual debe ser compartida con los niños, para que luego se converse con los alumnos sobre:

  • La colección y la editorial.
  • Quién es el autor.
  • La biografía del autor.

Es fundamental ir brindando información permanentemente sobre los soportes.

El Nombre Propio como Punto de Partida

Emilia Ferreiro y Ana Teberosky sostienen que, para que los niños puedan empezar a trabajar con la escritura convencional, se ofrece la escritura del nombre propio. La importancia de este radica en varios aspectos:

  • Punto de vista morfológico: Es una escritura estable, no cambia.
  • Identificación: Se ubica primero el nombre con el cual el niño se siente identificado.
  • Punto de vista afectivo: Los niños descubren que se puede ser uno mismo también por escrito.

Lo que siempre plantean las autoras es que la escritura debe aparecer a partir de los soportes textuales de todos los materiales escritos, y de ahí ir al nombre propio, el cual funciona como un repertorio inicial.

Actividades con el Nombre Propio

Respecto al nombre propio, se puede trabajar con el diseño de actividades como:

  • Que los chicos completen una ficha de lector.
  • Que, a partir de préstamos de libros, los niños puedan completar con su nombre la ficha de préstamos.

Luego de trabajar el nombre propio, se prosigue con el nombre de los compañeros. Es importante que se construyan herramientas como el abecedario, el libro de asistencias, agendas telefónicas, o la lista de cumpleaños. La idea es que ellos trabajen con textos reales, es decir, textos que utilizamos en lo cotidiano en la sociedad, para que realmente haya un trabajo con las prácticas del lenguaje.

Ampliación del Repertorio: Textos Rítmicos

Luego de haber trabajado con ese repertorio de nombres, es importante trabajar con textos como adivinanzas, poemas y canciones. Estos textos permiten que los niños, a partir de la rima, la poesía, la musicalidad y la repetición, puedan ir aprendiendo la letra y memorizándola. Esta es una manera de asociar lo que está escrito con lo que ellos escuchan, facilitando el trabajo de construcción del sistema.

2. La Lengua Escrita y su Construcción Social

Para Emilia Ferreiro, la lengua escrita es un sistema de signos que tiene un significado convencional para una comunidad. Si bien es una construcción colectiva, es considerada un tesoro social que el niño va a ir construyendo por interacción. Es, por lo tanto, una construcción cultural y social.

La lengua no es algo estático; con el tiempo tiene variaciones, incluyendo variaciones dialécticas, adecuadas al contexto. La lengua no es un código simple.

Implementación de la Lengua Escrita en el Aula

Emilia Ferreiro plantea que, para trabajar la lengua escrita en el aula, es principal que los alumnos tengan al alcance distintos materiales de soporte gráfico como:

  • Cuentos, noticias, poesías, canciones, adivinanzas, trabalenguas, textos explicativos, etc.

Esta variedad de textos hace que el alumno pueda interesarse por estos soportes gráficos. Para que los niños puedan acercarse a los libros, principalmente tiene que haber una biblioteca a su alcance donde puedan tener contacto con los materiales. Estos materiales de la biblioteca deben estar ordenadamente clasificados (por colores, autores o tamaños).

El Momento de la Lectura Compartida

Una vez que el niño ya tiene contacto con los libros, la docente debe explicarles el cuidado de los libros, e intervenir mencionando el autor, la colección o el título del libro que les tocó. Luego, en el momento de lectura, los niños deben respetar el silencio y prestar atención para que la docente pueda explicarles de qué trata el cuento, quién es el autor y exponer las imágenes.

Es muy importante que la lectura del cuento genere entusiasmo en los niños para que la docente pueda llamar su atención e ir relacionando las imágenes del libro con el texto.

Al finalizar la lectura del cuento, la docente debe hablar sobre lo leído y realizar preguntas como: ¿De qué trataba el cuento? ¿Quiénes eran los personajes? ¿Qué pasó al final del cuento? ¿Cómo se llamaba el cuento? entre otras.

La Escritura del Nombre Propio y la Identidad

Luego de trabajar con los textos, se comienza con la escritura del nombre propio, que es importante porque es una de las primeras escrituras que el niño aprende y le permite asociarse con su identidad. El nombre propio forma la identidad de la persona, el niño se siente representado, y además aprende que la escritura tiene un orden determinado. Es importante que el nombre propio siempre tenga un soporte donde el niño pueda apoyarse.

3. Etapas en la Construcción del Sistema de Escritura

El proceso de construcción del sistema de escritura se divide en varias etapas:

H4. 1ª Etapa: Presilábica

  • Ocurre alrededor del año y medio o dos años.
  • Los chicos comienzan a importarles las marcas gráficas.
  • No hay control de calidad y cantidad; se basa en el grafismo primario (los primeros intentos de escritura).

H4. 2ª Etapa: Silábica

  • Los niños diferencian los dibujos de las letras.
  • Basan su escritura en letras que ven, que recuerdan o que han aprendido a graficar.
  • En esta etapa reconocen las sílabas.

Esta etapa se divide en dos fases:

  1. Inicial: Reconocen las sílabas, pero no le pueden dar el sonido a las letras; no le dan un valor silábico convencional.
  2. Estricta: Construyen la evolución de la sílaba. Escriben las vocales, porque son más fáciles de reconocer sonoramente.

H4. 3ª Etapa: Silábico-Alfabética

  • Empiezan a ampliar el repertorio.
  • Se amplía el horizonte con las consonantes.
  • Aparecen los problemas ortográficos.

H4. 4ª Etapa: Alfabética

  • Son sujetos alfabetizados.
  • No deberían tener dificultades significativas en la escritura y en la oralidad.

4. Conceptos Fundamentales en la Didáctica de la Lengua

H5. ¿Qué es un Fonema?

Cuando hablamos, producimos sonidos. Cada uno de esos sonidos del habla es un fonema. Los fonemas, al combinarse, forman palabras y enunciados. El fonema, por lo tanto, es la unidad fonológica mínima de una lengua; no puede ser descompuesta en unidades más pequeñas.

H5. Clases de Palabras según Teberosky

Desde el punto de vista gramatical, las palabras pueden ser:

  • Clase Abierta (o palabras con contenido, lexicales): Incluye nombres, adjetivos, verbos y adverbios. Toman diferentes formas. La formación de las palabras sigue dos reglas: la inflexión y la derivación.
    • La inflexión se produce a partir de la raíz con morfemas sintácticamente determinados (ejemplo: adapta, adaptamos, adaptando, adaptado); estas formas no cambian de categoría (todas siguen siendo verbos).
    • La derivación, en cambio, son formaciones de lexemas que hacen cambiar la palabra de categoría.
  • Clase Cerrada (o palabras vacías, gramaticales, funcionales): Incluye pronombres, artículos, verbos auxiliares, preposiciones y conjunciones. Es generalmente más inmutable.

H5. ¿A qué se refiere con “Input”?

El input es el procesamiento de información por medio de lo que ya se sabe (conocimientos previos).

H5. ¿Por qué es importante la Lectura en Voz Alta?

Además de la interacción con el material gráfico, se da gran importancia a la lectura en voz alta de ese mismo material por parte del profesor. Numerosas investigaciones han mostrado altos índices de correlación entre participar en actos de lectura y aprender a leer y escribir. Esto se debe a que son las prácticas culturales de lectura las que transformarán esos soportes y esas marcas gráficas en objetos simbólicos y lingüísticos.

La lectura en voz alta permite asociar los signos gráficos con el lenguaje, y el lenguaje con los tipos de textos, los géneros y los soportes materiales sobre los cuales se presentan. Escuchar leer en voz alta ayuda al niño a desarrollar una competencia sobre el lenguaje escrito.

H5. ¿Qué valor tiene el Nombre Propio?

Los nombres propios tienen ciertas particularidades que los hacen candidatos fáciles a la segmentación dentro de lo oral:

  • Son acentuados.
  • Son bastante estables en el pasaje de una situación enunciativa a otra.
  • No sufren alteraciones morfológicas.
  • Son unidades de significado difíciles de predecir a partir del contexto y no pueden ser sustituidos por sinónimos.

La escritura del nombre propio tiene en el preescolar la función de ayudar a aprender que las letras no son cualesquiera y que van en cierto orden para que digan tal o cual cosa. Se dificulta el reconocimiento y la estabilidad del nombre propio cuando se ponen demasiadas letras.

Además, tiene un significado afectivo, vinculado con la ampliación de la propia identidad, el descubrir que se puede ser uno mismo también por escrito, lo cual ayuda a establecer el primer vínculo positivo con la escritura.

H5. ¿Para qué se emplean Listas?

Para comenzar a aprender a escribir, se sugieren los elementos lexicales: nombres propios y nombres comunes bajo la forma de listas de repertorios. Por ejemplo: listas de los nombres de los alumnos de la clase, nombres de animales, de juguetes, etc.

H5. Definición de Sílaba

La sílaba es cada fonema o conjunto de fonemas que pronunciamos en una sola emisión o golpe de voz, cuando decimos una palabra. Por ejemplo, la palabra pan tiene una sola sílaba porque se pronuncia con un solo golpe de voz. En cambio, la palabra bo-te-lla tiene tres, pues al decirla damos tres golpes de voz.