Baja Edad Media en España: Crisis, Instituciones y Expansión de Castilla y Aragón (Siglos XIV-XV)

La Baja Edad Media en la Península Ibérica: Crisis y Estructuras Políticas (Siglos XIV-XV)

El periodo de la Baja Edad Media, que abarca los siglos XIV y XV, fue una etapa de profundas transformaciones y desafíos para los reinos peninsulares. Este documento explora la organización política, las instituciones y las diversas crisis que marcaron este crucial momento histórico en la Corona de Castilla y la Corona de Aragón.

Organización Política e Instituciones en la Baja Edad Media: El Reino de Castilla

Los reinos de Castilla y León vivieron un continuo proceso de unión y desunión desde el siglo XI hasta su fusión definitiva en el siglo XIII con Fernando III el Santo. La Corona estaba formada por Galicia, Álava, Guipúzcoa y el Señorío de Vizcaya.

Durante el siglo XIV, en la Corona de Castilla existieron fuertes pugnas dinásticas que culminaron con el advenimiento de la dinastía de los Trastámara. En el conjunto de los territorios que constituían la Corona de Castilla, el rey era la máxima representación del Estado y era considerado como un oficio que se ejercía en beneficio de la comunidad.

La Corona

La Corona gozaba de amplios poderes desde el siglo XIII. Justificaba su autoridad con la frase: “es por la gracia de Dios”. Reunía el poder ejecutivo, el legislativo y el judicial. Entre sus obligaciones estaban gobernar con justicia, defender el territorio y velar por la fe cristiana. El conjunto de sus derechos se denominaba “regalías”.

Con el paso del tiempo, y para fortalecer su poder, la sucesión se convirtió en hereditaria por primogenitura de la línea masculina, aunque en Castilla, en ausencia de herederos varones, una mujer podía ocupar el trono.

A partir del siglo XIII, diversos reyes procuraron crear un marco jurídico que sirviera para evitar la confusión derivada de la ausencia de leyes escritas. Se inspiraron en la legislación romana y destacan dos importantes recopilaciones de leyes:

  • Las Partidas: Elaboradas durante el reinado de Alfonso X, se basaron en el derecho romano como elemento para reforzar la autoridad real.
  • Ordenamiento de Alcalá: Aprobado en las Cortes convocadas en Alcalá de Henares y elaborado durante el reinado de Alfonso XI. Este conjunto de leyes fijó el orden de prioridades entre los distintos cuerpos legales existentes.

Instituciones de Gobierno Centrales

Las instituciones de gobierno centrales eran las siguientes:

  • Cortes: Institución política derivada de la Curia Regia Extraordinaria. Convocadas por primera vez en León, se consideran las más antiguas de Europa. Estaban compuestas por representantes de los tres estamentos.
  • Consejo Real: Órgano asesor y consultivo derivado de la Curia Regia Ordinaria; de él dependía la administración del reino. Estaba formado por caballeros, prelados y letrados.
  • Altos Funcionarios de la Corte:
    • Mayordomo: Encargado de la hacienda y cuentas reales.
    • Notario Mayor del Reino: Redactaba documentos reales.
    • Canciller Mayor: Portador del sello real.
    • Alférez Mayor: Dirigía el ejército en ausencia del rey.
    • Almirante Mayor: Se encargaba de dirigir la flota.
    • Adelantado Mayor: Cargo creado para ser la máxima autoridad civil y militar en un distrito.
  • Audiencias o Cancillerías: Integradas por un cuerpo colegiado para impartir justicia en nombre del rey. La justicia podía ejercerse de forma privada y de forma pública.
  • Hacienda: En Castilla no estaban claramente diferenciados los ingresos del rey de los del reino. El mayordomo era el administrador mayor, y el contador dirigía la Contaduría Mayor de Hacienda, que controlaba los ingresos y pagos. Posteriormente, se creó el Tribunal Mayor de Cuentas con función inspectora. Los impuestos más importantes eran la Alcabala (impuesto indirecto) y los derechos de aduanas, entre otros.

Instituciones de Gobierno Territoriales

El territorio se dividía en “merindades” (en Galicia, León y Castilla), a cargo de un merino, funcionario real, que reclutaba tropas, cobraba impuestos y era la máxima instancia judicial en nombre del rey.

Posteriormente, en el siglo XI, se crearon los adelantamientos con las mismas características en los reinos musulmanes recién conquistados.

Instituciones Locales

El Concejo, o asamblea vecinal abierta en sus orígenes, desde el siglo XII se convirtió en un concejo restringido. Contaba con un número fijo de concejales presididos por un alcalde nombrado directamente por el rey.

Organización Política e Instituciones en la Baja Edad Media: La Corona de Aragón

El origen de la Corona de Aragón fue la unión entre el Condado de Barcelona y el Reino de Aragón por matrimonio. Posteriormente, se añadió a dicha Corona el Reino de Valencia, y más tarde, el Reino de Mallorca.

La Corona de Aragón se formó como una confederación de estados independientes, pues cada uno de sus núcleos mantenía instituciones propias. La estructura política de la Corona de Aragón era más compleja debido a su formación a partir de la integración de varios reinos. Cada uno de ellos conservó sus costumbres, lengua y leyes.

En cada reino había delegados del poder real, o virreyes. En el transcurso del siglo XIII nacieron las Cortes, que en ocasiones se reunían con carácter general para toda la Corona. Tuvieron funciones consultivas, fiscales y legislativas, con más atribuciones y potestad legislativa que las Cortes castellanas.

Como delegación de las Cortes, surgió en Cataluña la Diputación General (o Generalitat), institución que se consolidó en el siglo XV y vigilaba el cumplimiento de lo decidido en las Cortes y la hacienda. En Aragón y Valencia se denominaron Diputaciones del Reino.

La justicia se impartía en las Audiencias desde el siglo XIII. En Aragón, existía también la figura del Justicia Mayor, de origen confuso, que surgió como mediador en las pugnas entre el rey y los nobles. En el siglo XV, apareció en Cataluña la institución de los Síndics Provisors de Greuges, que actuaban como jueces de quejas o agravios.

La administración del territorio se organizó en torno a unidades territoriales parecidas a las merindades. Los concejos, órganos del poder local, terminaron en manos de oligarquías locales, al igual que en la Corona de Castilla.

Crisis Demográfica, Económica y Política en la Baja Edad Media

Tanto en la Corona de Castilla como en la de Aragón, esta fue una etapa de grandes dificultades, a la vez que se desintegraba el sistema feudo-vasallático.

Crisis Agraria

Las sociedades medievales no podían soportar varios años de malas cosechas por dos razones fundamentales:

  • Bajos rendimientos agrícolas que no permitían almacenar excedentes para años de escasez.
  • Dificultades para importar trigo de regiones lejanas debido a las malas comunicaciones, la inseguridad general y el encarecimiento de los precios.

Cuando esto ocurría, se rompía el precario equilibrio entre población y recursos, desencadenando una gran crisis de subsistencia con el siguiente proceso:

  • Malas condiciones climáticas y pérdida de cosechas.
  • Escasez de cereal.
  • La población con menos recursos, muy debilitada por el hambre, enfermaba con facilidad.

Crisis Demográfica

Distintas epidemias asolaron Europa. La Peste Negra fue una de las más temidas, y no había medio eficaz para controlar la enfermedad al desconocerse su origen. Desde Asia y por vía marítima, llegó a las riberas del Mediterráneo y en 1348 entró en Mallorca, Valencia y el interior peninsular.

Los efectos fueron cada vez mayores en una población debilitada por las crisis de subsistencia. La terrible mortandad provocó pánico; la gente huía de las ciudades al campo, aumentó la religiosidad y hubo un cambio de mentalidad.

Consecuencias de las Crisis

Las consecuencias demográficas de las crisis descritas fueron las siguientes:

  • Aumento de la mortalidad.
  • Flujos migratorios entre campo y ciudad.
  • Despoblamiento de numerosos lugares.
  • Aumento de los precios agrícolas.
  • Impacto psicológico sobre la población.

Las consecuencias económicas también fueron graves:

  • Crisis de la economía señorial por falta de mano de obra.
  • Crisis del comercio de la lana en Castilla y crisis del comercio mediterráneo en Aragón.

Las consecuencias sociales se desarrollaron en todos los ámbitos:

  • Los señores, ante la falta de vasallos y rentas, vieron disminuir su poder adquisitivo, al tiempo que las manufacturas de lujo que consumían se encarecían por la crisis comercial.
  • Los campesinos pretendieron frenar los abusos señoriales a través de diversos movimientos sociales violentos:
    • Revuelta de los Irmandiños: Asociación de labriegos y pequeña nobleza contra los grandes señores, que fueron sometidos.
    • Movimiento de los Payeses de Remensa en Cataluña: Conflicto de larga duración. Los campesinos lucharon por la libertad de dejar las tierras que trabajaban para los señores sin tener que pagar una redención, y también por el derecho de ocupar las tierras vacías.
    • Revuelta Foránea en Mallorca: Situación similar a las anteriores, entre los campesinos de fuera de la “ciutat” y los señores que habitaban en esta.
  • Reacciones urbanas de tres tipos:
    • En Cataluña, la “gente menuda” (artesanos, pequeños comerciantes), conocida como la “Busca”, se levantó contra la “Biga” u oligarquías urbanas (grandes rentistas, comerciantes, alta burguesía).
    • Rivalidad entre bandos nobiliarios locales y sus clientelas.
    • Persecuciones contra las aljamas judías, acusados por el pueblo de sus desgracias.

Crisis Política

En la Baja Edad Media se inició el proceso de fortalecimiento del poder real que conduciría a las monarquías de corte autoritario en la Edad Moderna. En este camino, los reyes encontraron muchas dificultades y resistencias.

En la Corona de Castilla, el proceso de guerras civiles tuvo dos fases:

  • Siglo XIV: Guerra civil entre Pedro I de Castilla, quien para imponer su autoridad buscó apoyo entre los judíos y la pequeña nobleza, y su hermanastro Enrique de Trastámara. Finalizó con el asesinato de Pedro I por su hermano Enrique de Trastámara, que reinó como Enrique II. El triunfo fue realmente para la alta nobleza, que obtuvo compensaciones territoriales y el mayorazgo.
  • Siglo XV: Durante la minoría de Juan II, ejerció la regencia su tío Fernando de Trastámara, quien posteriormente sería coronado rey de Aragón. Durante el reinado de Enrique IV, los nobles destronaron al rey en efigie. De la posterior guerra civil entre los partidarios de la hija del rey, doña Juana, y los de su hermana Isabel, obtendría la corona Isabel de Castilla.

En la Corona de Aragón, la crisis política afectó más a Cataluña. La corona fue ofrecida a Fernando de Trastámara frente a Jaime, conde de Urgell. La firma del Compromiso de Caspe significó la llegada de una nueva dinastía de corte autoritario. La consecuencia en el siglo XV fue una guerra civil en la que la monarquía no doblegó a las oligarquías catalanas.

Juan II buscó solución al conflicto pactando el perdón general de los sublevados y sobreponiéndose a la situación con actitud conciliadora.

La Expansión de la Corona de Aragón en el Mediterráneo

Las Coronas de Castilla y de Aragón se recuperaron gracias a la expansión por el Mediterráneo, iniciada a mediados del siglo XIII y finalizada a mediados del siglo XV.

La expansión estuvo motivada por la imposibilidad de conquistar más territorios peninsulares como consecuencia de la firma del Tratado de Almizra entre Castilla y Aragón.

Las principales razones de la expansión aragonesa en el Mediterráneo fueron:

  • Conquista de Valencia y Baleares por Jaime I a mediados del siglo XIII.
  • Conquista de Sicilia por Pedro III, arrebatándosela a Carlos de Anjou.
  • Influencia en el norte de África.
  • Expedición de los Almogávares a Oriente: conquista de los ducados de Atenas y Neopatria.
  • Conquista de Nápoles por Alfonso V.

La expansión se basó en el desarrollo de un próspero comercio a larga distancia con Italia, el norte de África y Oriente.

Para ello, se crearon nuevas instituciones jurídicas y mecanismos que facilitasen el comercio, el control y las relaciones con los territorios incorporados:

  • Consulado de Mar: Tribunal con jurisdicción marítima y para pleitos comerciales.
  • Taula de Canvi: Banca municipal.
  • Cónsules en las plazas comerciales.
  • Compañías comerciales y encomiendas.
  • Lonjas de Contratación y difusión de la letra de cambio en la península.

Para apoyar el comercio frente a la piratería, ocuparon plazas de soberanía en África: Bugía, Orán y Túnez, aunque en el siglo XV pasaron a la Corona de Castilla.

A finales del siglo XIV, diversos conflictos internos, la invasión del Rosellón por los franceses y la competencia de los castellanos en el comercio, desembocaron en una crisis y Aragón buscó rey durante dos años. Finalmente, fue elegido Fernando de Antequera.